por Víctor Artavia, Corresponsal IzquierdaWeb

En la última semana las mujeres retomaron las calles del país para protestar contra los femicidios al grito de ¡NI UNA MENOS, VIVAS NOS QUEREMOS! Lo anterior producto de tres femicidios que tuvieron lugar en los días previos, donde resultaron asesinadas dos turistas extranjeras, la española Arantxa Gutiérrez y la mexicana María Trinidad Matus, a lo cual se sumó el caso de Ingrid Herrera, una mujer colombiana residente en el país.

El vienes 10 de agosto se realizó una vigilia en la Plaza de la Democracia, en el centro de San José, la cual congregó a más de mil personas, en su mayoría mujeres jóvenes que están sumándose a la lucha feminista. Además se realizaron marchas en el Caribe Sur y Santa Teresa (playa del Pacífico Norte), centros turísticos donde se produjeron los femicidios de las dos turistas.

Esa misma semana tuvo lugar la concentración del 8 de agosto en Casa Presidencial, en solidaridad con el movimiento de mujeres de Argentina en su lucha por el aborto legal, así como para exigirle al gobierno de Carlos Alvarado la firma inmediata de la norma técnica para el aborto terapeútico y lanzar la campaña por el aborto legal en Costa Rica.

De acuerdo a Heidy Valencia, referente de Las Rojas y vocera del movimiento Aborto Legal Costa Rica, la gran convocatoria de esta vigilia y la concentración en Casa Presidencial reflejó “el nivel de organización que vienen acumulando las mujeres para luchar en las calles contra la violencia patriarcal y los femicidios”. Valencia reiteró el planteamiento de Las Rojas para “exigirle al gobierno una declaratoria de emergencia nacional contra la violencia patriarcal y los femicidios, pero que no sea simbólica, sino que incluya medidas desde todas las instituciones y presupuesto para hacerla efectiva, porque nuestros derechos y nuestras vidas sí son prioridad”.

Carolina Funes, militante de Las Rojas y el Nuevo Partido Socialista, explicó a la agencia EFE que “Nos unimos a la indignación. Todos los días nos están matando, nos están violentando por el simple hecho de ser mujeres. El Estado que también es responsable, no está haciendo nada. Exigimos nuestro derecho a poder caminar libres, seguras y sin miedo”.

Para el 26 de agosto está programada una marcha en San José contra los femicidios.