Hoy se llevó acabo la Marcha Nacional contra el plan de ajuste (Combo Fiscal) por las calles de San José. Cientos de miles de trabajadores y trabajadoras del sector público, estudiantes y organizaciones de izquierda llenaron las calles de la capital por horas, en una jornada que desde ya podemos calificar como histórica: ¡Las primeras estimaciones hablan de 400 mil personas marchando!
El gobierno de Carlos Alvarado, en unidad con los principales partidos políticos (PLN y PUSC), las cámaras patronales y los medios de comunicación burguesa, promueven una reforma fiscal profundamente regresiva con impuestos al consumo (incluida la canasta básica y medicinas), recortes al presupuesto de instituciones sociales, entre otras medidas neoliberales. Al mismo tiempo, dejan exentos del pago de impuestos a los principales grupos exportadores nacionales y transnacionales, así como al capital financiero.
Esto explica que la gran mayoría de la población repudie la reforma fiscal y apoye la huelga, la cual pareciera estar ganado cada vez más puntos de apoyo.
En los dos primeros días de huelga se realizaron acciones regionalizadas, con movilizaciones y cortes de ruta por todo el país. En zonas como Limón y Barranca de Puntarenas hubo conatos enfrentamientos con la policía.
Para derrotar el combo fiscal se requiere profundizar las medidas de lucha, impulsando cortes de ruta que detengan paralicen la actividad económica, incluida a las empresas privadas (dónde hay una dictadura de las patronales que no permite la organización sindical). Está fue la forma en que se derrotó al Combo del ICE en el año 2000, y no tenemos duda que es la mejor forma de derrotar al actual gobierno.
Pero esto se ve obstruido por la política de las dirigencias sindicales burocráticas, las cuales contienen la lucha llamando al diálogo con la mediación de la Iglesia Católica, antes que plantear la derrota del plan fiscal e imponer una reforma progresiva con impuestos al gran capital.
Por Víctor Artavia, 13/9/18