Hace pocas horas, en el corazón de París, comenzó una operación del terrorismo islamista que ya ha dejado el saldo de más de 100 muertos e incontables heridos.
Además, han tomado un teatro histórico, el Bataclan, donde tendrían de rehenes a centenares de espectadores que corren peligro de muerte.
Hace pocas horas, estas bestias pusieron bombas en las calles de un barrio popular de Beirut, causando alrededor de medio centenar de muertos. Ahora están cometiendo en París otra matanza que puede llegar a superarla.
La corriente internacional Socialismo o Barbarie repudia este infame y cobarde ataque, así como también el de Beirut.
No hay pretexto alguno que pueda justificar esta barbarie. La única consecuencia de estas matanzas, además de los ríos de sangre que provocan, es fortalecer en Europa (y Occidente) a la extrema derecha, enemiga de los trabajadores de todos credos y nacionalidades, que capitaliza el racismo y la islamofobia que estos atentados potencian. Y, en el Medio Oriente, los otros grandes beneficiarios son las dictaduras militares, como la de al-Sisi en Egipto, que gracias al fascismo islamista pueden presentarse hasta como “defensores” de las libertades y los derechos humanos.
Ahora, gracias a estos atentados y bestialidades, Washington, los imperialismos europeos y también el Kremlin tendrán combustible para justificar cualquier intervención militar en Medio Oriente y también las medidas para fortalecer el aparato policial y represivo en sus propios países… ¡Algo que les viene muy, muy bien, en una situación en que todos pretenden imponer cada vez más “austeridad”, salarios de miseria, desregulación laboral y liquidación de los últimos restos del “estado de bienestar”!
No es casual que a estas horas, ya esté decretado el estado de sitio, el que se presenta como justificado por el atentado en curso, pero que también puede ser utilizado contra cualquiera manifestación o reclamo legítimo que venga desde abajo.
Por todo esto, al mismo tiempo que llamamos a repudiar masivamente los atentados, convocamos a cerrar filas contra el curso a la derecha que va a ser alentado aprovechando la barbarie islamista. La manera de repudiar esta barbarie, no es la “unidad nacional” a la que seguramente se va a convocar desde el gobierno de Hollande y las organizaciones de los de arriba, sino el repudio y la movilización desde abajo.
Las organizaciones obreras, juveniles y de la izquierda radical, debemos de inmediato unirnos y ponernos de pie, para hacer frente a esta situación en forma absolutamente independientemente de los gobiernos y los partidos del régimen y de los capitalistas.
Declaración de la corriente internacional Socialismo o Barbarie, 13 de noviembre 2015, 22 horas.