Repudio total a la movilización homofóbica pro-familia.

Organismos ultra católicos están convocando a movilizar en todo el país contra el matrimonio igualitario. El Frente Nacional por la Familia de México, que nuclea miles de organizaciones civiles y religiosas, tiene organizado para el próximo sábado 10 del corriente mes, 60 marchas en el interior de país y promete una gran movilización en la capital el próximo 24 de septiembre.

Todo esto sucede en el marco de que el pasado 17 de mayo, el presidente Peña Nieto, anunció una futura reforma constitucional que permitiría la unión legal entre personas del mismo sexo, así como también la posibilidad de adopción de niños por parejas no heterosexuales. A su vez esta serie de reformas, vienen a ratificar un proceso social que hace años viene ganado terreno conquistando este tipo de derechos en varios estados del país como: Ciudad de México, Quintana Roo, Chihuahua, Coahuila de Zaragoza, Nayarit, Jalisco, Campeche, Michoacán, Morelos y Colima.

Entonces lo que esta reforma constitucional viene a prometer es que la ley se vea obligada aplicarse en todo México por igual. Pues así los interesados en adquirir este tipo de derechos civiles no tendrán que verse obligados a apelar a recursos de amparo, como sucede hasta ahora, dejando a miles de personas vulnerables a las negativas patriarcales y homofóbicas de los organismos de justicia.

RECUPEREMOS LAS CALLES PARA DEFENDER NUESTROS DERECHOS

Lo más aberrante que se desprende de este tipo de iniciativas, donde la iglesia se ha empoderado de las calles mexicanas, es que está funcionando como una máquina de reproducción feroz de ideología homofóbica y patriarcal. Es por eso que entendemos que no se trata simplemente de conquistas legales, que hasta ahora han sido muy progresivas, sino que también las organizaciones LGBT y de mujeres estamos llamadas a enfrentar esta batalla cultural que hoy nos impone la iglesia. Ya son miles de personas las que se están movilizando de forma muy organizada, defendiendo fervientemente el esquema patriarcal de la familia, con un discurso directo contra la “diabólica ideología de género”. He aquí la importancia de salir del ámbito meramente institucional y recuperar las calles en manos de los movimientos que luchamos contra todo tipo de violencia de género.

Es primordial romper con el marco de “respeto” que hoy nos imponen para darle espacio a este tipo de acciones de la iglesia organizada; y es que el respeto ya lo han quebrantado ellos, a pesar de que ejerzan su legítimo derecho a la protesta, porque sus manifestaciones son completamente discriminatorias y no hacen más que incentivar y alimentar la violencia hacia las personas no heterosexuales y a las mujeres; es decir, a quienes resultamos ser los más vulnerados y reprimidos en el ámbito del precioso esquema de familia que ellos defienden. Ellos son los que sustentan moralmente las agresiones cotidianas que sufrimos, que van desde ofensas verbales al directo maltrato físico y hasta el homicidio en muchos casos.

Es por todo esto que desde Las Rojas repudiamos todas las iniciativas misóginas y homofóbicas de la Iglesia a la que, en Estados laicos como México, la impotencia de poder político la ha obligado a tomar las calles, un método propio de los sectores oprimidos de la sociedad que debemos recuperar para echarlos y promover la libertad de elección y el fin de la violencia machista que estas instituciones medievales nos quieren imponer como modelo de vida.

¡Sí a la Ley de Matrimonio Igualitario en todo México!

¡Que la Iglesia no se Meta!

¡Basta de lesbo-trans-homofobia!