El subcomandante Marcos
disuelve el brazo político de la guerrilla zapatista de Chiapas y
formará un nuevo movimiento
El frente que muere
mañana
Por Toni Cano
Corresponsal en México
El Periódico, 24/11/05
A partir de mañana
viernes, "el Frente Zapatista de Liberación Nacional (FZLN),
organización hermana del Ejército Zapatista de Liberación Nacional
(EZLN), deja de existir y nadie puede usar su nombre para ningún fin,
por bondadoso que éste parezca o sea".
Con críticas a algunos
de sus miembros y promesas de refundación, el subcomandante Marcos
anuncia la disolución del brazo político de la guerrilla del estado
de Chiapas.
Lo hace en su
particular cuenta atrás, presto a iniciar con el año nuevo una larga
gira para formar un nuevo frente político dentro de la otra campaña
zapatista, paralela a la electoral. Y su comunicado causa una primera
reacción unánime: "Los zapatistas se han quitado un muerto de
encima".
Las siglas FZLN
aparecieron cosidas en la camisa marrón que llevaba el primer
zapatista muerto en combate. Fue en mayo de 1993, cuando una columna
del Ejército, "por un chivatazo o por casualidad" –dijo
después Marcos– descubrió en la sierra de Corralchén, entre
Ocosingo y Altamirano, el gran cuartel en el que la guerrilla
preparaba un alzamiento inminente. El tiroteo se prolongó tres días,
murieron dos soldados, otros dos resultaron malheridos y, según el
Ministerio de Defensa, "perdió la vida un civil no
identificado".
Camisas con
insignias
Llevaba esas siglas,
como otras "camisas marrones con insignias", es decir,
uniformes, hallados en lo que era un gran centro de entrenamiento
militar en medio de la selva. Marcos contó tiempo después que los
guerrilleros salieron del cerco y se replegaron a la foresta, por lo
que "todos los combates posteriores fueron entre ellos
mismos". Pero aquel "accidente" le obligó a postergar
medio año la toma de los palacios municipales, y aquel centinela
muerto con un pañuelo rojo al cuello y un fusil con dos cargadores a
un palmo de su mano, a cambiar el nombre, de Frente, a Ejército
Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
La formación
El subcomandante llamó
a formar el FZLN casi tres años después, en la Cuarta Declaración
de la Selva Lacandona: "Una organización política, civil y pacífica
que no luchara por el poder y se empeñara en la construcción de una
nueva forma de hacer política", recuerda Marcos.
El encargado de
encabezar ese nuevo intento de brazo político zapatista sería Javier
Elorriaga, un historiador que pasó 15 meses encarcelado en el penal
chiapaneco de Cerro Hueco, tras ser detenido en 1995 en un retén del
Ejército a la salida de la Selva Lacandona. Poco después, su nombre
fue pronunciado por el presidente, Ernesto Zedillo, que lo señaló
como uno de los "principales dirigentes" del EZLN.
Elorriaga no supo
aprovechar como Marcos el carisma de las cámaras y la popularidad que
le dio su liberación fue menguando con la de su Frente Zapatista,
limitado a cuatro elementos voluntariosos, entre ellos una gallega
internacionalista.
Igual que entonces
–en carta a La Jornada, su diario habitual– se cargó de un
plumazo su primer intento de crear un Movimiento de Liberación
Nacional (MLN) y acusó a sus dirigentes de desviacionistas e incluso
de haberse embolsado dineros recaudados en Europa para el EZLN. Marcos
agradece ahora al FZLN los servicios prestados. Señala que hubo
quienes lo usaron a "para provecho propio", para aislar a
los zapatistas, o como plataforma para "para simular compromiso
donde sólo había una posición cómoda".
En la capital mexicana,
la memoria que dejan las actividades del frente que muere mañana se
reduce a la celebración de aniversarios, manifestaciones menguantes y
venta callejera de camisetas, actividad que provocó frecuentes roces
de los frentistas con los danzantes aztecas del Zócalo, la gran plaza
central, o los policías de Coyoacán, en el sur de ciudad.
Ya el año pasado, el
propio Javier Elorriaga hablaba de "los retos en una organización
política de nuevo tipo, que no luche por el poder, sino por el cambio
en las relaciones sociales que le dan sustento al poder". Para
ello, decía, es fundamental "devolver el poder de decisión al
colectivo y que el movimiento social se forme de manera
autogestionaria".
Nueva organización
Marcos dice que la
nueva organización que espera consolidar con su nuevo zapatour
"nacerá dirigida directamente por la Comisión Sexta del EZLN;
se ingresará en ella sólo a invitación expresa y será
particularmente estricta en que se cumplan los principios zapatistas".
De momento, 780 organizaciones sociales –las únicas importantes con
bases indígenas y campesinas– se han apuntado a la otra campaña,
en cuyo "bordado multicolor", asegura el subcomandante,
"el EZLN trazará la forma y pintará el color zapatista".
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