América Latina

¡No al fraude electoral! ¡Ponerle fin a la Transición “Pactada”! ¡Por una asamblea constituyente libre y soberana!

Las lecciones de México

Por Marcos Luna
El Trabajador Centroamericano
(Suplemento Elecciones en México), 01/09/09

Al cierre de edición la lucha contra el fraude electoral en México se acercaba a momentos críticos; a finales de agosto el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación debía pronunciarse sobre la validez o no de las elecciones del 2 de julio, el 1 de septiembre Vicente Fox, rinde su último informe ante la Legislatura y el 16 de septiembre se está convocada una Convención Nacional Democrática.

Este artículo pretende señalar las principales lecciones del actual proceso de lucha contra el Fraude Electoral y la táctica de los socialistas frente al mismo.

La historia de la “democracia” en México

Para los marxistas la historia no se mide con el valor sacro santo de la “democracia y el voto”, sino con el de las relaciones de fuerzas entre las distintas clases en lucha, pese a eso por más que los medios de prensa mexicanos lo insistan, en México nunca han existido elecciones libres y democráticas en el sentido liberal del término.

A la dictadura de 30 años de Porfirio Díaz (1876-1911) se sucedieron los distintos gobiernos “de facto” (en el sentido liberal) revolucionarios y contrarrevolucionarios del “período de oro” de la revolución mexicana (1910-1920) (Madero, Huerta, Carranza y Obregón).

Los sucesivos gobiernos de los generales Obregón, Calles y Cárdenas fueron los que construyeron el estado moderno mexicano y su vocero oficial el Partido Nacional Revolucionario (luego Partido de la Revolución Mexicana, finalmente llamado Partido Revolucionario Institucional) que gobernó durante siete décadas (1928- 2002) hasta la subida la poder del Partido Acción Nacional de Vicente Fox.

La Cuarta Internacional, en épocas de Trotsky supo comprender el significado del PNR (PRI) de primera época, planteando que éste era un “frente popular en forma de partido” lo que le daba al estado mexicano un carácter contradictorio semidemocrático, semibonapartista. (Ver recuadro 1)

Esto fue lo que permitió la existencia de 70 años del PRIato. Las distintas expresiones políticas fundamentales de la burguesía mexicana se producían al interior del PRI, y a su vez esta mantenía la legitimidad y legalidad del estado y el gobierno a través de sucesivas y fraudulentas elecciones, para las que mantenía una serie de partidos “turecas” que le ayudaban a mantener el simulacro democrático, además se anexaba a las organizaciones sindicales (constitucionalmente integradas al estado), y semi estatizaba también a las organizaciones políticas de izquierda a través de subsidios estatales (Partido Popular Socialista, Partido Comunista Mexicano y Partido Revolucionario de los Trabajadores); como si fuera poco además se contaba con la cobertura ideológica que producía que mucha de la “crema y nata” de los exiliados marxistas argentinos, españoles, chilenos, etc. encontraran fácil espacio en las cátedras mexicanas, siempre y cuando no se les ocurriera hablar de política mexicana. [1] Esto no evitó; ni la guerra sucia contra las organizaciones político–militares; ni los encarcelamientos contra los activistas radicales (sobre todo trotskistas y maoístas); ni las masacres abiertas como en Tlatelolco en 1968.

La trasformación y agotamiento del PRIato

La situación cambia radicalmente a partir de inicios de los 80’s, pues se inicia un violento proceso de ajuste contra la clase trabajadora urbana y rural, empiezan los procesos de privatizaciones, los ataques al salario social de los trabajadores y a las conquistas sociales inscritas en la constitución, sobretodo los artículos constitucionales heredados de la Convención de 1917, que son verdaderas conquistas de la revolución agraria zapatista-villista. (Ver recuadro 2)

Junto a eso, la burguesía entra en un asocio cada vez mayor con el capital financiero internacional, tanto en su forma legal (bancario, especulativo) como el ilegal (narcotráfico, limpia de dinero).

A finales de los ochentas es evidentísimo el fin del PRIato transformado en una mezcla de corrupción política-clientelar y programa neoliberal, varios hechos políticos harán patente el inicio de una nueva época política en México: Las movilizaciones estudiantiles de 1987, el fraude electoral que permitió que Carlos Salinas de Gortari, asumiera el poder contra el entonces líder del PRD Cuathemoc Cárdenas. [2]

El salinismo y el gobierno de su sucesor Ernesto Zedillo, fueron los gobiernos agonizantes del PRIato, salidos del fraude electoral e impregnados hasta la médula de negocios ilícitos, solo la debilidad del movimiento social y popular latinoamericano a inicios de los 90’s explica su sostén en el gobierno, pero dos hechos simultáneos cambian el panorama político: La entrada en vigencia del TLC Estados Unidos- México-Canadá y la insurrección zapatista en Chiapas. El primero señalaba el inicio de un nuevo ciclo en el capital financiero imperialista y el proceso de violenta contrarreforma para desnacionalizar y semi colonizar la economía mexicana; y la segunda, el inicio de un nuevo ciclo de luchas populares en América Latina, después del “shock” que significó la caída de los Estados Obreros Burocráticos de Europa del Este y con ellos el estalinismo criollo y sus organizaciones satélites. [3]

El PRI ya no puede aglutinar ni a los sectores más conservadores, oligárquicos y pro imperialistas de la burguesía, las capas medias altas y los terratenientes que tienden a concentrarse alrededor de Vicente Fox, líder del PAN, ex gerente general de la Coca Cola Company en México; así como la burguesía vinculada al mercado interno, a las capas medias empobrecidas y a los sectores populares que crecían en descontento y en movilizaciones.

La burguesía mexicana fortalece al PRD como alternativa para contener y desviar por la vía electoral el descontento de los sectores populares mexicanos, pero fundamentalmente como expresión política de la burguesía nacional mexicana y las capas medias del Distrito Federal, ciudad gobernada por el PRD desde 1998.

La transición “pactada” y el movimiento de masas

Desde la herida de muerte que significó para el PRIato el fraude de 1988 y los magnicidios de inicios de los 90’s (asesinato de Colozio), así como los escándalos de corrupción de Salinas de Gortari a finales de los noventas y la creciente fuerza electoral del PRD en la capital mexicana y del PAN en los estados norteños, la burguesía mexicana organizó un transición pactada entre el PRD-PRI y PAN que garantizaría la salida indolora, vía electoral del PRI.

Elecciones y “rejuego democrático” como mecanismo para engañar a las masas mexicanas, pero a su vez preservar lo fundamental del capitalismo semi colonial mexicano e impulsar las contrarreformas (universitaria, [4] indígena, laboral, electoral) necesarias para el funcionamiento de la transición pactada neoliberal. Que la salida del PRIato por la vía electoral concluyera con un gobierno peor de neoliberal que el de Salinas y Zedillo, generó un cortó circuito en la “transición pactada” que necesitaba ahora al PRD como mecanismo para engañar “por la izquierda” a los sectores populares mexicanos.

No obstante como el PRIato fue sustituido por un proceso pactado y no por la vía revolucionaria, produjo que el PAN heredara intacta la “maquinaria estatal de producir fraudes” que durante 70 años construyo el PRIato y que fue aplicada con toda celeridad en las elecciones del 2 de Julio, contra el PRD.

El 2 de julio: el fraude y las movilizaciones

Dejaremos que un testigo que no puede ser sospechoso de simpatías hacia al PRD hable sobre como fue articulado el fraude:

“Cuando el supuesto bajón de AMLO y la subida de Felipe Calderón con encuestas pagadas, y luego AMLO repunta antes de la elección. Según información que teníamos, en el IFE se empezó a hacer un guardadito de millón y medio de votos, para compensar la desventaja de Calderón. (…) Votos no sabemos de dónde, pero en el padrón electoral hay 5 millones de gentes que no iban a votar. Dos millones muertos y tres o más que no están en el país.

“El PRD debió poner atención y no lo hizo porque calculó que ganaría sobrado. La tarde del 2 de julio en Los Pinos ya saben que van a perder.

“Fox llama a Ugalde y le dice que hay que administrar la entrada del PREP mientras se acomodan los votos guardados. El IFE empieza a dar entrada sólo a las casillas donde va bien Calderón. (…) Se trata de un fraude operado desde Los Pinos y el comando central del PAN, que pone en crisis la democracia, la legalidad y la supuesta neutralidad del IFE.” (“Estúpido culpar al EZLN por no apoyar a López Obrador: Marcos”, La Jornada, 07/07/06)

El fraude era evidentísimo y la presión “por abajo” de las bases del PRD, los obliga a generar movilizaciones. El IFE decide solo contar un segmento de los votos, pero aún así el dato del fraude es escandaloso. [5]

AMLO decide llamar a la “resistencia civil pacífica” organizando movilizaciones y campamentos como medida de presión, pero la derecha mexicana acostumbrada al fraude y en casos extremos al violencia paramilitar, hace oídos sordos e intenta lanzar a la opinión publica pequeño burguesa contra los manifestantes y finalmente a la policía federal:

“Apenas el lunes pasado, elementos de la Policía Federal Preventiva y tropa del cuerpo de Guardias Presidenciales y del Estado Mayor Presidencial desalojaron a golpes a legisladores del PRD que pretendían instalar un campamento frente a la Cámara de Diputados.

“Al día siguiente, más de 800 militares y policías sitiaron el lugar, colocaron vallas metálicas, cortaron la circulación de vehículos e instalaron retenes. Además, estacionaron media docena de tanquetas antimotines, equipadas con cañones de agua. Ese equipo represor está casi nuevo. Hasta ahora, sólo ha sido utilizado en una ocasión, en septiembre de 2003, contra globalifóbicos de todo el mundo que se dieron cita en Cancún para manifestarse durante la cumbre de la Organización Mundial de Comercio.” (Página 12, 18/08/06)

Perspectivas de la lucha

En este momento la lucha política de los sectores populares mexicanos esta centrada en la lucha contra el fraude electoral de la derecha oligárquica, independientemente de que todas las fuerzas de izquierda saben que el PRD y AMLO es parte fundamental del orden capitalista semicolonial en México. Los marxistas estamos a la cabeza de la lucha democrática, pero no usando ni confiando en los métodos de la democracia burguesa (los recursos legales, maniobras parlamentarias) sino con los métodos de la clase obrera (huelgas generales, paros nacionales, ocupaciones, etc.) Por eso nos parece equivocada la perspectiva de lucha que da el EZLN cuando asegura: “No tenemos el problema de la gente que prendió sus velas al proceso electoral. Hubo quien dijo ‘estoy en la otra pero pienso que la electoral es también una posibilidad’.

Siempre defendimos ese punto de vista aunque no lo compartíamos. Arriba no hay nada qué hacer, pero algunos dicen que sí, son de abajo y los respetamos. En la otra campaña sí sabemos qué vamos a hacer: avanzar en la forma organizativa de nuestro movimiento, tomando como eje todavía la libertad de nuestros compañeros presos de Atenco.” (Ídem). Veamos que el capital financiero a diferencia de Marcos no es indiferente a los resultados electorales, La Jornada anuncia: “A partir del 3 de julio y durante todo el proceso postelectoral, los inversionistas extranjeros han retirado más de 16 mil 600 millones de pesos en recursos que se encontraban invertidos en bonos de la deuda interna gubernamental.” (Viernes 18 de agosto). Lo que señala que la lucha contra el fraude debe ser presentada como la lucha definitiva por destruir lo que queda del PRIato, pero también de la misma transición pactada que representa AMLO.

Las múltiples luchas que llevan adelante los sectores populares mexicanos: la lucha minera, las luchas estudiantiles de la no aceptados, la lucha por la liberación de los presos de Atenco, la poderosa semi insurrección popular de Oaxaca, deben ser generalizados y coordinados y dirigidos contra el forma en que actualmente tomo la transición pactada: el fraude electoral.

Las masas populares de Oaxaca, que han tomado por asalto las instituciones gubernamentales y han construido su propio poder: La Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca, la cual rivaliza con los poderes del propio estado burgués mexicano. [6]

Los sectores populares mexicanos están frente a una perspectiva clara: coordinar sus luchas y generar organismos de doble poder y la convocatoria a una nueva Asamblea Constituyente Libre y Soberana que borré la fraudulenta “Transición Pactada”, el mal gobierno, que otorgue “Tierra y Libertad” a los obreros y campesinos, que avance hacia el socialismo con democracia obrera.


Recuadro 1

Trotsky: Discusión sobre América Latina, 4 de noviembre de 1938 (extractos):

La sociedad latinoamericana, como toda sociedad - desarrollada o atrasada- está compuesta por tres clases: la burguesía, la pequeño burguesía y el proletariado. En la medida en que las tareas son democráticas en el amplio sentido histórico, son tareas democrático burguesas, pero acá la burguesía es incapaz de resolverlas (...)

En este sentido, durante el curso de la lucha por las tareas democráticas, oponemos el proletariado a la burguesía. La independencia del proletariado, incluso en el comienzo de este movimiento, es absolutamente necesaria, y oponemos particularmente el proletariado a la burguesía en la cuestión agraria, porque la clase que gobernará, en México como en todos los demás países latinoamericanos, será la que atraiga hacia ella a los campesinos.

Si los campesinos continúan apoyando a la burguesía como en la actualidad, entonces existirá ese tipo de estado semi bonapartista, semi democrático, que existe hoy en todos los países de América Latina, con tendencias hacia las masas. (...)

Estamos en el período en que la burguesía nacional busca obtener un poco más de independencia frente a los imperialismos extranjeros. La burguesía nacional está obligada a coquetear con los obreros, con los campesinos, y tenemos ahora al hombre fuerte del país orientado a la izquierda como hoy en México. Si la burguesía nacional está obligada a abandonar la lucha contra los capitalistas extranjeros y trabajar bajo su tutela directa, tendremos un régimen fascista, como en Brasil, por ejemplo. (...)

Incluso en estos gobiernos semi bonapartistas democráticos, el Estado necesita del apoyo de los campesinos y es gracias a su peso que disciplina a los obreros. Es más o menos lo que ocurre en México.(...)

En la cuestión agraria, apoyamos las expropiaciones. Esto no significa, entendido correctamente, que apoyamos a la burguesía nacional. En todos los casos en que ella enfrenta directamente a los imperialistas extranjeros o a sus agentes reaccionarios fascistas, le damos nuestro pleno apoyo revolucionario, conservando la independencia íntegra de nuestra organización, de nuestro programa, de nuestro partido, y nuestra plena libertad de crítica.

El Kuomintang en China, el PRM en México, el APRA en Perú son organizaciones totalmente análogas. Es el frente popular bajo la forma de un partido. (...)

Correctamente apreciado, el Frente Popular no tiene en América Latina un carácter tan reaccionario como en Francia o en España. Tiene dos facetas. Puede tener un contenido reaccionario en la medida en que esté dirigido contra los obreros, puede tener un carácter agresivo en la medida en que esté dirigido contra el imperialismo.

Pero, apreciando el frente popular en América Latina bajo la forma de un partido político nacional, hacemos una distinción entre Francia y España. Pero esta diferencia histórica de apreciación y esta diferencia de actitud sólo están permitidas con la condición que nuestra organización no participe del APRA, el Kuomintang o el PRM, que conserve una libertad de acción y de crítica absoluta.

(...) En tanto sección mexicana de la IV Internacional, este no es nuestro Estado y debemos ser independientes frente a él. En ese sentido, no nos oponemos al capitalismo de estado en México; pero lo primero que reivindicamos, es nuestra propia representación de los trabajadores frente al Estado. Tratar de apoderarse del Estado de esta manera es totalmente idiota. No se puede tomar el poder por esta vía pacifica. Es un sueño de pequeño burgués.

(...) Era el plan de Stalin con el Kuomintang y es a causa de esta idiotez de Stalin que el Kuomintang gobierna hoy China. Entraremos en el Kuomintang, decía Stalin, luego eliminaremos con cortesía a la derecha, luego al centro, finalmente la izquierda. Así tomaremos el poder sin dificultad. Nosotros, desde la Oposición de Izquierda, subrayamos que la derecha del Kuomintang era imperialista. Tenía el ejército. No se puede tomar el poder sin oponerse a esta maquinaria. (Tomado de la recopilación Sobre la liberación nacional, Editorial Pluma.1978)


Recuadro 2

Una herencia de las reivindicaciones zapatistas

El Artículo 27 de la Constitución Mexicana (extractos)

La propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional, corresponde originariamente a la Nación, la cual ha tenido y tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo la propiedad privada.

(...)La Nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada las modalidades que dicte el interés público, así como el de regular, en beneficio social, el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de apropiación, con objeto de hacer una distribución equitativa de la riqueza pública, cuidar de su conservación, lograr el desarrollo equilibrado del país y el mejoramiento de las condiciones de vida de la población rural y urbana. En consecuencia, se dictarán las medidas necesarias para ordenar los asentamientos humanos y establecer adecuadas provisiones, usos, reservas y destinos de tierras, aguas y bosques, a efecto de ejecutar obras públicas y de planear y regular la fundación, conservación, mejoramiento y crecimiento de los centros de población; para preservar y restaurar el equilibrio ecológico; para el fraccionamiento de los latifundios; para disponer, en los términos de la ley reglamentaria, la organización y explotación colectiva de los ejidos y comunidades; para el desarrollo de la pequeña propiedad rural; para el fomento de la agricultura, de la ganadería, de la silvicultura y de las demás actividades económicas en el medio rural, y para evitar la destrucción de los elementos naturales y los daños que la propiedad pueda sufrir en perjuicio de la sociedad.

(...) Corresponde a la Nación el dominio directo de todos los recursos naturales de la plataforma continental y los zócalos submarinos de las islas; de todos los minerales o sustancias que en vetas, mantos, masas o yacimientos, constituyan depósitos cuya naturaleza sea distinta de los componentes de los terrenos, tales como los minerales de los que se extraigan metales y metaloides utilizados en la industria; los yacimientos de piedras preciosas, de sal de gema y las salinas formadas directamente por las aguas marinas; los productos derivados de la descomposición de las rocas, cuando su explotación necesite trabajos subterráneos; los yacimientos minerales u orgánicos de materias susceptibles de ser utilizadas como fertilizantes; los combustibles minerales sólidos; el petróleo y todos los carburos de hidrógeno sólidos, líquidos o gaseosos; y el espacio situado sobre el territorio nacional, en la extensión y términos que fije el Derecho Internacional.

(...) En los casos a que se refieren los dos párrafos anteriores, el dominio de la Nación es inalienable e imprescriptible y la explotación, el uso o el aprovechamiento de los recursos de que se trata, por los particulares o por sociedades constituidas conforme a las leyes mexicanas, no podrá realizarse sino mediante concesiones, otorgadas por el Ejecutivo Federal, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las leyes.


[1].- Intelectuales como Adolfo Sánchez Vázquez, José Arico o Juan Carlos Portantiero y editoriales como Siglo XXI editores o Editorial ERA son solo pequeños ejemplos de este proceso.

[2].- Esta crisis política no derivó en movilizaciones como la actual, pues el PRD no luchó por su propio triunfo electoral y acepto estoicamente el fraude.

[3].- Las dos etapas del zapatismo la de 1994 y la que inicia con la Sexta declaración de la Selva Lacandona en el 2005, señala el ciclo de 10 años que han hechos los sectores populares latinoamericanos, en 1994 el zapatismo tenía como estrategia la renuncia a la conquista del poder, la organización de “autonomías” indígenas exclusivamente en el sur de México y ninguna actitud de coordinación con los movimientos sociales urbanos. El lanzamiento de la “Otra campaña” marca una salto en una estrategia nacional y un mayor nivel de búsqueda de coordinación de los movimientos populares a nivel nacional. Aunque la política del EZLN sigue siendo un desastre, es evidente que la “Otra campaña” es una señal del cambio en el estado de ánimo de las masas mexicanas y latinoamericanas.

[4].- Esta reforma produjo la más espectacular huelga estudiantil latinoamericana desde la reforma de Córdoba [Argentina, 1918], aunque finalmente fue derrotada por la acción de la “transición pactada”, las fuerzas policiales y la política ultra izquierdista de la dirección estudiantil.

[5].- “Las cifras de la izquierda:

El Partido de Acción Nacional perdió en más de 12.000 casillas, 20.440 sufragios y ganó 6.330. Queda con un saldo negativo de 14.140 votos. El PRD perdió 6.731 votos y ganó 6.843, queda con un saldo positivo de 112.

Las cifras de la derecha:

El PAN dice que en el 98% de las casillas se ratifica que el conteo estaba bien hecho. El 2% se encuentra con errores.

La diferencia neta que arrojará este recuento será de 1.500 votos para uno o para el otro partido. Esto es el 0.04% de los casi 4 millones de votos que fueron recontados.“ (Tomado de: BBC Mundo. Lunes 14 de Agosto. México: apoyo de la izquierda)

[6].- Andrés Fernández Cortés, maestro de educación primaria, declara: “Tomamos la Secretaría de Protección Ciudadana, la Dirección de Seguridad Pública y el edifico de la Procuraduría General del Estado. (…) Aquí estamos desde el día 14 de agosto. A la Procuraduría, por ejemplo, llegamos por sorpresa, muchos compañeros llegaron a pie, otros en camionetas, otros en autobús y tomamos las oficinas por sorpresa (…) No veníamos armados, los maestros veníamos pacíficamente como siempre, nuestra única arma es exigir a estas autoridades (…) La policía quiso en un determinado momento desalojarnos pero afortunadamente los compañeros están preparados ante esta circunstancia, repelimos la agresión de los policía y en última instancia salieron huyendo.” (Tomado de BBC Mundo. Jueves, 17 de agosto de 2006. México: tensión en Oaxaca )