El
Presidente ofrece diálogo sobre los estatutos secesionistas
y la nueva Constitución, pero la derecha sigue conspirando
y ya maneja medio país
Evo
pide tregua a la oligarquía
Econoticiasbolivia,
19/12/07
La
Paz.– El presidente indígena de Bolivia, Evo Morales,
pidió públicamente una tregua por las fiestas de navidad y
año nuevo a los prefectos opositores que gobiernan de facto
y en rebeldía cuatro de las nueve regiones del país y que
ahora avanzan para consolidar y legitimar su poder.
"Empecemos
el diálogo en base a la nueva Constitución (elaborada en
solitario por el gobernante Movimiento al Socialismo y pequeños
grupos afines). Primero hay que aprobar la ley de las
autonomías y segundo hay que complementar con los estatutos
autonómicos, sean departamentales, sean regionales, sean
provinciales, indígenas especialmente", dijo Morales
al demandar una pacificación del país, virtualmente
partido en dos.
La
demanda del presidente Morales, que tiene un sólido apoyo
en el Altiplano (La Paz, Oruro y Potosí) y en casi todo el
área rural del país, se hizo pública a los pocos días
que los prefectos del oriente y los valles (Beni, Pando,
Tarija y Santa Cruz), todos ellos representantes de la
oligarquía criolla, lograran en masivas concentraciones
populares aprobar sus estatutos autonómicos, contrarios a
la ley y en franca rebeldía contra el gobierno central.
Morales
convocó a los facciosos líderes de esas regiones a
dialogar sobre estos estatutos secesionistas y sobre la
nueva Constitución Política del Estado elaborada por el
oficialismo en la Asamblea Constituyente. Los prefectos,
lejos de atenuar su rebeldía, comenzaron a preparar, junto
a los movimientos cívico–empresariales que los respaldan,
los referéndums para legitimar conm el voto popular sus
estatutos autonómicos.
Acciones
pacificadoras
Como
primera acción para desinflar la profunda crisis que vive
Bolivia, Morales instruyó paralizar toda la masiva
propaganda oficial que denunciaba, por televisión, radio y
prensa, el carácter ilegal, subversivo y secesionista de
los prefectos y sus estatutos autonómicos. Con estas nomas,
los terratenientes y la burguesía, con masivo apoyo
popular, intentan formalizar el poder que ya de facto
ejercen en cuatro de las nueve regiones de Bolivia,
configurando su propio Parlamento, su propia Policía y
tomando el control absoluto sobre la tierra, el gas, la
educación y los impuestos (ver: “La oligarquía arma su
propio Estado en Bolivia”).
En
lo formal, el pedido de tregua fue rechazado por los
prefectos opositores, pero la cercanía de las fiestas dejó
en suspenso las acciones de confrontación (huelgas de
hambre y movilizaciones callejeras), aunque sólo hasta
enero.
La
derecha se alista
En
el centro del país, según informó el prefecto de
Cochabamba, el ex capitán Manfred Reyes Villa, que cogobernó
con el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, a partir de
enero empezarán a recolectar firmas para llamar a un referéndum
sobre autonomía departamental en abierto desafío al poder
central.
"Explicaremos
a la gente el por qué se quiere autonomía departamental
para Cochabamba", dijo el prefecto fascista que tras
ser echado del cargo a principios del 2007 por un
levantamiento popular y fugar a los Estados Unidos fue
repuesto en el cargo por decisión de Morales.
En
el extremo norte, en Pando, los oligarcas y dirigentes cívicos
comenzaron los trámites para sacar los libros y recolectar
firmas para viabilizar la consulta para refrendar el
estatuto independentista. “El directorio cívico se
encargará de redactar y aprobar la pregunta para la
consulta, explicó el asesor del Comité Cívico pandino”,
Ricardo Shimokawa. El reto es llenar los libros en dos
semanas para después presentar los libros a la Corte
Electoral para la depuración posterior.
En
el extreme sur, en Tarija, el asambleísta Ricardo Cuevas,
dijo que el Consejo Preautonómico organizará el cronograma
del trabajo relacionado con el Estatuto Autonómico para esa
región. Paralelamente a ese trabajo, la dirigencia cívica
presentará ante la Corte Electoral los libros que contienen
las 32.000 firmas que el sábado pasado se entregó al
prefecto Mario Cossío. El objetivo de los tarijeños es
presentar el estatuto e inmediatamente llamar a un referéndum
departamental.
En
Beni, el Consejo Departamental se puso el plazo de un mes
para convocar el referéndum departamental, explicó el
constituyente beniano Fernando Ávila.
Todos
ellos quieren legalizar las propuestas de estatuto autonómico
que otorgar a los prefectos de la derecha el total control
de la política de tierras y del régimen tributario, así
como forjar parlamentos regionales y su propia Policía para
imponer la ley de los grandes hacendados y de la burguesía
financiera y comercial, que cuenta con masivo apoyo urbano.
Crítica
obrera
La
demanda de tregua de Morales había sido cuestionada por los
dirigentes mineros de la Central Obrera Departamental de
Oruro, ya que consideran que el fascismo sigue acumulando
fuerzas ante la pasividad gubernamental.
Los
mineros proletarios habían convocado al pueblo a
movilizarse para aplastar la conspiración fascista y
avanzar por la senda revolucionaria más allá del tibio
reformismo gubernamental en la perspectiva del socialismo.
“Es
la oportunidad histórica de resolver a favor de los
oprimidos la lucha antagónica de los pobres contra los
ricos”, dice el mensaje de los obreros (ver: “Los
mineros se ponen en pie de combate”).
Gobierno
ofrece diálogo público con agenda abierta
ABI
/ Econoticiasbolivia, 18/12/07
Cochabamba.–
El Portavoz de la Presidencia, Álex Contreras, reiteró
este martes la convocatoria al diálogo a los prefectos
opositores aglutinados en la denominada "media
luna" con una agenda abierta y en presencia de los
medios de comunicación.
"El
gobierno nacional está ratificando y reiterando la
convocatoria al diálogo como lo hiciera el presidente Evo
Morales, sin condiciones", señaló Contreras, en
conferencia de prensa.
El
Vocero manifestó que en el escenario del diálogo no debe
existir pretextos ni condicionamientos y por ello demandó a
los prefectos de los departamentos de Santa Cruz, Rubén
Costas de Autonomía para Bolivia (APB); de Tarija, Mario
Cossío (Camino al Cambio); de Pando Leopoldo Fernández
(Podemos) y de Beni Ernesto Suárez (Podemos) voluntad para
acudir a la invitación y dejar de lado esas agresiones mediáticas.
En
ese contexto, Contreras manifestó que este escenario de diálogo
que se logre concertar sea trasmitido por todos los medios
de comunicación y que el pueblo sea testigo de lo que se
habla en un proceso de negociación.
"Este
diálogo debería ser abierto, público transparente y como
Gobierno nacional le estamos ofreciendo una agenda abierta,
que los temas que analicemos sean consensuados entre los
representantes de las prefecturas y el Poder Ejecutivo para
dialogar", afirmó Contreras.
El
funcionario gubernamental indicó que hasta la fecha se ha
desvirtuado esas versiones de quienes hablaron de
militarización en algunas regiones opositoras y de
enfrentamientos.
"Ahora
es tiempo de buscar soluciones concertadas y pacíficas y
que estén enmarcadas en la Constitución Política del
Estado y las leyes vigentes en el país", enfatizó.
"Que
no se ingrese en una etapa de rumores y de terror y que se
busque el camino del diálogo y sobre todo del entendimiento
entre bolivianos", agregó.
Las
cuatro regiones en donde ganó el sí por las autonomías
departamentales, presentaron el pasado fin de semana sus
estatutos departamentales en contra de la nueva Constitución
Política del Estado aprobada por la Asamblea Constituyente
en la ciudad de Oruro, a la que consideran que "dividirá
al país".
Mientras
ello ocurría en esas regiones, en la sede de gobierno el
presidente Morales junto a varios sectores sociales festejó
la probación del nuevo texto constitucional y que ahora
debe ser sometido a un referendo que calificó como la
"última batalla" contra la oposición.
Pese
a la convocatoria al diálogo, el diputado por la alianza de
oposición Poder Democrático y Social (Podemos), Antonio
Franco, señaló que sólo se acudirá "si el
Presidente retrocede en todas las leyes que aprobó de
manera 'irregular' en desmedro de las regiones".
Morales
denuncia a los racistas y a EEUU
Econoticiasbolivia
/ ABI, 18/12/07
Montevideo
(Uruguay).– El presidente boliviano Evo Morales denunció
este martes ante los mandatarios del Mercado Común del Sur
(Mercosur) que grupos minoritarios racistas, pero con mucho
poder, se oponen al proceso de cambio en democracia y al
trabajo que encara su Gobierno a favor de los pobres que son
la mayoría en Bolivia.
"En
mi país me dijeron alguna vez que solo los pobres podemos
ocuparnos de los problemas de los pobres y como ese es mi
origen creo que estoy en condiciones de ayudarlos",
afirmó Morales en su intervención en la XXXIV Cumbre del
Mercosur, que se realiza en esta ciudad.
Confesó
que como Presidente su deber es gobernar para todo el pueblo
boliviano, pero enfatizó que está claro que los pobres son
la mayoría y los más necesitados en Bolivia.
Racismo
– grupos
Morales
informó a los mandatarios del Mercosur que en Bolivia sigue
habiendo racismo y discriminación que es impulsado por
algunos sectores como forma de justificar los conflictos políticos
y sociales.
"Hay
grupos que no aceptan que un indígena, un campesino, un
indio gobierne", dijo Morales ante la mirada atenta de
sus homólogos presidentes.
En
las concentraciones de la denominada "media luna"
promovida por cívicos y autoridades de cuatro ciudades
(Santa Cruz, Tarija, Trinidad y Cobija) manifestaron
discursos despectivos contra los indígenas y el mandatario
Morales, incluso lo llamaron "macaco" (mono).
Los
constituyentes campesinos e indígenas fueron duramente
agredidos física y verbalmente por citadinos y
universitarios de Sucre.
Morales
Ayma explicó que el desarrollo económico de Bolivia pasa
por solucionar los problemas sociales de las mayorías
campesinas e indígenas.
"Si
en Bolivia no resolvemos el problema social de los
campesinos e indígenas, no se resolverán los problemas
económicos y de desarrollo del país", agregó.
"Saben
todos que mi origen es desde la lucha como dirigente
sindical y por la defensa de los derechos de los pobres e
indígenas de mi país, y hoy más que nunca reivindico esas
ideas y posturas", subrayó.
Terrorista
y dictador
Morales,
además, denunció en el Mercosur que los pequeños grupos
de poder y racistas, están utilizando todos los medios a su
alcance para desprestigiarlo como calificativos como
"dictador", cuando les desafió a los prefectos a
someterse a un referéndum revocatorio.
Aseguró
que los prefectos opositores no quieren someterse a ese
referéndum porque saben que serán derrotados por el voto
popular.
"Antes
me acusaron de terrorista y de narcotraficante. Ahora que
llegué a la Presidencia me acusan de dictador", indicó
al referirse a los grupos oligárquicos de Bolivia, que con
ayuda extranjera, principalmente de Estados Unidos, están
generando un clima de tensión.
Sin
embargo, dijo, esas acusaciones se deben a la "suciedad
de la política" y a la postura del Gobierno en favor
de los pobres a través de la nueva Constitución Política
del Estado.
"No
sabía que la política era tan sucia, yo no sabía ello,
porque siempre hemos luchado por los cambios en
democracia", afirmó.
"Yo
llegué a la Presidencia con el apoyo de los más humildes
de mi país y no me olvido de ello", reiteró.
Violaciones
de derechos humanos
Por
otra parte, el Jefe de Estado aseguró que durante su
Gobierno jamás se violarán los derechos humanos pese a que
lo acusan de ser asesino por los tres muertos en Sucre,
Chuquisaca, cuando la Asamblea Constituyente sesionó en
instalaciones de La Glorieta.
Morales
señaló extrañado que hasta la fecha no exista el informe
del médico forense que de cuenta de las verdaderas razones
del deceso de las tres personas.
Por
ello solicitó a los organismos internacionales a sumarse al
proceso de investigación y que den un informe verdadero de
lo que ha sucedido en la capital de la República.
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