Al
cierre de este edición de Socialismo o Barbarie Bolivia, se
desató la brutal represión contra la marcha en defensa del
TIPNIS [ver
video]. En los videos y otros materiales publicados
en este sitio web se documenta ampliamente esta acción del
gobierno de Evo
Morales. En este artículo, la variante represiva ya había
sido pronosticada. De hecho, ya estaba en marcha en sus
preparativos, con el provocador bloqueo de Yucumo y el
envío masivo de policías a "preservar la
integridad"... no se sabe de quién.
Pero
lo más importante son la consecuencia inmediatas de
esta salvaje represión. Fue un "tiro por la
culata", que por abajo recibió el más amplio
repudio obrero, estudiantil y popular, con movilizaciones de protesta
en La Paz, Cochabamba y otras ciudades, y por arriba, agravó
la crisis política en el gobierno y el MAS. La mayor
expresión de esta crisis fue la renuncia de los ministros
de Gobierno y Defensa, y otros miembros del gabinete.
El
conflicto del TIPNIS puso las cosas claras en Bolivia.
Demuestra que el gobierno sólo gobierna para unos pocos. Si
bien hubo intento de "resolver" el conflicto en
algún momento, las propuestas que llevo el propio gobierno
nunca conformaron a nadie. El MAS se enfrenta hoy a una
grave crisis política. Especialmente, con sus bases que lo
apoyaron: se empieza a desarmar todo una estructura de engaños.
En
estos días, toda una serie de movilizaciones cruzan el país
de norte a sur. En las capitales de los departamentos se
registraron marchas de apoyo a los marchistas del TIPNIS.
Desde hace años no se ve tan grande solidaridad con otras
organizaciones; lo que pudo lograr la marcha es aglutinar a
una serie de organizaciones que vieron este tema como el
principio de una revuelta que nadie hoy puede determinar
hasta donde llegara. Todo lo que plantea el gobierno es
tirado a la basura. Y la bronca crece minuto a minuto entre
la población.
A
esto se le cruza que muy pronto hay elecciones judiciales,
unas elecciones que tienen un pronostico muy reservado por
el propio gobierno. El problema del TIPNIS termino
dividiendo aguas entre la población que ya venia teniendo
grandes diferencias con un gobierno que decía que
"todo cambiaria en el proceso de cambio" y, al
final, seria una gran mentira de pura demagogia.
La
posibilidad que ingrese la clase obrera
Las
cosas llevaron al desborde por la inoperancia del gobierno
de resolver los problemas. Después de 45 días de comenzada
la marcha, esta se encontró con el bloqueo que realizaba la
policía, como "prevención" para que no haya
enfrentamientos con los bloqueadores de Yucumo (vinculados
al MAS).
El
gobierno cada día que pasa va perdiendo el apoyo de la
población. Lo que más detono la bronca fue la prohibición
de pasar agua y comida a los marchistas. Esto se vio
impedido por los bloqueadores de Yucumo, que requisaban a
los que pasaban por el lugar sacándoles sus pertenencias y
realizando trabajo parapolicial.
Las
marchas y bloqueos fueron en todo el país. En Pando
instalaron cuatro puntos de bloqueo en localidades como El
Naranjal, Australia, Puerto Hamburgo y El Triangulo. En
Cochabamba hubo marcha contra la gobernación. En La Paz ya
lleva más de 7 días de vigilia la CONAMAQ, y realizaron
varias marchas que también acompaño la federación de
maestros. En Potosí se registraron marchas también.
Igualmente paso en Sucre. Y en Santa Cruz se realizaron
marchas en contra de Evo Morales en las efemérides de esta
ciudad. A esto se le suma el paro llamado por la COB. Este
podría poner un condimento de peso si es que la clase
obrera entra en escena (como ya anunciaron los mineros desde
la federación o sectores productivos del país).
La trampa del "dialogo"
La
realidad es que la lucha se viene profundizando. Los
marchistas que estaban paralizados por más de una semana en
cercanías de Yucumo, más exactamente en San Miguel de
Chaparina rompieron el cerco policial. Justo cuando estaban
dialogando con el canciller Choqueuanca y que la propuesta
de este era que se "dialogue conjuntamente con los
colonizadores" es cuando se rompe el dialogo y también
se pasa el primer cerco policial. Acá la prensa acuso a los
marchistas de haber tomado como rehén al ministro cuando
fueron solamente algunos empujones; eso si, los
colonizadores podían tirar dinamita y nadie decía nada.
Tampoco dijeron nada cuando la policía reprimió
violentamente los bloqueos de Camiri y el Naranjal.
Pero
el colmo, es que el gobierno ha dicho que quiere llevar este
caso a organismos internacionales, como dijo el ministro
Sacha Llorenti: "Señaló que tras este hecho, una
comisión gubernamental integrada por su autoridad y la
ministra de Transparencia y Lucha contra la Corrupción,
Nardi Suxo, viajará el domingo a Washington, sede la
Organización de Estados Americanos (OEA), para sentar una
denuncia internacional por el ‘secuestro’ de
Choquehuanca" [canciller].
Esto
es lo más bajo en que puede caer el gobierno que no puede
solucionar ninguno de los problemas, y va entonces a pedir
la escupidera en un organismo del imperialismo contra los
indígenas. Por si lo anterior fuera poco, este personaje
agrega: "Denunciaremos este tipo de hechos que por
supuesto vulneran nuestras normas internas y también el
derecho internacional". Sin palabras.
Los
casos de corrupción agravan la crisis política
En
este marco, otro elemento que agrava la actual crisis
politica, es que el MAS se enfrenta a una corrupción en sus
propias filas, con policías narcos y muchos disidentes que
hoy están de la otra vereda. Va perdiendo de a poco
figuras, y sumando desprestigio.
En
cuanto a la corrupción por parte de la policía, llego a
grados insospechados. El jefe de la lucha de narcotráfico,
General René Sanabria, fue preso por lo mismo que
supuestamente "combatía": una clara muestra de lo
podrido de las instituciones. Para tratar de despegarse del
caso –porque la corrupción no terminaba con él, sino que
autoridades de gobierno también estarían implicadas por
narcotráfico– le dieron 14 años de prisión en Estados
Unidos; todo esto refleja una de las causas de desprestigio
del gobierno.
Por
otro lado, algunos de los partidarios masistas ya dijeron
que si sigue el bloqueo a la marcha, se alejarían del MAS.
Unas
elecciones que podrían defi n i r mucho
Para
sumar problemas, el próximo 16 de octubre se llevaran a
cabo las elecciones del Poder Judicial a nivel nacional. El
gobierno se jugó a que estas elecciones le darían el
respaldo que le venia faltando. Como dice la Constitución
Política del Estado Plurinacional, se tiene que llevar a la
"vía democrática" la elección de los jueces que
impartirán la justicia en nuestro país. La cuestión es en
esta coyuntura de crisis política, le será muy difícil al
MAS salirse con una victoria que calme las aguas.
En
esta cuestión de la elección, el MAS ya arreglo todo para
que los que se elijan sean afínes al propio gobierno. Como
ya se sabe, el gobierno selecciono en el Congreso quienes
serian los que asuman los cargos: gane quien gane será
favorable al MAS. Pero todo esto viene paralizado por una
coyuntura poco favorable. Aparte, dependerá de cómo se
sigan desarrollando los acontecimientos; esto le dará un
condimento extra para unas elecciones poco democráticas y
dirigidas desde las entidades del Estado.
La crisis económica podría poner
gasolina a la situación
Por
si fuera poco, la crisis económica empieza a hacer efecto
en Bolivia. Las materias primas, especialmente los
minerales, han bajado en los últimos días a niveles poco
productivos. Esto condicionara más todavía la política
que termine dando el gobierno: a la crisis política se le
podría sumar crisis una social.
Al
parecer, el estaño bajo a precios poco rentables y estaría
cerca de los limites de productividad. En parte esto se
venia venir hace tiempo cuando empezó la crisis económica
mundial y que ya hemos escrito anteriormente. Pero ahora,
con la recaída de las bolsas y un giro a afectar la
producción primaria, hoy se ven afectados considerablemente
los precios de los minerales.
Esto
podría desencadenar una ola de protestas en el sector
minero privado y estatal. Ya se escuchan las voces de alerta
ante la baja de los minerales. Más allá de esto, el
gobierno de Morales y Linera también ve afectado el ingreso
de millones de dólares de parte de las regalías, en el
cual al Estado no le quedara otra que seguir ajustando el
bolsillo de los trabajadores.
Al
no haber industrializado en estos 6 años de gobierno, los
precios de los minerales serán factor determinante para
futuros despidos o aumentos de horas de trabajo.
Progreso
si pero no por el TIPNIS
En
este tema de que si la carretera tiene que pasar o no por el
TIPNIS, nosotros, como marxistas revolucionarios, defendemos
la autodeterminación de los pueblos indígenas por elegir
su forma de vida y defender su hábitat. Es claro que
estamos a favor del desarrollo, del tendido de carreteras,
de todo progreso en el desarrollo de las fuerzas productivas
sociales; pero esto debe llevarse a cabo sin poner en riesgo
la naturaleza ni avasallar los derechos de libre
autodeterminación originarios.
La
propuesta es que la carretera tiene que pasar por otro
lugar, sin poner en riesgo la reserva natural. El
capitalismo sólo ve los propios intereses a costa de
abaratar costos: puede destruir todo lo que se encuentra en
su camino. Acá es donde el gobierno muestra su lado más
capitalista: dividir el parque para que entren las
petroleras, que en parte ya están trabajando.
La
petrolera brasilera Petrobras y la Petroandina ya tienen
sectores determinados dentro del TIPNIS. La contaminación
por parte de estas empresas ya la vienen denunciando los
pueblos indígenas desde hace tiempo como el caso del pueblo
Guaraní con el Parque El Aguaragüe. A estas empresas les
importa poco y nada el medioambiente, y menos en Bolivia,
que se deja pasar todo con tal de que del algo de las regalías.
Por
una alternativa obrera, originaria y socialista
Sólo
con el socialismo se llegará a una producción sostenible
que preserve la naturaleza y la vida del hombre y sus
ambientes, logrando desarrollarse al máximo las
potencialidades de las fuerzas productivas humanas y
naturales.
No
es como dice el gobierno, que siempre se lleno la boca con
la palabra "socialismo" y jamás hizo nada en este
sentido. Todo lo contrario: sólo trajo confusión a la
población.
Al
verdadero socialismo sólo se llega a través de la
insurrección obrera y campesina, y no por vías de la
democracia parlamentaria al estilo Chávez o Evo Morales.
Sólo
con la clase obrera como dirección se podrá terminar la
con la destrucción de la naturaleza, garantizar los
derechos de libre autodeterminacion, a l tiempo que se da un
impulso fenomenal al progreso y a las condiciones de vida de
los explotados y oprimidos.