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El
futuro de la movilización popular en el Qullasuyo
El
destino de este movimiento:
¿Bolivia
blanca o Bolivia diversa?
Marina
Ari,
periodista
aymara - e-mail: wayraari@hotmail.com
Texto
publicado en Bolpress, 11-11-2003
Son
más de 80 muertos, cientos de heridos, un número indeterminado de presos
y torturados, pero hoy los culpables políticos de la masacre de octubre
en Bolivia, (agrupados en el MNR, MIR, NFR, UCS, MBL) arguyen impunes que
ellos no fueron. Hoy que los grandes medios de comunicación se hacen cómplices
de la impunidad y dan la voz al que masacró y no a las víctimas, hoy que
la clase media occidental blancoide, (una elite boliviana más
internacional y tolerante pero igual etnocida), pone en la flamante
presidencia de Carlos Diego Mesa sus esperanzas de aliviar sus temores,
planteo esta reflexión sobre la heroica revuelta popular en el Qullasuyu.
En
este artículo usaré un término que no gusta mucho en Bolivia es el término
"blancoide", lo uso simplemente por precisión. En Bolivia
existe una mínima composición social blanca, un débil mestizaje y una
mayoritaria población Indígena. Las migraciones europeas no han tenido
las características de otros países como Argentina y Chile, y el proceso
de mestización y genocidio Indígena promovido por diferentes gobiernos
bolivianos no ha tenido éxito.
Entonces
se ha estructurado un sistema similar al de Sudáfrica, donde las minorías
blancas y blancoides tienen su base de poder en el factor raza y cultura
occidental. El color de piel, los rasgos físicos y el uso del idioma español,
son determinantes para la clasificación en las escalas económicas y
acceso a oportunidades. Los indígenas ocupan masivamente los niveles de
miseria, pobreza y desempleo. Aunque Bolivia es en general uno de países
más pobres, los "blancos" tienen una preferencia, de hecho, a
privilegios basados en sus características raciales y étnicas y manejo
de los símbolos de la cultura occidental.
Es
por eso que los mestizos se niegan a auto identificarse como tales y se
definen como "blancos descendientes de españoles", sin embargo
ellos no han podido realizar una construcción de identidad ni cultura que
les sea característica, sin mencionar su origen étnico y racial, es por
eso que no los nombro con los denominativos que detestan (mestizos o
cholos) y los identifico como blancoides o semi blancos.
¿Qué
relación tiene todo esto con lo que está pasando en Bolivia?. Tiene
mucho que ver. Absolutamente todas las masacres que se produjeron en
Bolivia durante septiembre y octubre de 2003, por parte del gobierno de
Gonzalo Sánchez de Lozada fueron ejercidas contra gente Indígena. En su
mayoría Aymaras rurales y Aymaras urbanos.
Fueron
los Aymaras quienes iniciaron este movimiento social, con una huelga de
hambre en la Radio Católica San Gabriel, la cual fue dirigida por los
Mallkus y Mama T’allas (autoridades hombres y mujeres Aymaras) de la
Nación Aymara. Con visión política y conocimiento de su cultura, el
Mallku Felipe Quispe se unió (obedeció) a los mandantes de esta huelga
de hambre, pero NO la dirigió, esta iniciativa no nació de su partido
político y no fue comandada por él. Las peticiones de esta huelga de
hambre eran: respeto a la Justicia Indigenal, derecho a la decidir sobre
el destino de nuestros recursos naturales y respeto a los compromisos que
el estado boliviano ha firmado –e incumplido- en el gobierno de Jorge
Quiroga , heredero del ex dictador Hugo Banzer del partido radical
derechista Acción Democrática Nacionalista y el encabezado por Sánchez
de Lozada.
La
huelga fue totalmente ignorada no sólo por el gobierno de Gonzalo Sánchez
de Lozada y los partidos que lo apoyan (MNR, MIR, UCS, NFR, MBL), sino
también por casi todos los medios de comunicación social, con excepción
de algunas radios Aymaristas, es más en la poca atención que recibió sólo
mereció la burla, ataque y escarnio de periodistas blancoides,
considerados por la clase media como "prestigiosos". Esta huelga
fue también despreciada e ignorada por la clase media paceña y boliviana
en general.
La
respuesta del gobierno a esta movilización y reivindicaciones que siempre
consideró despreciables por ser de "Indios" fue la masacre de
Warisata. Warisata es un centro Aymara donde se construyó la Escuela
Normalista de Warisata, el paradigma de la educación Indigenal que ha
costado sangre y luto a los Aymaras durante los inicios del siglo XX.
Warisata significa la prohibición, bajo pena de muerte y castigos
severos, de los bolivianos a los Aymaras de educarse. Warisata significa
la conquista del derecho de educarse y plantear más allá de la simple
alfabetización española, una educación que parta de la cultura y lengua
Aymara. Esta conquista costó la persecución y muerte de amautas y
luchadores Aymaras como Avelino Siñani y el tata Santiago Poma, entre
otros.
Es
por eso que la masacre de Warisata, que además era practicada nuevamente
contra Indígenas indefensos, tuvo la trascendencia de recordar a la Nación
Aymara el racismo y exclusión que durante siglos se ha ejercido sobre los
Aymaras.
La
ciudad de El Alto que recibe las migraciones de Aymaras rurales, ciudad
con una de las más altas poblaciones Aymaras y a la vez la que sufre una
separación no sólo física sino de atención y provisión de servicios básicos
de la ciudad de La Paz, se levantó en solidaridad con nuestros hermanos
de sangre masacrados en Warisata y protestó contra la violación de la
Escuela Ayllu. Los bolivianos no entendieron esto y no se inmutaron frente
al ataque a uno de los símbolos de la cultura e historia Aymara "la
Atenas India" como la llamó Carlos Salazar Mostajo, pues ellos
desprecian nuestros símbolos.
Con
esta causa y en base al respeto a la filosofía de solidaridad el Alto
protestó y la repuesta del gobierno boliviano ha sido la peor masacre de
la historia boliviana. Con la confianza que le dio el apoyo de Estados
Unidos y la OEA, Sánchez de Lozada y los partidos que lo respaldaban
ejerció una larga política del criollaje boliviano: el genocidio Indígena.
Uno de los teóricos del mestizaje boliviano, Bautista Saavedra, sostenía
en el "Proceso Mohosa" que "hemos de explotar a los indios
aymaras y quechuas en nuestro provecho, o hemos de eliminarlos, porque
constituyen un obstáculo y una rémora en nuestro progreso.."
Entonces
no es coincidencia que todas las víctimas de las masacres de septiembre y
octubre en Bolivia, los muertos, heridos y presos sean Indígenas. Quienes
han participado masivamente en las movilizaciones eran "gente de
extracción popular" como llaman en Bolivia al Indígena en los
centros urbanos, buscando diluir su condición indígena con intención de
mestización forzada.
Es
más, ser Aymara, o Indio, es considerado algo vergonzoso para los
sectores blancos, blancoides y mestizos de Bolivia, sectores que por
cierto son estrechamente minoritarios.
El
mismo migrante Indígena en Bolivia busca despojarse de su condición y
cultura Indígena puesto que la boliviandad ha preparado por siglos una
imagen distorsionada del Aymara, sea la folklórica del Indiecito
ignorante, humilde y manso "como una llama" o en el otro extremo
la imagen o del Indio "salvaje, feroz e incivilizado". Ambos
estereotipos -creados intencionalmente- y el rechazo y discriminación
vigentes, producen rechazo en la juventud Aymara rural que busca
mestizarse . Instituciones como las escuelas, los medios de comunicación,
la iglesia católica y otras influyen decisivamente en este odio a si
mismo, en esta vergüenza de ser indio.
Pero
lo más indignante es el saqueo al que no le queda más que la dignidad.
La cultura Aymara por ejemplo, los bolivianos han presentado siempre como
su música a la música indígena Aymara, como su obra el Tiwanaku, centro
religioso de nuestros mayores, hoy indignantemente convertido en
"centro turístico", han explotado el "folklorismo"
para obtener apoyos a los "pobres indios", mientras ellos se
adueñan y lucran de nuestra cultura, de la cultura que ellos desprecian,
odian y no entienden. Este conflicto tuvo el sello libertario Aymara, que
es la predicción de Tupac Katari, hecha realidad "A mi nomás me están
matando, pero volveré y seré millones". Sin embargo hasta las vidas
robadas están siendo usurpadas. Aquello que fuera el regreso de Katari,
ha sido ya escamoteado por parte de los blancoides bolivianos.
La
clase media boliviana occidental versus los nuevos ricos del Ku Klux Camba
en la masacre de octubre. [“Camba”: supuesta “nacionalidad” de los
blancos de Santa Cruz –Nota del Editor]
Para
comprender como los blancoides de la región occidental de Bolivia, están
usurpando el movimiento libertario Aymara es necesario conocer algunas de
sus características comparándolas a la de los sectores oligarcas de la
nación camba, asentados en el oriente de Bolivia.
El
viernes 17 de octubre del 2003, cientos de jóvenes de la Nación Camba
atacaron a una marcha de hombres y mujeres campesinos y obreros, entre
gritos de "basura, collas de mierda" se dieron el gusto de moler
a patadas a una mujer de pollera, de destrozar a golpes a esos "collas"
que tanto odian. Por su parte los dirigentes de este movimiento negaban a
sus frutos pese a que este histórico hecho racista fue visto por todo el
país mediante las pantallas de televisión, el mismo creador de la nación
camba, el árabe Dabdoub decía estar "azorado cuando varios medios
de comunicación afirmaron que la Nación Camba participó en las reyertas
que hubo en la plaza principal. Nada más falso, porque nuestros
principios, ideológicos o humanos, están fuera de cualquier propósito
excluyente o racista" .
Sin
embargo, no era la primera vez que algo así pasaba. En enero del 2003 se
produjo una situación similar cuando una marcha de obreros y campesinos
convocada por la Central Obrera Departamental de Santa Cruz fue atacada
por cientos de jóvenes de la "Nación Camba" y la Juventud
Cruceñista, quienes agitaban las banderas verde y Negro de la Ku Klux
Camba y blandían palos, ladrillos y botellas con las cuales agredieron a
los humildes trabajadores bajo el grito de "fuera collas de mierda!".
Después de desalojar mediante la violencia a los campesinos los miembros
de la Nación Camba se subieron a la tarima donde hasta hace un momento un
obrero intentaba dirigir un discurso. El 17 de noviembre del 2001, pasó
algo similar cuando personas de la Unión Juvenil Cruceñista adherentes a
la Nación Camba, golpearon a universitarios .
Y
ni que decir en zona rurales donde se han producido masacres de indígenas
y campesinos propiciados por la Nación Camba, el caso de Pananti o de
otras zonas, donde los terratenientes cruceños, han formado "Comités
de Autodefensa de Tierra" para evitar la ocupación de tierras de
campesinos desesperados, que claman por una Reforma Agraria que distribuya
las tierras de forma más justa. En Pananti, el 4 de octubre del 2000,
ingresaron al pobre campamento de campesinos e indígenas "sin
tierra", decenas de paramilitares armados, "bajo la dirección
de terratenientes, ganaderos y la complicidad de autoridades
policiales", comandados por Teófilo Urzagasti, quemaron el
campamento "los Sotos" y mataron e hirieron a hombres, mujeres y
niños (MST 2001). El 13 de mayo del 2001 y el 20 de mayo de 2001, el
campamento Los Sotos sería atacada a balas nuevamente por escuadrones
armados. El 28 de abril del 2001, Enrique Selaya, ex diputado por el MNR,
conjuntamente 3 paramilitares ingresaron al campamento Nueva Esperanza a
las 7:30 de la noche, y persiguió a los campesinos e indígenas que
huyeron al monte, un nuevo ataque dirigido por el mismo Selaya se realizó
el 30 de abril del 2001 cuando logró a capturar a un indígena al cual le
colocó el revolver en la boca amenazando con matarlo. El 8 de mayo del
2001, los gamonales de la Nación Camba encabezados por Rosendo Benítes
–esta vez acompañados por policías vestidos de civil-, ingresaron a
las comunidades de Salada Grande y Salada Chica destruyeron y quemaron las
chozas y robaron las pertenencias de los indígenas del Movimiento Sin
Tierra.
La
mayoría de estos empresarios son extranjeros que han arrebatado sus
tierras a los pueblos indígenas y una buena parte se ha beneficiado con
concesiones de tierras en gobiernos dictatoriales. En resumen la mayor
concentración de tierras en pocas manos se da en el oriente, según el
Instituto Nacional de Reforma Agraria en Bolivia, alrededor de 25
empresarios privados de Santa Cruz poseen 22 millones de hectáreas de los
cuales solo 4 millones de hectáreas son cultivadas. El resto de la tierra
es usado como hipotecas bancarias, muchas de estas tierras y alrededor de
6 millones de hectáreas de concesiones forestales corresponden a
territorio indígena usurpado (García Mérida), sin contar la evasión de
impuestos y moras en los bancos que produjeran el cierre de algún banco,
en beneficio de estos empresarios cruceños.
A
la vez estas tierras –cuando son utilizadas- rinden utilidades en varios
casos mediante el trabajo esclavista. La "caza de bárbaros",
indígenas del oriente que eran cazados como animales por parte de los
gamonales extranjeros en Santa Cruz se dio entre los siglos XIX y XX, hoy
se utiliza a conscriptos no Con referencia a estos casos uno de los más
escandalosos fue el llamado "caso macororó", cuando un medio de
comunicación descubrió a principios del 2003 descubrió que 350
conscriptos eran semi esclavos, obligados a cosechar la planta del macororó
en las 3000 hectáreas perteneciente a Patricia Cronembold Melgar, ex
esposa del entonces canciller Carlos Saavedra Bruno.
Esta
es una imagen incompleta de la burguesía cruceña perteneciente a la Nación
Camba, falta un análisis histórico, socio cultural, de género, y creación
de valores, que corresponde a una investigación específica. Sin embargo
aún así nos sirve para compararla a otra burguesía la burguesía a la
que pertenece el nuevo presidente de Bolivia Carlos de Mesa Gisbert.
La
burguesía del occidente boliviano se precia de ser una burguesía culta,
internacionalizada (a diferencia de la burguesía de oriente a la que
consideran provincial), tiene el fuerte objetivo de bolivianizar Bolivia,
es por eso que diferentes presidentes bolivianos han destinado los
recursos económicos de la producción de Oruro, Potosí y La Paz, por
cientos de años a "integrar Bolivia", han puesto sus esperanzas
en el oriente como el futuro de Bolivia. Todo lo contrario de la burguesía
camba que detesta la idea de "bolivianizar" Santa Cruz, uno de
los exponentes más violentos del Ku Klux Camba, Sergio Antelo, se refería
al líder campesino Cimar Victoria como "un conocido delincuente que
ocupa el cargo de dirigente de los, entre comillas, colonizadores /que
tiene/ el objetivo de "bolivianizar" Santa Cruz, convertirla en
el Andes boliviano, que es totalmente inviable...".[1] La burguesía
occidental además ha marcado las corrientes filosóficas y sociológicas
en Bolivia, lo más coherente de las artes y letras se ha producido en el
occidente. La evolución de los derechos de indígenas, mujeres, afro
descendientes y otros se ha realizado en la parte occidental de Bolivia.
Esto no quiere decir que la burguesía occidental no sea racista, es
racista de otra forma, mientras la nación camba justifica el racismo
"... en Estados Unidos hay racismo hacia los latinos, en Europa hay
discriminación con los ‘sudacas’, en Inglaterra contra los negros, en
fin, hay racismo. No defiendo al racismo, pero hay razas..."[2], la
burguesía occidental hace una marcha de manos unidas pidiendo la renuncia
de Sánchez de Lozada, sin dejar de explotar y marginalizar a los Indígenas.
Es sin duda un diferente tipo de racismo, se diferencia en que un grupo
usa el palo y el otro el sistema económico político.
Un
día antes del 17 de octubre, los jovenzuelos de la Ku Klux Camba
anunciaban la paliza a indígenas por el internet, este mensaje de un tal
Jorge Paz era muy representativo de varios mensajes similares: ".. es
mejor que te quedés pegado a tu televisor (si vivís en el collao) o te
pasés por el 4to Anillo y Avenida Banzer mañana viernes 17 y podrás
constatar con tus propios ojos de auquénido para ver como reventamos
indios!!! La Nacion Camba le tiene un "grato" recibimiento a
la primer marcha de animales sucios que tratan de ingresar a
nuestra urbe... personalmente estoy esperando para partir cabezas de animales
collas y limpiar la nueva Bolivia de esa basura...", es
decir, exactamente lo mismo que gritaban los integrantes de la Nación
Camba y Juventud cruceñista al magullar a patadas a una señora Aymara,
frente a las cámaras de televisión nacionales.
La
burguesía occidental en cambio se había unido al movimiento de pedido de
renuncia del cuasi dictador Sánchez de Lozada, sus intelectuales,
artistas y empresarios progresistas habían iniciado una huelga de hambre
encabezada por la respetada ex Defensora del Pueblo, Ana María Campero; y
hasta los más reaccionarios medios de comunicación tenían esta noticia
en primera plana. En la zona sur, el área nuclear de la burguesía
occidental, se habían organizada una "cadena humana"
consistente en formar un cordón de personas que se tomaban de la mano.
Otra vez los medios ensalzaron la calidad pacífica de estos actos. Y no
es que las marchas indígenas no hayan sido pacíficas, los Indígenas no
tenían armas, la diferencia estaba en el ejército y policía que
golpeaban, y disparaban a los Aymaras empobrecidos con gusto, pero no se
atrevían a hacerlo con la señora rubia y con lentes de sol, que marchaba
con su empleada con la petición similar de que Lozada se fuera. Sobre
todo estas medidas le abrieron la puerta a la clase media y burguesía de
occidente para protagonizar el conflicto, los medios masivos de comunicación
escamotearon el protagonismo y objetivos Indios del conflicto, dando
primera plana a los autodenominados "piqueteros de la
esperanza", la clase media blancoide occidental que buscaba servir
"de amortiguador a la polarización y paralización del país".[3],
léase cambiarle el sentido de exigencia de profundos cambios por
maquillajes sociales y económicos, al estilo blancoide.
Porque
las masacres de septiembre y octubre fueron resueltos por y para la
burguesía occidental. Con mayor inteligencia y habilidad, sobre todo con
"buena voluntad", la burguesía criolla occidental se sobrepuso
a la propuesta neo nazi de la burguesía camba. Carlos Diego Mesa,
presidente de Bolivia desde octubre del 2003 representa uno de los
intentos más fuertes de la bolivianización de Bolivia, frente a dos
propuestas que interesada y torpemente se han intentado meter en el mismo
saco, la propuesta de la nación camba y la propuesta de la reinstauración
de la nación Qullasuyana.
Las
tres concepciones tienen una base histórica diferente y un peso
cuantitativo y cualitativo diferente. La propuesta de nación Qullasuyana
viene desde la época del incario y ha ido evolucionando y fortaleciéndose,
planteando derechos igualitarios para ese 60% de indígenas y el 30 %
restante (ese 30% que se siente avergonzado o indiferente frente a su
identidad), es el propósito de que sean las mayorías que gobiernen y de
finalizar con el racismo como base de la exclusión, es una propuesta
integradora porque el territorio que ocupa hoy Bolivia es territorio Indígena,
por eso no aceptamos balcanización alguna. La propuesta de la
bolivianización es la propuesta que tiene su origen en la república,
tiene el propósito de "civilizar" al Indígena, es decir hacer
más agudo el etnocidio y aplacar o maquillar el racismo de los sectores
de poder, busca mantener la situación de privilegio de los blancoides,
hacer más amplia la cholificación negativa, es decir diluir y vulgarizar
los valores indígenas y sentido nacionalista. No hay que olvidar que los
blancoides occidentales en Bolivia, pese a que pueden caracterizarse como
bolivianistas de buena voluntad, son simples malos imitadores de las
culturas europea y hoy de la estadounidense. La propuesta de la nación
camba es una propuesta nueva[4] que viene desde el régimen del dictador
Banzer[5], tiene el objetivo de excluir los derechos y presencia indígena
y de agudizar la exclusión mediante el supremacismo blancoide. El futuro
de estas propuestas no puede predecirse porque el destino se hace en base
a cada esfuerzo y voluntad de hacer historia. Resalto, sin embargo, que
aquí hay un pueblo que dilapida generosidad y solidaridad, una nación de
grandeza de conocimientos y saberes, una nación que ha legado al mundo
conocimientos extraordinarios como la modificación genética de la papa,
la curación para la malaria, el proceso de deshidratación y miles de
conocimientos más. Aquí está unas personas que han sobrevivido a
generaciones de genocidio, exclusión y miseria y que sin embargo
conservan la grandeza de sus valores y cultura: los Aymaras, junto a otros
pueblos hermanos Indígenas. Cuando el futuro sea nuestro, mostraremos la
misma generosidad y sencillez de hoy.
Octubre
del 2003 en Bolivia, nos ha mostrado que somos los millones que reclamó
Tupac Katari, y no me refiero sólo a los Aymaras sino a toda la gente del
mundo que se sintió solidaria, con algún punto en común con la gente
que era masacrada o en Iraq o en Colombia o en Bolivia, desconocidos de
Argentina, desconocidos de Canadá, desconocidos de Ecuador, Brasil,
Francia.... creo que todos estos solidarios pensamos y sentimos que la
vida humana es más valiosa que miles de dólares, que cada identidad
merece respeto, que tanto sacrificio, tanto valor y generosidad merece un
destino futuro de Nación donde prevalezcan nuestros valores de justicia y
solidaridad.
Bibliografía:
Aré
Vásquez, Tuffí. Mario Paredes Mallea "La Nación Camba es
neofascista". El Deber. Santa Cruz de la Sierra - Bolivia, domingo
06, julio de 2003
Aparicio
Otero, Rolando. Santa Cruz contra el racismo. El Deber. Santa Cruz de la
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Deber. Santa Cruz, Bolivia: 5 de enero de 2003
Camacho
S, Adhemar. Marcha expresó el descontento de toda la región. El
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El
Deber. Cambas y collas se enfrascaron en una batalla campal en Santa Cruz.
Santa Cruz, Bolivia: 25 de enero de 2003
El
DEBER. Cívicos y políticos coinciden en el cambio de modelo, piden
autonomía. Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, Martes 28, Octubre de 2003
García
Mérida, Wilson. Bolivia: Usarán soldados sin salario para reactivar la
empresa privada. Rebelión. 20 de julio del 2003
Gandarillas,
Roberto. La siembra del terror organizado. El Deber. Santa Cruz de la
Sierra, Bolivia. 18 de octubre de 2003
La
Prensa. Cambas y collas pelean en la plaza de Santa Cruz. La Paz: 25 de
enero de 2003
Movimiento
Sin Tierra Bolivia. Antecedentes de la matanza de los Campesinos Sin
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Pabón
Montiel, Juan Bautista del Carmen. La Nación Camba, un problema nacional.
El Deber. Santa Cruz, Bolivia: 25 de enero de 2003
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Toranzo
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Vegas
R., Leopoldo. Cidob y el MAS acusan a Nación Camba de racistas y
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en la PTJ. EL DEBER. Santa Cruz de la Sierra - Bolivia, Martes 21, Octubre
de 2003.
Notas:
[1]
Antelo, Sergio. El Deber, 18 oct. 2003.
[2]
Antelo, Sergio. El Deber, 17 oct. 2003,
[3]
Campero, Ana María. Conspirar por la paz. La Razón 08/11/2003.
[4]
El primer documento de la nación camba aparece el 14 de febrero de 2001,
es básicamente una reacción del grupo empresarial de extranjeros
neonazis radicados en Santa Cruz, al planteamiento del Mallku Felipe
Quispe del año 2000 cuando plantea que el objetivo de los Aymaras es la
reconstitución de la Nación Aymara y que los blancoides eran inquilinos
usurpadores. El documento de la nación camba plantea un "nuevo
nacionalismo cruceño", basado en una historia común (todas de
intervención europea) y rasgos culturales comunes como "la necesidad
de hacer siesta después de almuerzo". (Pinto Mosqueira:2, 2003)
[5]
Ya desde la época de Banzer quien proviene de asentamientos nazis de
alemanes en Bolivia, se planteaba una corriente supremacista
"blanca". Un ejemplo de los planes racistas de Banzer los expone
Martin Sivak, cuando registra en la biografía de Barnzer que el dictador
dispuso implementar un proyecto de traslado de excolonos blancos de origen
alemán y holandes bajo el pensamiento banzerista de mejora de raza (Sivak:173,
2001).
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