Estados Unidos

Desempleo en EEUU alcanza su máximo de 25 años

Por Brian Blackstone
The Wall Street Journal, 03/04/09

Washington (Dow Jones)––El nivel de empleo en Estados Unidos volvió a caer en marzo, lo que ubicó el total de las pérdidas de empleos desde que comenzó la recesión, hace 16 meses, por encima de los cinco millones.

El informe, que mostró un aumento de la tasa de desempleo a un máximo de 25 años, refleja una realidad más sombría para la economía del país después que otros informes sobre los sectores inmobiliario, automotriz y manufacturero generaran cierta esperanza de una recuperación.

Las nóminas de empleos no agrícolas cayeron en 663.000 el mes pasado, informó el viernes el Departamento de Trabajo, su decimoquinto descenso consecutivo.

Sin embargo, la lectura de enero fue revisada a la baja, a una caída de 741.000, el tercer mayor descenso hasta la fecha.

Los economistas consultados por Dow Jones Newswires habían proyectado, en promedio, un descenso de 673.000 en las nóminas de marzo.

La tasa de desempleo, por su parte, ascendió en 0,4 puntos porcentuales al 8,5%, su nivel más alto desde noviembre de 1983. Los analistas esperaban una tasa del 8,5%.

La economía ha eliminado 5,1 millones de empleos desde el inicio de la recesión en diciembre del 2007, y más de dos millones de esas pérdidas han ocurrido sólo en los últimos tres meses.

"Estos descensos han sido generalizados entre los diferentes sectores, pero particularmente agudos en el manufacturero, de construcción y de servicios temporales de ayuda", dijo Keith Hall, Comisionado de la Oficina de Estadísticas Laborales.

Los anuncios de despidos continuaron el mes pasado en todos los sectores, e incluyeron compañías como United Technologies Corp. (UTX), General Dynamics Corp. (GD), National Semiconductor Corp. (NSM) y Wal–Mart Stores Inc. (WMT).

La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos señaló que espera que la tasa de desempleo aumente al 10,5% para fines del próximo año.

Según algunos indicadores más amplios, las condiciones en el mercado laboral sugieren que ya se han alcanzado esos niveles. Si se incluyen los trabajadores con una vinculación marginal y los empleados involuntarios a tiempo parcial, la tasa de desempleo o subempleo ascendió el mes pasado al 15,6%, un aumento frente al 14,8% de febrero y más de cinco puntos porcentuales por encima del mismo mes de un año atrás.

El ingreso promedio por hora de los trabajadores aumentó el mes pasado en US$0,03, o un 0,2%, a US$18,50. Si se compara con un año antes, el ingreso promedio ascendió un 3,4% en marzo.

El Departamento de Trabajo agregó que las contrataciones laborales en el sector de la producción de bienes registraron una disminución de 305.000 durante marzo. Dentro de ese grupo, las empresas manufactureras eliminaron 161.000 empleos, para un total de 1,5 millones desde el inicio de la recesión. Los empleos en el sector de la construcción se redujeron en 126.000.

En tanto, los empleos en el sector de los servicios disminuyeron en 358.000. Las compañías de servicios empresariales y profesionales redujeron en 133.000 sus nóminas de empleos. En el sector financiero, los empleos se redujeron en 43.000.

Las firmas minoristas eliminaron 47.800 puestos de trabajo y el sector del entretenimiento y hospedaje recortó 40.000 empleos.

Los empleos temporales, que los economistas consideran un indicador de las perspectivas futuras para el empleo, cayeron en más de 70.000.

El sector de los servicios de salud volvió a ser el único sector privado que mostró un comportamiento positivo, con una creación de 13.500 empleos. El Gobierno eliminó 5.000 empleos.

La duración promedio de la semana laboral disminuyó en 0,1 puntos porcentuales a 33,2 horas.


La economía de EEUU sigue sin reaccionar pese a los millonarios estímulos

No hay salvavidas que frene el desempleo

Página 12, 01/04/09

Washington anunció ayer que marzo cerró con una suba de 0,4 por ciento del desempleo, que llegó al 8,5 por ciento, peor de lo esperado. Hay 5.100.000 despedidos, más los millones que se rindieron y los que trabajan part time.

Los millonarios salvavidas lanzados por el gobierno estadounidense para reactivar la economía no lograron rescatar al mercado laboral de la creciente destrucción de empleos en la que se encuentra. Sin perspectiva de mejora en el corto plazo, las nóminas de las empresas continúan reduciéndose. Según cifras del Departamento de Trabajo, el de–sempleo creció en marzo 0,4 punto respecto de febrero para ubicarse en 8,5 por ciento, el nivel más alto desde 1983. “Desde el comienzo de la recesión, en diciembre de 2007, la pérdida de empleo alcanzó a 5,1 millones de personas, 3,3 millones en el transcurso de los últimos cinco meses”, advierte el informe oficial. El presidente Barack Obama consideró que estos números advierten sobre la necesidad de una acción más coordinada entre todos los países.

“Si no actuamos de manera concertada, fracasaremos colectivamente”, dijo Obama durante una conferencia de prensa que brindó junto con su par alemana, Angela Merkel, poco después de que se conocieran la cifras de empleo en su país. El mandatario norteamericano reconoció que su economía “se ha visto duramente golpeada” por la crisis. En febrero, su administración impulsó un plan de reactivación para salvar o crear más de 3,5 millones de puestos en dos años. Sin embargo, las estadísticas oficiales siguen dando cuenta del deterioro de estos indicadores sociales.

Ayer la Cámara de Representantes (diputados) y luego el Senado de Estados Unidos aprobaron una resolución presupuestaria por más de 3,5 billones de dólares para el ejercicio de 2010. La resolución, que servirá de guía para los gastos del año fiscal 2010, todavía queda pendiente de rectificaciones para que coincidan las versiones aprobadas por la Cámara baja y el Senado. La versión de los representantes aumentaría los gastos del Estado en un 9,5 por ciento respecto del año pasado, mientras los senadores proponen incrementarlo en un 7 por ciento.

Sin embargo, las ayudas del Estado siguen teniendo como principal receptor al sistema financiero, en tanto el sector real no se recupera. La cantidad de empleos eliminados el mes pasado fue incluso superior a las previsiones de los analistas. Los cálculos privados estimaban la destrucción de 658.000 puestos, luego de los 651.000 de febrero y 741.000 de enero. El mes pasado la actividad recortó unos 663.000 empleos. La industria expulsó de sus nóminas 305.000 trabajadores en marzo, mientras que unos 358.000 puestos se perdieron en el sector servicios, donde trabaja cerca del 85 por ciento de la mano de obra no agrícola estadounidense. Por su parte, el único sector generador de empleos fue el público. La educación y los servicios de salud sumaron 14.000 nuevos puestos en marzo.

El informe de la cartera laboral detalla que las empresas de construcción se desprendieron de 126.000 puestos, las fábricas perdieron 161.000, el comercio minorista 50.000 y los servicios profesionales y de negocios otros 130.000.

Si se agregan las personas que sólo tienen un trabajo de tiempo parcial porque no consiguen otro, y las que desalentadas abandonaron la búsqueda de empleo, el índice de desempleo en marzo fue de 15,6 por ciento, el más alto desde que se comenzó a compilar. El registro oficial de desempleados subió de 12,4 millones en febrero a 13,2 millones en marzo. En tanto, el número de personas que desearía trabajar más horas pero están forzadas a tomar empleos de tiempo parcial aumentó en 423.000 el mes pasado y llegó a 9,3 millones. Se trata de empleos que no cuentan con beneficios sociales, como vacaciones y seguro médico. A esto se agregan más de 5,5 millones de personas que sostienen querer encontrar un trabajo, pero no están contabilizados entre la población activa por diversas razones.

En las últimas previsiones publicadas por la Reserva Federal se estimaba un desempleo de 8,5 y 8,8 por ciento para el transcurso de este año, aunque con el actual ritmo de destrucción de puestos no se descarta un cifra de dos dígitos para el año próximo y por encima del 9 por ciento éste. Por su parte, el titular de la Fed, Ben Bernanke, reiteró que la institución debe mantener su flexibilidad para retirar las inyecciones de capitales que volcó a la economía y mantener controlada la inflación a medida que pase la crisis. “El alivio de los trastornos en los mercados de crédito y el restablecimiento de ese flujo a los hogares y las empresas son esenciales si hemos de lograr, como espero, la reanudación gradual de un crecimiento económico sostenible”, dijo Bernanke.