|
Deuda
griega
La
agencia Moody's rebajó ayer hasta el nivel «basura» -de A3 a Ba1,
cuatro escalones de golpe- la calificación crediticia de los bonos que
emite el Estado griego por las dudas sobre el impacto de las medidas de
ajuste en el crecimiento económico del país. |
Quisieron dar una imagen
de cohesión y ofrecer una postura común ante las crisis económica, pero el
presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel,
apenas lograron un acuerdo para llevar a la cumbre del G20 la propuesta de una
tasa bancaria con la que financiar futuros rescates. Evidenciaron que
mantienen sus diferencias sobre el impulso de una política económica común
en la UE, con la creación de un «gobierno económico europeo».
La canciller alemana, Angela
Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, intentaron mostrar ayer una
imagen de cohesión sobre cómo actuar ante las crisis en la UE, para
minimizar las discrepancias que han surgido últimamente, en medio de un
panorama de crisis de la moneda europea, de su economía, y de su cohesión
política.
Tras una reunión de algo más
de hora y media con Sarkozy en Berlín, ambos líderes subrayaron su propósito
de presentarse a la próxima cumbre del G-20 en Toronto con una posición
conjunta porque, dijeron, «no estamos satisfechos» con lo conseguido en la
anterior cita del grupo en lo relativo a lograr una mayor regulación de los
mercados financieros.
Para ello, dirigirán una
carta al primer ministro canadiense, Stephen Harper, en la que defenderán
propuestas comunes como la creación de una tasa bancaria para que los
institutos financieros cuenten con un colchón de fondos, en el caso de una
nueva crisis, y la implantación de un impuesto para las transacciones.
Pero fueron más ambiguos al
hablar de la creación de un gobierno económico entre los dieciséis países
de la Eurozona, que Sarzoky defiende, pero Merkel hasta ahora rechaza.
Gobierno
de los Veintisiete
La canciller alemana defendió
un gobierno de los Veintisiete. «No se trata de crear instituciones nuevas,
sino de abordar los problemas en el marco de los veintisiete miembros de la UE
y, si acaso, actuar los dieciséis, si la situación lo requiere», dijo
Merkel, ratificando su postura a favor de englobar a todos los socios. Sarkozy,
en cambio, insistió en las palabras «rapidez de actuación» y «dinamismo»
para reforzar su argumento a favor del gobierno económico de la Eurozona. Ni
uno ni uno concretaron más a este respecto, pese a que teóricamente la cita
era preparatoria para la cumbre de la UE del próximo jueves, en la que Berlín
y París quieren presentarse, en palabras de Merkel, «con una única voz».
Las diferencias latentes de
siempre entre ambos líderes se convirtieron en abiertas tras el estallido de
la crisis griega. Sarkozy apuesta por las ayudas rápidas, mientras Merkel las
fue retrasando.
Al borde
de la ruptura
Por su parte, el presidente
de la UE, Herman Van Rompuy, afirmó que el bloque de dieciséis países que
integran la zona del euro estuvieron a punto de ruptura el mes pasado. Van
Rompuy se refirió así a los problemas fiscales que comenzaron a afrontar
entonces los estados de la eurozona y que, a su juicio, tienen origen en años
anteriores, pero habían quedado ocultos por la fortaleza del euro.
En una entrevista que publicó
ayer el diario «Financial Times», recogida por Efe, criticó también a los
mercados financieros por su reacción, que considera excesiva, a las
dificultades económicas actuales y por guiarse por rumores y prejuicios. Sin
embargo, defendió las medidas que los estados europeos están adoptando para
contentarlos, como la flexibilización de los mercados laborales y el retraso
de la edad de jubilación.
Examen de
Bruselas
La Comisión Europea publicará
hoy su evaluación sobre el programa para reducir el déficit de las cuentas públicas
españolas así como los de Italia, Bélgica, República Checa, Alemania,
Estado francés, Holanda, Austria, Eslovenia y Eslovaquia.
Revuelo
por la posibilidad de que Madrid recurra al fondo de rescate
El Ministerio español de
Economía y Hacienda desmintió ayer de nuevo que Madrid vaya a solicitar la
ayuda de los países de la UE por su crisis financiera y de deuda, tal y como
afirmó en sus páginas el diario alemán «Frankfurter Allgemeine Zeitung»,
que citó fuentes de los círculos gubernamentales de Berlín y se refirió a
la preocupación por la situación del sistema bancario español. Asimismo,
apuntó que otros estados miembros de la zona euro consideran que las medidas
de ajuste presentadas por el Gobierno de Zapatero son inadecuadas. Fuentes del
Ministerio español señalaron a Europa Press que esta información es falsa,
pero es la segunda vez en una semana en la que la prensa alemana asegura que
Madrid va a recurrir al fondo de estabilización, dotado con 750.000 millones
de euros. El viernes lo aventuraba «Financial Times Deutchland». Pese al
desmentido español, el «Frankfurter Allgemeine Zeitung» recordó que el
Ejecutivo griego hizo una declaraciones similares en primavera y luego pidió
ayuda a la UE. La canciller alemana, Angela Merkel, también dijo que no hay
que fomentar «los rumores y las especulaciones» sobre la posibilidad de que
Madrid necesite ayudas del fondo de rescate. «La noticia importante es que
hay un paraguas para toda la Eurozona. Es lo importante para los mercados.
España o cualquier otro país sabe que ese paraguas está ahí». El portavoz
europeo de Asuntos Económicos, Amadeu Altafaj, aseguró que «a día de hoy
no se está discutiendo ningún plan de asistencia financiera a ningún país.
Parece que alguna gente no entiende esto, particularmente en Alemania».