Tras el rescate de Irlanda, los mercados miran
a Portugal
y España
Por Jeffrey T. Lewis, en Lisboa y
Christopher Bjork, en
Madrid
Wall
Street Journal, 22/11/10
Las esperanzas de que el plan de rescate que se
prepara para Irlanda contenga la acumulación de presión sobre otros
gobiernos europeos se desvanecieron el lunes, cuando los mercados financieros
dirigieron la atención hacia Portugal como la posible siguiente pieza del
dominó en caer.
El domingo, Irlanda decidió solicitar formalmente miles
de millones de euros en ayuda a la Unión Europea y el Fondo Monetario
Internacional para hacer frente a su déficit presupuestario.
Varios políticos esperaban que el rescate de Irlanda
calmara las tensiones en otras economías de la UE. "Espero que el pedido
de ayuda de Irlanda al fondo de la UE normalice la situación del mercado
porque, claramente, Portugal estaba sufriendo un efecto de contagio",
dijo a la prensa José Sócrates, el primer ministro portugués. "No hay
relación entre Portugal e Irlanda".
La ministra de Economía de España, Elena Salgado,
rechazó rotundamente que su país vaya a necesitar ayuda financiera externa
para reducir su déficit presupuestario o para componer sus finanzas.
"España está haciendo todo aquello a lo que se ha comprometido y con
resultados ya tangibles", sostuvo en la radio estatal RNE.
Sin embargo, el principal índice bursátil de España
cerró con un retroceso de 2,7%, mientras que el índice de referencia de
Portugal cayó 1,4%. "Tras la confirmación de que Irlanda sería
rescatada, los mercados se preguntan si ha llegado el momento de ayudar a
Portugal y, a largo plazo, a España o Italia", planteó la firma de
corretaje española Banca March en un informe a sus clientes.
Los inversionistas siguen extremadamente preocupados ante
la posibilidad de que Portugal herede pronto la crisis de Irlanda. Los bonos
de Portugal registraron una ganancia mínima después del anuncio del rescate
de Irlanda, mientras que el costo de asegurarlos contra una cesación de pagos
se disparó. Costos de seguro similares para España, Grecia e Irlanda también
subieron.
Si Portugal fuera a recurrir al fondo de rescate de la
UE, necesitaría apenas 51.500 millones de euros (US$70.500 millones) en los
próximos tres años para cubrir sus anticipados déficits presupuestarios y
pagar bonos que estén por vencerse, según datos de HSBC. Pero el equivalente
para España es de más de 350.000 millones de euros, lo que pondría a prueba
la capacidad de la UE y del Fondo Monetario Internacional.
Portugal enfrenta una huelga general el miércoles, dos días
antes de que el Parlamento vote sobre planes de gastos para 2011 y después de
que la minoría que lidera el gobierno de Sócrates consiguiera en una ardua
batalla una reducción del presupuesto.
Miguel Macedo, líder parlamentario del principal partido
de oposición de Portugal, el PSD, dijo el lunes que la decisión del gobierno
irlandés podría aliviar en algo la presión sobre Portugal, pero el gobierno
no debe abandonar sus esfuerzos por reducir drásticamente el altísimo déficit
presupuestario del país. Portugal "no puede dejar de hacer ni un solo día
lo que tiene que hacer para escapar del radar de los mercados
internacionales", dijo. "Tenemos que cumplir rigurosamente con el
presupuesto que vamos a aprobar esta semana y hacerlo bien porque es la única
forma de recuperar la credibilidad de los mercados".
Sin embargo, Tullia Bucco, una economista del banco
UniCredit en Milán dijo: "Aún es difícil ver qué podría poner a
salvo a Portugal. No creo que un voto a favor del presupuesto calme las cosas.
Mientras más tiempo duren las presiones del mercado, más crecen las
probabilidades de que Portugal tenga que pedir algún tipo de ayuda".
En 2009, Portugal tenía un déficit presupuestario
equivalente a 9,3% de su Producto Interno Bruto y su meta para este año es
reducir ese porcentaje a 7,3%, y a 4,6% para 2011.
Economistas de Citigroup señalaron que el déficit
portugués hasta el momento no ha logrado "mostrar una clara mejora en
2010, especialmente en comparación con otros países de la periferia de la
zona euro como Grecia, Irlanda o hasta España". El gobierno anunció el
lunes que el gasto aumento 2,8% entre enero y octubre, pero que el ingreso
creció 4,6%, por encima del 1,2% previsto en el plan presupuestario para el año.
Se prevé que el plan de rescate de Irlanda incluya un
paquete que impulse las reservas de capital de los bancos.
¿Es la cesación de
pagos una mejor salida?
Por
Bob Davis
Wall
Street Journal, 22/11/10
Washington.– Mientras que otro país europeo se
acerca a un rescate multimillonario, varios economistas dicen que solamente
hay una forma de hacer que los acreedores compartan el dolor: declararse en
cesación de pagos.
En Dublín, funcionarios del Fondo Monetario
Internacional (FMI), la Unión Europea (UE) y el Reino Unido están negociando
los detalles de un paquete de rescate que probablemente requiera que el
gobierno irlandés se apriete el cinturón en pensiones y salarios pero, a su
vez, que pague a los tenedores de bonos de los bancos cuyas deudas el gobierno
garantizó.
Un desenlace tan desequilibrado –que ha sido repetido
por lo menos desde las crisis de deuda de América Latina en la década de los
años 80– enfurece a los votantes y sugiere a los inversionistas que no hay
un precio a pagar por realizar préstamos riesgosos porque las instituciones
internacionales siempre los rescatarán.
En lugar de eso, dicen economistas, se debería requerir
a los prestamistas asumir algún tipo de responsabilidad sobre sus inversiones
como manera de reducir la deuda de un gobierno y obligarlos a ser más
cuidadosos respecto a dónde invertir su dinero la próxima vez ya que se darán
cuenta de que el FMI y otros no garantizarán que se les pague todo.
"El efecto más importante es que la deuda (de un país)
no se acumule demasiado", dijo Kenneth Rogoff, economista de Harvard que
ha estudiado siglos de cesaciones de pago soberanas.
La canciller alemana, Angela Merkel, trató de moverse en
esa dirección el mes pasado. Convenció a otros miembros de la UE de que debían
considerar obligar a los inversionistas en bonos soberanos a aceptar pérdidas
como condición para futuros planes de rescate. Pero el esfuerzo tuvo efectos
contraproducentes cuando provocó un fuerte incremento en los costos de
endeudamiento de los países más débiles de la eurozona. Los críticos dicen
que esto hizo aún más probable un rescate para Irlanda.
La reacción negativa del mercado ilustra la dificultad
de hacer un cambio así. Durante los tiempos de crisis, cualquier rumor de que
se castigará a los acreedores hace subir las tasas de interés y empeora la
situación. Durante los momentos de tranquilidad, el impulso para cambiar se
diluye. Los acreedores se ocupan de otras preocupaciones y los países que
emiten deuda no quieren cambios que puedan incrementar sus costos de
financiamiento.
"Hay países que creen que facilitar el proceso de
cesación de pagos reduciría su habilidad para emitir deuda", dice
Raghuram Rajan, economista de la Universidad de Chicago.
Luego de la crisis financiera asiática de 1997 y 1998,
el FMI propuso un mecanismo de cesación de pagos institucionalizado. El
fondo, según la propuesta, habría juzgado la capacidad de un país de pagar
sus deudas y las políticas que necesitaba aplicar. Otra institución habría
actuado como un tribunal internacional de bancarrota. La propuesta se diluyó
en 2003 por la oposición del Departamento del Tesoro de Estados Unidos y de
los mercados emergentes, que no querían ceder poder a un organismo
internacional.
Pero incluso si Europa crea un mecanismo de default, dice
Rogoff , no es claro que los países en desarrollo vayan a seguir la idea.
El temor de un
efecto dominó se propaga por
la Unión
Europea
Por
Tom Lauricella, Stephen Fidler y
Mark Gongloff
Wall
Street Journal, 23/11/10
El nerviosismo de los mercados financieros se acentuó en
Europa en medio de una venta generalizada de euros y bonos de algunos de los
países más endeudados de la zona euro, desvaneciendo las esperanzas de que
un rescate internacional de Irlanda aliviaría la presión sobre otros
gobiernos.
Los precios de los bonos españoles y portugueses cayeron
significativamente ayer y el rendimiento de los títulos alemanes subió a
niveles récord, según datos de la firma Markit. El euro cayó por debajo de
US$1,34 por primera vez en dos meses.
"Las personas que están apostando a un contagio
probablemente están en lo correcto", dice David Gilmore, estratega de
Foreign Exchange Analytics, una firma de divisas. "No hay nada en
realidad que detenga el próximo efecto dominó en el mercado", agregó.
La inquietud en Europa, combinado con los eventos en la
península de Corea, se sintió en los mercados estadounidenses. El Promedio
Industrial Dow Jones cayó 142,21 puntos a 11.036,37, mientras que los precios
de los bonos del Tesoro saltaron.
La canciller alemana, Angela Merkel, subrayó la grave
situación que enfrenta el euro al calificar la crisis en Irlanda como
"muy preocupante" para la región. "Estamos en una situación
extraordinariamente seria en lo que concierne al euro", dijo Merkel en un
discurso durante una conferencia de empresarios alemanes el martes.
La canciller alemana, Angela Merkel, subrayó la grave
situación que enfrenta el euro al calificar la crisis en Irlanda como
"muy preocupante" para la región.
El empeoramiento de la situación en Europa tomó a
varios operadores con la guardia baja. La atención en las últimas semanas se
había concentrado en el impacto del relajamiento cuantitativo implementado
por la Reserva Federal de Estados Unidos. Y a fines de la semana pasada,
muchos inversionistas pensaron que la situación de Irlanda estaba a punto de
ser resuelta. Pero con la disolución el lunes de la coalición gubernamental
en Irlanda, el contagio está nuevamente en la mente de los inversionistas.
El rescate de irlanda por parte de la Unión Europea y el
Fondo Monetario Internacional siguió a inyecciones masivas de capital del
gobierno para salvar a los bancos que sufrieron grandes pérdidas. Esto ha
llevado la mirada a bancos en España y Portugal. Entre tanto, Portugal reportó
el lunes que su déficit presupuestal en los 10 primeros meses del año se
amplió comparado con el mismo lapso de 2009. (Más sobre España en la nota
de abajo).
"Creo que los mercados se han dado cuenta de que
estos son problemas sistémicos que van a necesitar soluciones sistémicas",
dijo Brian Yelvington, estratega de renta fija de la firma Knight Capital.
Los economistas dicen que el contagio, en el que la pérdida
de confianza del mercado en una economía se transmite a otras, puede
transmitirse por conexiones comerciales, similitudes económicas o lazos
financieros, aunque no todos son relevantes en todos los casos. Una
desaceleración económica en un país puede golpear las exportaciones de un
socio comercial o reducir los ingresos por turismo. Un colapso en el valor de
los activos financieros en un país puede mermar la confianza en los bancos de
otro si estas instituciones poseen mucho de esos activos.
Una segunda fuente del contagio es cuando los
inversionistas identifican factores de una economía en problemas y ven rasgos
similares en otra. Aunque Portugal no tiene problemas bancarios de la escala
de Irlanda o un déficit presupuestario tan grande como el de Grecia, sí
tiene una desafortunada combinación de déficits presupuestarios, una alta
deuda gubernamental y un bajo crecimiento que preocupa a los inversionistas.
Un tercer mecanismo de contagio es a través de
portafolios de inversionistas. Aquí, las caídas en los precios de una clase
de activo causa que los inversionistas vendan otros activos. Particularmente
notable es la concentración de los tenedores de deuda en España. Ayer, el
diferencial entre los bonos españoles y alemanes subió a 2,36 puntos
porcentuales, el punto más alto desde 1999.
Para los fondos de cobertura y otros gestores de dinero,
determinar cómo negociar mejor en medio de la agitación ha sido complicado
por muchos factores.
Muchos dicen que no están muy seguros de hacer apuestas
especulativas a través del mercado de seguros contra cesación de pagos,
debido a que las transacciones en este tipo de instrumentos para Portugal y
España es relativamente poco frecuente. En lugar de eso, muchos gestores están
mirando la posibilidad de negociar deuda de empresas financieras en países
como Irlanda y Portugal, al apostar a que alguna de esa deuda perderá valor.
Las medidas de austeridad de Irlanda debilitarían
aún más
su economía
Por
Neil Shah
Wall
Street Journal, 24/11/10
En un tardío intento por convencer a los inversionistas
de que puede afrontar sus deudas, el gobierno irlandés develó el miércoles
una serie de medidas que elevarán el impuesto a la venta, reducirán el
salario mínimo y eliminarán puestos en el sector público, pero que también
podrían empeorar la crisis económica del país.
Mientras Irlanda negocia un rescate internacional
valorado en 80.000 millones de euros (unos US$107.000 millones), el primer
ministro, Brian Cowen, presentó planes para reducir el gasto en 10.000
millones de euros y elevar los impuestos en 5.000 millones de euros en un período
de cuatro años, con el fin de reducir un déficit presupuestario que se prevé
alcance este año 32% del Producto Interno Bruto del país, 10 veces el límite
de la zona euro.
Funcionarios de la Unión Europea han dicho que el
recorte del déficit irlandés al límite de 3% del PIB es crucial para el
paquete de ayuda que preparan.
"Ha llegado la hora de que enfrentemos unidos este
desafío", dijo Cowen en una conferencia de prensa en Dublín. "La
magnitud de la crisis significa que" todos deben contribuir.
Sin embargo, las severas medidas podrían debilitar la
economía irlandesa y reducir su recaudación fiscal, necesaria para pagar su
gigantesca deuda nacional. En los últimos dos años, Irlanda ha eliminado
casi 15.000 millones de euros –cerca de 9% de su PIB– de su economía, que
está sufriendo de una masiva debacle bancaria.
Estos recortes fueron una de las razones por las que la
economía irlandesa se contrajo inesperadamente en el segundo trimestre,
exacerbando los problemas del país.
La austeridad de Irlanda podría debilitar aún más la
frágil coalición del gobierno de Cowen. En medio de llamados para que
renuncie, Cowen se comprometió el lunes a celebrar elecciones generales el próximo
año si se aprueba el 7 de diciembre el crucial presupuesto para 2011.
Algunos temen que las nuevas medidas exasperen a
legisladores independientes y a miembros descontentos del partido oficial,
Fianna Fail, bloqueando la aprobación del presupuesto. Esta situación
provocaría la convocatoria a nuevas elecciones antes de fin de año que podrían
continuar minando la confianza de los mercados en Irlanda a medida que se
agrava la crisis europea de deuda.
Los mercados financieros no reaccionaron inmediatamente
al nuevo plan gubernamental. El euro subió el miércoles a US$1,3388 frente a
US$1,3336 horas antes. Pero los precios de los bonos del gobierno irlandés
continuaron cuesta abajo: el rendimiento del bono de referencia a 10 años
subió a 8,96%, en comparación a 8,89% horas antes.
Muchos economistas afirman que Irlanda puede tomar
severas medidas porque sus beneficios sociales son relativamente generosos y
sus impuestos se encuentran entre los más bajos en Europa.
El salario mínimo irlandés de 8,65 euros por hora, por
ejemplo, es el segundo más alto de la UE. El gasto gubernamental en salarios
del sector público se disparó 90% entre 2000 y 20008, según el banco
italiano UniCredit SpA.
Pero retirar más dinero de la economía podría
exacerbar los problemas fiscales de Irlanda. Su tasa de desempleo, de cerca de
14%, es superior al promedio de 10% en la zona euro. Los esfuerzos para
reducir el déficit podrían verse frustrados si los esfuerzos de Irlanda
repercuten negativamente en el consumo y la recaudación fiscal, lo que crearía
una espiral negativa que impediría al país pagar sus deudas sin una
reestructuración.
"Lo que propone el gobierno es malo para la economía,
la sociedad y la cohesión social", afirma Sean Healy, director del
centro de estudios Justicia Social de Irlanda, con sede en Dublín. "Si
Irlanda no está en posición de generar crecimiento, no podrá pagar su
deuda".
Como se esperaba, los funcionarios irlandeses se
comprometieron a mantener los impuestos sobre empresas –un referente de la
economía local durante décadas– en un bajo 12,5%. Sin embargo, el impuesto
al valor agregado subiría 1% a 22% en 2013.
En cuanto al gasto, Irlanda recortará su sueldo mínimo
un euro, a 7,65 euros por hora. Además, eliminará casi 25.000 puestos del
sector público, recortará 10% los salarios de los nuevos empleados
gubernamentales y reducirá 1.200 millones de euros de su proyecto de ley de
sueldos del sector público. El gasto en programas de bienestar social también
sufrirá un recorte de cerca de 3.000 millones de euros.
A pesar de la adopción de las inminentes medidas, el
gobierno aún espera que la economía crezca un promedio de 2,75% anual de
2011 a 2014.
El dominó irlandés
Por Geoffrey Wood
Wall
Street Journal, 25/11/10
Para entender si el rescate europeo de Irlanda le hará
bien al país, es bueno recordar cómo se metió Irlanda en este embrollo.
Cuando el banco británico Northern Rock y luego la
industria financiera de Islandia colapsaron se inició una corrida en los
bancos irlandeses. Dublín intervino y garantizó todas las deudas bancarias,
no sólo los depósitos de los clientes individuales, sino absolutamente todo,
incluyendo depósitos comerciales y bonos. La corrida se detuvo, como era de
esperarse, de forma medida temporal. Pero los problemas con los bancos
irlandeses resultaron ser mucho más grandes de lo que se pensó
originalmente.
Con un déficit por encima del 30% del producto interno
bruto, el gobierno irlandés ya estaba extendido hasta su límite de
endeudamiento para apuntalar los bancos. Con recortes de presupuesto
anunciados de 15.000 millones de euros durante los próximos cuatro años para
poner bajo control su déficit, una mayor austeridad fiscal para pagar por aún
más ayuda para sus bancos no era una alternativa políticamente viable para
el gobierno irlandés. Parecía posible que la economía irlandesa, sin
importar lo mucho que lo intentara, no pudiera llegar a pagar sus deudas. Este
temor generó otra corrida bancaria contra los bancos irlandeses, lo que desató
el préstamo de emergencia de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario
Internacional (FMI).
Ahora, si el problema de Irlanda era tener demasiada
deuda, ¿cómo puede ayudarla el endeudarse aún más? Sólo hay una
respuesta: el nuevo préstamo debe ser en términos tan generosos, es decir
tasas de interés más bajas y un vencimiento más largo, para que pueda ser
pagado con mayor facilidad que la vieja deuda. El paquete de ayuda de la UE y
el FMI también debe ser más grande que la vieja deuda, para que pueda ser
usado para pagar viejos préstamos y recapitalizar a los bancos irlandeses.
Para Irlanda, esto significaría años, quizás décadas,
de impuestos más altos. Incluso si puede evitarse la fuente más obvia de daño
para su economía –subir su impuesto del 12,5% a las empresas–, va a haber
problemas. Irlanda tiene una fuerza laboral bien educada que bien puede imitar
a generaciones anteriores y buscar nuevas oportunidades de empleo en el
extranjero. ¿Cuántos trabajadores capacitados y graduados universitarios
quedarán en Irlanda después del rescate? ¿Quién pagará esos impuestos más
altos? Los problemas de Irlanda no han sido resueltos. Simplemente han
cambiado para ser ahora un tipo diferente de problemas.
Esos países que pondrán el dinero para el préstamo de
la UE –y recuerden que este crédito tiene que ser concedido en condiciones
muy generosas para lograr atajar los problemas más inmediatos de
Irlanda–pronto podrían experimentar situaciones presupuestarias más
severas. Quizás Alemania puede soportar esa situación. ¿Pero qué pasa con
Italia o incluso con Francia?
¿Y qué sucede después de Irlanda? Las condiciones del
préstamo para Irlanda –bajo en costo y largo en plazo– tendrán que ser
ofrecidas a cualquier otro país de la UE que pueda quedarse sin fondos. ¿Quién
quedará de pie para ofrecer esos créditos si caen más piezas del dominó?
Si Portugal o incluso España podrían necesitar un rescate, la carga sobre el
centro económico de la zona euro –Alemania– se incrementará aún más.
¿Por cuánto tiempo podría soportarlo? ¿Y cuánto tiempo estará dispuesta
a hacerlo?
En algún momento los mercados cuestionarán la
estabilidad del proyecto del euro en su conjunto. Estas dudas pueden ser
enfrentadas de dos maneras. O se termina la unión (o se reduce a su núcleo
central) o habrá una súbita centralización política y fiscal. ¿Cuál es más
probable?
No tengo la bola de cristal, pero todo se reduce a dos
preguntas más: ¿Alemania querría seguir formando parte de una unión con países
de crecimiento lento y fiscalmente irresponsables? ¿Y querrán esos países,
por su parte, quedarse en una unión en la cual no son más que provincias
pobres y subordinadas? Las respuestas a estas preguntas determinarán la
supervivencia del euro.
(*) Wood es profesor de Economía en la Escuela de
Negocios Cass, en Londres.
El desacuerdo sobre los rescates y el nerviosismo
persisten
Líderes europeos se enfrentaron ayer
Por
Marcus Walker, Matthew Karnitschnig y Neil Shah
Wall
Street Journal, 25/11/10
Berlín y Dublín.– Líderes europeos se enfrentaron
ayer sobre una propuesta de comprometer más fondos a rescatar países con
problemas en la zona euro, en momentos en que se intensificó la presión
sobre las economías más débiles de la región.
El brazo ejecutivo de la Unión Europea, la Comisión
Europea, planteó una propuesta el miércoles para duplicar el tamaño del
fondo de rescate europeo de 440.000 millones de euros (US$588.000 millones)
destinado a ayudar gobiernos de la zona euro, pero la idea fue rechazada por
Alemania, según personas al tanto de la situación.
El desacuerdo entre Bruselas y Berlín se produce en
medio de crecientes temores de que la crisis de confianza de los
inversionistas en los gobiernos de la zona euro, que ya obligó a Grecia y a
Irlanda a buscar rescates internacionales, podría expandirse tarde o temprano
a Portugal y España.
Muchos inversionistas y analistas dudan que la UE haya
acordado destinar el financiamiento suficiente para rescatar a España si el
país llega a perder acceso a los mercados de bonos. El apoyo de Alemania, la
mayor economía de Europa y el mayor contribuyente al fondo de rescate de la
UE, sería esencial para cualquier aumento del fondo de ayuda.
Luego del rescate en mayo de Grecia por 110.000 millones,
la UE estableció un programa de asistencia de 750.000 millones de euros junto
con el Fondo Monetario Internacional. La pieza central de ese esfuerzo es el
Fondo Europeo de Estabilización Financiera, o EFSF por sus siglas en inglés,
el cual recibirá contribuciones de los países de la zona euro por hasta
440.000 millones de euros en garantías de crédito. Los aportes restantes
provendrían del FMI y la Comisión Europea, con sede en Bruselas.
Funcionarios europeos indicaron que la postura de la
Comisión era que Portugal y España pueden salir adelante sin un rescate. Un
vocero de la Comisión indicó que es "absolutamente falso" que la
entidad haya propuesto duplicar o expandir el fondo de rescate.
Pero otras fuentes europeas afirmaron que la Comisión
planteó un plan para aumentar la capacidad del EFSF, y que fue desechado con
rapidez por Berlín.
El banquero central más importante de Alemania, el
presidente del Bundesbank, Axel Weber, dio pistas sobre las discusiones que se
desarrollaban detrás de bambalinas cuando el miércoles afirmó que los
gobiernos de la zona euro expandirían el EFSF si fuera necesario.
El gobierno consideró que los comentarios de Weber habían
llegado en un momento inoportuno, y le ha dicho a la Comisión que el EFSF ya
tiene los fondos suficientes a su disposición, según una persona al tanto.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente
francés, Nicolas Sarkozy, hablaron sobre la crisis de la zona euro el jueves
por la noche, indicó un vocero de la canciller. Los líderes acordaron que
las conversaciones sobre la ayuda para Irlanda deberían terminar pronto y
elogiaron el plan del gobierno irlandés de recortar su déficit
presupuestario. También enfatizaron que el actual plan de rescate europeo
seguirá sin cambios hasta 2013, sostuvo el vocero.
Los temores de que la crisis bancaria y de deuda de
Irlanda pudiera extenderse a España afectaron ayer el desempeño de los
mercados en Europa. Los costos de endeudamiento de las economías más débiles
de la zona euro permanecieron altos. Los operadores especularon que el Banco
Central Europeo estaba contrarrestando la tendencia con la compra de bonos
como parte de su programa de emergencia para apoyar el mercado.
La prima que España tiene que pagar para atraer
inversionistas, comparada con la tasa pagada por Alemania (considerado del
deudor más seguro de Europa) siguió subiendo y alcanzó ayer los 2,5 puntos
porcentuales.
Los costos de asegurar la deuda española contra una
eventual cesación de pagos tocó un nuevo récord: ahora cuesta anualmente
US$301.000 proteger por cinco años US$10 millones en bonos soberanos de España,
de acuerdo con Markit, un proveedor de datos financieros.
El euro cerró ligeramente al alza a US$1,3378, mientras
que los precios de los bonos del gobierno irlandés cayeron.
El rendimiento del bono de referencia a 10 años del
gobierno irlandés, que se mueve a la inversa de su precio, esta semana aumentó
a 9,17% desde alrededor de 8% el lunes por la mañana.
El costo de asegurar los bonos del gobierno irlandés
contra la cesación de pagos también se acercó a un máximo histórico el
jueves, cuando el centro de información LCH Clearnet aumentó el costo de
operar con bonos irlandeses por tercera vez en este mes.
Esto indica que en Irlanda, el anuncio del plan de
austeridad más reciente no logró calmar los nervios.
La reacción refleja una variedad de preocupaciones sobre
el presupuesto y el futuro político de Irlanda. Los observadores advirtieron
que los pronósticos del gobierno sobre crecimiento económico podrían ser
optimistas considerando el ajuste de cinturón que se cierne sobre el país.
Por el plan de duplicar el Fondo de rescate europeo
La Comisión Europea choca con Alemania
Por
Marcus Walker y Matthew Karnitschnig
Wall
Street Journal, 25/11/10
Berlín.– La Comisión Europea está presionando para
duplicar el tamaño del fondo de rescate europeo de 440.000 millones (US$586.000
millones) para los países endeudados de la eurozona, según fuentes
conocedoras de la situación.
Pero la propuesta de la Comisión, el brazo ejecutivo de
la Unión Europea, se ha encontrado con la oposición de Alemania, la mayor
economía europea, que no quiere ampliar el tamaño del fondo.
Tras el rescate de Grecia en mayo, la UE creó un
programa de recate de EUR750.000 millones junto con el Fondo Monetario
Internacional. La pieza central es el Fondo Europeo para la Estabilidad
Financiera, financiado por los miembros de la eurozona con hasta EUR440.000
millones. El resto de la contribución la harían el FMI y la UE.
El desacuerdo entre Bruselas y Berlín, que se hizo público
el miércoles, llega en un momento de incertidumbre en los mercados
financieros, porque se duda que el fondo actual sea suficiente para lidiar con
la eventual caída de España.
El miembro del consejo del Banco Central Europeo y
presidente del banco central alemán, Axel Weber, aludió a las negociaciones
tras bambalinas cuando dijo el miércoles que los gobiernos de la eurozona
ampliarían el fondo de estabilidad si fuera necesario.
El Gobierno alemán considera que los comentarios de
Weber han llegado en mal momento y ha dicho a la Comisión que el fondo de
estabilidad europeo ya tiene fondos suficientes a su disposición, según una
fuente conocedora de la situación.
La capacidad de préstamo efectiva de los acuerdos de la
UE y el FMI podría reducirse a en torno a EUR530.000 millones si Portugal y
España acabaran requiriendo también un rescate. El Fondo Europeo de
Estabilidad Financiera es una compañía registrada en Luxemburgo con
capacidad para emitir bonos respaldados con garantías de Alemania y otros países
solventes de la eurozona.
Duplicar la capacidad del fondo de estabilidad a
EUR880.000 millones eliminaría las dudas sobre si tiene suficiente poder para
apuntalar el Estado español.
Tal ampliación exigiría un compromiso financiero mucho
mayor de Alemania, donde muchos legisladores y votantes se muestran escépticos
sobre el rescate de países europeos con problemas financieros.
Irlanda se convirtió en el primer país en solicitar
ayuda del fondo de estabilidad la semana pasada y está negociando un paquete
de rescate de Europa y el FMI, que podría alcanzar los EUR85.000 millones.
Grecia recibió un rescate de EUR110.000 millones de la UE y el FMI en mayo,
antes de la creación del Fondo Europeo para la Estabilidad Financiera.
El fondo de emergencia europeo podría
quedarse corto si
España y Portugal piden ayuda
Por
Ian Talley
Wall
Street Journal, 24/11/10
Washington.– El fondo de emergencia europeo, del cual
se ha dicho que tiene el poder financiero para apagar la crisis financiera en
la euro zona, quizás no tenga el dinero suficiente para cubrir un posible
rescate de España.
"[El fondo] estaría muy cerca del límite, sería
precario y no dejaría nada para nadie más", dijo Whitney Debevoise, una
abogada de deuda soberana del bufete Arnold Porter y ex directora ejecutiva
del Banco Mundial
La Unión Europea tiene comprometidos 440.000 millones de
euros por parte de sus países miembros para su Fondo Europeo de Estabilidad
Financiera, el cual se está usando para extender el rescate a Irlanda. La
exigencia de los funcionarios europeos de que los fondos de rescate tengan una
calificación Triple A reduce la capacidad de préstamo de la UE a 250.000
millones de euros, además de los 60.000 millones de euros disponibles en el
presupuesto del bloque. El Fondo Monetario Internacional dijo que prestaría
un 50% adicional a los países europeos.
Si Irlanda requiere entre 80.000 millones y de euros y
100.000 millones de euros, como han indicado los funcionarios y Portugal
necesita cerca de 50.000 millones de euros para cubrir sus necesidades de
refinanciamiento de su deuda soberana, eso apenas deja suficiente para cubrir
los requerimientos de deuda de España a lo largo de los próximos tres años.
El paquete de ayuda a Grecia de 110.000 millones de euros fue negociado antes
de la creación del fondo de rescate.
El problema, dijo un funcionario del FMI, es que Portugal
y España también podrían llegar a necesitar el financiar la recapitalización
de algunos bancos o tendrían otras obligaciones, por lo que el mecanismo de
rescate europeo no contaría con la capacidad para cubrir estas brechas
financieras.
"El fondo de rescate, como está estructurado
actualmente, no tiene la munición suficiente, si no cuenta con una contribución
mucho, mucho más grande del FMI", dice Jacob Kirkegaard, investigador
del Peterson Institute for International Economics. "¿Pero cuánto desea
al FMI, como institución global, exponerse a Europa como región?",
indicó.
Aunque sólo Irlanda, hasta el momento, ha solicitado
ayuda del programa de la UE y el FMI, los temores de que Portugal y España
necesiten ayuda externa ya han disparado el costo de tomar prestado en los
mercados de deuda soberana y bancaria de ambos países. Tanto la UE como el
FMI se abstuvieron de hacer comentarios para esta nota.
Presiones sobre Portugal para que también acepte un
“rescate”
Tratarían de evitar un efecto de contagio sobre España
Por
Jeffrey T. Lewis y Christopher Bjork
Wall
Street Journal, 26/11/10
Lisboa (EFE Dow Jones)–El Gobierno portugués dijo el
viernes que no está sometido a ninguna presión para solicitar ayuda
financiera de la Unión Europea para evitar un efecto de contagio sobre España.
"Desmiento cualquier tipo de presión", dijo
una portavoz de la oficina del primer ministro de Portugal Jose Socrates.
El periódico alemán Financial Times Deutschland
informaba el viernes de que el Banco Central Europeo y una mayoría de
miembros de la zona euro están pidiendo a Portugal que solicite el rescate.
El periódico dijo que una fuente del Ministerio de
Finanzas alemán señaló que "si Portugal aceptara la ayuda, sería
positivo para España porque España está muy expuesta a Portugal".
Las autoridades españolas y el Banco Central Europeo
también han desmentido que estuvieran presionando a Portugal para que
solicite un rescate.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel
Barroso dijo que la comisión no está ejerciendo presión sobre Portugal para
que el país solicite ayuda financiera de Europa.
"Es absolutamente, completamente falso (...) toda
referencia a un plan de ayuda para este país. Ni se ha pedido ni se ha
sugerido. Es absolutamente falso", dijo Barroso en una conferencia
organizada en la sede de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico el viernes.
Barroso dijo que había hablado con varios líderes
europeos, incluidos los de España y Portugal en los últimos dos días, además
de con el presidente del Banco Central Europeo y la canciller alemana Angela
Merkel, pero insistió en que esas conversaciones están dentro de sus
atribuciones habituales.
Añadió que la eurozona ha puesto en macha todas las
herramientas necesarias para tratar con las crisis de deuda soberana y mostró
su confianza en que las medidas recientemente introducidas por países con
problemas financieros eran lo suficientemente "valientes" para
lidiar con la situación.
Por otra parte, el Parlamento de Portugal aprobó el
viernes el presupuesto para 2011, y el primer ministro luso, Jose Socrates, se
mostró confiado en que la aprobación calme a los mercados de deuda de la
eurozona, golpeados por el desplome financiero de Irlanda.
En el debate que precedió a la votación, el ministro de
Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, pidió a los parlamentarios que
mostraran unidad, y añadió que no hay alternativa a la aprobación del
presupuesto.
El Gobierno en minoría de Socrates ha alcanzado un
acuerdo con el principal partido de la oposición para permitir que se apruebe
la ley de presupuestos.
El plan presupuestario continúa con la labor de reducir
el déficit público, que en 2009 fue del 9,3% del producto interior bruto. El
objetivo del Gobierno es recortarlo al 7,3% del PIB este año y por debajo del
3% del PIB en 2013.
Teixeira dos Santos ha repetido que se cumplirá el
objetivo de 2010, aunque hay temor a que no se haya recortado el gasto lo
suficiente.
Aunque Zapatero descarta un rescate
Los mercados dudan sobre España
Por
David Román
Wall
Street Journal, 26/11/10
Madrid.– El presidente del Gobierno español, José
Luis Rodríguez Zapatero, dijo el viernes que no hay "absolutamente"
ninguna posibilidad de que España busque un rescate de la Unión Europea en
un intento por tranquilizar al mercado y evitar el contagio de la crisis de
deuda a la cuarta mayor economía de la eurozona.
En una entrevista de radio, Zapatero también lanzó un
reto a los agentes que apuestan contra el país, a los que dijo: "Déjeme
hacer una advertencia a los inversionistas que apuestan en corto sobre España;
se van a equivocar y van a ir contra sus intereses".
Zapatero también dijo que la economía del país ha
tocado fondo, mientras que tanto la reestructuración del sector financiero
como la reducción del déficit público, desde el 11,1% del PIB del año
pasado hasta el 9,3% a finales de este año, están avanzando como se
anticipaba.
El llamamiento a la calma del presidente del Gobierno se
produce en medio de señales de que un rescate de España, una posibilidad
remota hace unos días, se está convirtiendo en un riesgo más urgente para
las autoridades del país.
El economista jefe del Banco de España, José Luis Malo
de Molina, advirtió el jueves que la dependencia de España de los mercados
financieros externos le vuelve particularmente vulnerable a un contagio de la
crisis de deuda soberana.
La prima rentabilidad que los inversionistas piden para
comprar bonos españoles a 10 años en vez de los alemanes subió 15 puntos básicos
el viernes a un nuevo máximo desde la adopción del euro de 267 puntos básicos,
aunque luego aflojó ligeramente. Los inversionistas están pidiendo ahora una
rentabilidad del 5,2% por los bonos españoles. La bolsa de Madrid caía un 2%
a las 1438 GMT, la mayor caída entre los grandes mercados europeos.
Peter Westaway, el economista jefe en Europa de Nomura,
dijo: "España es fundamentalmente solvente a razonables niveles de tipos
de interés, [pero] necesita empezar a endurecer pronto".
"España tiene que ser cuidadosa... Los actuales
planes del Gobierno son ligeramente optimistas, especialmente en sus
expectativas de crecimiento".
Zapatero, que se enfrenta a elecciones regionales clave
durante los próximos meses y ha visto su popularidad caer en picado, dijo que
España no necesita más medidas de ajuste.
Los comentarios de Zapatero, que reiteran comentarios
realizados anteriormente por otros miembros del Gobierno, también coinciden
con la creciente presión sobre España desde que el diario Financial Times
Deutschland dijera el viernes que Portugal está siendo presionado por la UE
para que acepte un rescate.
La noticia, rápidamente desmentida por todas las partes
involucradas, sigue centrando la atención en España, considerada por muchos
la siguiente pieza de dominó en caer si Portugal sucumbe a los temores del
mercado y acepta un rescate de la UE, como ha hecho Irlanda en los últimos días.
Un resultado de este tipo agotaría los recursos de la UE y pondría en
peligro a la propia eurozona.
Willem H. Buiter, economista jefe de Citigroup, dijo el
jueves en una nota que España "probablemente" recibirá un rescate
de la UE y el FMI, poco después de que lo haga Portugal antes de final de año,
una previsión que habría resultado chocante sólo hace unas semanas.
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