Los dramáticos acontecimientos
en Egipto y la región de Oriente Medio han inevitablemente eclipsado la reunión
de los responsables políticos que se reunieron en la “Conferencia Anual de
Seguridad” en Munich.
Esta fue la primera oportunidad
de estar frente a frene que tuvieron figuras clave como la canciller alemana,
Angela Merkel, el primer ministro británico, David Cameron, la secretaria de
estado de EE.UU., Hillary Clinton, y su homólogo ruso, Sergei Lavrov, para
intercambiar opiniones sobre los trastornos en el mundo árabe.
Sólo uno de los oradores
destacados en la conferencia - el ex candidato presidencial republicano de
EE.UU. John McCain - estaba listo para declarar en términos explícitos que
el presidente egipcio, Hosni Mubarak, debería irse ya.
En general y a pesar de que es
la línea más matizada de la administración Obama y que representa el
consenso aquí. El énfasis estuvo puesto en el proceso y no de la
personalidad - la necesidad de una transición ordenada hacia una sociedad
verdaderamente democrática.
Clinton hizo sonar la alarma
acerca de que los graves problemas abarcan todo el Oriente Medio en su
conjunto, y no sólo Egipto. "La región está siendo atacada por una
tormenta perfecta donde convergen varias tendencias", dijo.
El desempleo de los jóvenes -
especialmente entre los más educados - junto con las nuevas formas de
comunicación en red, mas los recursos naturales que se agotan y hacen
desaparecer el agua potable y las reservas de petróleo que se acaban, todo
esto junto significaba que "el status quo era insostenible".
Pero en la cuestión vital - que
el presidente de Egipto renuncie- Hillary se quedó en silencio.
“Calma Retórica”
Sin embargo, una fascinante visión
del pensamiento de EE.UU. fue proporcionada por el ex embajador de EE.UU. en
Egipto Frank Wisner - el hombre enviado a El Cairo por el presidente Barack
Obama a principios de esta semana para dar un mensaje a Mubarak.
Wisner se unió a la conferencia
a través de video-enlace desde Nueva York. Él es un diplomático veterano
que conoce Egipto y también al presidente Mubarak. Instó a la gente a
controlar su retórica – a medida que los egipcios escuchan las demandas
desde el exterior de que Mubarak se debe ir, según él, las cosas podrían
tener consecuencias negativas.
El
ex embajador trató de establecer las familiares demandas de EE.UU. - cambios
en la Constitución de Egipto, el respeto de los derechos de las minorías,
una prensa libre, elecciones libres y justas y así sucesivamente.
Fundamentalmente, dijo que en su
opinión Mubarak debería permanecer en el cargo para dirigir a través de
este los cambios necesarios. Fue, dijo, la oportunidad del presidente egipcio
de asegurarse su propio legado. "El rol de Mubarak sigue siendo crítico
por los próximos días", dijo.
¿Fue sólo el punto de vista de
un experto bien informado sobre Egipto, o una visión del enviado especial de
Obama con el programa real de Washington? Wisner dijo que en los últimos días
hubo "destellos frágiles" de cambio en Egipto.
En general, sin embargo, hizo
eco de lo que muchos aquí en Munich, subrayan como extremadamente frágil y
peligrosa situación.
El no - algunos dirían
abortado- proceso de paz entre Israel y los palestinos estuvo también muy en
la mente de la gente de aquí, en la reunión del Cuarteto - el grupo de
dirección diplomática que comprende a los EE.UU., Rusia, la Unión Europea y
las Naciones Unidas - que están luchando por mantener el proceso vivo.
El Ministro de Asuntos
Exteriores británico William Hague me dijo ayer que los trastornos en la región
pusieron más urgencia a la necesidad de una solución de dos estados para los
israelíes y para los palestinos.
En el evento, el Cuarteto no
hizo más que reiterar sus declaraciones anteriores. La petición de que las
conversaciones de paz entre Israel y los palestinos se completarán antes de
septiembre parece tal vez casi de fantasía - ciertamente muy optimista.
El Cuarteto, sin embargo, dio la
bienvenida a un paquete de medidas acordadas por los israelíes para la
expansión del área de actividades de la Autoridad Palestina y mejorar el
acceso a Gaza. ¿Hasta qué punto estos se llevarán a cabo aún está por
verse?
Pero en el fondo de la mente de
todos esta el temor de que los trastornos en Túnez, Egipto y otros países
también podrían desatarse un día en el West Bank y Gaza.