El viernes 25
de febrero de 2011 se constituyó en Egipto una Coalición que reunía “a un
grupo de dirigentes obreros” (Al Masry Al Youm, 26–2–2011) con el fin de
“reafirmar los principios revolucionarios en favor del cambio, la libertad y
la justicia social”.
El movimiento
de huelgas no ha parado en Egipto. Así pues, en el sector de la industria química
y farmacéutica, aproximadamente 1.000 trabajadores, en Shubra (uno de los
distritos de El Cairo), se declararon en huelga a partir del 27 de febrero.
Como muchas luchas similares, las demandas se refieren tanto a la denuncia de
la corrupción de la dirección de la empresa como sobre los salarios. La táctica
de las direcciones de imponer ante la huelga días de vacaciones – en
realidad un lock–out – se aplicó también en ese caso (Cairo
Pharmaceuticals and Chemical Industries).
Aproximadamente
300 trabajadores de Samuel Tex, una empresa de lino, entraron en huelga
exigiendo el pago de sus salarios, una mejora de los salarios, de las horas de
trabajo determinadas y los días de vacaciones como la ley establece.
Estas luchas
remiten a una parte de las demandas levantadas por la “Coalición de los
trabajadores de la Revolución del 25 de enero”, cuya manifiesto publicamos
a continuación. Además, las demandas que se refieren a la disolución de los
aparatos de seguridad y el levantamiento del Estado de Urgencia, tienen una
fuerte actualidad.
En efecto, se
arrestó a personas que manifestaban exigiendo la dimisión del primer
ministro Ahmed Chafik y un tribunal militar condenó, el 1º de marzo, a Amr
Abdala al–Beheiri, a cinco años de prisión, “por haber atacado a un
funcionario”. Amnesty International exigió el cese del juicio de civiles
por tribunales militares. (Redacción de La Breche)
Declaración
de la “Coalición de los Trabajadores de la Revolución del 25 de Enero”
Dirigentes,
figuras emblemáticas y otras personalidades vinculadas al movimiento obrero
egipcio se reunieron con el fin de examinar la situación actual. Afirmaron su
adhesión a a la Revolución del 25 de enero cuyo lema es: “Cambio,
Libertad, Justicia social”.
Destacaron
también el derecho fundamental de los trabajadores a reapropiarse de los
derechos que se les confiscaron (derecho de huelga, de manifestación pacífica)
así como la legitimidad de su lucha contra la corrupción, que se efectúa
ante las direcciones de sus empresas o ante las organizaciones sindicales
oficiales.
Por sus
movilizaciones, los obreros en efecto han contribuido en estos últimos años
a preparar el terreno de la revolución. Sus luchas fueron decisivas para la
derrota de sus enemigos y para la oposición al régimen. Gracias a estas
movilizaciones, la revolución no cesará sin que una victoria se obtenga, es
decir sin que las demandas sociales y económicas estén concretadas. Esta es
la razón por la que afirmamos nuestra determinación de conseguir las
siguientes demandas:
1. Formar
inmediatamente un Consejo Presidencial Civil con el fin de dirigir la transición.
2. Hacer caer
el gobierno de Ahmed Chafik (aunque éste intenta rellenar las brechas) y
formar otro gobierno constituido de órganos nacionales competentes y
completamente independientes del régimen actual hasta la realización de
nuevas elecciones.
3. Levantar
inmediatamente el Estado de Urgencia.
4. Liberar
inmediatamente a todos los presos políticos.
5. Desmontar
el aparato de información y seguridad del Estado, y condenar a toda persona
responsable de la represión y las torturas contra los ciudadanos.
6. Llevar a
juicio a las figuras que simbolizan la corrupción y recuperar de este modo
las riquezas que se confiscaron con el fin de restablecer la justicia social y
de aplicar las demandas de los trabajadores.
7. Aplicar
todas las decisiones jurídicas que se derivan de la ley e ignoradas hasta
ahora, así como las disposiciones referentes al salario mínimo; disolver las
organizaciones sindicales oficiales y reincorporar a todos los obreros
despedidos.
8. Aplicar los
acuerdos internacionales relativos a los derechos económicos y sociales para
gozar de libertades sindicales y salarios equitativos, tener el derecho a
trabajar para satisfacer sus propias necesidades, el derecho a la seguridad
social y a los seguros de enfermedad, el derecho a la educación y a la
vivienda, el derecho de huelga y de resistencia colectiva.
Respecto a
todo eso, incitamos a los trabajadores a seguir defendiendo sus derechos con
valor. Afirmamos también que la Historia no perdonará al trabajador que no
se indigne contra la injusticia que él y sus similares sufren en este período
revolucionario. Los trabajadores deben agruparse cuanto antes en las
organizaciones sindicales, sociales, culturales y políticas hasta la victoria
de la revolución.
• ¡Por
una revolución… una revolución hasta la victoria!
• ¡Cambio…
libertad… justicia social!
Firmas (por
orden alfabético):
Bissan Kassab
(Socialistas Revolucionarios)
Hamdi Hussein
(Federación de obreros del Partido Comunista egipcio)
Khalid Al–Azhari
(Hermanos Musulmanes)
Khaled Ali
(Centro por los Derechos Sociales y Económicos)
Rashad Shaban
(Trabajadores Travailleurs Amiriya por el tejido)
Saud Omar
(Foro Nacional Democrático)
Seham Shwadeh
(Grupo de Solidaridad)
Shokri Azare
(Comité por la defensa de las cajas de seguros)
Saber Abou
Al–Fotouh (Centro de trabajadores manuales de Egipto)
Saber Barakat
(Comité de coordinación por los derechos y las libertades sindicales)
Salah Numan
(Trabajadores de la química)
Talal Shokr
(Federación de los jubilados)
Garib Saqr
(Trabajadores de Egipto e Irán)
Fatima Ramadan
(Movimiento de Renovación Socialista)
Maher Suleiman
(Hermanos Musulmanes)
Mohammed Al–Attar
(Trabajadores textiles de Mahalla)
Mohamed Abdel–Salam
(Comité de coordinación por los derechos y libertades sindicales)
Naji Rashad
(Trabajadores de los molinos )
Hisham Fouad
(Socialistas Revolucionarios)
Haitham
Gabr (Movimiento de Renovación Socialista)