Rebeliones en
Medio Oriente y
norte de África

Invaden Bahrein

Llegan soldados de Arabia Saudita y
policías de los emiratos

Huelga general de los sindicatos

Ansalatina, 14/03/11

Un millar de soldados de Arabia Saudita y 500 policías de Emiratos Arabes Unidos ingresaron ayer para “mantener la estabilidad y la seguridad” y “restablecer el orden” en Bahrein, escenario de protestas de la mayoría shiíta reprimidas por la casta reinante sunnita. La oposición denunció una “ocupación extranjera” y el gobierno norteamericano advirtió que el Pentágono nunca fue avisado de la intervención militar.

Las autoridades sauditas afirmaron haber satisfecho “un pedido de ayuda por parte de Bahrein”, en reacción a lo que llamó “una amenaza a la seguridad”.

La oposición shiíta acusó a los gobernantes de la región y del país de lanzar “una guerra no declarada contra los ciudadanos” del archipiélago.

El envío de tropas extranjeras está previsto en un acuerdo militar de 1984 entre los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo, con lo cual, en teoría, la intervención no implica una invasión.

Con la exclusión de Irak, el Consejo reúne a los seis estados árabes que tienen aguas compartidas con la república islámica.

La televisión del Estado de Bahrein mostró ayer las primeras imágenes de la llegada al reino independiente de unos 100 vehículos militares sauditas.

Bahrein es base de la Quinta flota de Estados Unidos, y Arabia Saudita, también gobernada por sunnitas, es archienemigo de Irán.

EE.UU. mostró su preocupación. “Hemos comunicado a todas las partes nuestras preocupaciones sobre acciones que podrían ser consideradas provocativas o agudizar tensiones sectarias”, dijo el vocero del Pentágono, el coronel David Lapan, quien precisó que ni el secretario de Defensa, Robert Gates, ni el jefe de los Estados Mayores, almirante Mike Mullen, fueron informados preventivamente sobre una acción militar de Arabia Saudita.

Los soldados sauditas cruzaron la frontera en apoyo al régimen local de la familia sunnita Al Jalifa, que desde semanas es blanco de protestas populares de parte de los shiítas, que representan la mayoría de la población del archipiélago estratégico del Golfo.

“El pueblo de Bahréin enfrenta un peligro real: el de una guerra contra los ciudadanos bahreiníes, es una declaración de guerra”, destacaron los siete miembros de la oposición, incluyendo al Wefaq shiíta, en un comunicado.

“Nosotros consideramos el ingreso de todo soldado, de todo vehículo militar a los espacios terrestres, aéreos o marítimos del reino de Bahrein como una ocupación flagrante, una conspiración contra el pueblo de Bahrein desarmado, y una violación de los acuerdos y convenios internacionales”, agregó la oposición.

La llegada de más de mil soldados sauditas tiene lugar después de una intensificación de la movilización de manifestantes shiítas, que ayer mantenían bloqueados los accesos al centro de Manama, donde se encuentran el barrio de negocios y los edificios públicos, según un corresponsal de la AFP.

La ciudad está casi paralizada por una huelga general convocada por los sindicatos para protestar contra la represión de las manifestaciones.


Protestas e incidentes en un nuevo Viernes de Ira

Hubo marchas en Yemen, Bahrein e Irak

Agencia Associated Press (AP), 12/03/11

Sanaa.– En un nuevo viernes de ira en Medio Oriente, miles de manifestantes salieron a la calle ayer en Yemen, Bahrein, Jordania, Kuwait e Irak para pedir reformas políticas y protestar contra las autoridades locales, inspirados en las revueltas de Túnez, Egipto y Libia.

En Yemen, en lo que fue la mayor protesta desde que comenzaron las manifestaciones en enero, pequeños grupos de seguidores del gobierno y opositores se enfrentaron ayer, mientras un número récord de yemeníes demandó la renuncia del presidente Alí Abdullah Saleh, en el poder desde hace 32 años.

En Sanaa, la capital, decenas de personas de ambos bandos se arrojaron piedras, mientras que, según testigos, la policía disparó al aire balas de plomo para dispersar los choques.

A la vez, miles de personas leales a Saleh abarrotaron la plaza Tahrir de la capital, con fotos del veterano líder. Pero la convocatoria de la oposición, estimada en más de 40.000 personas, superó ampliamente a la de los simpatizantes del gobierno.

"No queremos iniciativas, queremos que se vaya", dijo uno de los opositores, desestimando la oferta que anteayer había hecho el presidente yemení de votar una nueva Constitución y realizar reformas electorales durante este año.

"Irse significa irse, no hay mejor opción", gritaba la multitud opositora reunida en la Universidad de Sanaa.

Las protestas contra Saleh se registraron también en la ciudad de Adén, al sur del país, en donde las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes e hirieron a más de 14 personas. Desde que comenzaron las protestas en Yemen, en enero, más de 30 personas murieron como consecuencia de la violencia.

En tanto, en Bahrein, también se registraron graves disturbios cuando fuerzas de seguridad respaldadas por vigilantes aliados al gobierno se enfrentaron contra manifestantes cerca de las oficinas y complejos de la familia gobernante.

En Riffa, al sur de la capital, Manama, donde reside la familia real del sultanato, la policía usó gases lacrimógenos y balas de goma contra los manifestantes opositores, que previamente habían sido atacados por simpatizantes del gobierno.

"El pueblo quiere la caída de los Al–Khalifa", coreaban los opositores, en su mayoría chiitas insatisfechos que quieren reformas en la Constitución y mayores derechos, en un país que está gobernado por una monarquía sunnita.

También en Jordania, cientos de personas se manifestaron después de las oraciones musulmanas del mediodía para reclamar que el rey Abdullah II disuelva la Cámara baja del Parlamento, porque "no representa al pueblo jordano".

Más de 1500 manifestantes se congregaron en la ciudad de Zarka, al Norte, para pedir también reformas constitucionales y expresar su apoyo a los rebeldes libios.

El malestar que afecta a todo el mundo árabe se hizo sentir también en Irak, Kuwait y Arabia Saudita. Allí, las fuerzas de seguridad se desplegaron en masa en la capital, Riad, para replegar las incipientes manifestaciones que habían sido convocadas por Facebook.


En Yemen, se agrava la represión policial

Agencia ANSA, 14/03/11

Sanaa.– El enfrentamiento entre el gobierno de Yemen y sus detractores se agravó ayer cuando cinco manifestantes murieron en las protestas opositoras, duramente reprimidas por la policía local, que disparó contra los críticos del presidente Ali Abdullah Saleh.

Los manifestantes exigían el fin de la presidencia de Saleh, que está en el poder desde hace más de 30 años y que, hasta poco después de que comenzaran las revueltas árabes, en enero pasado, pretendía dejarle el gobierno a su hijo.

Entre las víctimas de la violencia de ayer, hay un niño de 12 años, baleado por la policía en Mukalla, en el sudeste del país, donde cientos de manifestantes habían organizado una marcha de protesta contra el régimen, a la que se habían adherido también los estudiantes.

Dos manifestantes opositores murieron, por otra parte, en la capital, Sanaa. Otros dos manifestantes murieron en Aden en una manifestación similar, según fuentes locales.

Unas 300 personas resultaron heridas en enfrentamientos con la policía tanto en la capital como en Mukalla: según testigos, las fuerzas de seguridad dispararon contra los manifestantes y lanzaron gases lacrimógenos.

En Sanaa, los manifestantes están concentrados en la Plaza de la Universidad desde el 21 de febrero, para pedir la dimisión de Saleh.

Según la ONU, al menos 37 manifestantes y seis policías murieron en Yemen desde fines de enero, cuando estallaron las protestas.


El Sultán de Omán no logra frenar las protestas

Inter Press Service (IPS) /Al Jazeera, 03/03/11

Sohar.– Nuevas protestas populares se produjeron en el sultanato de Omán esta semana, en el marco de una ola de manifestaciones pro–democráticas en todo el mundo árabe.

La habitual tranquilidad en la norteña ciudad portuaria de Sohar se vio afectada en los últimos días.

Testigos dijeron que soldados dispararon al aire e hirieron a una persona el martes, cuando intentaban dispersar a una multitud que protestaba cerca de esta ciudad. "Éramos entre 200 y 300 personas en la carretera. El ejército comenzó a disparar al aire", narró uno de los manifestantes a condición de mantener el anonimato.

"Muchas personas corrieron. El hombre que recibió el disparo había llegado para calmar al ejército", añadió.

La multitud se dispersó sólo para reagruparse en la plaza Globe, ubicada cerca del puerto, y las tropas se retiraron, dijeron testigos.

Más tarde, el tráfico comenzó a fluir libremente en el puerto, y en la plaza se ubicaron cinco vehículos blindados, pero los manifestantes habían desaparecido.

Fue el cuarto día de protestas en Omán. Los manifestantes exigen más empleos y reformas políticas. El lunes habían bloqueado la entrada al puerto de Sohar, que exporta al día 160.000 barriles de 159 litros de petróleo refinado

También se han producido pequeñas protestas en la capital, Muscat.

Unos 300 manifestantes realizaron una sentada frente a la sede de la Asamblea Consultiva del sultanato el martes, exigiendo reformas y el fin de la corrupción.

La protesta fue organizada por intelectuales y organizaciones de la sociedad civil. Los manifestantes portaban carteles que rezaban: "Queremos empleos", "Queremos salarios más altos" y "Queremos libertad de prensa".

Mientras, unas 2.000 personas se reunieron en una mezquita para expresar su apoyo a la monarquía absoluta del sultán Qabus bin Said, quien ha gobernado este país durante cuatro décadas. Sus partidarios responsabilizaron a los manifestantes de la violencia de esta semana.

El domingo pasado, en un intento de calmar las tensiones, el sultán prometió crear 50.000 nuevos empleos, brindar beneficios a los desempleados por 390 dólares mensuales y considerar una ampliación de poderes a la Asamblea Consultiva, que en la actualidad ejerce sólo funciones de asesoría.

Hubo informes encontrados sobre el número de muertos en los enfrentamientos de Sohar el domingo, cuando la policía abrió fuego a manifestantes que lanzaban piedras, luego de haber intentado dispersarlos a bastonazos y con gases lacrimógenos.

El Ministerio de Salud señaló que una persona había fallecido, pero un médico y varias enfermeras de un hospital estatal aseguraron que las víctimas fatales eran seis.

"Hemos estado en contacto con el gobierno y aconsejamos la contención y la resolución de los conflictos a través del diálogo", dijo el lunes el portavoz del Departamento de Estado (cancillería) de Estados Unidos, P.J. Crowley.

Los partidos políticos están prohibidos en Omán, y el sultán Qabus ejerce el poder absoluto.

El monarca reorganizó su gabinete el sábado pasado, una semana después de que protestas en Muscat le dieran el primer indicio de que el descontento popular en todo el mundo árabe podría alcanzar a Omán.

Este país no integra la Organización de Países Exportadores de Petróleo, pero genera unos 850.000 barriles diarios y tiene fuertes vínculos militares y políticos con Occidente.

Algunos países árabes ricos en la región, como Arabia Saudita y Kuwait, han prometido miles de millones de dólares en beneficios públicos y han ofrecido modestas reformas para mantener en calma a sus habitantes, luego de que movimientos populares derrocaran a los respectivos gobiernos de Túnez y Egipto, y amenazan ahora al de Libia.


(*) Publicado en acuerdo con Al Jazeera.


Marruecos reprime con brutalidad una manifestación

Unos 20 heridos en la primera protesta
tras el discurso real

Por Ignacio Cembrero
El País, 14/03/11

Rabat.– Los antidisturbios marroquíes reprimieron con brutalidad, según testigos, la primera manifestación pacífica que islamistas e izquierdistas intentaron llevar a cabo, ayer en Casablanca, tras el discurso del rey. Mohamed VI anunció el miércoles una reforma de la Constitución.

Las cargas policiales provocaron al menos una veintena de heridos, que acudieron a las urgencias hospitalarias. Entre ellos figura Mohamed Sassi, de 58 años, fundador del Partido Socialista Unificado (PSU), una pequeña formación legal de izquierdas, que fue golpeado ante la sede de su partido. La policía detuvo a 130 manifestantes, según los convocantes.

Varios centenares de jóvenes, en su mayoría militantes del movimiento islamista ilegal Justicia y Espiritualidad, se concentraron en la plaza de Correos con la intención de marchar para exigir "una Constitución democrática" y una "monarquía parlamentaria". La manifestación no había sido autorizada y los participantes "atacaron a las fuerzas del orden", según la versión del Ministerio del Interior difundida por la agencia oficial MAP. Los antidisturbios la disolvieron y cuatro agentes resultaron heridos.

La concentración apenas se estaba formando cuando la policía cargó, según varios testigos. Decenas de jóvenes –barbudos e izquierdistas– se refugiaron en la cercana sede del PSU, que la policía intentó tomar. La mayoría de los heridos fueron golpeados en las puertas del edificio, donde estaba reunido el buró político del partido para analizar el discurso del monarca.

Mohamed VI anunció hace cinco días que encargaba a una comisión de juristas y politólogos la elaboración de enmiendas a la actual Carta Magna que otorguen mayores poderes al primer ministro, en detrimento de los del rey, y que creen potentes instituciones regionales que sirvan para descentralizar el país.

La alocución real no ha apaciguado los ánimos de los colectivos que iniciaron las protestas el 20 de febrero. Piden, entre otras cosas, que no sean juristas designados por el soberano los que retoquen la Constitución, sino que una asamblea constituyente redacte una nueva Ley Fundamental. Marruecos vive una efervescencia social y política sin precedentes desde la entronización de Mohamed VI, en 1999.

Los jóvenes que convocaron, a través de Facebook, las protestas del mes pasado, han pedido a los marroquíes que se echen de nuevo a la calle el próximo domingo.