La
vergüenza del silencio
Por
Fabiola Samhan (*)
Revista Hoja de Ruta, febrero 2009
Debo
reconocer, no sufro de Obamania, mis suspicacias no me lo
permiten, las expectativas frente al primer presidente negro
de los Estados Unidos de Norte América son mesiánicas,
groseramente desbordantes frente al minúsculo espacio
existente de intervención y transformación de nuestra
cotidianidad. Nuestra (in)civilización e (in)humanidad han
sido eficaces en casi no dejar espacio para sembrar paz.
Casi todo es inerte… indolente.
Sí pensé
–con idealismo–, que tanta euforia popular, simbolismos
y discursos de conciliación, inclusión y benevolencia,
eran el escenario perfecto para que aquellos que llevan décadas
silenciados, jivarizados por esta superpotencia y su
democracia imperialista a palos, sacaran la voz,
instrumentalizaran el momentum para liberarse de sus
fantasmas y castraciones.
Me acordé
de Europa en general, y Alemania en particular, convertidos
desde hace 60 años en el sigiloso mayordomo refinado de
EE.UU., más bien, la nodriza, pues como buena sirviente que
lo vio crecer, no sugiere, no opina, sólo obedece, a pesar
de no estar de acuerdo en ni cómo se viste, en qué come,
menos aún en los grotescos modales de su retoño.
Reflexioné
también sobre varios países árabes, que no dudan en citar
sus glorias pasadas para reivindicar su civilidad, su génesis
como comunidad, seduciendo a sus pueblos con ilusiones que
jamás arriban. Cada uno de estos líderes emerge implacable
y voraz frente a sus propios pobladores, usando mano dura
cuando no acatan; pero frente señor Occidente se arrodillan
complacientes, serviles, apenas y murmuran a puertas
cerradas sobre la tiranía y salvajismo que éste exhibe sin
pudor.
Ambos,
Europa y los países árabes, sus dirigentes –la mayoría
autodenominados como socialistas humanistas, social demócratas,
ecologistas– son vasallos cómplices del cinismo y la
masacre. Hoy de lo que se denomina Gaza –y Palestina en
general desde hace décadas–, también se suman a la
lista: el Líbano, Chechenia, Irak, Afganistán, Kosovo,
Sabra y Chatila….y más.
Esta nueva
“ofensiva” o “incursión defensiva”, de acuerdo a
los calificativos usados por casi todos los líderes políticos
y la prensa mundial, arroja el siguiente balance. Según la
ONU –al 27 de enero pasado–, eran 13 soldados israelíes
y 182 heridos contra 1.314 muertos y 5.450 heridos
palestinos, la mitad mujeres y niños en un territorio de
360km 2 – es decir 45km de largo por 8km de ancho–,
espacio en el cual viven hacinadas un millón y quinientos
mil doscientas dos personas, algo así como 4.116 habitantes
por kilómetro cuadrado. De la población total, el 52,7%
tiene entre 15 y 64 años, el 45,7% tiene entre 0 y 14 años
y el 2,7% tiene más de 65 años. (1) A esto se suma que
casi un millón doscientos mil palestinos (80%) dependen de
la ayuda humanitaria, debido a que el 98% de su escuálida
industria colapsó luego del bloqueo económico, militar y
humanitario que Israel, la Unión Europea, EEUU, y Rusia
iniciaran cuando el movimiento islámico Hamas asumiera el
poder, al ganar democráticamente –y con cientos de
observadores internacionales in situ –las elecciones
legislativas en enero de 2006.
El
aporte de los medios
Los datos
recién mencionados son formales, reales –creciente en términos
de muertes para Palestina– pero parecieran no impresionar
mucho, aún cuando se repiten explícitos o retóricamente
disfrazados en todo tipo de medios de comunicación.
Posiblemente alarman a más de alguno, pero no bastan para
entender la real magnitud de problema. Los diarios, revistas
y noticieros destinan páginas y minutos extras que terminan
siendo irrelevantes, pues jamás se liberan del estereotipo
y la flojera para abordar el llamado conflicto desde sus
reales causas y consecuencias. Finalmente es mejor así, más
útil para el régimen político–económico imperante a
nivel global que no se entienda nada y que no se explique
nada. Sólo así es posible disipar el verdadero origen del
problema para que éste pueda ser “re–creado” según
las consecuencias pretendidas.
Es
frecuente que en este episodio como los de antaño, el 90%
de las interpretaciones partan desde el argumento
sionista–israelí: el grupo terrorista Hamas, atrincherado
en Gaza, no cesa de bombardear a Israel, el que no tuvo más
remedio que responder con firmeza para resguardar la
seguridad de sus ciudadanos. Frases como las siguientes se
repiten una y otra vez en boca de los portavoces israelíes,
las cuales terminan siendo ideas fuerza de todo análisis:
nuestro legítimo derecho a defendernos; ya no teníamos
alternativa; No somos enemigos del pueblo palestino; lo que
hacemos es reaccionar; queremos la paz, lo que hacemos en
Gaza es en forma quirúrgica; no queremos ver a la población
sufrir; Hamas es culpable de la muerte de los civiles
palestinos . (2)
Estas
afirmaciones a pesar de lo insólitas, son creíbles y
defendibles para muchos, debido, entre otras cosas, al
trabajo minucioso y subliminal de la extensa maquinaria mediática,
incluyendo Hollywood, en manos de acaudalados empresarios
sionistas. A esto se suma, la decadencia del oficio periodístico,
del reporteo, pues respetando y valorando las excepciones de
profesionales que aún sobreviven, el resto de mujeres y
hombres preparados – se supone éticamente– para
informar son los primeros en hacer uso de deducciones sin
sentido, un circo de eufemismos y reduccionismos que no
hacen ni un flaco favor al entendimiento, por el contrario,
profundizan los prejuicios.
Colegas
achanchados y desencantados que se escudan en la línea
editorial para no hacer el esfuerzo de analizar e
interpretar los hechos con un juicio coherente, ya no son
capaces de darse cuenta del real significado y efecto de sus
de sus titulares, sus adjetivos, sus “interpretaciones”.
La mecánica gira en torno a que los periodistas de diarios
leen, copian y pegan los cables de agencias, los de la
televisión leen y citan los diarios, los de la revistas se
nutre de ambos, institucionalizando el circulo vicioso que
vemos hoy, donde toda la información de prensa disponible
respecto de conflictos internacionales, en general, y
particularmente del tema palestino, tiene el mismo
parafraseo y enfoque simplista. Es recurrente, inclusive,
que muchas de las notas de prensa ni siquiera vengan
firmadas por algún periodista o intenten citar como fuente
explícita de información a las agencias internacionales
–Efe, Upi, Orbe, Ansa–; más bien sustentan sus tesis
preconcebidas en estruendosos titulares y el abuso excesivo
del recurso en “off” o fuente confidencial. Nos
encontramos, entonces, con textos plagados de: autoridades
vinculadas expresan, según los análisis, fuentes cercanas
confirman, según los diagnósticos se prevé, según
información oficial, etc…. Pudiendo jamás identificar qué
autoridades son aquellas, ni cuáles, son a ciencia cierta,
los análisis, informes o diagnósticos que se mencionan .
De esta
estrategia político–económica de la desinformación, se
entiende el origen de algunas de las deducciones que
circulan en las sobremesas de cualquier familia o grupo de
clase media, baja o alta que se informa, debidamente, por
los medios. Tratar de entender el fenómeno a través de la
prensa, particularmente en Chile, da como resultado más o
menos lo siguiente:
Gaza, que
en realidad es parte de una Palestina que no está en el
mapa, es un territorio autónomo y está, por extrañas
razones jamás precisadas, en medio de Israel, la promesa bíblica
que todos los criados como católicos apostólicos y romanos
conocemos desde pequeños. No se sabe bien porque Hamas
lanza insistentemente cohetes al moderno y pacífico
territorio israelí que emerge “espontáneamente y por
derecho divino” en 1948, nación que sólo clama su
derecho a existir y seguridad para sus ciudadanos. La
actitud de Hamas se atribuye, casi exclusivamente, a que son
musulmanes radicales, es decir genéticamente fanáticos,
odian la modernidad , son envidiosos de la democracia (3),
por eso jamás reconocerán la existencia de Israel y no
descansaran hasta destruirlo.
En este
escenario plagado de terroristas islámicos –no sólo
Hamas, sino también Hezbollah en el Líbano, el presidente
iraní Mahmud Ahmadinejad y el sirio Bashar al Assad
empecinados con financiar guerrillas y/o atentados,
amenazando incluso a Occidente–, Israel se ve obligado a
desarrollar evolucionados aparatos de inteligencia, armas
letales, bombas atómicas “disuasivas”, tácticas de
secuestros, encarcelamiento y asesinatos “selectivos” de
cabecillas de grupos insurgentes, y finalmente, optar por
construir un impopular megamuro ultra tecnológico de un
millón de dólares por kilómetro –2 veces más alto que
el de Berlín y 30 veces más largo (4). Israel quiere la
paz y como muestra de ello hizo el gesto de retirarse
unilateralmente de Gaza; pero a pesar de eso, los palestinos
“insisten“ en desaprovechar las instancias para
solucionar su situación –no sólo no aceptaron
anteriormente propuestas de paz como Camp David– sino que
en las últimas elecciones votaron en masa por los
fundamentalistas de Hamas y no a favor de los
“moderados” oficialistas de Al Fatah, con quien Israel
ya estaba llevándose de maravilla, olvidando incluso el
hecho de que tuvieran su emblemático líder, Yasser Arafat,
prisionero en su sede de gobierno durante 3 años hasta su
muerte a finales de 2004.
Según la
información circulante, estos radicales –ahora
oficialmente en el poder– usan a la gente como escudos
humanos y en atentados suicidas, entrenan a niños lavándoles
el cerebro con propaganda anti–israelí, sembrando el odio
en las nuevas generaciones, tanto así que la misma OLP, ha
tenido enfrentamientos con ellos. La agitación es tal desde
que asumieron, el gobierno israelí no ha tenido más
remedio que implantar un bloqueo económico, cerrar las
fronteras y evitar la internación de armas.
Es decir, a
pesar de la presión, el lánguido pueblo palestino en vez
de repudiarlos sigue apoyándolos, también dicen que es
porque los tienen atemorizados. En este contexto
“disuasivo” propiciado por el estado israelí en busca
de la paz, Hamas ha seguido insistentemente tirando cohetes
desde la frontera, por lo tanto, No queda otra alternativa;
todo tiene un límite, así es como el 27 de diciembre
Israel decidió responder.
El contexto
descrito permite a lo menos una que otra suspicacia,
abriendo paso a una larga lista de preguntas sin respuestas:
¿por qué Israel insiste en poblar con kibutz y judíos
ortodoxos –radicales– las zonas que ha ido anexando a su
territorio, ilegalmente, en contra de los mandatos y
resoluciones internacionales , envés de sacar a sus
compatriotas de ese peligroso territorio “susceptible a
enfrentamientos continuos” y relocalizarlos en algún
lugar de su fecundo vergel?. Si los palestinos son tan
peligrosos como para defenderse con costosos F16 y toda la
artillería israelí, ¿porqué en las fotos y videos que
circulan sólo se ven familias en la indigencia, jóvenes y
niños con hondas y piedras, todos los que luego aparecen en
siguientes imágenes mutilados entre los escombros?. Y si
son tan repudiables los pobladores palestinos, ¿por qué
los distinguidos miembros de la Cruz Roja Internacional, la
Agencia de la ONU para Refugiados, la Organización Mundial
de la Salud, Médicos Sin Fronteras y otras tantas
instituciones occidentales los defienden, los curan, les dan
comida y asilo en sus instalaciones, al punto de terminar
siendo blancos de bombas del “episodio defensivo” israelí?,
¿por qué el edificio donde se concentraba la prensa
mundial fue bombardeado; así como los camiones con
alimentos y medicinas?. Israel justifica el ataque a las
escuelas de la ONU – 33 muertos– diciendo que desde ahí
fueron disparados morteros, es decir, ¿Naciones Unidades
está confabulada con el terrorismo palestino (5)?. Por otro
lado, a lo menos curioso es lo referente al bloqueo de
fronteras, ¿cómo es que no llegan víveres ni agua de
contrabando, a través de los centenas de túneles subterráneos
que se dice repletan el desierto, pero sí lo hacen,
supuestamente, cientos de cohetes y armamentos varios?....
Insistir en
la explicación de que son fundamentalistas, terroristas islámicos,
completamente imbuidos en una doctrina arcaica y vengativa,
no resiste análisis alguno, es una simple excusa para todos
aquellos que prefieren tomar distancia o bien disfrazar
otros convenientes intereses. La profecía autocumplida de
la “barbarie fundamentalista” sólo sirve para avalar la
lucha de los “civilizadores” contra ese denominado
terrorismo, justificando el silencio criminal de su propia
raza y la escalofriante complicidad de todos los
espectadores.
Si
realmente le interesa entender el problema
palestino–israelí, diversifique sus fuentes de información,
contrástelas, capte con detención la forma como le cuentan
el conflicto en los diarios. En el dramático caso de Chile,
sólo dos conglomerados son dueños del 90% de los medios de
comunicación. Esto es, por un lado, la red Mercurio, a
manos del judío Joaquín Edwards Eastman (6) –quien
recibió de la CIA, en los años '70, dos millones de dólares
para implementar una campaña de terror mediático y minar
el gobierno de Salvador Allende, justificando la dictadura y
los miles de detenidos de desaparecidos (7)– que comprende
Las Últimas Noticias, La Segunda, casi todos los
principales diarios regionales y el emblemático Mercurio,
el diario más antiguo de América Latina. Y en la otra
trinchera está el grupo Copesa del señor Álvaro Saieh, de
origen palestino, que se compone por la Tercera, la Cuarta,
la Hora, revista Que Pasa y Paula. A simple vista uno podría
pensar que ambos conglomerados generan una especie de
equilibrio informativo, dados los orígenes; pues no se haga
ilusiones. Con excepción de un par de fotografías, gráficos
y columnistas invitados ligeramente más atrevidos en el
caso de la Tercera, el resto es un flujo de eufemismos
escudado en un supuesto lenguaje “pulcro” e
“imparcial”. A continuación algunos ejemplos:
El
Mercurio, lunes 29 de diciembre, A4, nota sin firma. (párrafo
6): La ofensiva del estado judío en represalia por los
misiles disparados por Hamas hacia territorio israelí desde
la franja ha dado muerte a unos 300 palestinos. Esta noticia
trae una infografía o gráfico, cuya fuente es Jane's
Defence Weekly e Inteligencia Israelí; y en un cuadro
destacado con el título “Objetivos” se señala: según
el ejército de Israel 230 blancos han sido destruidos y 97%
de las víctimas son militantes . (Noticia en el marco de
las imágenes de masacre y las declaraciones de la ONU
criticando el abuso israelí)
El
Mercurio, domingo 11 de enero, A6, texto de foto: “así
como Edimburgo, varias ciudades simpatizantes árabes
protestaron contra Israel” . (Nota en referencia a las
manifestaciones en Madrid, Londres, París, Buenos Aires,
entre muchas otras, contra del bombardeo desproporcionado a
Gaza y la negativa de abrir las fronteras para la llegada de
ayuda humanitaria)
El
Mercurio, miércoles 14 de enero, A5, nota sin firma. Epígrafe:
Intenta que los islamistas acepten un alto al fuego . Título:
con combates urbanos Israel busca presionar a Hamas. La
Tercera, miércoles 14 de enero, Página 10, nota sin firma:
Israel entra en barrio de ciudad de Gaza en más profundo
avance desde el inicio de la ofensiva . (Ambas noticia
referidas al ingreso de tropas y tanques israelíes a los
vecindarios densamente poblados que rodean el centro de Gaza
y su destrucción total)
Internet
permite acceder a información de los más diversos confines
del mundo, aquí es posible encontrar toneladas de noticias
y artículos con la lógica recién señalada, pero también
gratas sorpresas, como son los casos de los periódicos
peruanos La República y El Comercio, los cuales exhiben una
cobertura y lenguaje más realista, con notas y editoriales
sobre la real situación de Gaza, señalando fundadamente al
Estado de Israel como violador flagrante del Derecho
Internacional. De la misma forma en España, el diario El
Mundo ha desarrollado una serie de artículos con el
objetivo de explicar el conflicto y desmitificar las ideas
preconcebidas. (8)
El premio
al descaro –si contar a CNN– se lo lleva la gigante BBC
(British Broadcasting Corporation), que además de su
“sigilo informativo” y presión a los periodistas que
cubren el tema, fue el único medio de Gran Bretaña que se
negó, recientemente, a emitir un llamado de 2 minutos para
enviar ayuda humanitaria a la población de Gaza,
argumentando que éste contraviene la supuesta imparcialidad
informativa. La solicitud la realizó la DEC –Comité de
Emergencias para Desastres–, constituida por 13
organismos, entre ellos La Cruz Roja Internacional y Save
the Children. En dicha cinta no se menciona explícitamente
a Israel, sólo muestra la destrucción de casas y muertos
acompañado de una voz en off dice: “muchos niños luchan
por sobrevivir, sin casas y necesitados de alimentos y agua.
No se trata de los aciertos o errores del conflicto. Estas
personas simplemente necesitan su ayuda ”.
Este
resguardo “editorial” de la BBC, es el cinismo más
desolador. La vuelta de tuerca de todo esto es que la
sociedad civil inglesa ya no está dispuesta a ser cómplices,
así es como han llegado más de 15 mil reclamos formales a
la emisora, protestas masivas en la sede central y 110
diputados firmaron una moción que instala la emisora a
cambiar de postura.
En
el mundo de los ciegos…
En
definitiva, son los medios de comunicación y las
autoridades de las distintas partes del globo los que nos
permiten tomarle el real pulso a la problemática que se
vive en Medio Oriente y entender los hilos ocultos, deudas y
fidelidades detrás de esta historia.
La retórica
general fue al boleo, sin interpelación directa, repetida
con matrices por casi todos las cabezas de gobierno la
muerte de civiles es inaceptable/ lamentable, se hace un
llamado a las partes a detener el conflicto.
Los únicos
gestos explícitos han sido de los parias según Occidente,
es decir, los que en esta ronda no detentan ningún peso
específico en términos políticos: el presidente
venezolano Hugo Chávez y el boliviano Evo Morales rompieron
relaciones con Israel, los que junto con Irán realizaron
duras críticas al doble estándar israelí y la comunidad
internacional; asimismo, Siria que congeló las
negociaciones de paz con su vecino.
Particularmente,
sólo uno supo aprovechar el momentum citado al inicio del
texto. Que mejor escenario que el reciente Foro Económico
de Davos para que Turquía sacara las agallas que nadie tuvo
ni ha tenido desde hace décadas. El otrora corazón del
Imperio Otomano que venía timorato buscando ser aceptado
como risueño integrante de la Unión Europea, sacó la voz,
a través de su primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan,
lo que sin duda le redituará una fidelidad popular
duradera, sólo basta ver el recibimiento que tuvo al
regreso. Frente al descaro del Presidente israelí Shimon
Peres, el premier turco refutó enérgico: Desde meses antes
había un alto el fuego, en el que Hamas no lanzó un solo
cohete y, en cambio, Israel transformó Gaza en una enorme cárcel
al aire libre, donde ni siquiera podía entrar una caja de
tomates .
Ante el
impulso y desatada la catarsis, el Secretario General de la
Liga Árabe, Amro Musa, también acusó a Israel de haber
impedido la entrada de alimentos y ayuda a Gaza durante
meses: "el principal problema es la ocupación israelí,
los asentamientos, las barreras ”, criticando el hecho de
que se exigiera a los palestinos celebrar elecciones y
cuando Hamas ganó se le declarase irrelevante. Todo lo
anterior, a pesar del evidente favoritismo del moderador de
la reunión, quien no los dejara hablar y sí privilegiara
25 minutos de perorata desbocada del octogenario Peres. (9)
La
oportunidad de reivindicación estuvo…, está; pese a
ello, la alemana Ángela Merkel, n o sólo la desperdició
sino más bien engrosó esa extenuante hipoteca que cae,
desde hace más de medio siglo, sobre la conciencia de sus
compatriotas que ya bastante cansados están con el
estereotipo y la censura histórica que los persigue. Culpó
unilateralmente a Hamas de la escalada de violencia en la
Franja de Gaza, e instó a los palestinos a no disparar
sobre los convoyes de ayuda humanitaria y a cesar los
disparos sobre asentamientos israelíes de forma inmediata y
duradera. Thomas Steg, vice portavoz de la cancillería
alemana, refuerza la postura germana para el gobierno alemán
no hay duda de la legitimidad de Israel a defender su propio
territorio (10).
Obama:
¿un nuevo régimen?
La guerra
civil en los llamados territorios palestinos y el ataque
militar israelí no tiene como origen al Islam ni tampoco la
persecución del pueblo judío, es un problema político–
estratégico y debe ser mirado desde esa perspectiva si
realmente se quiere encontrar una solución ecuánime.
Israel no
es una democracia, no se comporta como tal. Hace uso de los
mismos mecanismos abusivos y de represión que cualquier
dictadura islámica u occidental. Censura la libertad de
expresión y de libre circulación, ejerce políticas de
segregación, expropia, humilla, tortura, arrebata los
derechos de sus propios habitantes, encarcelando a los judíos
que apelan a la objeción de conciencia para no ir a matar
palestinos y también a aquellos que critican sus políticas
de exterminio (11). Peor, desafía con soberbia a la
comunidad y los organismos internacionales, negando la
validez de todo derecho o garantía cuando esta no es de su
agrado o no le conviene, sin que nadie pueda exigirle
respeto o, a lo menos, mesura. (12)
Como dije
al inicio de este escrito, el rostro amable de Obama no ha
surtido efecto en mí, aún cuando el nuevo inquilino de la
Casa Blanca sabe la necesidad de un reordenamiento del régimen
imperante a nivel global y de un cambio de política de EEUU
hacia Medio Oriente, para mantener la supremacía
estadounidense y tratar de vivir en paz. Por lo pronto, los
iniciales hechos ocurridos durante su ascenso empañan el
camino. El comportamiento de Israel fue una mensaje claro de
cómo quiere que sean las cosas en este nuevo mandato, con
este objetivo comenzó los ataques el 27 de diciembre de
2008 y recién el 7 de enero de 2009, Obama rompió su
silencio: siento profunda preocupación por la muerte de
civiles ; mientras tanto ya desde noviembre tenía elegido a
su jefe de gabinete, nada menos que el congresista demócrata
Rahm Israel Emanuel, ex asesor del gobierno de Bill Clinton
y ex voluntario de las Fuerzas de Defensa de Israel. (13)
Adicionalmente,
mientras llovía información mediática sobre a la rutina
diaria del mandatario en ascenso –a cuál iglesia iría;
sus gustos por el deporte, su sobrenombre basquetbolístico
“Barry O' Bomber Obama”; o las tiernas cartas para sus
hijas–, la saliente secretaria de Estado, Condoleeza Rice
y su amiga sionista Livni Tzipi, firmaran un memorándum de
entendimiento entre ambos países que compromete a EEUU a
prestar todos los servicios militares y de inteligencia
necesarios para resguardar la seguridad de Israel y detener
el terrorismo. Nada se dijo al respecto.
Por cierto
hay más, pero esto es suficiente para pensar, sin ser
pesimista, que lo que viene no es sustancialmente mejor. Por
lo tanto, la aceptación, la convivencia y la paz siguen aún
bastante lejanas.
(*)
Periodista de la Universidad de Chile. Diplomado en Cultura
Árabe e Islámica, Universidad de Chile.
1.
Sólo para que se haga una idea Santiago de Chile tiene
1.400km2. Cifras demográficas estimadas a julio 2008.
2.
Palabras repetidas simultáneamente por Ehud Barak, ministro
de Defensa; Ehud Olmert, primer ministro israelí; Livni
Tzipi, ministra de Relaciones Exteriores; Mark Regev, vocero
de Gobierno; Shimon Peres, Presidente de Israel. Vea los
descargos de este último en el Foro Económico de Davos, 29
enero 2009, frente al cuestionamiento de su política y
bombardeo a Gaza, de parte primer ministro turco, Recep
Tayyip Erdogan, quien terminó retirándose indignado luego
de un candente debate.
3.
Palabras reiteradas del ex presidente de EEUU George W. Bush,
en su lucha contra el terrorismo.
4.
En los años '30, el sionista Vladimir Jabotinsky fue
premonitor: ”los árabes se opondrán a la inundación de
Palestina con inmigrantes judíos. Si nosotros fuéramos árabes,
no lo aceptaríamos. Con el fin de sobrevivir los judíos
construir un muro de hierro y de poderío militar hasta que
los árabes acepten”.
5.
7 de enero 2009, el ejército israelí bombardeo dos
escuelas, una en el campamento de refugiados de Jabaliya y
la otra en Chati, donde se encontraba un importante número
de familias palestinas que huían del conflicto luego que
sus casas fueran destruidas. Los recintos de los organismos
internacionales, se supone, era opción más segura y la única
debido a que no hay forma de salir de Gaza, pues las
fronteras están bloqueadas.
6.
Nació en 1928, es hijo de María Isabel Eastman Beéche y
Agustín Edwards Budge. Asumió la presidencia del Mercurio
en 1958, cargo que ocupa hasta el día de hoy.
7.
Ver documental estrenado a fines de 2008 en chile “El
Diario de Agustín”, Fernando Villagrán y Universidad de
Chile
8.
Ver el análisis “Desmontando los tópicos de Gaza”
http://www.elmundo.es/elmundo/
2008/12/30/internacional/1230654642.html
9.http://www.lavanguardia.es/internacional/noticias/20090129/53629629532
/erdogan–se–marcha–indignado–de–davos–tras–un–discurso–en–el–que–peres–justifico–la–ofensiva–en–gaza–.html
10.http://www.lavanguardia.es/internacional/noticias/20081229/53608345956/
brown–se–declara–horrorizado–merkel–culpa–a–hamas–y–paris–convoca–a–la–ue–a–una–reunion–de–urgencia–.html
11.
http://www.December18th.org ; http://www.youtube.com/watch?v=pNjggLhQo6w
12.
“La decisión de la ONU es impracticable (…) Israel no
ha cumplido aún con su misión… Israel nunca ha aceptado
que un elemento externo influya en su derecho a defender a
sus ciudadanos” Palabras de Ehud Olmert cuando desde la
ONU, el señor Ban Ki–Moon le solicita un alto al fuego
inmediato.
13.
Durante su campaña para llegar al Congreso en 2002, Emanuel
apoyó la posición del presidente George W. Bush hacia
Irak. En 1991, durante la primera guerra del Golfo Pérsico,
se alistó como voluntario en las Fuerzas de Defensa de
Israel. En 1993 participó de la ceremonia de los Acuerdos
de Oslo, entre Israel y la Autoridad Palestina. Ver las
declaraciones del padre de Emanuel http://negocios.negocios.com/noticia.php?s=8&sm=8¬i=38188
|