El SI, el NO y la izquierda en el
referéndum venezolano
Hipotecando la independencia política
Por José Luis Rojo
Socialismo o Barbarie, periódico,
13/12/07
La derrota de Chávez en el referéndum del 2–D ha
abierto una intensa discusión política entre las fuerzas
de la izquierda en la región. Sólo con ver las
contribuciones a la pagina APORREA (medio electrónico
pro–chavista y semi–oficial) se puede dar uno cuenta de
la magnitud del debate [1].
No se trata sólo de Aporrea. Desde las diversas
corrientes de la izquierda “trotskista” de la región
llegó el momento de poner “las barbas en remojo” en lo
que tiene que ver con la posición asumida por cada una ante
el referéndum.
Básicamente, tres fueron las posiciones más
representativas; posiciones que, a la vez, excedieron el
plano meramente “táctico”, traduciendo a “cielo
abierto” la opción político–estratégica sustentada
en cada caso.
Estas tres posiciones fueron las siguientes: el
“doble SI”, defendido por las corrientes que se agrupan
en la “Revista de América” y en el periódico “Marea
Clasista y Socialista” [2]; el NO defendido desde
la izquierda, cuyo ejemplo más connotado ha sido el del
PSTU del Brasil [3]; y, por último, los que
defendimos la abstención (o el voto nulo), como ha sido el
caso de la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie (o
compañeros como el dirigente obrero Orlando Chirinos) [4].
Bajo la disciplina del comandante
Chávez
A “Marea Clasista y Socialista”, integrante de
ese engendro burocrático–estatal llamado PSUV [5],
le pareció que no alcanzaba con impulsar un “simple” sí...
Vergonzosamente, llamaron a “formar cuadro
cerrado, por el Doble Sí, por la profundización de
la revolución y para derrotar al golpismo y la
contrarrevolución. Pongamos a los batallones y a todo
el movimiento obrero, campesino y popular en la movilización
total por él SI y contra el golpismo, en
estado de 13 permanente para que no vuelva el 11”
[6].
Simplemente escandaloso. Y no sólo vergonzoso
desde el punto de vista de una posición de elemental
independencia política respecto de un gobierno nacionalista
burgués. Más grave aún, en directa oposición al sentimiento
de una inmensa porción de la misma base
“bolivariana” que masivamente se abstuvo en el referéndum.
Es decir, se trata del caso no sólo de vendedores de
espejitos de colores para los demás, sino de empedernidos
compradores ellos mismos de sus propias ilusiones, que
en un curso de obtusa y ciega capitulación al
capitalismo de Estado del siglo XXI, siquiera supieron
apreciar –a pesar de sus reiterados paseos por
Venezuela– cuál era el estado de ánimo más profundo
entre los sectores populares.
Porque no hay manera de dejar de preguntarse: ¿cómo
se puede llegar a tal grado de perdida de independencia política
–en corrientes que se consideran “trotskistas”– como
para llegar a llamar a formar “cuadro cerrado” con Chávez
y a ofrendarle un “doble sí”? ¿Cómo se puede
expresar tal grado de desorientación política como
para quedar a kilómetros detrás de la justa
percepción de 3.000.000 votantes explotados y oprimidos
que, correctamente, están apreciando la ausencia de cambios
estructurales de fondo en Venezuela?
Triste la situación en la que han quedado los
sustentadores del “doble sí”, los que ahora –por toda
política– no tienen más que dedicarse a echar lágrimas
de cocodrilo pidiéndole al propio Chávez que “revierta
la situación” en el colmo de su total y absoluta renuncia
a todo criterio de independencia política y en su
seguidismo al líder “esclarecido”: “Hay la necesidad
de que el presidente le meta lupa a esta situación
que pesó enormemente en la decisión de votar No y en
abstenerse” [7].
En el mismo saco con los escuálidos
Pero no se ha tratado sólo de la total renuncia de
la independencia política de los sustentadores del doble sí.
En una situación simétrica quedaron corrientes que como el
PSTU del Brasil, impulsaron el NO en el referéndum.
No preguntamos: ¿cómo se puede llegar a cometer
semejante desatino político? ¿Cómo se puede mezclar
las banderas de esta manera con la oposición burguesa
patronal? ¿Cómo se puede defender –a capa y espada–
semejante política acusando a los que correctamente
impulsamos la abstención o el nulo en el plebiscito, de ser
“capituladores vergonzantes al chavismo”?
Porque en él último número del periódico de este
partido se lanza la siguiente crítica a nuestra corriente [8]:
“Existieron varios sectores de izquierda que se negaron
a apoyar él ‘si’ chavista. Pero por una postura
completamente centrista, tampoco defendieron el ‘no’
(...). Incluso la Corriente Socialismo o Barbarie del
nuevo MAS argentino, que apoyo la abstención. Se trata en
verdad de una capitulación vergonzante al chavismo” [9].
Según parece, en el raro mundo
de estos compañeros, el mezclar completamente las
banderas con la oposición burguesa de derecha no tiene
la menor importancia. Porque a nadie se le podía escapar
–desde semanas antes del 2–D– que los que irían a
darle el tono reaccionario y pro–imperialista al NO, cosa
que el minúsculo grupo venezolano de la LIT, evidentemente,
no podría contrapesar ¡…eran los “escuálidos”!
Pero, para el PSTU, los que
defendimos un curso realmente independiente de toda
ala burguesa con la abstención, seríamos una suerte de
“chavistas vergonzosos”... Un desatino que sólo
puede tener una explicación política y otra, más general,
de índole “teórica”.
Políticamente, y siguiendo el
rico debate realizado en Centroamérica entre diversos
agrupamientos trotskistas de la región, los compañeros
ligados a la LIT parecen argumentar que “si se estaba
consecuentemente en contra de la reforma de Chávez,
entonces había que votar no” [10]. Nos
preguntamos: ¿dónde se ha visto que los socialistas
revolucionarios debamos admitir los tramposos términos (sí
o no) de un referéndum burgués, mecanismo que ya desde la
época de Marx ha sido considerado de los más antidemocráticos
y planteado –en las más de las oportunidades– el liso y
llano rechazo al mismo? [11]. Los compañeros
parecen sugerir que para no ser un “capitulador
vergonzante” sólo cabía votar NO, ¡aunque esto
implicara hipotecar la independencia política de clase
ante la burguesía pro–imperialista escuálida!
Junto a este grave problema político,
hay otro de índole más general [12]. Se trata del
análisis “democratizante” por el cual se pierde de
vista que ni el sí, pero tampoco el no, eran opciones de
los trabajadores.
Es decir, haber extremado en ángulo
de rechazo al bonapartismo chavista, pero perdiendo de vista
que, socialmente, hay cosas en juego en la polarización
chavismo–escuálidos
[13]; evidentemente no en el
terreno de la clase obrera y el anticapitalismo, pero cómo
perder de vista que –en un sentido– los escuálidos
expresan, globalmente, un proyecto a claramente a la
derecha del chavismo, aun cuando ambos proyectos son,
insistimos, proyectos burgueses.
En síntesis, aquí hay algo del
objetivismo habitual del PSTU de considerar una tarea (la
derrota de la reforma chavista) de manera totalmente independiente
del sujeto y los métodos con la que se ha encarnado
(los escuálidos, por el expediente antidemocrático de un
referéndum burgués), lo que eventualmente, no dejará de
tener consecuencias.
La masiva abstención abre el
espacio para la izquierda revolucionaria
En estas condiciones, el SI y el NO desde la
izquierda terminaron en una mezcla de banderas con
uno u otro “campo” político patronal. Haciéndole su
acostumbrado seguidismo a Chávez en un caso; quedando increíblemente
pegados a los escuálidos en el otro.
Contrariamente a las posiciones anteriores, creemos
que las corrientes –como CI SOB– que llamamos a la
abstención o el voto nulo, expresamos una posición correcta
y un acierto político. Porque de alguna manera logramos
“sintonizar” con un estado de ánimo que se ha venido
generalizando entre amplios sectores populares: estos
3.000.000 de explotados y oprimidos “bolivarianos” que
no fueron a votar expresaron –de alguna manera– una
suerte de protesta por izquierda al gobierno de Chávez.
Esta realidad es de extrema importancia: en un cierto
sentido, por primera vez en mucho tiempo se ha roto la
polarización chavismo–escuálidos, abriéndose la
eventualidad de un espacio independiente de ambos que
puede ser la base de sustentación para la construcción de
una corriente política de los trabajadores independiente.
Ese es el elemento más importante que ha dejado como saldo
el referéndum para las fuerzas auténticamente socialistas
revolucionarias del continente. A esa perspectiva
aportaremos desde CI–SOB todas nuestras fuerzas.
Notas:
1.
No puede dejar de subrayarse que Chávez –para
lavar sus culpas– está recurriendo al remanido argumento
burocrático de que la culpa por la derrota del si la
tuviese la base bolivariana. Hace esto afirmando que el
problema habría estado en que la población no estaría
“madura para el socialismo”...
2. El MST argentino, el MES de
Brasil, dirigentes obreros como Stalin Pérez Borges de
“Marea” y otros grupos de menor envergadura.
3. Al que claramente defendemos de
las calumnias de James Petras, más allá de las profundas
diferencias políticas que tenemos con esta organización no
solo en general, sino como veremos más abajo en lo que
respecta a su posición ante el referéndum mismo.
4. En el caso del PO, a decir
verdad, previamente al referéndum no llegó a emitir una
posición clara al respecto. Luego del mismo, en
declaraciones de Jorge Altamira a la prensa, se parece
sustentar la opción del NO.
5. Después de la derrota en el
referéndum han aparecido toda una serie de connotadas voces
que comienzan a “sincerarse” acerca de una serie de tópicos.
Por ejemplo, acerca de la verdadera naturaleza del PSUV, al
que el intelectual chavista Heinz Dieterich define
abiertamente como “un partido de Estado”.
6. Declaración de Marea Clasista
y Socialista, APORREA. A la luz
de los resultados, resulta más que grotesca la
situación vivida por esta corriente. Es que integrantes de
“Revista de América” viajaron a Venezuela con una
amplia delegación, convocaron a una conferencia de prensa,
se sacaron fotos (que enviaron a todo el mundo),
participaron del acto chavista el viernes 30 en Caracas,
gritaron a los cuatro vientos su “doble SI”... sólo
para quedarse “sin el pan y sin la torta”. ¡Triste
destino de estos ex trotskistas devenidos en socialistas
nacionales!
7. Marea Clasista y Socialista
fija posición después de los resultados del referéndum,
Aporrea, 3–12–07.
8. En el mismo artículo el PSTU
critica al PCO y la LER del Brasil, grupo el primero
vinculado al PO argentino y el segundo al PTS de este mismo
país.
9. En “Polémicas con la
izquierda chavista”, Cesar Neto, en www.pstu.org.br.
10. Ver este debate en
www.socialismo–o–barbarie.org
11. Un compañero centroamericano
del PST–CR, Roberto Herrera, dice a este respecto:
“Ahora bien, parte del desencanto de sectores de los
trabajadores y el pueblo con el chavismo, es el permanente
chantaje político al que los somete Chávez, siempre
polarizando entre él y Bush (...) ¿a cargo de qué los
socialistas debemos reforzar por izquierda este chantaje? Yo
creo que en eso la consigna de Chirinos (...) es muy fuerte:
‘los socialistas somos la tercer opción”. En
www.socialismo–o–barbarie.org.
12. Este elemento más general, a
decir verdad, está compartido con los compañeros de la
UIT–CI que unilateralmente han analizado la derrota del SI
como “un triunfo obrero y popular”.
13. Que no sea en el terreno de la
clase obrera y el anticapitalismo no quiere decir que se
tratara de una “falsa polarización” como argumentó el
grupo venezolano de la LIT.
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