Plan "anticrisis mundial” de Chávez
¿Medidas económicas para trascender el capitalismo
o
para defenderlo?
Por Manuel Sutherland (*)
CEPRID, 02/05/09
El pasado 21 de marzo el Presidente Chávez anunció al país
un conjunto de medidas diseñadas para luchar contra los
impactos de la crisis sistémica del capitalismo. Dichos
anuncios, se han vendido como una forma "súper"
revolucionaria de afrontar los embates de la depresión. Los
gremios de empresarios socialistas, los economistas
bolivarianos y lo más anticomunista del chavismo han
gritado: "le dimos una puñalada de muerte al paquete
neoliberal, no recurrimos al FMI, esto es un plan anticíclico
(A. Álvarez), este plan deja claro la orientación
socialista revolucionaria del gobierno (J. Faría)".
Revisando las medidas me resulta difícil no considerar, lo
contrario. Siguen hablando de Crisis financiera, pasajera,
culpa del capital "malo" y especulador.
Aunque parezca ridículo, estás premisas parecen marcar
el punto de análisis de los "izquierdistas" que
salen en televisión explicándonos lo que sucede en el
planeta. A estas conclusiones, se aborda por el sólo hecho
de desechar la teoría del socialismo científico y
menospreciar la explicación marxista de la Crisis. De estas
consideraciones pequeño burguesas emanan las fallidas
"salidas" y planteos de lucha contra la crisis
sistémica del capital, que engloba lo: Cultural, ético,
político, energético, alimenticio etc. Decimos esto,
porque en las medidas anticrisis, no hay atisbos de
enfrentamiento contra el sistema que la lleva intrínseca.
No hay ideas que aclaren que el problema no es la crisis del
capital, sino el capital mismo.
En el Plan, ni por asomo se muestran pasos que asemejen
algún intento de reversión a las relaciones sociales que
fundamentan el caos capitalista. Aún se apuestan por
combatir con herramientas morales y metafísicas al capital
(malo, especulador y apátrida), con más capital (bueno,
patrio, productor etc.). Así, se proponen como elementos
progresistas, acciones que a mi parecer se distancian poco
de "operaciones" de ajuste, que en el pasado
criticamos. Por ello, si no se avanza en la compresión de
una realidad distinta a la burguesa, se reproducirán sus más
nefastos resultados.
La absurda y estéril “lucha contra el neoliberalismo y
el FMI”
Otro asunto increíble radica en las comparaciones
inauditas y estólidas de las medidas que se tomaron, con
las que otros gobiernos afectos al FMI y al BM, emplearon en
determinadas circunstancias. ¿Es ese el tabulador con el cuál
comparar las medidas bolivarianas?
Evaluarse en términos "revolucionarios", con
las medidas adoptadas por Carlos Menem, Alan García y
Carlos Andrés Peréz, es un insulto a la inteligencia y al
socialismo. Cualquier cosa, medianamente sensible sería
"menos mala" que lo que ellos plantearon. Un
proceso de cambios, no debe compararse con lo más contrario
al socialismo en el planeta. Lo razonable es pensar, ¿en
que grado, estas medidas contribuyen a aprovechar la crisis
para destruir el sistema que la engendra de forma crónica?
Si lo analizamos desde esa perspectiva, en las medidas no
encuentro ningún atisbo de avance en la superación del
drama capitalista, en su acto depresivo.
El neoliberalismo, no es otro tipo de capitalismo, ni una
doctrina filosófica, ni una concepción del mundo. Es, a lo
sumo, un conjunto de herramientas de política económica,
que se utilizan en determinados momentos (por cualquier tipo
de capitalista, incluyendo: socialdemócratas y Keynesianos)
a fin de acrecentar la explotación del obrero, abaratar los
costos de producción y acelerar el proceso de concentración
y centralización del capital. Más nada. Sus bazofias
pseudo psicológicas no son compradas ni por sus gestores,
ni son creídas por nadie. Por ello, la lucha contra esto es
una pérdida de tiempo y confusión, debido a que abre las
puertas a la idea de un capitalismo light, o
antineoliberal, donde todos suframos menos.
La lucha es contra el sistema capitalista, no contra una
política determinada del mismo. Luchar contra el
neoliberalismo, es decir, de forma implícita, que hay
caminos más benévolos para el capitalismo, y es ayudar a
darle oxigeno, a quién se anega. El "plan
anticrisis" se presenta como una alternativa
no–neoliberal, pero, tampoco socialista debido a que no
cuestiona la (des)organización social del trabajo del
sistema.
Medidas "revolucionarias"
Es evidente que este Plan anticrisis no afecta el sistema
que se quiere superar. Incluso, el juego del lenguaje
expresado en su magistral exposición, invita a aplaudir
algo, que hecho por otro gobierno sería motivo de protesta.
¿Exagero? No, lejos de desconocer los importantes avances
que se han desarrollado en el país, la radicalización de
movimientos populares y las conquistas en determinadas áreas
(deportes, salud, cultura, entre otros) me es imposible no
plantear diferencias estructurales con la naturaleza y
contenido del Plan anticrisis. Veamos:
a) Aumento de 183% en el endeudamiento público, para el
2009
La deuda venezolana, está calculada en 32 mil millones de
dólares (la externa pública) y la de PDVSA en 16 millardos
de dólares, la interna 30.515 Millones de Bolívares
fuertes. ¿Es poco?, si vemos con lupa, notamos que del año
1998, hasta ahora, la deuda interna pública ha crecido
1206%, en un período de bonanza petrolera es insólito e
innecesario. El economista bolivariano, E. Córdova dice:
"tenemos un estado que prefiere endeudarse él antes
que transferirle los costos a los más necesitados"[1]
¿Pero, quién paga la deuda? La deuda, es un desangre al país,
es una forma de alimentar a parásitos rentísticos de las
finanzas, que reciben altísimos intereses que provienen de
nuestra riqueza natural energética (no renovable) y del
trabajo diario de todos quienes en la patria somos
explotados por una camarilla de burgueses. El estado vive de
la plusvalía que capta del empresariado (previamente
expropiada al obrero), de los recursos naturales de la
población y del trabajo arrebatado al obrero en impuestos,
entonces, ¿quién paga la deuda?
Aumentar en 183% algo que deberíamos negarnos a pagar,
por ser un robo, una exacción directa es un salto atrás.
El papel lamentable de anticomunistas, que aplauden esta
medida, nos amarga y preocupa.
b) El aumento insuficiente de 10% y 10% del salario y los
despidos masivos del estado y el sector privado en su
reestructuración
El salario mínimo, es el borde de existencia de la clase
trabajadora. Está diseñado por las burguesías como la
cantidad básica suficiente que permite a un obrero comer e
ir a explotarse al día siguiente, es decir reproducir su
fuerza de trabajo. Con una inflación del año pasado de
30,9% y de más de 43% en alimentos el empobrecimiento de
los trabajadores no podido superarse. La pérdida del
salario real para el año 2008 fue de 0,9%, en un año de
extrema bonanza petrolera, donde el precio de la cesta
petrolera venezolana alcanzó un record de 126 Dólares. Los
2 aumentos programados, No cubrirán el aumento de los
precios de los bienes (sobre todo alimentos).
La inflación anual de 30% hizo perder en casi un tercio
el poder adquisitivo de los trabajadores. Los dos aumentos
programados dejarán morir un tercio de la pérdida total de
ingreso laboral y se constituirá en una grave pérdida del
salario real, elemento de vital importancia al analizar la
estructura del plan. Los fijadores de precio (los burgueses)
ajustan los precios no en función de la inflación
esperada, sino más bien de la inflación pasada. Lo cuál
hará que pronto ajusten sus precios al alza y acentúen la
pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores y se
constituya todo esto en un freno al crecimiento económico
(recesión).
Nos alegra que la tasa de desempleo actual sea de las más
bajas en los últimos 30 años, aunque la informalidad
(trabajadores que generalmente están en situación laboral
precaria) pasa la cifra del 43% de los empleados. A pesar de
esto, es notoria la cantidad de despidos que ha realizado la
administración pública. Reducciones de entre el 10% y el
50% del personal muestran la gravedad de los recortes
presupuestarios, que afectan a los trabajadores más
humildes, que perderán sus trabajos y verán disminuir
bruscamente su poder adquisitivo. Los despidos en masa no
son una postura justa ni acorde con el respeto que merecen
quienes hacen funcionar la sociedad. En época de crisis, la
creación y defensa del empleo es uno de los baluartes para
enfrentarla castigar a los trabajadores. En la URSS el
desempleo era cero, acá no esperamos tanto, sólo
exigimos consideración a la clase que mueve al mundo. Insólito
es el silencio abyecto, cobarde, cómplice y vergonzoso de
quienes saben esta situación y la callan o disimulan.
Otros de los aspectos fundamentales es la distribución
del ingreso, según la Tabla 1,[2] nos muestra que desde el
2001 hasta acá, ha empeorado. Es decir, en el PIB la
participación de la sumatoria de los salarios ha
disminuido, en relación con la suma de las ganancias, que
han aumentado vertiginosamente, acrecentando el proceso de
depauperación relativa. El crecimiento económico fabuloso
que hemos tenido, ha sido filtrado por nuestro empresariado,
que cada vez obtiene más ganancias del producto social. La
clase trabajadora ha pedido buena parte de la torta.
Cuadro
1
|
Año
|
2001
|
%
|
2002
|
%
|
2003
|
%
|
2004
|
%
|
2005
|
%
|
2006
|
%
|
Remuneración de
los asalariados
|
31.260.999
|
49
|
35.636.585
|
46
|
41.178.029
|
42
|
63.915.576
|
41
|
86.744.208
|
38
|
120.403.859
|
41
|
Excedente de
explotación, neto
|
33.024.028
|
51
|
41.474.906
|
54
|
57.100.587
|
58
|
91.669.448
|
59
|
139.309.179
|
62
|
174.825.184
|
59
|
Fuente: Ver sistema de cuentas nacionales BCV,
www.bcv.org.ve
|
c) La Reducción de las prebendas y lujos de la
burocracia, una crítica que lleva años rodando
La reducción del presupuesto, no es una medida ni
siquiera Keynesiana, es una que puede resultar lógica, si
vemos y escuchamos los despilfarros que se cometen en la
administración pública. El mismo presidente nos indica,
las ingentes cantidades de whisky, fiestas y agasajos a todo
trapo de la burocracia roja. Los salarios sauditas, son otro
aspecto que tímidamente se planteó, pero que lejos de
establecer una escala salarial de 1–8 ó 1–8, se
hicieron críticas románticas a personeros con prebendas
insólitas. Es vox populi que algunos personeros cobran el
equivalente a 30 salarios de un obrero calificado. A 10 años
de esta situación, la respuesta luce débil y tardía.
Reducir el presupuesto, es sacar dinero de circulación, lo
que podría aligerar el galopar de la inflación, aunque,
también tiene un efecto visible, en el despido de miles
trabajadores de administración pública, contratista y
empresas prestadoras de servicios al gobierno. Ello, puede
acarrear menos adquisición de mercancías, con lo cuál la
dinámica de crecimiento podría disminuir aún más.
d) La drástica reducción del presupuesto
La reducción planteada del presupuesto que se anunció es
menor a 7%, sin embargo, si se compara el gasto ejecutado el
año pasado, con el estimado a cumplirse se observa (llevado
a dólares) que la reducción será cercana al 25%. Lo cuál
debe traducirse en pingues recortes del gasto que serán un
desestímulo a la economía que se traducirá en una
contracción de la demanda agregada que puede allanar la
senda a la recesión. No sólo eso, dicha reducción (a
pesar de que el Presidente prometió salvaguardar a los más
débiles) debe afectar a quienes devengan ingresos que
rondan el salario mínimo y aquellos que trabajan directa o
indirectamente con el estado, lo cuál empeorará sus
niveles de vida y no servirán para relanzar la acumulación
capitalista que se intenta defender.
Más aún, si el gobierno está tratando de fortalecer el
estado y asumir tareas del sector privado (sin afectar sus
intereses) está fuerte disminución puede empeorar de
manera importante la calidad y cantidad de la prestación de
servicios que el estado presta a la comunidad. Todo ello,
puede agravar descontentos y decepciones que se vienen
acumulando y que ya se han puesto de manifiesto.
e) El aumento de un impuesto regresivo: el IVA. ¡El mundo
al revés¡
¿El mundo está al revés como dice Eduardo Galeano? No
creo, pero interesante es ver lo que dice un economista
abiertamente derechista como Leonardo Vera del IVA: "el
alza en un impuesto tan regresivo y contractivo sobre el
consumo a las puertas de una recesión sólo puede
explicarse como el resultado o el legado de una
irresponsable política fiscal pro–cíclica". Este
furibundo antiobrero denuncia el IVA y el carácter recesivo
del plan de forma abierta: "De lo que se trata es de un
vulgar ajuste por la vía de recortes masivos de gasto público
e incrementos regresivos de impuestos para cerrar la brecha
fiscal"[3]. Es decir, siendo L.V. un antisocialista
acusa al gobierno de neoliberal, que aún cuando sea una
postura oportunista, nos da que pensar sobre un plan que en
boca de ellos debería ser "socialista", es decir,
estatizador (en su lenguaje), pero que por el contrario se
muestra contractivo.
Siguiendo en el planeta piernas arriba, traemos al Señor
E. Córdova, que viniendo de una organización socialista
nos dice: "Los sesudos análisis de la oposición y
algunos compañeros y compañeras de "izquierda"
razonan y concluyen que el incremento del IVA de 3 puntos
porcentuales –9% a 12%– representa una desmejora en el
poder de compra"[4] ¿El aumento del 33,3% del IVA no
desmejora el poder adquisitivo? Vaya, en Venezuela la gente
de "Izquierda" defiende un aumento de un impuesto
abiertamente regresivo, antipopular y los derechistas lo
critican, insólito. E. Córdova llama "economicista"
a quienes planteamos lo contrario y dice esta perla:
"una escueta interpretación económica no nos dice
absolutamente nada, pues recordemos que la economía es una
simple abstracción".
Es decir, el concepto de Economía Política de Engels,
Rosa Luxemburgo y Bujarin tiene un nuevo acompañante, el señor
Córdova, quien destruye la Economía Política como ciencia
y nos explica que es inútil para entender porqué cualquier
aumento del IVA no afecta en "nada" a la población.
Los giros que se dan para defender lo indefendible asemejan
a cándidos viajes astrales que esconden la miseria
defendida.
El IVA es un tremendo castigo directo, a la clase
trabajadora. El IVA, es un impuesto regresivo, porque tiende
a redistribuir la renta a favor de quienes más ganan, y en
sumatoria, pone a pagar mucho más a quienes menos tienen,
en contraposición a quienes mucho poseen. Un
multimillonario y una madre desempleada van a comprar una
galleta. Ambos pagarán el mismo importe por el IVA, pero
como la clase trabajadora es mucho más numerosa que la
acaudalada, la sumatoria de lo que paguen los primeros será
mayor que los segundos, a pesar de que estos últimos
consuman más.
Así, el aumento de 9% a 12% del IVA, empobrecerá
directamente a la gente, al pecharle sus enseres básicos de
consumo. El IVA no había que aumentarlo, sino eliminarlo,
es una carga para el pueblo pobre. Venezuela es aún el
segundo país con menor presión tributaria en América[5],
el Impuesto sobre la renta es bajísimo y el impuesto a los
activos empresariales se eliminó. Entonces, ¿Porqué no
hacerle pagar a los empresarios, lo que expropian al obrero
a diario? ¿Porqué llevamos 10 años de Bolivarianismo y la
ley del Impuesto Sobre la Renta que sufrimos (igual que la
Ley del Trabajo) son tan abiertamente neoliberales y
reaccionarias? ¿Para cuando se planea cambiarlas?
f) Control de Cambio y defensa a la burguesía importadora
y especulativa.
El control de cambio, es una estrategia para impedir que
de manera que los empresarios fuguen todas las divisas del
país y lo lleven a la quiebra. En efecto, de liberal el
control de cambio, habría una corrida por los dólares que
esfumaría las Reservas Internacionales. Sin embargo, el
mantener el control de cambio, e impedir o limitar (el tope
a gastar en divisas para un venezolano en el extranjero es
3100 USD) que cualquiera venezolano pueda traer cosas del
extranjero, hace que la burguesía importadora, con
licencias o no coloque precios de monopolio en las mercancías
importadas a dólar oficial. Es decir, al restringir la
competencia de empresarios que puedan traer mercancías,
ellos suben el precio de las mismas (acá casi todo lo
manufacturado es importado) a niveles exorbitantes. Por
ello, extorsionan a los trabajadores con márgenes de
ganancia que rondan el 500%. Eso no se puede permitir, es un
ataque al pueblo trabajador. Quien dude de los márgenes,
compare los precios internacionales en Internet, con los que
los empresarios colocan en las tiendas, es una hiperestafa.
g) Las inversiones públicas, estímulos al sector privado
y condonaciones de deuda.
Esta política, tiene las limitantes que casi todas las
contrataciones que ofrecerá el Estado, serán entregadas a
los empresarios, quienes construirán: casas, carreteras
etc. Así, que los resultados de esas inversiones van a ser
filtrados por las ingentes ganancias que devengarán los
burgueses, gracias a la distribución de la renta petrolera,
que le llenará los bolsillos, y difícilmente retornará
como inversión productiva.
El intento de construir la horriblemente mal llamada
"economía social" (como si existiese una economía
antisocial) las cooperativas, EPS, Comunas (con su
Ministerio Oficial) y una larga lista de emprendimientos
productivos "populares" están destinados al
fracaso. Debido a que jamás podrán competir ni superar en
productividad a grandes capitales con tecnología avanzada y
explotación racionalizada de la clase obrera. La
imposibilidad de producir a escala y de contar con lo mejor
en avances técnicos induce a aumentar la explotación de
cada "emprendedor" y a tener que subsidiar o pagar
más por mercancías que produciéndose a escala saldrían más
baratas. La adoración al capital chico, es una evasión a
tareas revolucionarias relacionadas a la expropiación de
grandes capitales y a su organización y distribución
centralizada, acorde con las necesidades fundamentales de la
clase obrera. Esta continuación de la Nueva Política Económica
Bolivariana, o "Alianza Productiva" lanzada en
julio de 2008, en mi criterio no será exitosa.
h) Las nacionalizaciones
Nacionalizar el banco de Venezuela es un paso, pero,
nacionalizar la Banca y los grandes medios de producción,
es una tarea ineludible. La nacionalización (sin
indemnización) es lo que debe plantearse como medida. No se
puede seguir, y más aún con los graves niveles de pobreza,
regalando dólares a empresarios que se enriquecieron a
costa de la clase obrera. Sus inversiones, plusvalía
reinsertada en el sistema de acumulación, han sido
cubiertas varias veces. Los pasivos laborales y ambientales,
la depreciación y obsolescencia de la mayoría de las máquinas
y mobiliario a expropiar, hace innecesario cualquier tipo de
pago.
En fin, a mi juicio, la crítica desde posiciones que
expresen los valores fundamentales de la clase, son
absolutamente necesarias para la revisión o abandono de políticas
que han fracasado y que afectan directamente a las
trabajadoras y trabajadores. Nadie tiene la verdad revelada,
sólo se hacen investigaciones para aproximarnos a
realidades objetivas, que permitan entender de una manera
distinta a los opresores, el mundo que deseamos transformar.
Por ello, se plantean argumentos y acciones a favor de
trascender el sistema de explotación, que no perjudiquen a
la clase obrera y que sean útiles para aprovechar la
depresión del sistema, como arma para destruirlo. Desde ese
punto de vista, y queriendo que fueran distintas, considero
que las medidas, no apuntan en ningún aspecto a subvertir
el (des)orden de las cosas, el capitalismo.
Notas:
[1] Elio Córdova, Algunas reflexiones sobre las medidas
económicas, Disponible en http://www.kaosenlared.net/noticia/algunas–reflexiones–sobre–medidas–economicas,
Todo lo publicado de Elio, se encuentra aquí.
[2] Ver sistema de cuentas nacionales BCV, www.bcv.org.ve
[3] Leonardo Vera, De que signo es "el plan
anticrisis" de Chávez, Disponible en http://www.infolatam.com/entrada/de_que_signo_es_el_plan_anticrisis_de_ch–13030.html
Ambas citas son del artículo.
[4] Ibíd. 1.
[5] Ver estudios de la CEPAL, sobre Inversiones
Extranjeras y repatriación de capitales.
(*) Manuel Sutherland es Coordinador de Formación en
Economía Política de la Asociación Latinoamericana de
Economía Marxista (ALEM).
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