Amenaza
de cárcel para dirigentes estudiantiles
Por la
absolución a Martín Ogando y Sergio Salgado
Socialismo o
Barbarie, periódico, 23/07/04
Del 4 al 6 de agosto se llevará
a cabo el juicio oral a Martín Ogando y Sergio Salgado, consejeros
estudiantiles de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, en lo que
constituye el primer juicio a estudiantes desde la caída de la
dictadura militar en 1983.
Socialismo
o barbarie dialogó con Martín Ogando, militante de la agrupación
universitaria Praxis, sobre los hechos que motivaron la persecución
judicial y el significado político que hoy presentan.
Desde la agrupación juvenil
Ya Basta!, el MAS y el FTC nos sumamos a la lucha por la absolución
de los compañeros dirigentes estudiantiles y el desprocesamiento de
los más de 4.000 luchadores populares perseguidos por el Estado.
Convocamos a participar de la movilización y el acampe frente a los
tribunales los días 4, 5 y 6 de agosto.
SoB:
Martín, contanos como fueron los sucesos por los cuales se los esta
acusando.
Martín
Ogando:
La
causa por la cual vamos a juicio oral del 4 al 6 de agosto con el
compañero Sergio Salgado (Partido Obrero) tiene que ver con
movilizaciones que encaró el movimiento estudiantil en 1999 contra un
fraude electoral orquestado entre la Franja Morada y la anterior
dirección de la Facultad de Ciencias Sociales, muy ligada al Frepaso.
La elección dejaba todo el control del escrutinio en manos de la
junta electoral del consejo directivo, a la cual la amplia mayoría de
las agrupaciones estudiantiles no teníamos ningún tipo de acceso.
Contra esta maniobra comenzó un
proceso de movilización muy importante. La mayor parte del arco político
de la facultad decidió no presentar listas para no avalar el fraude.
Al segundo día de elección se organiza una asamblea masiva de más
de 900 compañeros, donde se resuelve el fin de la elección
fraudulenta y la convocatoria a nuevas elecciones en condiciones
trasparentes y democráticas, con control del movimiento estudiantil y
la separación de las listas a Centro de Estudiantes de las de Consejo
Directivo. Durante esta movilización se producen una serie de
incidentes y es por esos incidentes que nosotros estamos procesados.
SoB:
¿Quiénes son los que iniciaron la causa contra ustedes?
MO:
Los protagonistas de esta causa denotan rápidamente el contenido de
persecución política que tiene este juicio. Tanto contra Sergio como
contra mí no tienen ninguna prueba, sino que somos perseguidos por
ser referentes de dos organizaciones políticas acusadas de haber
impulsado la movilización. Pero lo más escandaloso son los
acusadores: la gestión de la facultad, ligada al ex decano Malimacci
(acusado de estafar a compañeros desocupados del barrio Guadalupe);
Franja Morada, que tiene un largo y oscuro historial dentro de la
universidad; el rectorado de la UBA –querellante en la causa–, con
Oscar Shuberoff a la cabeza, personaje negro de la historia de la UBA,
y el último de estos personajes siniestros es Darío Recharte, en ese
momento secretario general de la UBA, luego segundo al mando de la
SIDE durante la masacre de Plaza de Mayo del 20 de diciembre del 2001.
Es
gente de esa calaña, del riñón del grupo Sushi, los que lanzan un
ataque no contra nuestras personas, sino la lucha del movimiento
estudiantil por la recuperación de los centros de estudiantes contra
la Franja Morada.
SoB:
¿Cuál es el análisis político que hacés de este
juicio?
MO:
No se puede separar el juicio de la situación actual que estamos
viviendo. Hay un intento por parte de sectores ligados a la derecha y
el gobierno de Kirchner de criminalizar la protesta social. Blumberg
dijo que la justicia debería trabajar más. ¡Bueno, vaya si está
trabajando! Hay más de 4000 compañeros luchadores procesados.
Nosotros
vemos una prueba de fuerza entre los que queremos mantener vivas las
organizaciones que se han desarrollado al calor de la rebelión
popular del 19 y 20 de diciembre, y quienes están jugados a recuperar
la institucionalidad a costa de liquidar y sacar de las calles a las
organizaciones que luchan. En ese sentido sabemos que del 4 al 6 de
agosto no nos van a poner en el banquillo de acusados a Sergio y a mí,
sino a todas las organizaciones sociales y de lucha de la clase
trabajadora.
SoB:
En este momento están en plena campaña por la absolución. ¿Qué
actividades están llevando a cabo?
MO:
Se ha iniciado una campaña bastante intensa con los compañeros del
centro de estudiantes, a pesar del obstáculo que nos levantaron al
ponerle fecha al juicio en medio de las vacaciones. Se realizó un
foro muy importante en la facultad, con la presencia de Nora Cortiñas,
presidenta de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora y el decano de
la facultad de Sociales, Federico Shuster, ambos testigos de la
defensa en la causa. También participaron otros luchadores que están
enfrentando procesos en este momento, el "Pollo" Sobrero de
la Unión Ferroviaria, los compañeros de Subtes y compañeros de
Brukman.
La
perspectiva ahora es el juicio; del 4 al 6 de agosto vamos a realizar
un acampe frente a los tribunales convocado por el Centro de
Estudiantes y por la FUBA. Una movilización con un acto central el día
4, un festival el día 5 y una vigilia y movilización el día 6
esperando el veredicto.
SoB:
¿Qué es lo más importante que ves en esta lucha por la absolución?
MO:
Yo quiero remarcar la importancia de la unidad de todos los sectores
que tienen procesados, que tienen compañeros perseguidos, de unificar
esfuerzos. Yo creo que las medidas en común que se están planteando
desde las reuniones del Hotel Bauen son un paso adelante. Lo que se
juega acá no es el apoyo a tal o cual persona, sino conseguir que
cada compañero, el día de mañana, a la hora de salir a luchar para
recuperar su sindicato, en defensa de la universidad o por trabajo
genuino, no tenga sobre su cabeza la amenaza ya no sólo del despido o
de la persecución de la burocracia sindical, sino el peso del Estado
actuando con la represión, con la persecución y con las causas
penales.
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