El
fenómeno más dinámico entre los trabajadores
Emerge
una nueva camada de activistas obreros
Socialismo
o Barbarie, periódico, 08/06/06
Mientras
Kirchner prepara la reelección y la oposición burguesa deshoja la
margarita, la patronal festeja las fabulosas ganancias
que le asegura el acuerdo con Moyano y el gobierno.
El
pacto Kirchner-Moyano-Patronal ha logrado disminuir sensiblemente
la ola de reclamos salariales que se anunciaba a principios de año, vía
los acuerdos por gremio con la burocracia sindical. La “cifra
general” del orden del 15 al 19% de aumento, por supuesto, no
refleja las realidades de cada gremio en particular sino el acuerdo de
hambre entre el gobierno, Moyano y la patronal que puso un techo a
los aumentos y funciona de hecho como un cepo a las luchas. El
acuerdo deja unos pocos beneficiados y una amplia mayoría de
perjudicados, sobre todo en aquellos sectores que aumentaron
enormemente la productividad, la explotación del trabajo y las
ganancias empresarias, por no hablar del casi 50% de trabajadores que
siguen en “negro” o los aún millones de desocupados.
Lo
que no ha logrado el pacto gobierno-burocracia-patronal
es convencer a los trabajadores que “sean felices sin comer
perdices”: es decir, en la mayoría de los casos estos aumentos
no frenan la bronca salarial. Porque no alcanzan para recuperar lo
perdido en los últimos meses con la inflación de los productos de
primera necesidad.
Junto
con la bronca salarial, crece en la base del movimiento obrero la
experiencia y la lucha contra la burocracia, verdadero
gendarme del techo salarial. No se puede dejar de subrayar que por
debajo de la superficie está en curso un extendido proceso molecular
de elección de nuevos delegados. Los cuales, a pesar del control a
priori de la burocracia, emergen como una nueva generación de
activistas obreros, en su mayoría “ingenuos” y sin
experiencia alguna, pero que traen vitalidad a las organizaciones
de base de los trabajadores, sobre todo a nivel de fábrica.
Compañeros que comienzan a hacer una experiencia sobre bases
inicialmente “sindicales” pero que tienen los ojos y las orejas
abiertas sin prejuicios para vincularse con las corrientes de la
izquierda revolucionaria que tengan la sensibilidad y la disposición
de volcarse a este proceso. Es el caso de automotrices, del neumático,
de empresas metalúrgicas, etc.
Esto ocurre sin
desmedro de los procesos más “macro”, más visibles de emergencia
de un nuevo clasismo. Por ejemplo, en Mar del Plata los compañeros
de Nueva Alternativa recuperaron el sindicato de los no
docentes universitarios (APU) de manos de la burocracia. La agrupación
está conformada por la mayoría de los activistas de la lucha
salarial del año pasado que implicó una dura toma del Rectorado por
más de un mes. Se trata de otro avance en la recuperación de los
organismos de la clase trabajadora y que muestra que a pesar de la
estabilización del país y de que –por arriba– los proyectos
eleccionarios patronales monopolizan la vida política, por abajo
emerge un riquísimo proceso de recomposición que no se ha cortado.
Encuentro Obrero y
el ejemplo del Conlutas
Todo esto muestra que
las experiencias y la organización contra la burocracia no se ha
frenado: al contrario, han ganado en profundidad. Todos esos
activistas y luchadores necesitan un ámbito de reunión, un punto de
referencia para discutir y actuar en común contra las patronales el
gobierno y la burocracia. Esto vuelve a plantear la perentoria
necesidad de poner en pie un Encuentro Obrero de frente único de
tendencias, así como sigue pendiente la conformación de una auténtica
Tendencia Clasista realmente opositora al gobierno K.
Un claro punto de
referencia para estas tareas estratégicas es el caso del Conlutas
(“Coordinadora Nacional de Luchas”) en Brasil. Se trata de una
importante organización de la vanguardia independiente de ese país,
que más que una “coordinadora”, en realidad, configura una
experiencia de congreso o encuentro de trabajadores de carácter
permanente. Y que si bien todavía no es realmente capaz de
organizar grandes luchas, está sirviendo como punto de referencia
clasista para empujar la reorganización del poderoso movimiento
obrero brasileño.
|