China

 

Greenspan teme una crisis en China

Alertó sobre su impacto en el mundo

Reuters, 23/05/07

El ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos Alan Greenspan volvió a vaticinar que el crecimiento económico mundial no podrá mantenerse en el tiempo y advirtió que teme una "dramática contracción" de la Bolsa en China.

Al participar, mediante una teleconferencia, de un evento en Madrid, el influyente ex funcionario norteamericano dijo que el reciente auge en la cotización de las acciones de las empresas no puede mantenerse indefinidamente. "Es claramente insostenible". Habrá una corrección dramática en algún punto", sostuvo.

Greenspan, que renunció a la presidencia de la Reserva Federal el año pasado, dijo que las importaciones baratas desde China eran uno de los factores que impulsaban el crecimiento mundial, junto con la emigración de trabajadores de Europa del Este hacia el Oeste y el impacto de una menor inflación y de tasas de interés más bajas.

"En los últimos cinco años el mundo en su conjunto está creciendo más rápido que en cualquier otro momento de la historia. No puede perdurar y no perdurará porque es un ajuste extraordinario", consideró.

Greenspan dijo además que los precios de los activos globales podrían caer, pero que la economía saldría ilesa si se muestra lo suficientemente flexible como para absorber las fluctuaciones.

"Tendremos grandes caídas a determinados niveles, pero no deberían repercutir significativamente sobre los niveles de empleo o la economía real", dijo.

Los temores de Greenspan sobre la evolución de la economía china son compartidos por distintos analistas, que en el último año especularon con la posibilidad de que el gobierno de ese país podría verse tentado a echar mano a sus reservas en caso de turbulencias financieras para evitar el descontento social.

Déficit norteamericano

A comienzos de este mes, Greenspan reiteró que creía que había un tercio de posibilidades de que la economía estadounidense entrara en recesión este año.

"No hay dudas de que Estados Unidos se encamina a una disminución del ritmo [de crecimiento]. Estamos claramente teniendo problemas en el área de inversiones de capital, así como potencial en consumo, y obviamente el tema vivienda se está rezagando", había declarado en Washington.

Ayer, en cambio, se mostró un poco más optimista sobre la marcha de la economía de su país, aunque sus palabras volvieron a tener incidencia en los mercados internacionales (ver página 8).

"No estoy particularmente preocupado por el déficit de cuenta corriente", dijo, agregando que el déficit presupuestario lo preocupaba más. En su presentación en Madrid, Greenspan también se refirió a la evolución del precio del petróleo, que ayer rondaba los 70 dólares por barril.

En este punto, el ex funcionario norteamericano aclaró que "el problema del crudo no es que estemos tocando un límite o que el mundo se esté quedando sin petróleo; no es eso. El problema es el acceso al crudo".

El ex titular de la Reserva Federal ve problemas en los mercados energéticos mundiales en los próximos años si los problemas geopolíticos siguen agobiando a los principales productores de petróleo y si la inversión se mantiene en niveles insuficientes.

Greenspan dio un susto: Pronosticó una debacle china y así inquietó a los inversores

Era una buena jornada global de mercados hasta que apareció Alan Greenspan, ex jefe de la Reserva Federal de Estados Unidos y uno de los gurúes más respetados en las plazas financieras.

Convertido ya en "refutador oficial", el hombre tomó un micrófono y dijo:

l Que ve una burbuja bursátil en China, y que ese mercado va a sufrir de un fuerte recorte.

l Que prevé una caída en el precio de los activos financieros, aunque cree que esto no afectará la economía real.

Sus palabras bastaron para frustrar el ánimo alcista con que venían operando ayer la mayoría de las plazas del mundo y dieron lugar a una actitud mucho más cautelosa de los grandes inversores. Después de todo, no sólo contaba lo que dijo sino quien lo dijo.

Lo demás fue historia cantada. En Estados Unidos, el índice industrial Dow Jones, que estaba marcando un récord intradiario, pasó a ubicarse en terreno negativo y cerró con una baja del 0,11%. Lo mismo ocurrió con el S&P 500 (que repitió la figura récord/baja) y el índice tecnológico Nasdaq, que terminó un 0,42% abajo.