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Mesa y Evo intentan quebrar la movilización social

Redacción de Econoticiasbolivia, 15/05/04

En una reunión de más de tres horas y media, el Presidente Carlos Mesa y su principal aliado, el diputado cocalero Evo Morales, acordaron anoche quebrar y dividir la movilización social de la Central Obrera Boliviana (COB) mediante la aceptación parcial de algunas demandas de los sectores más radicalizados. Los sectores resisten la maniobra.

Según informó el propio Morales, al salir de Palacio, el gobierno anularía en las próximas horas el Decreto 27457 que descentraliza y privatiza paulatinamente los servicios de salud, educación y caminos, y que es uno de los ejes de la protesta de estos sectores.

Hasta ahora, los maestros urbanos y rurales, los salubristas y camineros se habían convertido en el puntal principal de la lucha de la COB por acabar con el neoliberalismo y pugnar por la nacionalización del gas y el petróleo.

Según destaca la prensa nacional, "Morales, que estuvo acompañado de cinco diputados de su partido el Movimiento al Socialismo (MAS), indicó que esta norma sólo "incendió" el país y que era necesaria su abrogación para evitar la protesta de los sectores".

En el cálculo de Mesa y Morales, la anulación del Decreto obligaría a estos sectores a retirarse de la lucha, dejando muy debilitado el movimiento liderizado por la COB, que lentamente está logrando la adhesión militante de otros sectores como campesinos, mineros y fabriles, entre otros.

En el plan gubernamental, serían los activistas sindicales del Movimiento al Socialismo (MAS) los que tendrían la tarea de convencer y presionar a los maestros urbanos y rurales, salubristas y camineros para suspender la huelga general que cumplen desde la pasada semana, levantar la huelga de hambre que llevan adelante más de 800 salubristas y retirarse de los puntos de bloqueo con los que han cortado la principal carretera de Bolivia.

Este plan, sin embargo, no sería fácil de ejecutar. "No van a poder dividir el movimiento sindical", advirtió la radical dirigente de los maestros urbanos de La Paz, Wilma Plata, quien dijo que el pacto intersindical que une a estos sectores no concluye con la anulación del Decreto de descentralización de los servicios.

"Los maestros, trabajadores en Salud y camineros tenemos nuestras propias reivindicaciones, pero también estamos luchando por mejores condiciones de vida y de trabajo. Todo está unido. El gobierno dice que no puede aumentar los salarios porque no tiene plata, y no tiene plata porque han regalado el gas y el petróleo a las transnacionales. Por eso estamos luchando para nacionalizar las minas, el gas y el petróleo, bajo control obrero colectivo", dijo al asegurar que "las bases no traicionarán a la COB".

Otro factor que limitaría la efectividad de la maniobra gubernamental es la creciente radicalidad de los sectores, que a medida que avanza la lucha social, van planteándose nuevas tareas y retos, más aún cuando otros sindicatos y fuerzas laborales se incorporan a la lucha.

Este viernes, por ejemplo, contingentes de campesinos, colonizadores, fabriles, universitarios y normalistas se plegaron a la masiva marcha que avanza hacia La Paz desde la localidad de altiplánica de Patacamaya, a 100 kilómetros de la sede de gobierno, ciudad donde se intensifican las marchas y movilizaciones de protesta.

En otras ciudades, la movilización también está en alza. En Santa Cruz, por ejemplo, una masiva marcha de la Central Obrera Departamental, compuesta por fabriles, maestros, universitarios y salubristas, recorrió varios kilómetros, protestando contra el gobierno neoliberal de Mesa.

En Cochabamba, el centro de la ciudad quedó colapsado por la protesta de miles de manifestantes del magisterio rural, urbano, salud y del servicio prefectural de caminos. Otros miles de regantes se concentraron en un cabildo en el que se determinó radicalizar sus medidas de presión si es que el Superintendente de Electricidad no se presenta en esa ciudad en las próximas horas.

En los caminos, la presión también se intensifica, con bloqueos en el Altiplano y los valles de Cochabamba. En las últimas horas, la Policía departamental de Cochabamba informó que se había suspendido hasta nuevo aviso la salida de buses hacia el interior del país por los bloqueos de caminos protagonizada por grupos de campesinos a la altura de Bulo Bulo.

En Caracollo, a 37 kilómetros de la ciudad de Oruro, los bloqueos se expandían cortando totalmente el transporte entre La Paz, Oruro y Cochabamba, quedando varados más de 200 camiones de alto tonelaje desde el miércoles al mediodía.

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