Movimiento de inmigrantes en EEUU

 

Los trabajadores inmigrantes rechazan el garrote y también la zanahoria

¡Amnistía total, ahora!

Socialismo o Barbarie, 20/04/06

La legislación represiva a los trabajadores inmigrantes que se está debatiendo en el parlamento yanqui es ya un escándalo mundial. El mismo imperialismo que utiliza el pretexto de la “democracia” y los “derechos humanos” para cometer sus fechorías, revela una vez más que –como ya había advertido Trotsky– se trata del imperialismo “más despiadadamente brutal, depredatorio y criminal”.

El capitalismo norteamericano vuelve a mostrar esta hilacha con los proyectos de legislación antiinmigrante. Así, en diciembre del año pasado, fue presentada en la Cámara de Representantes (diputados) la iniciativa legislativa "Border and Immigration Enforcement Act of 2005", más conocida como “iniciativa HR 4437”. La ferocidad de este proyecto de ley es lo que provocó la reacción masiva de los trabajadores inmigrantes.

Los puntos centrales de la “iniciativa HR 4437” son el reforzamiento de las barreras en toda la frontera sur de EEUU y, especialmente, la criminalización de los 12 millones de trabajadores inmigrantes “sin papeles” que viven en EEUU.

El gobierno yanqui se propone construir un muro a lo largo de los casi 4.000 kilómetros de frontera, vigilado por decenas de miles de guardias con la colaboración extraoficial de “voluntarios” racistas –los Minuteman–, cuyo deporte preferido es la “caza del inmigrante”. El año pasado, estos obstáculos y las cacerías han causado la muerte a casi 500 latinoamericanos... algo que por supuesto no trasciende a los medios como cuando ponen una bomba en Londres o Tel Aviv. La “iniciativa HR 4437” dispone fondos para acelerar y reforzar estas barreras, y sus guardias. Recordemos la alharaca sobre el “Muro de Berlín” que hacía la propaganda yanqui 20 años atrás. Ahora, el “Muro de EEUU” lo deja reducido a una miserable alambrada de gallinero.

Pero lo más grave es el otro eje de la “iniciativa HR 4437”, el de criminalizar la emigración. Si se aprueba esta legislación, la emigración “ilegal” va constituir un delito similar al de “invadir una propiedad”, punible con años de cárcel. Asimismo, será castigado todo el que “ayude” a cometer ese “delito”. Quien dé comida o aloje a inmigrantes, irá también a la cárcel. Lo mismo con el que reciba en su casa a su hermano o su hijo “ilegal”.

Esta legislación es tan monstruosa que el inmigrante tampoco puede recibir asistencia médica si está enfermo. Bajo pena de ser procesado, el médico no puede asistirlo aunque ese paciente vaya a morir. Los hijos del inmigrante “ilegal” tampoco pueden ir a la escuela ni recibir atención médica.

La reacción masiva ante la inhumana bestialidad de la “iniciativa HR 4437” trabó su aprobación en el congreso yanqui. Pero, casi de inmediato, los políticos norteamericanos comenzaron a delinear un “plan B”. Después del garrote, la burguesía yanqui ofreció la zanahoria.

En apariencia, la “alternativa” a la “iniciativa HR 4437” no es tan “salvaje”, pero las consecuencias finales son prácticamente las mismas. El proyecto es el de ofrecer “visas temporales” que demorarían la expulsión de los indocumentados. Pero esto no los salvaría de ser expulsados, ya que no tendría ni residencia permanente ni ciudadanía. O sea que, después de ser explotados hasta la última gota, se les daría una patada en el trasero, devolviéndolos a sus países de origen. ¡Y esta alternativa es la que apoya el “progresismo” yanqui, con el senador Kennedy a la cabeza!

Este proyecto alternativo es, en el fondo, más siniestro que el de “iniciativa HR 4437”. Uno de sus rasgos principales es el de tratar de dividir a los trabajadores inmigrantes estableciendo distintas “categorías” que recibirían diferente trato. Por ejemplo, si uno está desde hace más de cinco años, recibiría una “visa temporal”. Si llegó después, sería simplemente expulsado.

Pero esta alternativa “zanahoria” del garrote imperialista también está siendo rechazada instintivamente por las masas de trabajadores inmigrantes, incluso por los que están ya legalizados. Es que muchos de ellos tienen en sus casas parientes sin papeles y lo de las “visas temporales” aparece como una burla más. La propuesta de jornada del 1º de Mayo tiene a su favor ese sentimiento.

Contra tales maniobras, la demanda de los trabajadores es la amnistía de todos los trabajadores indocumentados. ¡Que todos sean legalizados!

Sin embargo, los proyectos “zanahoria” han tenido impacto en sectores dirigentes de las comunidades de inmigrantes. En EEUU, como en todo el mundo, sobre las masas de trabajadores y de pobres se asientan diversas pandillas de “dirigentes comunitarios”, políticos burgueses, curas y pastores, burócratas sindicales y Organizaciones No Gubernamentales, que viven a costa de “representarlos” y/o “asistirlos”.

Este sector se había también sublevado ante la “iniciativa HR 4437”, que amenazaba con llevarlos a la cárcel por dar un plato de sopa a un inmigrante (lo que es parte de su negocio). Ahora, a muchos de ellos no les parece tan malo lo de las “visas temporales”. No es de extrañarse que son también ellos los que comienzan a oponerse a la movilización del 1º de Mayo.