El
ejército estadounidense muestra síntomas de agotamiento
Cinco
años de guerra en Iraq y Afganistán ponen a prueba el ejército
voluntario
Por Will Dunham Reuters,
08/10/06
IraqSolidaridad,
24/10/06
Traducido
de Paloma Valverde
“«
Estamos en los primeros momentos de una especie de crisis que si no se
controla tendrá como resultado la quiebra de [nuestras] fuerza»,
afirmó en la Universidad de Boston el coronel retirado del Ejército
Andrew Bacevich, un experto militar. «[...] Hay que ser absolutamente
ingenuo para pensar que vamos a ser capaces de seguir cargando tanta
presión sobre las fuerzas [armadas] mucho más tiempo», añadió.”
Cinco
años de guerra en Iraq y Afganistán han dejado signos de desgaste
natural en las fuerzas armadas estadounidenses, poniendo de manifiesto
preguntas sobre su capacidad para mantener los actuales niveles de
operaciones y de enfrentamiento a posibles nuevas crisis [1].
La invasión de Afganistán liderada por EEUU, ordenada tras los
atentados del 11 de septiembre, comenzó el 7 de octubre de 2001, lo
que empujó al combate a todos los voluntarios de las fuerzas armadas
estadounidense que siguió incólume allí y, desde marzo de 2003, en
Iraq.
Altos
mandos militares, incluido el Jefe del Estado Mayor del Ejército, el
general Meter Schoomaker, han advertido de la falta de capacidad
operativa de algunas unidades y de la falta de equipamiento, con
tanques Abrams, vehículos de combate Bradley y otros
equipos machacados por el uso excesivo en el campo de batalla. Muchos
Soldados se enfrentan a un segundo y tercer gran periplo de combates y
menos tiempo [en EEUU] entre cada despliegue. Al mismo tiempo, la tasa
de bajas [de la tropa] estadounidense aumenta, con más de 2.730
soldados fallecidos en Iraq [2] y más de 280 en Afganistán.
Quiebra
de la fuerza
"[...]
Estamos en los primeros momentos de una especie de crisis que si no se
controla tendrá como resultado la quiebra de [nuestras] fuerza",
afirmó en la Universidad de Boston el coronel retirado del Ejército
Andrew Bacevich, un experto militar. "[...] Hay que ser
absolutamente ingenuo para pensar que vamos a ser capaces de seguir
cargando tanta presión sobre las fuerzas [armadas] mucho más
tiempo", anadió.
Los
últimos cinco años indican que por primera vez toda la fuerza
voluntaria se ha puesto a prueba mediante una guerra prolongada. La
conscripción [3] terminó en 1973. El Secretario de Defensa,
Donald Rumsfeld, se niega a volver a él. El analista de Defensa del
Instituto Lexington, Loren Thomspon, afirma que la Marina es el
único cuerpo que está en plena forma en unas fuerzas armadas de 1,42
millones de soldados en activo a tiempo total y 830.000 reservistas a
tiempo parcial. "Las fuerzas sobre el terreno -el Ejército [de
Tierra] y el Cuerpo de Marines- sufren reducción de plantilla y pasan
por momentos difíciles. Los aviones de la Fuerzas Aérea se han
vuelto casi prehistóricos, de tan viejos que son", afirma.
Por
el contrario, Los oficiales del Pentágono defienden el buen estado
del ejército. "[...] Somos un país en guerra", afirma el
portavoz del Pentágono Bryan Whitman: "[...] Las fuerzas armadas
de esta nación no sólo hacen su trabajo bien, sino que están
llevando a cabo sus misiones a la perfección".
El
ejército ha realizados esfuerzos titánicos por mantener el actual número
de tropas, 141.000 en Iraq [4] y 21.000 en Afganistán. Por
ejemplo, se ha tenido que posponer la salida prevista de 4.000
brigadas del combate de elite del ejército desde Iraq y acelerar el
despliegue de una tercera [brigada] [5]. Con el Ejército [de
Tierra] y el Cuerpo de Marines debilitados en extremo, el Pentágono
ha convertido a miles de miembros de la Marina y de la Fuerza Aérea
en tropas de tierra para hacer trabajos como conducir camiones y
custodiar detenidos.
Otro
problema candente
Una
gran preocupación de los altos mandos estadounidenses es la confianza
en la capacidad del ejército para responder a las hostilidades en
otros puntos calientes internacionales, como son Irán o Corea del
Norte.
Con
la mayor parte del Ejército [de Tierra] y de los marines desplegados
en Iraq y en Afganistán, la Marina y el Ejército del Aire deberían
llevar el peso [de la batalla], es decir, los ataques aéreos y el
bloqueo naval, más que una gran responsabilidad por parte de la
fuerzas terrestres. Una amplia movilización de cientos de miles de
miembros de la Guardia Nacional y de la Reserva también podría
considerarse necesaria, pero tal medida se arriesga a la crítica
desde las comunidades estadounidenses, de las cuales soldados a tiempo
parcial podrían ser apartados de su vida civil. El Pentágono ya ha
hecho gran uso de ellos: este mismo año pasado entrenaron al 40 por
ciento del ejército iraquí.
El
ejército ha obligado a 75.000 soldados, incluidos 11.000 en la
actualidad, a continuar prestando servicio tras la finalización de su
período voluntario, de acuerdo a la política "detener las pérdidas",
diseñada para mantener completamente preparadas a las unidades
creadas para ir a Iraq y Afganistán. A algunos soldados se les puede
obligar a continuar en el ejército 18 meses más, una medida que
algunos críticos en el Congreso denominan "Plan oculto".
El
analista de defensa de la Institución Brookings, Michael
O'Hanlon, señaló otros síntomas de agotamiento en las tropas, lo
que incluye un aumento de la tasa de divorcios y suicidios y el
abandono [del ejército] de oficiales de graduaciones medias.
"[...] Creo que la moral está por los suelos y en peligro de que
muy pronto las cosas empeoren", afirma O'Hanlon.
De
momento, el ejército ha conseguido su objetivo de retención,
convenciendo a las tropas actuales de volverse a alistar para prestar
más servicios.
El
reclutamiento ha sido más problemático. El ejército perdió su
objetivo en el año fiscal 2005, pero el objetivo de desplegar 80.000
reclutados en 2006 se logró gracias a las medidas tomadas para
convencer a nuevos voluntarios, lo que incluye incentivos económicos,
más reclutadores, aumento del tope de edad para alistarse hasta los
42 años y la aceptación de más reclutas con antecedentes penales y
con el nivel más bajo posible. El Ejército de la Guardia Nacional y
el Ejército de la Reserva se quedaron ambos un poco por debajo de sus
objetivos de reclutamiento para 2006 tras no haberlos logrado tampoco
en 2005.
Notas
de IraqSolidaridad:
1.
Véase en IraqSolidaridad: Robert Burns: El Ejército de EEUU, al límite
- Will Dunham: El Ejército estadounidense obliga a 50.000 soldados a
prolongar su periodo de servicio | Mark Benjamín: La guerra en Iraq
consume al Ejército estadounidense | Abid Mustafa: La resistencia
iraquí fractura las relaciones de Bush con el Ejército
estadounidense | Ann Scott Tyson: Dos años después, la guerra de
Iraq agota el poder militar de EEUU
2.
Véase en IraqSolidaridad: Carlos Varea: Cifra record de bajas
estadounidenses en combate en Iraq. En la primera quincena de octubre
EEUU ha perdido una medía de cuatro soldados al día y enlaces
relacionados.
3.
Reclutamiento para el servicio militar obligatorio en EEUU.
4.
En la actualidad, casi 150.000 efectivos.
5.
A fin de recuperar este verano el control sobre Bagdad, véase en
IraqSolidaridad: Carlos Varea: La violencia sectaria en Iraq y la
nueva guerra en Oriente Medio. EEUU incrementa el número de tropas en
Iraq y 'reocupa' Bagdad.
[1].-
* Will Dunham es analista de la agencia internacional de noticias
'Reuters'.
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