Francia
sigue aferrada al “NO” en el referendo sobre la Constitución de
la Unión Europea
Argenpress,
14/04/05
“Pese
al intento del presidente francés, Jacques Chirac, de potenciar el
“SÍ” en el referendo del próximo 29 de mayo sobre la Constitución
de la Unión Europea (UE), la mayoría de los franceses parece hoy
seguir aferrada al “NO”.
Luego
de 14 sondeos seguidos, los partidarios del rechazo a la Carta Magna
de la UE siguen en ascenso. El último de esos estudios, realizado por
el instituto CSA los pasados día 12 y 13, sitúa en un 55% a quienes
se oponen a la aprobación del documento.
Asimismo,
esa encuesta muestra un 48% de interrogados indecisos, un margen sobre
el cual deberá trabajar con más fuerza el gobierno centroderechista
para evitar que Francia se convierta en el primer país de la UE en
oponerse a su Constitución.
El
avance más preocupante del NO se registra entre los jóvenes con
edades entre 18 y 24 años, el 54% de los cuales rechaza la Ley
Fundamental comunitaria, para un aumento de un 14 punto con relación
a sondeos anteriores.
La
víspera, otra encuesta del instituto Ipsos indica que el 52% de los
indagados se opone al texto constitucional, aunque el 30% de ellos
podría cambiar de opinión.
Pero
la mayor reticencia, de acuerdo con Ipsos, se encuentra, sobre todo,
entre los jóvenes de los sectores más desfavorecidos por los cambios
que supondría la entrada en vigor en el 2006 de esa Carta Magna.
La
campaña del gabinete centroderechista tiene lugar en medio de un
rechazo creciente a las reformas sociales aplicadas por el equipo del
primer ministro Jean-Pierre Raffarin, incluido el aumento de la edad
de jubilación y los pagos al fondo de pensiones.
Además,
casi un millón de empleados galos se lanzó recientemente a las
calles para pronunciarse contra los planes del gobierno para
flexibilizar la jornada laboral semanal de 35 horas.
Ese
ambiente de protestas, en las cuales participa con más fuerza la
porción de menos edad de la masa laboral, llevó a Chirac a organizar
un debate televisivo con 80 jóvenes para explicar las bondades de la
Ley Fundamental europea.
Medios
de prensa locales comentan que un rechazo a esa Constitución sería
un duro golpe para las aspiraciones de París a sacar provecho de las
posiciones de privilegio que le concede a este país ese documento, en
especial, en el Consejo Europeo.
La
votación en el Consejo sería, de acuerdo al proyecto constitucional,
por estados y por población, lo cual favorece a las llamadas naciones
grandes europeas como la propia Francia, Alemania, Italia y Gran Bretaña.
Además,
un fracaso del referendo, convocado por el propio Chirac, sería un
duro revés para sus aspiraciones de mantenerse en el Palacio de
Eliseo, tras las elecciones presidenciales del 2007.
Por
otro lado, aunque de forma oficial, tanto la gobernante Unión para un
Movimiento Popular, como el Partido Socialista, mayor fuerza
opositora, apoyaron oficialmente la Carta Magna de la UE, muchos de
sus miembros se muestran contrarios a esa línea.
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