"Ley de seguridad
nacional" contra la resistencia
y para la ocupación militar
CSCAweb, 09/07/04
El nuevo "gobierno" tutelado de Iraq ha anunciado,
conforme al principio pactado de la "seguridad" como
prioridad que ha de mover la acción de su mandato hasta el próximo
enero de 2005, la aprobación de una ley de seguridad nacional por la
que el "primer ministro" Iyad Allawi queda investido de
plenos poderes para decretar restrictivas medidas de seguridad
interna. La aprobación de la ley se producía al mismo tiempo que en
el centro de Bagdad se llevaban a cabo acciones casi simultáneas de
ataques con morteros y enfrentamientos directos entre combatientes de
la resistencia y efectivos de la recién creada policía local iraquí
en una zona muy próxima a la "zona verde" y a plena luz del
día [1].
La ley prevé que
el primer ministro pueda decretar, por ejemplo, el estado de
emergencia en diversas partes del país durante un periodo de 60 días
renovables cada 30; aplicar la ley marcial, imponer toques de queda,
practicar la pena de muerte, así como llevar a cabo detenciones
contra "sospechosos de organizar acciones violentas",
practicar escuchas telefónicas o prohibir el derecho de asociación.
La nueva ley ha sido comparada por los propios nuevos
"ministros" iraquíes de Justicia (Malik Dohan al-Hasan) y
de Derechos Humanos (Bujtiar Amin), encargados de su presentación pública
el pasado 7 de julio en Bagdad, con la Patric Act, la legislación de
excepción adoptada por la Administración Bush tras los sucesos del
11-S y que ha sido y sigue siendo extensamente criticada en el
interior de EEUU precisamente porque supone la limitación sin
precedentes de los derechos civiles y una amplia restricción de las
libertades públicas en beneficio de atribuciones y poderes antidemocráticos
a las fuerzas de seguridad internas. Esa misma lógica es, de hecho la
que recorre el espíritu y la forma de esta primera ley "iraquí"
tras la farsa del "traspaso de poder" a una autoridad títere
elegida por EEUU cuya caracterización más destacada es precisamente
la de la funcionalidad otorgada al "primer ministro" Allawi,
a la sazón, experto en cuestiones de servicios de seguridad y de
inteligencia y colaborador histórico de la CIA, el M-16 y otros
servicios secretos incluidos árabes [2].
Una ley contra la resistencia y para la ocupación
La nueva ley de seguridad nacional está pensada, en primer
lugar para legitimar los resortes represivos aplicables contra el
creciente poder de la legítima resistencia armada y social iraquí.
Equiparada ésta con "terrorismo" como conviene a EEUU [3],
la ley se sirve de la misma terminología que ha recreado el discurso
globalizado de la "seguridad" en el marco de la "guerra
total contra el terrorismo internacional" aplicada por la
Administración Bush con el consenso implícito de las grandes
potencias internacionales y del Consejo de Seguridad de Naciones
Unidas (CS). Tanto el gobierno títere de Iraq como la Administración
Bush pretenden adecuar en Iraq el discurso y las prácticas conforme a
los parámetros que exige la dominación estadounidense.
Además de los poderes para promulgar el estado de
emergencia, con el acuerdo del presidente y de los dos vicepresidentes
y con la intervención directa de policías o militares iraquíes para
aplicarlo, la ley prevé que "[...] las fuerzas de seguridad
iraquíes puedan pedir ayuda a las tropas internacionales estacionadas
en Iraq en caso de que no sean capaces de hacer frente al
peligro" [4]. Con ello no solo se vuelve justificar, esta vez vía
legislación interna, el mantenimiento de la presencia de las tropas
de ocupación extranjeras en el país sino que abre la vía
"legal" para su intervención activa en el control del país,
tal y como ya quedó estipulado previamente en la último resolución
1546 del Consejo de Seguridad de NNUU (CS) [5] y formalizado en la
petición expresa que el "primer ministro" Allawi remitió a
sus miembros antes de su aprobación siguiendo el dictado
estadounidense.
Inmunidad para las tropas y a los mercenarios estadounidenses
de la seguridad privada
Lo que la ley no especifica es si es de aplicación a las
tropas extranjeras presentes en Iraq que seguirán siendo quienes
lleven a cabo el control efectivo en las operaciones militares, las
detenciones masivas de iraquíes, la custodia de los presos y presas
iraquíes en los centros de detención y prisiones y el control de
efectivo del país. A este respecto merece la pena recordar que el
procónsul Bremer, pocos días antes de abandonar Iraq, emitió nuevas
órdenes que especificaban que tanto los miembros de las fuerzas
militares como los empleados estadounidenses de la seguridad privada
tendrán inmunidad respecto a la legislación de Iraq una vez adoptada
la "transferencia de poder". Esta nueva regulación se suma
a otras 97 que el propio Bremer catalogaba como "instrucciones de
obligado cumplimiento o directivas para el pueblo iraquí".
El ordenamiento legal bajo el gobierno títere de Allawi
La cuestión no es baladí pues, a falta de ordenamiento jurídico
legal, una vez desmantelado el sistema político iraquí, le legislación
que va a moldear el futuro de un Iraq sin soberanía está ya marcado
por esas órdenes y regulaciones instauradas por Bremer y que en ningún
caso podrán ser revocadas por ningún gobierno local emanado de la
ocupación.
Así, por ejemplo, las regulaciones afectan a cuestiones tan
trascendentales como la comisión electoral designada por la APC que
será quien ostente la autoridad para autorizar a partidos y
candidatos en las previstas elecciones de enero de 2005 y cuyas normas
establecen importantes restricciones a la participación política y a
la financiación por parte de organizaciones iraquíes que puedan
tener vínculos con la resistencia o con milicias armadas, mientras
autoriza sin restricción alguna la financiación de partidos iraquíes
con fondos extranjeros procedentes de EEUU, Arabia Saudí o Irán [6].
Asimismo, la APC ha dejado seleccionados y nombrados por un término
de cinco años a los cargos de las jefaturas de los servicios de
seguridad y de inteligencia así como a "inspectores
generales"estadounidenses en cada uno de los ministerios del
nuevo "gobierno" iraquí igualmente con mandato para cinco años,
con poderes plenos cuyos dictados, habida cuenta del grado de
dependencia política y económica del gobierno títere respecto de
EEUU, se impondrán sobre la "autoridad" formal de los
nuevos ministros.
En el sector de la economía, las regulaciones de Bremer imponer un límite
del 15% a los impuestos, garantizar la propiedad extranjera de
cualquier entidad o empresa iraquí en el país al 100%, aplicar
regulaciones para adecuar a Iraq a las condiciones de la Organización
Mundial del Comercio (OMC) y mantener la inmunidad para las compañías
que han recibido los contratos de petróleo antes de la
"trasferencia de poder" como la Halliburton [7].
La Unión Europea y la "reconstrucción" de Iraq
Al igual que en Palestina, y una vez obtenido el respaldo de
NNUU, el G-8 y la OTAN al proyecto de dominación de Iraq, EEUU ha
reservado a la UE la funcionalidad de contribuyente en calidad de
"donante" para la reconstrucción de Iraq. Con este fin,
Iyad Allawi se reunirá con los ministros de Exteriores de la UE el próximo
lunes en Bruselas tras la invitación cursada por la presidencia
holandesa. Con ello, la Europa oficial formalizará públicamente no
solo el reconocimiento de la UE al nuevo "gobierno" iraquí
sino el respaldo al proceso neocolonial que EEUU ha reabierto en Iraq
y su directa implicación en él. A finales de junio, la Comisión
Europea ya recomendó destinar 200 millones de euros anuales a la
"reconstrucción" del país así como establecer relaciones
con Iraq. Igualmente, el Fondo Monetario Internacional reconoció el
pasado 7 de julio al "gobierno" iraquí abriendo la veda
para la concesión de créditos millonarios que aumentarán la ya
vertiginosa deuda externa del país antes de que el pueblo de Iraq
pueda recobrar no ya su soberanía sino las mínimas infraestructuras
de su Estado destruidas por dos guerras y una ocupación.
Notas:
1.Véase en CSCAweb: Diario de la resistencia iraquí de 7 de
Julio de 2004
2. Véase en CSCAweb: Las cosas claras: EEUU impone a un
hombre de la CIA como primer ministro de Iraq y desautoriza al enviado
de Naciones Unidas
3.Véase en CSCAweb: Loles Oliván: La OTAN sanciona en
Estambul el fraude del "traspaso de poder" en Iraq y esboza
su proyecto de intervención global en Oriente Medio - Carlos Varea:
EEUU aumentará su presencia militar en Iraq y mantendrá al país
desmilitarizado
4. La Vanguardia, 8 de julio de 2004
5. Véase en CSCAweb: EEUU preserva en el nuevo borrador de
resolución el pleno control sobre sus tropas en Iraq, imposición
aceptada por el gobierno de transición designado esta semana y El
Consejo de Seguridad aprueba en una nueva resolución el fraude de la
"transferencia de poder" en Iraq - Resolución 1546 del CS
de NNUU sobre Iraq aprobada el 8 de junio 2004
6.
Bennis, P.: "Paying
the Price: The Mounting Cost of the Iraq War", Institute for
Policy Studies, 5th July, 2004 en www.ips-dc.org).
7.
Ibidem. Véase en CSCAweb: Loles Oliván: Bremer abandona
Iraq entre acusaciones de opacidad y fraude por parte de la Autoridad
de ocupación en la gestión de los ingresos del petróleo iraquí.
|