Lecciones de los sucesos de agosto
Por Carlos Varea
CSCAweb, 15/08/04
No se ha hecho público
el nombre de los 1.300 participantes -ni cómo han sido seleccionados
ni a quién representan- en la denominada "Conferencia Nacional
Iraquí" inaugurada tras un aplazamiento previo el domingo 15 de
agoto en Bagdad. La convocatoria ha sido promovida por los ocupantes y
el nuevo gobierno Allawi, y de ella deberá surgir un parlamento no
electo según el calendario y el procedimiento fijado en noviembre de
2003 por la Administración Bush. La reunión ha estado marcada por la
realidad del país, el de una guerra abierta y generalizada contra los
ocupantes y sus instancias designadas: proyectiles de mortero mataban
a una persona y herían a otras 17 personas al impactar en la
denominada "Zona verde" de la margen derecho del Tigris, que
aloja a las embajadas de EEUU y Reino Unidos, y buena parte de las
dependencias gubernamentales iraquíes, y donde se celebraba la reunión.
Poco antes, la Conferencia había sido inaugurada por el enviado
especial de Naciones Unidas, Asharf Qazi, un gesto más de la sumisión
del organismo internacional ante la determinación de EEUU y el Reino
Unido de legitimar la ocupación. Un centenar de participantes abandonó
la reunión en protesta por los ataques contra Nayaf y otras ciudades
[1].
La reunión de Bagdad se produce además en un momento de
espera en los combates entre los milicianos seguidores del clérigo
Moqtadar as-Sadr -calificado por los medios de comunicación
occidentales como radical- y las fuerzas estadounidenses en Nayaf, a
donde este fin de semana acudían 10.000 iraquíes (también
procedentes de Faluya con ayuda humanitaria) para sumarse a la defensa
de la mezquita del Imán Alí, santuario del Islam shi'í, donde se
encuentra as-Sdr y sometida a asedio por los marines. En un gesto patético
e indigno, el sábado, 13 el gobierno Allawi -una instancia designada
por los ocupantes, sin legitimidad alguna ni fuerzas propias-
anunciaba el asalto final a Nayaf tras una nueva negociación
fracasada con as-Sadr, un asalto que deberán llevar a cabo, claro está,
... las fuerzas estadounidenses.
La Asociación de Ulemas Musulmanes, la máxima instancia
sunní de Iraq, ha prohibido a los musulmanes mediante un edicto
religioso (fatua) "[...] toda colaboración con las fuerzas de
ocupación y el asesinato de sus propios hermanos y
conciudadanos", advirtiendo a los miembros de la policía iraquí
y Guardia Nacional (el nuevo ejército iraquí) de la condena que
supone "[...] combatir con los ocupantes y participar en el
derramamiento de la sangre de sus hermanos". La AUM calificaba
además de genocidio el asalto estadounidense a Nayaf en su comunicado
del jueves, 12, indicando:
"Lo que está sucediendo en Nayaf a manos de las fuerzas
estadounidenses no es nada más que un genocidio y actos criminales
prohibidos por la sharia [ley islámica] y las leyes civiles, y atañe
a cualquiera que rechace la ocupación." [2].
Un gesto de solidaridad con los habitantes de las ciudades
atacadas del centro y sur de Iraq que expresa la unidad
intercomunitaria contra la ocupación, como ocurriera con anterioridad
con el asedio a Faluya.
EEUU, el clero y el 'factor' shi'í
Durante este primer año de ocupación la actitud del clérigo
as-Sadr ante la ocupación ha sido extremadamente ambigua y ha estado
muy mediatizada por el juego de poder dentro de la jerarquía
religiosa shi'í -con el factor añadido de la implicación de Irán
en éste. En ningún caso, al menos hasta la rebelión de agosto, cabía
identificarle a él o sus seguidores como integrantes de la
resistencia política o militar a la ocupación, que cabe caracterizar
por su negativa a aceptar, no ya la propia presencia militar
extranjera, sino los mecanismos e instancias impuestos por EEUU para
legitimar y perpetuar la propia ocupación, en concreto el proceso
puesto en marcha el 28 de junio, conocido como de "transferencia
de poder" y el denominado "Gobierno Interino" de Iyad
Allawi surgido de aquél.
Antes ya de la guerra de agresión de EEUU y sus aliados
contra Iraq se pudo constatar que la Administración Bush primaba las
relaciones con la jerarquía religiosa shi'í y con las organizaciones
confesionales asociadas a ella, particularmente el Congreso Supremo de
la Revolución Islámica en Iraq (CSRII), formación directamente
vinculada a Irán, a costa de otros interlocutores históricamente
vinculados a Washington y Londres (además de a Israel) en sus planes
de asedio y derrocamiento del régimen iraquí, particularmente las
formaciones kurdo-iraquíes de Talabani (Unión Patriótica del
Kurdistán) y de Barzani (Partido Democrático del Kurdistán). El
CSRII había participado -cuando menos ya abiertamente- desde el
verano de 2002 en las reuniones preparatorias de los planes de invasión
de Iraq y, una vez ocupado el país, se integró en el Consejo
Gubernativo designado por el administrador civil Bremer en junio de
2003. En el transcurso de este primer año de ocupación EEUU y Reino
Unido han favorecido a sus interlocutores shi'íes en momentos muy
concretos, por ejemplo, a la hora de fijar el documento final de la
denominada Constitución interina, aprobada en marzo de 2004. La lógica
de tal proceder (además del obligado ajuste de las reivindicaciones
de los colaboracionistas kurdos a las presiones de Turquía, otro
aliado de EEUU en la región) se basada precisamente en la consideración
de que la jerarquía religiosa shi'í y sus paraguas políticos podían
controlar a la comunidad que, como decíamos, se considera la más
numerosa de Iraq y las más hostil al anterior régimen.
En una entrevista difundida durante el fin de semana del 5 y
6 de julio de 2003 en la cadena al-Jazeera, el líder del CSRII, Bakr
al-Hakim, reafirmó la fatua emitida anteriormente por varios ulemas
si'íes prohibiendo la participación en la resistencia armada contra
las fuerzas de ocupación de Iraq: "Antes de optar por la lucha
armada hay que explorar la vía del diálogo [con EEUU]", indicó
[3]. Tras su muerte en atentado en agosto del pasado verano, la figura
principal del shi'ísmo iraquí el gran ayatollah as-Sistani -de
origen iraní- se acomodó igualmente a los ocupantes, ofreciendo a éstos
la sumisión de la comunidad a la ocupación y su aceptación del
proceso de "transferencia de poder" de finales de junio.
As-Sader frente a la ocupación
As-Sadr ha procurado durante este año hacer valer sus dos
principales triunfos: el primero, representar al shí'ismo árabe-iraquí,
no proveniente o sometido a Irán; y el segundo, no apoyar
abiertamente la ocupación. Tolerado e incluso cortejado por Paul
Bremer, as-Sadr mantuvo sin embargo en pide de guerra a los milicianos
del Ejército del Imán al-Mahdi, su propia milicia creada tras la
invasión, durante la primavera en las ciudades del centro-sur de Iraq.
Tras 10 tras semanas de combates, los militares estadounidenses y as-Sadr
alcanzarían un acuerdo de cuatro puntos a finales de mayo para la
salida de su milicia de Nayaf y Kufa. Unos días después, as-Sadr se
entrevistó en Nayaf con el gran ayatollah as-Sistani, y el 16 de
junio llamaba a sus seguidores a poner fin a la revuelta [4].
Aparentemente as-Sadr había logrado su objetivo: demostrar que era él,
y no el CSRII y as-Sistani, quienes controlaban a la comunidad shi'í,
además de acomodarse adecuadamente -y ser reconocido- dentro de la
jerarquía religioso shi'í.
Tras ello, as-Sadr aceptó con reticencias el fraudulento
proceso de "transferencia de soberanía" del 28 de junio e
insinuó su disposición a participar en las elecciones de 2005, si
bien ya anunció previamente al estallido de los actuales combates que
no participaría en la convocatoria de la Conferencia Nacional Iraquí,
al igual que la Asociación de Ulemas Musulmanes [5].
Pese a ello, varios incidentes a finales de julio con fuerzas
italianas y marines -recién desplegados en la zona y, al parecer,
particularmente agresivos- en Nasiriyah y Nayaf fueron el detonante de
lo que ha sido esta nueva y violenta revuelta de agosto.
Los combates se extendieron a Basora, Diwaniya, Kut,
Naseriyah y Bagdad (barrios de Shu'ala y Medina as-Sadr), además de a
Nayaf, donde reside as-Sadr y cuyas partes este, oeste y sur (y
parcialmente la norte, donde se localiza el cementerio, el mayor del
mundo islámico) quedaron bajo control miliciano. El lunes, el Pentágono
optó por arrebatar a Polonia el mando militar del contingente
multinacional de dos de las cinco provincias del centro del país bajo
su control, las de Nayaf y Qasidiyah [6].
Muy significativamente, por primera vez en seis años as-Sistani
abandonaba Nayaf supuestamente para recibir tratamiento médico en
Londres, algo que hasta la propia prensa estadounidense ha
interpretado como la concesión por su parte de "luz verde"
para el asalto por parte de los marines a esta ciudad sagrada para el
Islam shi'í y el aplastamiento de la revuelta, incluida la eliminación
definitiva de as-Sadr [7]. As-Sistani no ha condenado en ningún
momento el asalto a Nayaf, ciudad que es también sede de su propio
ejercicio religioso.
Guerra generalizada en el sur
Durante estas dos semanas primeras de agosto, tanto las
fuerzas estadounidenses como las británicas han recurrido al
bombardeo aéreo de ciudades y barrios. Por primera vez, las fuerzas
estadounidenses han pedido a los habitantes que evacúen una ciudad -Nayaf-
antes de proceder a su asalto [8].
Los británicos bombardearon con aviones tres barrios de
al-Amara durante tres horas en la madrugada del 10 al 11 de agosto (de
"uso apropiado de la fuerza", calificó el ataque un
portavoz militar británico [9]), con una estimación inicial de seis
iraquíes muertos y 15 heridos, según fuentes hospitalarias, quedando
interrumpido el suministro eléctrico; en combates preliminares
iniciados el domingo, 1 de agosto en esta ciudad habrían muerto 15
personas y 78 resultado heridas [10]. Al-Amara, situada a 365 kilómetros
al sur de Bagdad, es la capital de la provincia de Maysan, al norte de
la de Basora, y ha sido escenario de recurrentes ataques contra tropas
británicas en los últimos meses, lo cual es demostrativo de que la
actividad insurgente comenzaba a regularizarse en el sur del país
antes de la actual revuelta de as-Sadr -al igual que los ataques a la
infraestructura petrolífera en los dos ramales al sur de Basora, por
los que se exporta en la actualidad la práctica totalidad del crudo
iraquí (ver más adelante).
El Reino Unido ha perdido a otros dos militares en el
transcurso de esta primera quincena de agosto en Basora: el primero,
el día 9 en una emboscada contra varios vehículos militares que causó
además varios heridos entre los británicos; el segundo, el día 12,
al explotar una bomba al paso de un convoy militar, ataque en el que
resulto gravemente herido otro soldado [11]. Patrullas y bases británicas
han estado siendo atacadas con armas ligeras y fuego de mortero desde
el primero de agosto [12]. Al menos cinco militares británicos
resultaban heridos el lunes, 9 en enfrentamientos en las calles de
Basora [13]. [En la foto, milicianos de la resistencia iraquí
(armados con fusiles de asalto AK-47 kalashnikov y un lanzagranadas)
hacen frente a las tropas de ocupación británicas en el sur de
Basora]
En la localidad de Numaniyah, al noroeste de al-Kut (capital
de la provincia de Wasit, al este de la de Babilonia), un convoy de
fuerzas ucranianas era atacado con bomba el martes, 10 [14]. Los
insurgentes tomaban el control de la capital provincial combatiendo a
las tropas polacas y los miembros de la Guardia Nacional iraquí el miércoles,
11, con una balance de bajas "en ambos bandos" desconocido;
la aviación estadounidense bombardeaba a continuación la ciudad,
causando varias decenas de muertos [15].
El martes, 10 era igualmente bombardeada con proyectiles de
mortero la base del contingente japonés en Samawah, capital de la
provincia de al-Mutanna, a 40 kilómetros al sur de Bagdad y al oeste
de la de Basora, sin causar bajas [16]. Samawah había sido elegida
por el gobierno japonés para el despliegue de su contingente por ser
considerada una ciudad segura. La zona está bajo control holandés,
con 1.300 efectivos. Precisamente, en ar-Rumayhath, en las
proximidades de la base del contingente holandés en Samawah, el sábado
perdía la vida un policía militar de esta nacionalidad de 29 años
en enfrentamientos con insurgentes, el segundo holandés muerto en
Iraq; otros cinco resultaban heridos graves. Y también cerca de esta
ciudad, moría por la explosión de una bomba un capitán ucraniano el
domingo [17].
En Hilla (capital de la provincia de Babilonia, al sur de
Bagdad) al menos 14 iraquíes morían en enfrentamientos con las
tropas polacas el sábado, 14 [18]. Tres bases polacas -Zulú, Delta y
Lima- habían sido bombardeadas con proyectiles de mortero el domingo,
8 sin causar bajas.
Combates en las zonas oeste y norte
Los combates en el centro y sur del país han hecho olvidar
otros frentes abiertos. Faluya era nuevamente bombardeada por aviones
estadounidenses en la madrugada del miércoles, 11, con un balance de
cuatro muertos y otros tantos heridos, según informan fuentes
hospitalarias de esta ciudad. Varias casas fueron destruidas [19].
Cuatro civiles resultaban muertos y tres más heridos durantes los
combates mantenidos por insurgentes y marines el jueves, 12 en la
parte este de la ciudad, en el barrio de al-Aaskari [20].
En la capital provincial, ar-Ramadi, fuentes médicas
informaban el sábado de tres muertos en combates entre insurgentes y
tropas de EEUU [21]. Al este, en Bagdad, la "Zona verde" y
el ministerio de Cultura -barrio de al-Rustamiya- eran bombardeados
intensamente el martes, 10 [22], además del ataque del domingo, tras
la apertura de la Conferencia Nacional.
Samarra era bombardeada intensamente por la aviación de EEUU
con proyectiles de 250 kilos en la madrugada del viernes al sábado.
Estos ataques y enfrentamientos en tierra posteriores en esta ciudad
situada a 100 kilómetros al norte de la capital han causado la muerte
al menos a 13 iraquíes, muchos de ellos menores y mujeres, según
fuentes hospitalarias; medio centenar de viviendas y el ayuntamiento
han sido destruidos en los ataques [23].
Fuertes enfrentamientos entre insurgentes y fuerzas
estadounidenses de la Brigada Stryker auxiliadas por iraquíes se han
mantenido también en Mosul desde la primera semana de agosto. 12
soldados estadounidenses resultaron heridos y un número indeterminado
de insurgentes muertos. Portavoces militares de las tropas de ocupación
describieron combates prolongados en varios puntos de la ciudad, en
ambas riberas del río Tigris, con asaltos por parte de los
guerrilleros de distintos edificios y ataques "[...] con
morteros, granadas autopropulsadas, AK-47 y bombas de fabricación
casera en una serie de ataques coordinados [...]" que implicaron
entre 30 y hasta más de 100 insurgentes [24]. También al norte, en
las proximidades de Kirkuk, un iraquí moría por fuego estadounidense
tras una emboscada este sábado a un convoy militar [25].
También durante estas dos primeras semanas de agosto, los
ataques a la infraestructura petrolífera han sido recurrentes, tanto
en el oleoducto del norte Kirkuk-Ceyhan (sabotajes los días 3 y 5
-tres acciones en la jornada que determinan nuevamente la paralización
total de las exportaciones por esta vía), como en el sur (un ataque
el día 9 de agosto en la principal vía de suministro de las
terminales al sur de Basora reduce las exportaciones iraquíes de
crudo a la mitad -poco más de un millón de barriles al día) [26].
Por su parte, los trabajadores del sector petrolífero de
Nasiriyah informaban en un comunicado emitido el miércoles, 11 de
agosto de que habían parado las operaciones de bombeo de derivados
refinados y gas licuado a Bagdad "[...] en protesta por la
conducta inhumana del gobierno interino [presidido por Allawi] y su
cooperación con las fuerzas de ocupación en el saqueo de la ciudad
santa de Nayaf" [27]. Como en otros puntos del país, miles de
manifestantes protestaron asimismo en las calles de esta ciudad contra
Allawi, al que calificaron de "agente estadounidense".
Balance de bajas
Como se aprecia, no es exagerado afirmar que la práctica
totalidad del territorio iraquí está en guerra entre insurgentes y
ocupantes. Sin embargo, pese a la sublevación den curso de as-Sadr,
EEUU sigue registrando más bajas en combate en las provincias del
centro, occidente y norte del país, particularmente en la de al-Anbar,
que en el sur.
Además de las dos bajas británicas, la ucraniana y la
holandesa antes indicadas, de los 22 muertos en combate
estadounidenses de esta primera quincena del mes, hasta el día 15
[28], seis se han producido como resultado de la revuelta de as-Sader
(cinco en Nayaf y uno en Medina as-Sadr, en Bagdad); el resto -hasta
15, sin incluir dos muertos por causa calificada de "no
hostil", al estrellarse al parecer accidentalmente un helicóptero
el día 11 al oeste de Bagdad- se han registrado en la provincia de
al-Anbar (entre ellas, dos en las proximidades de al-Qaim, en la
frontera con Siria, en un operativo antiguerrillero el día 4), en la
capital (dos, como resultado de la explosión de una bomba al paso de
un convoy el día 2; otra más el 15 en un ataque con bomba al norte),
en Kirkuk (ataque con morteros contra una base el día 8) y en Balad
(emboscada con armas ligeras y explosivos el día 4). Dos de estos
militares habían sido heridos en combate (uno de ellos, un capitán
de Infantería) y murieron tras ser evacuados a hospitales en EEUU.
Desde el 1 de mayo han muerto en combate en Iraq 621 militarse
estadounidenses.
El balance de muertos iraquíes de los combates de la primera
quincena de agosto está aún por determinarse, pero se puede cifrar,
sin duda, en centenares, por lo demás difícilmente catalogables como
civiles o insurgentes, dado que se trata en ambos casos de vecinos de
los barrios o ciudades atacadas. Según The Washington Post del 11 de
agosto, las tropas que han asaltado Nayaf han señalado que los
milicianos del Ejército de al-Mahdi "[...] muestran signos de
que han recibido entrenamiento durante el alto el fuego [acordado en
junio]. Las unidades estadounidenses, acostumbradas a los
desorganizados golpes de 'golpear y correr' de los insurgentes en
Bagdad y otros lugares han quedado impresionados al ver a los
combatientes de negro del Ejército de al-Mahdi moviéndose en
coordinadas unidas de cinco [miembros], típicamente tres [de ellos]
armados con fusiles [de asalto] que disparan para cubrir el
lanzamiento de granadas autopropulsadas, el arma que más está dañando
a las fuerzas estadounidenses en Iraq" [29] . Un militar
estadounidense señalaba, refiriéndose a los milicianos: "Estos
tipos realmente nos hacen trabajar para matarlos; pero, finalmente,
son muertos". Fuentes árabes señalaban recientemente contactos
entre el Ejército del Imán al-Mahdi de as-Sader y la resistencia en
Faluya para que éstos proveyeran de adiestramiento a los milicianos
de as-Sadr [30].
Consideración final
Siendo o no cierto, si algo pone en palmaria evidencia la
rebelión en las provincias de la mitad meridional de Iraq de este mes
de agosto es que la comunidad shi'í -a la que las fuerzas ocupantes y
los medios de comunicación gustan caracterizar siempre como la
mayoritaria del país- no acepta la ocupación, cuando menos
transcurrido este primer año tras la invasión. Ha quedado destruido
el mito de que la jerarquía shi'í puede garantizar ante los
ocupantes -en beneficio propio- el control de la comunidad shi'í y la
sumisión de ésta a los planes de EEUU en Iraq.
La otra consecuencia de lo vivido en estas dos semanas -por
si hiciera falta- es la temprana y definitiva descalificación de las
nuevas autoridades iraquíes y del propio primer ministro Allawi, no
ya tuteladas sino sometidas a EEUU, que han sido incapaces de resolver
la crisis frente o al margen de la solución militar impuesta por los
ocupantes -el mero aplastamiento de la milicia de as-Sadr.
Fuentes cercanas a la resistencia venían señalando en estos
meses que la expansión a la zona de mayoría shi'í del sur de Iraq
de una actividad insurgente sostenida como la que se registra en las
zonas centro, oeste y norte del país desde hace un año dependería
esencialmente de la resolución del conflicto de poder dentro de la
propia jerarquía religiosa shi'í [31], y que la resistencia debía
esperar a que se resolvieran estas contradicciones intracomunitarias
para asociar eficazmente a los habitantes de esta zona de Iraq a una
resistencia efectiva y agresiva contra la ocupación. Podría ser que
este momento hubiera ya llegado: aun cuando sea aplastada la revuelta
en curso de as-Sadr, los sucesos de agosto -como los de hace un año-
abren una nueva fase en la lucha de liberación en Iraq al hacer
bascular a la comunidad shi'í hacia la resistencia contra ocupación
y sus lacayos ya sin ambigüedades.
Notas:
1. Al Fanar, Boletín de prensa árabe, 7 de julio de 2004.
2.
Middle East Online, 12 de agosto de 2004.
3.
Al-Jazeera, 15 de agosto de 2004.
4.
Al-Jazeera, 5 y 16 de junio de 2004.
5. El portavoz de la AUM ante los medios de comunicación y
editor del semanario al-Basaer, Muthana Hareth al-Dhari, era detenido
por los estadounidenses el día 2 de agosto, tras mantener un
encuentro con cadenas árabes de televisión en el que precisamente
había explicado las razones del boicot de la Asociación a esta
iniciativa (al-Jazeera, 29 de julio de 2004).
6.
Novitine, 9 de agosto de 2004.
7.
The Washington Post, 11 de agosto de 2004.
8. AFP citado por IslamOnline.net, 10 de agosto de 2004.
9.
Al-Jazeera, 11 de agosto de 2004.
10. Ídem.
11. La última baja británica en combate era del 28 de
junio, también en Basora por ataque con explosivos. Ministry
of Defense (www.operations.mod.uk/telic/casualties.htm).
12.
Al-Jazeera, 9 de agosto de 2004.
13.
Reuters, 9 de agosto de 2004.
14.
IslamOnline.net, 10 de agosto de 2004.
15. AFP, 11 de agosto de 2004.
16. Kyodo News, 10 de agosto de 2004.
17.
Al-Jazeera, Associated Press y Xinhuanet, 15 de agosto de
2004.
18. AFP, 14 de agosto de 2004.
19. Associated Press, 11 de agosto de 2004.
20. Middle East Online, 13 de agosto de 2004.
21. AFP, 14 de agosto de 2004.
22.
Al-Jazeera, 10 de agosto de 2004.
23. AFP, 14 de agosto de 2004.
24. Tacoma News Tribune, 10 de agosto de 2004.
25. AFP, 14 de agosto de 2004.
26. Fuente:
www.iags.org/iraqpipelinewatch.htm
27.
Al-Jazeera, 11 de agosto de 2004.
28.
US Department of Defense, varias Notas Informativas, Associated Press,
Reuters, al-Jazeera e Iraq Coalition Casualty Count.
29.
The Washington Post, 11 de agosto de 2004.
30. Mafkarat al-Islam, 6 de agosto de 2004.
31. Véase por ejemplo en CSCAweb la entrevista con al-Kubaysi
en: Entrevista con Abdel Yabar al-Kubaysi, dirigente de la Alianza
Patriótica Iraquí: "Naciones Unidas y al-Brahimi son agentes
políticos de EEUU"
|