Carta
del pueblo de Faluya a Kofi Annan para que se ponga fin al bombardeo
de la ciudad y se evite el asalto anunciado
Por
Kassim Abdullsattar al-Jumaily (*)
CSCAweb, 22/10/04
Traducción
de Loles Oliván
"Es
más que evidente que las fuerzas estadounidenses están cometiendo a
diario crímenes de genocidio en Iraq. En este momento, mientras le
escribimos, las fuerzas estadounidenses están perpetrando esos crímenes
en la ciudad de Faluya. Los aviones de guerra de EEUU están lanzando
las más potentes bombas contra la población civil de la ciudad,
asesinando e hiriendo a centenares de personas inocentes. Al mismo
tiempo, sus tanques atacan la ciudad con artillería pesada"...
Excmo.
Sr. Kofi Annan
Secretario
general de Naciones Unidas
Nueva
York
Faluya,
14 de octubre de 2004
Su
Excelencia,
Es
más que evidente que las fuerzas estadounidenses están cometiendo a
diario crímenes de genocidio en Iraq. En este momento, mientras le
escribimos, las fuerzas estadounidenses están perpetrando esos crímenes
en la ciudad de Faluya. Los aviones de guerra de EEUU están lanzando
las más potentes bombas contra la población civil de la ciudad,
asesinando e hiriendo a centenares de personas inocentes. Al mismo
tiempo, sus tanques atacan la ciudad con artillería pesada. Como
Usted sabe, no hay presencia militar en la ciudad. No se han
desarrollado acciones por parte de la Resistencia de Faluya en las últimas
semanas porque las negociaciones entre los representantes de la ciudad
y el gobierno [interino de Iyad Allawi] seguían adelante. En ese
clima, los nuevos bombardeos por parte de EEUU se han producido
mientras el pueblo de Faluya se disponía a prepararse para el ayuno
de Ramadán. Ahora muchos de ellos están atrapados entre las ruinas
de sus casas derruidas y nadie puede ayudarles mientras los combates
continúan.
En
la noche del 13 de octubre un solo bombardeo estadounidense destruyó
50 casas con sus residentes dentro. ¿Es esto un crimen genocida o una
lección sobre la democracia estadounidense? Es obvio que los
estadounidenses están ejecutando actos de terror contra el pueblo de
Faluya por una sola razón: su rechazo a aceptar la ocupación.
Su
Excelencia y el mundo entero saben muy bien que los estadounidenses y
sus aliados devastaron nuestro país bajo el pretexto de la amenaza de
armas de destrucción masiva. Ahora, tras toda la destrucción y los
asesinatos de miles de civiles, han admitido que las armas no se
encontraron. Pero no han dicho nada sobre los crímenes que han
cometido. Desgraciadamente todo el mundo guarda silencio y ni siquiera
los civiles iraquíes asesinados serán dignificados con expresiones
de condena. ¿Va a pagar EEUU alguna compensación como se obligó a
hacer a Iraq tras la Guerra del Golfo de 1991?
Al-Zarqawi:
un pretexto creado por EEUU
Sabemos
que vivimos en un mundo de doble rasero. En Faluya [los
estadounidenses] han creado un nuevo y vago objetivo: "al-Zarqawi".
Al-Zarqawi no es sino un nuevo pretexto para justificar sus crímenes,
matando y bombardeando a diario contra civiles. Ha pasado casi un año
desde que crearon este nuevo pretexto y cada vez que destruyen casas,
mezquitas, restaurantes, y matan niños y mujeres, dicen "hemos
lanzado una operación exitosa contra al-Zarqawi". Nunca dirán
que lo han matado porque tal persona no existe. Y eso significa que el
asesinato de civiles y el genocidio cotidiano seguirá.
El
pueblo de Faluya le asegura a Usted que esta persona, de existir, no
está en Faluya ni probablemente en ningún otro lugar de Iraq. El
pueblo de Faluya ha pedido muchas veces que cualquier persona que vea
a al-Zarqawi le de muerte. Ahora todo el mundo se ha dado cuenta de
que este hombre no es más que un héroe hipotético creado por los
estadounidenses. Al mismo tiempo, el representante de Faluya, nuestro
dirigente tribal, ha denunciado en repetidas ocasiones [las acciones
de] el secuestro y asesinato de civiles; nosotros no tenemos ninguna
relación con ningún grupo que se comporte de manera tan inhumana.
Su
Excelencia, apelamos a Usted y a todos los dirigentes del mundo para
que ejerzan la presión más fuerte posible ante la Administración
Bush para que ponga fin a sus crímenes en Faluya y para que retire a
su ejército de la ciudad. Faluya gozaba de tranquilidad y de paz
cuando salieron. No fuimos testigos de ningún desorden en la ciudad.
La administración civil funcionaba bien a pesar de sus limitados
recursos. Simplemente no dimos la bienvenida a las fuerzas de ocupación.
Ese es nuestro derecho de acuerdo con la carta de Naciones Unidas, con
el Derecho Internacional y con las normas de la humanidad. Si los
estadounidenses creen lo contrario, deberían abandonar primero las
Naciones Unidas y todas sus agencias antes de actuar en modo contrario
a la Carta que ellos han suscrito.
Es
muy urgente que Su Excelencia, junto con los dirigentes mundiales,
intervengan de manera inmediata para prevenir una nueva masacre.
Hemos
intentado contactar con sus representantes en Iraq con el fin de
pedirles que sean más activos a este respecto, pero como Usted sabe,
están viviendo en la "Zona Verde" [de máxima seguridad de
Bagdad], donde no podemos acceder a ellos. Queremos que NNUU tome
partido sobre la situación de Faluya así como de la de muchas partes
de nuestro país.
Con
nuestros mejores deseos,
(*)
Kassim Abdullsattar al-Jumaily (Presidente del Centro de Estudios de
los Derechos Humanos y la Democracia)
En
nombre del pueblo de Faluya y de:
Consejo
de la Shura de Faluya
Asociación
de Sindicato
Sindicato
de Maestros
Consejo
de Dirigentes tribales
Casa
de la Fatwa y de la Educación Religiosa
|