Irak resiste

 

Las puertas del infierno están abiertas en Iraq

"Sólo con la retirada de los ocupantes puede Iraq dar los primeros pasos seguros hacia la paz y la estabilidad"

Por Yawad al-Jalisi (*)
The Guardian, 01/04/05
IraqSolidaridad, 05/04/05
Traducción para IraqSolidaridad de Sinfo Fernández

"Los ocupantes están siguiendo en la actualidad una política de dominio y ruptura interna, fomentando las divisiones étnicas y sectarias e imponiéndolas en todas las instituciones que han creado. Incidentes tales como el reciente secuestro de una periodista italiana, puesta en libertad sólo para ser recibida por los liberadores estadounidenses con una lluvia de balas, han dado pábulo en Iraq a amplias sospechas acerca de quién es realmente el responsable de muchos de los actos terroristas -secuestros, asesinatos, bombardeos y matanzas indiscriminadas- que están ahogando a Iraq. Esos actos han coincidido con el ocultamiento de operaciones militares importantes [de la resistencia iraquí] contra las fuerzas de ocupación por todo el país."

La ocupación británico-estadounidense de Iraq está emponzoñando todos los procesos políticos en mi país y en todo Oriente Medio. Las elecciones celebradas en enero bajo el control de las fuerzas ocupantes no fueron ni libres ni justas. En lugar de suponer un paso adelante en la resolución de los problemas de Iraq, han sido utilizadas para prolongar el dominio extranjero sobre el pueblo iraquí.

Sólo con la retirada de los ocupantes del país puede Iraq dar los primeros pasos seguros hacia la paz y la estabilidad. Sólo estableciendo un calendario preciso de retirada, las fuerzas políticas iraquíes podrán ponerse libremente de acuerdo y poner en marcha un proceso de elecciones democráticas, genuinamente libres y justas, una Constitución permanente y un programa que haga frente a las necesidades de todo el pueblo iraquí.

Los poderes ocupantes están siguiendo en la actualidad una política de dominio y ruptura [interna], fomentando las divisiones étnicas y sectarias e imponiéndolas en todas las instituciones que han creado.

Incidentes tales como el reciente secuestro de una periodista italiana, puesta en libertad sólo para ser recibida por los liberadores estadounidenses con una lluvia de balas, han dado pábulo en Iraq a amplias sospechas acerca de quién es realmente el responsable de muchos de los actos terroristas -secuestros, asesinatos, bombardeos y matanzas indiscriminadas- que están ahogando a Iraq. Esos actos han coincidido con el ocultamiento de operaciones militares importantes [de la resistencia iraquí] contra las fuerzas de ocupación por todo el país.

Ninguno de los crímenes terroristas ha sido resuelto y ni un solo de sus autores ha sido llevado a juicio. Tras cada crimen terrorista importante, se proclama el arresto de sus autores, utilizando nombres y personalidades divulgadas a través de los medios de comunicación controlados por EEUU. Este esfuerzo de los medios de comunicación (que también tratan de echar tierra sobre las noticias de destrucción de ciudades enteras, de brutales asaltos nocturnos, de secuestros, toques de queda y de la detención y tortura de miles de prisioneros) es vigilada por el departamento de información de las fuerzas estadounidenses, que se ganó el agradecimiento especial del secretario de Defensa estadounidense durante su visita a Iraq.

El proyecto de EEUU en Oriente Medio

Estos crímenes son una muestra del infierno creado por el proyecto de Estados Unidos para Oriente Medio. Y ahora se está empezando a trasladar ese infierno a Líbano, abriendo la perspectiva de guerras interminables de consecuencias inimaginables.

Siria está ahora retirando sus fuerzas de Líbano y dejando la responsabilidad de lo que pueda suceder casi totalmente en manos del otro bando. Pero, ¿qué es lo que va a ocurrir a continuación? ¿Será desarmada la resistencia libanesa, que dirige Hizbollah? Y si rechaza entregar sus armas, ¿cómo será desarmada? ¿Será a través del despliegue de nuevas fuerzas de ocupación en el país? Esto ya se intentó hacer a principios de los años ochenta y llevó a la derrota estadounidense y de la ocupación israelí de Líbano. Eso podría ocurrir de nuevo, pero en una escala mucho mayor y por toda la región, que no puede tolerar por más tiempo esta presión sin fin por parte de EEUU, que es considerada por los pueblos de la zona como la ejecución de las peticiones israelíes.

Los esfuerzos deben ir dirigidos a resolver los problemas del pueblo palestino, al que Israel no permite regresar a su tierra, a pesar de las resoluciones de Naciones Unidas y de todos los preceptos del derecho y la justicia. El problema palestino no puede resolverse con reuniones exhibicionistas como la reciente conferencia de Londres de Tony Blair. Las grandes potencias (particularmente Gran Bretaña, que contribuyó a crear el problema en sus comienzos) tienen una responsabilidad moral a la hora de resolverlo.

Fin a la ocupación, fin a las amenazas

Al mismo tiempo, la crisis iraquí no puede solucionarse remendando una detestada ocupación con elecciones fraudulentas y camarillas étnicas y sectarias sostenidas por los ocupantes. La única solución es la retirada inmediata de las fuerzas ocupantes -o como mínimo el establecimiento de un calendario estricto de retirada garantizado internacionalmente. Hablar de libertad y democracia es visto por nuestros pueblos como un repetido fraude interminable porque esas palabras están siendo utilizadas por los poderes que han estado manteniendo regímenes dictatoriales corruptos. Los EEUU de hoy son todavía los aliados y promotores de muchos de esos tiránicos regímenes, tanto en nuestra región como en cualquier lugar del mundo.

No creemos que la postura agresiva de EEUU hacia Siria e Irán tenga como finalidad defender la libertad ni la democracia, sino desembarazarse de los Estados que están rehusando alinearse con los planes estadounidenses e israelíes para la región. Actualmente Siria está siendo acosada en Líbano debido a que rechaza respaldar la ocupación de Iraq, e Irán está enfrentándose a amenazas acerca de su programa nuclear porque a EEUU le preocupa su papel en relación con Iraq y su rechazo del statu quo en Palestina.

La opinión pública de los países ocupantes, como la estadounidense y británica, necesitan comprender que la continuación de esta injusta y peligrosa situación creará las condiciones para nuevos y más amplios levantamientos que amenazan realmente con abrir las puertas del infierno en la región y más allá.


Nota:

(*) Yawad al-Jalisi, ayatollah shí'í, es en la actualidad secretario general del Congreso Fundacional Nacional Iraquí (CFNI) [1], una alianza de organizaciones seculares y comunitarias, partidos políticos y asociaciones que integra a todos los grupos étnicos y religiosos de Iraq. Al-Jalisi dirige la prestigiosa universidad Madrasa al-Jalesiyya. Está previsto que al-Jalisi participe en la Sesión del Tribunal Internacional sobre Iraq que se celebrará en mayo en Barcelona.

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