Libro
de Robert Fisk (*) sobre la guerra de Iraq
“La
resistencia tiene el control del país, desde Kirkuk hasta Bassorah”
Enviado
por Boletín informativo - Red solidaria de la izquierda radical,
13/11/05
La
semana pasada, el mundialmente conocido periodista Robert Fisk (La
Jornada, The Independent) presentaba su nuevo libro en una librería
de Amberes: "La gran guerra por la civilización. La conquista de
Oriente Medio". A continuación se presentan algunos extractos.
Los
periodistas hacen su trabajo desde el hotel
Robert
Fisk. En Iraq, realizar labores periodísticas desde el hotel está a
la orden del día. CBS, CNN... todos están bien protegidos tras sus
enormes murallas de hormigón. Los corresponsales escuchan al portavoz
de Estados Unidos, asisten a la conferencia de prensa de las fuerzas
británicas, telefonean al Ministro de Información iraquí y envían
sus comunicados desde la habitación del hotel. Desde luego no estoy
en contra de eso, pero por lo menos que admitan de una vez que no
quieren aventurarse a salir al exterior. Actualmente están dando una
imagen de normalidad que en absoluto se corresponde con la situación.
No es mi forma de hacer periodismo.
Los
estadounidenses se desplazan con miedo de un cuartel a otro
Robert
Fisk. Olvidemos las historias relativas a la nueva constitución.
Olvidemos el reciente referéndum. La realidad iraquí es muy
diferente. La resistencia tiene el control del país, desde Kirkuk
hasta Bassorah, incluidos los sectores más importantes de Bagdad. Los
estadounidenses se desplazan con miedo de un cuartel a otro en sus vehículos
blindados.
La
resistencia está mayoritariamente formada por militares y oficiales
Robert
Fisk. Hace poco me encontré con tres dirigentes de la resistencia
armada. Uno de ellos, antiguo general del ejército iraquí, me dijo:
«Es la segunda vez que nos encontramos. La última vez fue en 1980,
en la primera línea de frente contra Irán. En aquella época usted
me entrevistó después de haberse subido a mi tanque.» La
resistencia está mayoritariamente formada por militares y oficiales.
Decenas
de miles de civiles han muerto desde el inicio de la guerra
Robert
Fisk. Quería tener una idea del número de civiles muertos debido a
la ocupación. El pasado mes de julio, me dediqué a ir de hospital en
hospital contando, uno por uno, los cadáveres que se encontraban en
los depósitos de Bagdad. En un mes, conté 1100 fallecimientos de
civiles como resultado de la violencia. Únicamente en la capital. Si
a ellos les sumamos los muertos del resto de las ciudades, donde la
violencia no es menor, podemos alcanzar la cifra de entre 3000 y 4000
muertos por mes, lo que representa a unas cuantas decenas de miles de
personas muertas desde el inicio de la guerra.
Hay
escuadrones de la muerte activos en Iraq
Robert
Fisk. En Iraq nadie quiere una guerra civil. Jamás, en toda la
historia del país ha habido una guerra civil. Suníes y chiítas no
son enemigos, pero cuando vemos que una bomba siembra de muertos una
estación de autobuses, caemos en la cuenta de que alguien quiere
provocar una guerra civil en Iraq. Todos los atentados no son siempre
obra de la resistencia o de Al-Qaeda. Los escuadrones de la muerta están
activos y obedecen órdenes. Pero, ¿órdenes de quién? Yo sólo me
menciono los hechos, ustedes podrán sacar sus propias conclusiones.
Los
estadounidenses y los británicos, ¿serán ellos el principal grupo
de combatientes extranjeros?
Robert
Fisk. El presidente Bush y Tony Blair hablan sin parar de los
combatientes extranjeros que organizan los actos terroristas en Iraq.
Sin embargo, olvidan mencionar que el principal grupo de combatientes
extranjeros (unos 180.000) viste los uniformes de los Estados Unidos o
de sus socios de la coalición.
La
salida de los estadounidenses tendrá influencia en todo el mundo
Robert
Fisk. Se trata de petróleo, por supuesto, pero no sólo de eso. Se
trata de la construcción del Imperio. Las superpotencias tienen
siempre una necesidad innata de guerras y conquistas. Sin embargo la
guerra en Iraq se ha terminado. Para Estados Unidos, Occidente ha
perdido la guerra en Iraq porque los iraquíes no nos interesan en
absoluto. Estados Unidos debe marcharse, pero es incapaz de hacerlo y
por eso las arenas del desierto están cada vez más impregnadas en
sangre. La retirada de Estados Unidos tendrá influencia en todo el
mundo y, si de una cosa podemos estar seguros es que, una vez que
Estados Unidos anuncie un principio de retirada, las tropas británicas
abandonarán Iraq.
Occidente
quiere llevar la democracia a Oriente Medio. Sin embargo no se trata
de democracia, sino de control. Sí, quizás los iraquíes quieran
unos pocos de nuestros valores democráticos pero lo que sobre todo
quieren es liberarse y librarse de la ocupación. Más que democracia,
los iraquíes quieren justicia y libertad.
La
situación hoy en día es tan grave como la de los años 20
Robert
Fisk. Para comprender Oriente Medio, es necesario comprender la
historia de la región. Siempre sucede lo mismo, Occidente cree que
puede olvidar la historia. En mi libro, pretendo hacer paralelismos
entre la ocupación británica de los años 20 y la situación que se
vive hoy en día. Se repiten las mismas brutalidades por parte del
colonizador, surgen los mismos focos de resistencia que,
inevitablemente, desembocarán en iguales resultados.
Los
ciudadanos iraquíes ¿son el objetivo de la resistencia?
El
11 de abril de 2005, el New York Times trazó el gráfico que aquí se
muestra2 y que abarca el período de marzo de 2003 a marzo de 2004 de
los atentados contra las tropas estadounidenses, sus aliados, los
civiles, las tropas iraquíes y otros objetivos.
A
finales de 2004, Anthony Cordesman, del prestigioso Center for
Strategic and International Studies, escribía lo siguiente: «Estados
Unidos ha reaccionado tarde a la resistencia iraquí. Tan tarde que ha
tenido que admitir que dicha resistencia podría contar con un enorme
apoyo procedente, sobre todo, de la población.» (1)
Realizó
un análisis particularmente interesante del número de atentados
cometidos entre septiembre de 2003 y octubre de 2004. En este análisis
se muestra que el 75% de los atentados van dirigidos directamente a
los militares estadounidenses y a sus socios de la coalición. Únicamente
el 4,1% van dirigidos contra la población civil. Estas cifras
contrastan con la imagen global presentada por los medios de
comunicación.
El
11 de abril de 2005, el New York Times trazó el gráfico que aquí se
muestra (2) y que abarca el período de marzo de 2003 a marzo de 2004
de los atentados contra las tropas estadounidenses, sus aliados, los
civiles, las tropas iraquíes y otros objetivos. En él se ve
claramente que los objetivos civiles son muy pocos. Además, tampoco
es totalmente cierto que los atentados contra la población civil sean
obra de la resistencia. La resistencia nunca ha dejado de condenar
cualquier acción llevada a cabo contra la población civil. Incluso
el número de ataques contra las tropas iraquíes es muy limitado,
pese al enorme incremento de reclutamientos. ¿Por qué los medios de
comunicación no hacen balance de estas cifras?
Notas:
(*)
Robert Fisk. La grande guerre pour la
civilisation. La conquête du Moyen-Orient. (La gran guerra por la
civilización. La conquista de Oriente Medio) Ed. La Découverte,
2005, 1437 páginas. Robert Fisk es corresponsal en Oriente Medio
desde 1976. En un principio trabajó para The Times y luego para The
Independent. En español se le puede leer en el diario mexicano La
Jornada. Gracias a sus experiencias personales, retrata en su libro la
historia global de una región particularmente agitada.
1
Cordesman A. The Developing Iraqi Insurgency: Status at end-2004 [El
desarrollo de la insurrección iraquí. Situación a finales de 2004].
(www.csis.org/features/iraq_deviraqinsurgency.pdf)
2
El gráfico fue remodelado por Junaid Alam, a partir de la base de
datos del NYT. Does
the Resistance Target Civilians? According
to US Intel, Not Really [¿Es cierto que la resistencia toma a civiles
como objetivo? No del todo, según las informaciones estadounidenses].
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