Irak resiste

 

Diario de la resistencia

CSCAweb, noviembre de 2005

Las dificultades bélicas de ocupantes y colaboracionistas: mercenarios sudamericanos, tecnología punta y cursos de formación urgente para intentar evitar lo inevitable

Las dificultades frente a la creciente sofistificación y efectividad de las tácticas de la Resistencia han llevado al ejército iraquí , informaba Reuters, a lanzar una medida desesperada; recuperar a los antiguos oficiales del ejército de Saddam Hussein. También es, a pesar de que los portavoces del ejército de EEUU intentan ahora despegarse de la retórica de fragmentación étnico–religiosa que suelen exhibir, un intento de mostrar a cuadros sunníes combatiendo a guerrilleros de la misma adscripción religiosa.

El coronel Fred Wellman, portavoz del Mando Multinacional que supervisa la formación de tropas colaboracionistas iraquíes, afirmaba: "No me gusta definir esta iniciativa como una reclutamiento entre sunníes, sino como un reclutamiento de antiguos oficiales". Sin embargo, la intención es esa, demostrar que en el nuevo ejercito colonial iraquí no hay divisiones sectarias, mientras que toda la política y las acciones bélicas de las instituciones coloniales en Iraq se desarrollan, por supuesto, según parámetros sectarios que posibilitan la fragmentación del Estado.

Washington recibe la presión de la sociedad estadounidense, una vez superado el listón psicológico de la cifra oficial de 2.000 bajas. Y para contrarrestar esa presión necesita desesperadamente dar la impresión de que el ejército iraquí corresponde al nuevo y democrático Iraq, admitiendo a todo recluta sin discriminación religiosa, política o étnica. El ministro de Defensa colaboracionista hizo un llamamiento a todos los ex–oficiales entre los rangos de teniente y mayor para volver a "servir a la preciada patria"la misma que el ministro ha puesto de nuevo en manos del colonialismo. Por supuesto, esta "repesca" va a estar sujeta a filtros ideológicos y de currículo, para evitar que elementos incómodos se puedan introducir en las filas del ejército colaboracionista. Según la propaganda oficial, la medida ha sido "un éxito", en base a los altos niveles de desempleo existentes en el país. El nuevo ejército colonial iraquí está desesperadamente necesitado de mandos medios y oficiales.

Igualmente desesperados por afrontar la creciente efectividad de la Resistencia parecen estar los militares estadounidenses; el New York Times daba noticia el 2 de noviembre de la próxima inauguración de una "escuela de contrainsurgencia" para oficiales en Iraq. La nueva instalación, situada en la base de Tayi dará un curso de formación sobre métodos, facciones y datos de la Resistencia y cómo responder a todo ello, a todo oficial recién llegado al país. Se espera que en breve una formación semejante la puedan recibir los oficiales del ejército colaboracionista. Parece ser que esa Resistencia que según Rumsfeld, y hace unos meses "estaba dando sus últimos coletazos" no deja de dar serios problemas, y obligando a EEUU a invertir cada vez más tiempo y dinero en combatirla. Esta semana, EEUU dio comienzo a la retirada de sus efectivos de la capital de Al–Anbar, Ramadi Tan sólo la base de Al–Uarrar, informaba Mufakirat Al–Islam, quedaría en la zona como representación de las fuerzas de ocupación. Las tropas ocupantes solicitaron a las fuerzas colaboracionistas protección en la retirada. Una fuente en el ejército colaboracionista declaraba a la agencia que tal movimiento podría ser temporal, o una prueba para ver el desenvolvimiento de las fuerzas iraquíes; también existe la posibilidad de que se trate de una retirada real, en calidad de derrota.

La agencia UPI daba cuenta esta semana de que los responsables del ejército de EEUU eran conscientes de que sus "caros vehículos blindados" no estaban preparados para soportar las explosiones de los artefactos que la guerrilla iraquí había comenzado a utilizar. Los "nuevos" artefactos en realidad corresponden a formas más racionales de emplear los explosivos, a los que se les da forma puntiaguda, convirtiéndose en una especie de enorme bala perforadora, capaz de atravesar 4 pulgadas de blindaje a cien metros de distancia. Es una táctica que lleva años utilizando la resistencia libanesa para combatir la ocupación israelí. Este tipo de reconocimiento publico, ahora sobre la incapacidad del blindaje estadounidense para frenar los devastadores efectos de los artefactos de la Resistencia, puede interpretarse de dos formas: de una honestidad forzada por la crudeza de la guerra en Iraq, destinada a generar el clima necesario para ir retirándose, o de una forma de ir proporcionando argumentos para una mayor inversión militar en el pais ocupado.

Ofreciendo otro ejemplo, quizá involuntario, quizá propagandístico, de cómo la Resistencia iraquí está obligando a las tropas estadounidenses a gastar miles de millones en intentar sofocar la guerra de liberación nacional, representantes del ejército de EEUU mostraban orgullosos otro avance de la tecnología militar: 15 millones de euros y cinco años de investigación ha costado al contribuyente norteamericano la fabricación de un aparato de identificación de francotiradores llamado Weapon Watch. Al mismo tiempo, la empresa israelí Elbit Systems ha introducido otro artilugio llamado Sistema de Control de Francotirador. El sistema final del Weapon Wacht es por infrarrojos y permite identificar el arma y la posición de quien la dispara en milésimas de segundo, pesa menos de 10 kilos y se puede instalar en vehículos. Los francotiradores iraquíes son un serio problema para los ocupantes. En la actualidad hay cuatro máquinas así operando en Iraq, pero a pesar de lo que dice la propaganda del ejército norteamericano, no parece estar clara su ponderada efectividad sobre todo, porque olvida la premisa principal del francotirador de combate: nunca realizar dos disparos desde el mismo lugar. El sistema israelí es un conjunto tecnológico de cámaras y pequeñas computadoras adosadas al francotirador, que permite al coordinador del equipo de infantería ver simultáneamente los objetivos de varios tiradores, dar órdenes por sms, y registrar hasta 30 horas de imágenes para su posterior estudio.

Otra muestra de la intensidad con que los estadounidenses se ven obligados a operar en Iraq la ha dado esta semana el periodista David Wood, quien en un reportaje difundido en varios medios en internet, informaba que las tropas de ocupación estaban empezando a utilizar munición de stocks que llegaban a datar de la segunda guerra mundial. Se refería al tipo de munición empleada por los M–2, las ametralladoras pesadas adosadas a la torreta de los Humvees, cuyo peso y calibre ( casi 100 gramos por bala, 50mm) las convierte en una herramienta de destrucción aterradora, capaz, según testimonios de los ocupantes de desgajar literalmente a una persona, atravesar el muro de cemento detrás suyo y los muros de varias viviendas situados mas atrás. Estas balas tienen un alcance de casi cinco kilómetros, y viajan a una velocidad de mas de 2700 kms por hora en sus primeros mil metros, y al parecer, están siendo usadas en tal medida en Iraq que el suministro llega a flaquear a veces. En anteriores ediciones de este Diario ya dimos cuenta de que el gasto general de munición de los ocupantes en Iraq es tal, que deben comprar existencias a Israel. Uno de los usos mas comunes de las ametralladoras M–2 es el servicio que prestan al final de una columna de Humvees, como última medida ante un ataque con coche bomba, pero su falta de exactitud establece que en una distancia media (más de 800 metros) sean necesarios una media de 40 disparos para lograr una diana completa. A corta distancia son demoledoras, pero normalmente si un conductor fedai está a corta distancia, ya suele ser tarde para la columna; esa falta de precisión puede hacer explotar la carga y en todo caso si explota ,aún sin impactar contra la columna, la deflagración resulta muy dañina.

Otro ejemplo de los aprietos de los ocupantes en Iraq lo indica su necesidad de empresas privadas de seguridad, quienes a veces llegan incluso a tomar cuidado de los oficiales estadounidenses que el propio ejército norteamericano es incapaz de proteger. IPS informaba el 31 de octubre que empresas de seguridad estadounidenses, concretamente la empresa Triple Canopy, con sede en Illinois– estaba contratando a 200 expolicías y exmilitares peruanos como guardias de seguridad con destino a Iraq, lo que estaba provocando un escándalo en el país latino. La media de sueldo de un mercenario peruano en Iraq es de menos de 30 euros diarios, una miseria para cualquier país europeo, pero un dinero bastante considerable en el empobrecido Perú. Los mercenarios peruanos suelen estar fogueados en la lucha contra la guerrilla maoista de Sendero Luminoso, algo muy valorado por los empresarios estadounidenses. Triple Canopy proporciona guardaespaldas a empresarios implicados en la "reconstrucción" del país y goza de suculentos contratos en Iraq, gracias a sus contactos con la administración Bush: uno de sus primeros contratos, 90 millones de dolares, tenía como objeto proteger a una docena de funcionarios del anterior gobierno interino iraquí. Lo más chocante es que en palabras del representante de la subcontrata "Gun Supply" que forma para Triple Canopy a los futuros "guardas de seguridad" la empresa norteamericana "no contrata a mercenarios". Triple Canopy ya ha contratado mercenarios de El Salvador, Colombia y Chile, con sueldo más elevados, por cierto. 380 mercenarios peruanos han partido hacia Iraq por el momento, con un contrato de un año de duración, en el cual tanto EEUU como la empresa quedan exentos de responsabilidad en caso de que el contratado resulte muerto o herido en el cumplimiento de su trabajo. Así mismo, el seguro del empleado sólo se circunscribe a las horas y lugar de trabajo; si el mercenario es atacado en su alojamiento, no recibirá compensación alguna por parte de la empresa. Todos los peruanos recibieron un curso rápido de quince días, y fueron destinados a zonas dentro de la Zona Verde. Según algunos aspirantes al puesto, la situación era de urgencia para la empresa, andaban faltos de personal.

Al parecer, los términos del reclutamiento eran tan abusivos que el gobierno peruano tuvo que tomar cartas en el asunto. El propio ejército peruano tuvo que proporcionar la munición necesaria para el curso de entrenamiento de 15 días. Gun Supply, representante de Triple Canopy en Lima, cerró un contrato de 150.000 dólares con el ejército peruano al respecto, sin que este trámite pasara por el ministerio de defensa, al parecer. De toda formas, el contrato no se canceló, y la intención es reclutar a 600 mercenarios más. Gun Supply está dirigida por el hijo del jefe de seguridad de la embajada de EEUU en Peru, y ha vendido munición a la escolta del presidente Toledo.

Más efectos colaterales domésticos de la guerra en Oriente Medio: En EEUU, la reconocida necesidad de reducir los gastos militares del país posibilitaba el seguir adelante con el proceso de cierre de bases y optimización de recursos bélicos; según informaba AP, el Congreso autorizaba el primer cierre de bases militares domésticas desde hacía una década. Las emergencias provocadas por los huracanes que este otoño han sacudido EEUU, donde se demostró que la administración Bush era incapaz de proteger a sus gobernados, terminaban de inclinar la balanza a favor de esta medida.

Destacamos también una noticia que viene a describir el estado de estupor en el que parecen haber caído los ocupantes; nos venía dada esta semana desde Sky News: un teléfono por satélite, robado en la embajada inglesa en Bagdad, podría haber sido usado por "insurgentes" hasta el punto de efectuar un gasto de casi medio millón de libras en miles de llamadas hechas a Yemen y Arabia Saudí.(alrededor de 1.250.000 euros). El hecho fue descubierto al notar ciertas irregularidades en las facturas de dos años. No se puede saber si la noticia es auténtica o si forma parte del entramado desinformativo destinado a fortalecer la cada vez más cuestionada idea de que existe una enorme red de terroristas islámicos operando en Oriente Medio. Que un teléfono satelital opere en manos equivocadas durante dos años en zona de guerra da mucho que preguntarse. Una investigación oficial del M–16 se ha puesto en marcha, oficialmente, baja la redundancia.

Esa enorme cantidad de dinero se añade a las cifras publicadas esta semana sobre el esfuerzo económico que le está costando a GB la guerra de Iraq. Según informaba YahooNews el 31 de octubre, hasta la fecha el ministerio de Defensa británico ha reconocido un gasto de al menos 3.100 millones de libras, unos 5.300 millones de euros. Son 8500 los efectivos británicos oficialmente presentes en Iraq.

Parte de esas elevadas partidas van destinadas a paliar la creciente retirada de efectivos del Territorial Army, caso del que hablamos esta semana en otro apartado ( Ver: Crecen las cifras adversas en el frente interno). El Ejército Territorial inglés está a 6.000 efectivos por debajo de lo planificado, pero según el propio ministerio de Defensa, las cifras son incluso más bajas, ya que de 35.000 soldados, sólo 12.000 se encuentran formados y en disposición de entrar en combate; a pesar de todo, los portavoces de Defensa afirman que la situación en Iraq no es la responsable de esta tesitura. No obstante, Defensa ha empleado tres millones de libras (unos 4.5 millones de euros) en campañas televisivas llamando al alistamiento, al igual que sus aliados estadounidenses, que enfrentan el mismo problema de falta de nuevos reclutas. De hecho, el número de bajas voluntarias del E.T. se ha cuatriplicado desde el inicio de la guerra de Iraq, según fuentes del ejército. Así mismo, el esfuerzo en Oriente Medio ha provocado la primera leva entre reservistas desde la guerra de Corea en los 50. 12.580 reservistas han sido movilizados, y se ha reconocido oficialmente la muerte de 5 de ellos. La falta de efectivos se hace pública justo cuando el general George Casey, comandante de EEUU en Iraq, daba cuenta de la carencia de tropas que se precisan para patrullar la frontera con Irán en la zona bajo control británico. El mayor Rob Fulton, responsable de las fuerzas coloniales británicas en el sur de Iraq, solicitaba al menos 2.000 efectivos mas, que finalmente se quedaron en sólo 200. El gobierno británico también veta el aumento de tropas en Iraq, sobre todo como forma de controlar el descontento nacional respecto a la guerra de Iraq. Finalmente, el gobierno británico estudia la posibilidad de ofrecer primas de hasta 500 libras (unos 735 euros) a los soldados que logren reclutar a un amigo o familiar, durante un periodo de 6 semanas a partir de diciembre.

La Resistencia mantiene a raya al FMI y al Banco Mundial de Wolfowitz

Los planes de "Reconstrucción" de Iraq orquestados desde el FMI y el Banco Mundial se están viendo seriamente frenados por la acción de la Resistencia Iraquí, quien ha obligado incluso a que las sedes iraquíes de los dos máximos representantes de la usura internacional se tengan que desplazar fuera del país. El BM opera desde Omán, y el FMI desde los Emiratos. El caso del Banco Mundial es especialmente irónico; su actual dirigente, Paul Wolfowitz, fue uno de los principales arquitectos de la guerra de Iraq, y ahora es incapaz de hacer que el BM opere con total libertad desde Bagdad, en base a las condiciones de inseguridad que el propio Wolfowitz fue incapaz de predecir en su entusiasmo por atacar el país. De hecho, cuando era consejero de Defensa, Wolfowitz llegaba a criticar a quienes aseguraban que para mantener el control de Iraq habría que mantener una mayor cantidad de tropas ocupando el país que las previstas. Pero bueno, también dijo que las tropas de EEUU serían recibidas como libertadores en Bagdad. Nada más tomar control de su nuevo cargo, Wolfowitz se vio obligado a rebajar las expectativas anunciadas. Hay problemas incluso para que funcionarios del Banco puedan desplazarse y trabajar en Iraq, siendo como son objetivo de la Resistencia. En agosto de 2003, una bomba estalló cerca de la sede del Banco en Bagdad. La excusa de esta inseguridad se ve empleada así para justificar que de los 35.800 millones que hace dos años y medio el BM prometió dedicar a la "reconstrucción" de Iraq, sólo 156,8 han sido inyectados en sus proyectos en el país ocupado. Por su parte el FMI, desde su exilio en los EAU afirma que la acción de la resistencia mantiene el flujo de crudo en una cantidad oficial de dos millones de barriles diarios, en vez de los 2,4 proyectados. De igual manera, el FMI se ha visto obligado a reducir las expectativas del crecimiento económico " de Iraq" del 17 % proyectado al 4%.

Gestos de buena voluntad desde Siria; a cambio EEUU ataca territorio sirio, matando civiles

Siguiendo en ese proceso diplomático de gestos que apacigüen las demandas de occidente, Siria liberó esta semana a 190 prisioneros políticos, incluyendo a dos destacados activistas de derechos humanos, informaba la BBC el 3 de noviembre. Uno de los liberados, Mohammed Radoun es el presidente de la Organización Árabe de Derechos Humanos en Siria, quien manifestó a la liberación de Radoun: "este movimiento da al gobierno una mayor popularidad y consolida la unidad nacional frente a los peligros que acechan a Siria"

Por otra parte, la excusa de perseguir a "terroristas" en la zona oeste de Iraq cercana a la frontera con Siria, ha permitido a EEUU desplegar tropas a lo largo de la frontera. Este movimiento se entiende sólo en consonancia con la ofensiva diplomática anti–siria lanzada por EEUU, Francia, Gran Bretaña e Israel.

La presencia de tropas ha sido constante durante todo el año, y según testimonios recogidos y publicados el 29 de octubre por el Saturday's Globe han sido varios los incidentes provocadores protagonizados por las fuerzas de EEUU; en mayo de 2005, un helicóptero de EEUU abrió fuego sobre territorio sirio, resultando muerto Abdullah Al–Hassaki, funcionario sirio de seguridad destinado al puesto fronterizo de Barghouz. Otro militar y dos civiles sirios han muerto y otros seis han sido heridos este año bajo fuego estadounidense sobre territorio sirio, según cifras oficiales.. Por otra parte, diversas fuentes diplomáticas estadounidenses han insinuado que la administración Bush ha contemplado la posibilidad de operaciones especiales secretas estadounidenses en territorio sirio para acabar supuestamente con miembros de la Resistencia iraquí. Sin embargo, estos incidentes no han provocado una reacción pública del gobierno sirio, por temor a que la reacción en la calle árabe lleve a un empeoramiento de las relaciones con EEUU. Según Joshua Landis, reconocido analista sobre asuntos sirios, "El gobierno sirio mantiene esto en secreto porque no quiere verse avergonzado. Es el signo definitivo de su debilidad, porque no pueden hacer nada para evitar esto". Por otra parte, Siria ha levantado grandes secciones de un muro de arena a lo largo de los más de 700 kilómetros de frontera con Iraq, para poder cumplir con las exigencias de EEUU de evitar las filtraciones de guerrilleros a un lado y otro de la frontera. Sin embargo, la vigilancia nocturna es un gran problema; Gran Bretaña aún no ha entregado a las tropas sirias los anteojos de visión nocturna que hace tiempo prometió, y los militares sirios se quejan de que la vigilancia de la frontera no se vea respondida por el lado del ocupantes ni sus colaboracionistas. El General Amin Suleyman lo expresaba así: "Siria ha cumplido con todo lo que se le ha pedido y ha hecho todo lo posible. Pero no hemos visto nada por parte del otro lado". En la actualidad, Siria mantiene 557 puestos de control a lo largo de la frontera.

Las inteligentes maniobras iraníes

En un gesto que parece indicar definitivamente la influencia iraní entre los sectores shiíes pro–ocupación, el "ministro" iraquí de Interior, Bayan Yabor, salía en defensa de Irán tras las acusaciones de EEUU y GB en relación a la "injerencia" de Irán en asuntos internos de Iraq. Yabor, en declaraciones recogidas por Arabic News, calificaba de "ridícula" tal acusación, y realizaba un movimiento político bastante preocupante para EEUU, GB, Israel y otros países aliados: en una entrevista con la cadena de TV iraquí Al–Fayha, afirmaba : "como he repetido en varias ocasiones, Irán no tiene nada que ver con los acontecimientos en Iraq, y en particular con los que ocurren en el sur. () Déjeme entregar al público iraquí un pedazo de la verdad. Hemos arrestado a varios elementos de la inteligencia estadounidense y británica". Yabor aseguraba que mientras que Irán se ve repetidamente bajo la acusación de inmiscuirse en Iraq, Iraq había detenido a miembros de los servicios de inteligencia de India, Bangladesh, Pakistán, Gran Bretaña y EEUU, pero que no daría detalles sobre el asunto. En lo que podemos considerar un primer paso a la hora de que ciertos elementos en el poder en Iraq descubran su lealtad para con otros países, Yabor parece inclinarse hacia la defensa de Irán, acusando a "algunos países" de no querer ver desarrollarse un gobierno soberano en Iraq. Todo ello configura en realidad una nueva prueba de fuerza iraní en el pulso que mantiene con las potencias occidentales que ocupan Iraq.

Hemos de reseñar también, una de esas notas involuntarias, que a veces aparecen, casi inadvertidas en los mass media. En la información que el Sunday Times volcaba el 31 de octubre sobre la falta de reclutas en el Ejército Territorial británico, un par de frases nos llamaba la atención: "La policía británica en el sur de Iraq patrulla la frontera (con Irán) junto al nuevo ejército iraquí, mientras las tropas británicas permanecen en reserva. Los iraquíes, sin embargo, han demostrado no ser capaces de impedir las incursiones de los Guardias Revolucionarios de Irán". Se afirma abiertamente que fuerzas armadas iraníes entran Iraq en incursiones habituales. Si esto fuera así, ¿porque no se emplea este argumento más contundentemente en la vigente campaña de presión sobre Irán? Nos inclinamos a pensar que tal denuncia sería un arma de doble filo: Irán probablemente disponga de evidencias y acusaciones concretas sobre actividades hostiles de Gran Bretaña, EEUU o Israel en suelo iraní. Hay diversas formas de mantener la tensión con una intención mediática clara de crear, al menos, ruido ambiental; una es evidentemente mediante estas pequeñas esquirlas de metralla periodística.

Al mismo tiempo, en declaraciones recogidas por Associated Press, la máxima autoridad religiosa shií en Iraq, el Ayatolá iraní Ali Al–Sistani, declaraba desde su sede en Nayaf, la posibilidad de solicitar próximamente un calendario de retirada de las tropas. En caso de que EEUU y GB no se mostraran por la labor, asistentes de Al–Sistani comunicaron que el muy influyente líder haría un llamamiento para iniciar una campaña de protestas pacíficas en la calle. Tal resolución pondría en un serio compromiso a las potencias ocupantes. Sin embargo, Al–Sistani rechaza reunirse con los representantes de EEUU, lo cual no deja de ser una postura cara a la galería. El Ayatolá no desea mostrar en público la relación que necesariamente mantiene con los ocupantes: son ellos quienes han colocado a Al–Sistani en el lugar en el que se mantiene.

El anuncio del líder religioso puede indicar varias cosas: a)que Irán, a través de su representante religioso en Iraq finalmente lanza sus primeros golpes bajo la línea de flotación de los ocupantes. b) que Al–Sistani pretenda ofrecer una nueva vuelta de tuerca en su imagen de confrontación con los ocupantes, con la vista puesta en las elecciones de diciembre, favoreciendo la lista shií que defiende sus intereses, pese a que Al–Sistani se ha cuidado muy mucho de dar su apoyo a formación política alguna; c) que se trate de un movimiento pactado con los ocupantes, cuando éstos se ven muy agobiados domésticamente ante la falta de fechas concretas para la retirada.

EEUU vuelve a reconocer la influencia israelí en los planes de cambio de regímenes en Oriente Medio

El pasado 1 de noviembre, Stephen Hadley, consejero en seguridad nacional volvía a ligar públicamente los intereses de EEUU e Israel en Oriente Medio: una retirada de EEUU de Iraq animaría a "déspotas" y "extremistas" que pretenden "la eventual destrucción de Israel". Las declaraciones se producían en la reunión anual del influyente Comité de Relaciones Públicas Americano –Israelíes los días 30 y 31 de octubre. Hadley afirmó que donde permaneció una vez el régimen de Saddam Hussein, la construcción de la democracia haría de Iraq un firme aliado de EEUU: "Israel no debería ser condenado, en nombre de la estabilidad, a vivir en una región donde déspotas amenazan con 'borrarle del mapa'". Durante su intervención Hadley se marcó un considerable farol, al recordar el proyecto de que el nuevo Iraq venda electricidad a Israel. Cuando Iraq no dispone de electricidad para sí mismo, llegando incluso la ciudad de Basora a cerrar acuerdos autónomamente con Irán para que este "déspota" país le venda electricidad. Así mismo, Hadley dio cuenta de la apertura en Bagdad de una sede del Instituto de Investigaciones sobre el Medio Oriente, un think–tank con sede en Washington, pero ligado a Israel y al Mossad; la ciudadanía de Iraq ve esta inauguración como una confirmación del proceso de infiltración israelí en el país. Hadley no dudó en recordar los acuerdos por los que el petróleo del norte de Iraq llegaría a Israel a través de un nuevo oleoducto. La total pleitesía de Washington para con el proyecto colonial sionista quedaba recogida en las declaraciones de Hadley: "Como todos sabéis, el presidente Bush es un dedicado amigo de Israel. Ha asegurado al primer ministro Sharón que nunca pedirá a Israel que asuma riesgos para satisfacer intereses o políticas estadounidenses". Para dar prueba de ello, Hadley aseguró que la administración Bush había dado luz verde a Israel para que realizara cuanto considerara necesario para eliminar el "terrorismo" en los TTOO, en base a la "agenda de la libertad" que tanto Israel como EEUU "comparten". Sobre la cuestión palestina Hadley no dejó de estar sintonía con el resto de declaraciones de la noche: "sólo cuando los palestinos sean capaces de expresarse por las urnas y no con bombas, seremos capaces de ponernos en el camino para la seguridad de Israel". Toda una muestra de delicadeza y conocimiento de causa

Los colaboracionistas no pueden gobernar Iraq sin los cañones de los ocupantes

Incluso el mayor de los colaboracionistas iraquíes, Ahmed Chalabi se ha manifestado vehementemente en contra de la retirada de las tropas de EEUU. Chalabi, el que fuera estafador perseguido por las autoridades jordanas, líder del Congreso Nacional Iraquí, en nómina de Washington desde 1992, proveedor de la mayoría de evidencias falsas que condujeron a la invasión de Iraq, en una entrevista con Al–Yazira afirmaba que "Iraq necesita ahora apoyo internacional en el contexto de las Naciones Unidas, para defenderse a sí mismo y su territorio, interna y externamente". Chalabi, en la actualidad "ministro" del petróleo iraquí, se excusaba por sus mentiras como si hubiera sido una equivocación: "Éramos héroes equivocados. Saddam ya no está y los americanos están en Bagdad; lo que antes se dijera no tiene importancia". En relación a las protestas que el Nigergate está generando, en el que Chalabi tuvo mucho que ver, el colaboracionista afirmó: "la administración Bush está buscando un chivo expiatorio". Por la "información" que proporcionó a Washington, el CNI recibió un total de 366 millones de dólares.

En cuanto al futuro de Iraq, Chalabi no dudó en situarlo en una órbita de enfrentamiento con sus vecinos: Iraq está rodeado por seis países que suman un total de 3 millones de soldados, 10.000 tanques y 2.000 aviones de caza () Estamos construyendo el ejército iraquí, y hasta que no acabemos, necesitaremos ayuda internacional para mantener la seguridad y defender Iraq". Quizá debió especificar: " defender nuestro Iraq".

Por su parte, el colaboracionista kurdo Masud Barzani, quien ocupa el puesto de presidente de la región kurda mantuvo una reunión con el primer ministro Blair el 31 de octubre. En declaraciones conjuntas a la prensa, ambos mantuvieron el discurso habitual: "son los terroristas quienes matan a civiles, no las fuerzas multinacionales o las de la seguridad iraquí". "Es el terrorismo la razón de nuestra permanencia en Iraq". Barzani volvió a insistir públicamente en la necesidad de que permanezcan las tropas de ocupación en el país, algo que Blair dio por seguro, mientras en Iraq permanezca "la insurgencia".

Sin embargo, a veces se intuye en los mass–media que para los ocupantes empieza a darse una necesidad de estabilizar las cosas en Iraq, "desde dentro", y que no termina de ocurrir "el hecho" (un partido, un movimiento, una figura) que sea capaz de generar el ambiente ideal para normalizar la situación en Iraq. El embajador en Iraq, Zalmay Jalilzad lo decía a las claras en declaraciones recogidas por el diario virtual pakistaní Paktribune: " la ausencia de un líder fuerte y carismático afecta a los esfuerzos de Washington para reconstruir Iraq". Acto seguido, ofrecía como modelo de líder a Hamid Karzai, el "presidente" afgano instalado por la OTAN. ¿Podemos intuir de estas declaraciones que la relación entre colaboracionistas y ocupantes en Iraq comienza a mostrar públicamente sus roces? Algo en común tienen Karzai y los colaboracionistas de la Zona Verde: ninguno de ellos extiende su "gobierno" mas allá del búnker de sus edificios presidenciales, y ninguno de ellos ha sido nunca lo suficientemente "fuerte y carismático" como para llegar al poder sin la ayuda de fuerzas extranjeras que los auparan.

Iraq le costará la presidencia a Berlusconi

En Italia se intuye un cambio de gobierno, parece haber un interés en que Berlusconi abandone su puesto como primer ministro. Y de ahí ha de entenderse que comiencen a aparecer como setas noticias que desmontan los argumentos adoptados por el "Cavaliere" para entrar en la guerra de Iraq o que demuestren las mentiras y la ilegalidad de la misma. Esta semana saltó a los medios la participación de los servicios secretos italianos en el montaje del famoso uranio de Níger que nunca existió. AP informaba que una comisión parlamentaria cerrada al público interrogó al subsecretario de Estado y al director del SISMI (la inteligencia italiana) sobre la fabricación de documentos y evidencias falsas que fueron entregados a Gran Bretaña (GB) y EEUU donde se decía que Saddam hussein quería adquirir 500 toneladas de uranio africano. El escándalo había saltado cuando el diario "La República",próximo al candidato Prodi de la oposición a Berlusconi, había publicado días antes esta información. Berlusconi quiso desmentirlo todo en una entrevista realizada por el diario conservador Líbero, pro–Berlusconi.

Por otra parte AFP informaba que el consejero de seguridad de George Bush, Stephen Adley admitía haberse reunido con Pollari, jefe del espionaje italiano, el 9 de septiembre de 2002, pero que no hablaron sobre el uranio.

Las inminentes elecciones en Italia, y el rechazo a la guerra de Iraq ha llevado incluso a Berlusconi a realizar declaraciones antes impensables: en un programa televisivo, aseguraba que intentó "muchas veces convencer al presidente americano de no ir a la guerra". De hecho, Italia no envió tropas a Iraq hasta la toma de Bagdad. A principios de año retiró 300 de sus 3200 efectivos

A pesar de la polémica desatada por estas palabras, Berlusconi quiso dejar claro que seguía siendo un fiel aliado de Washington. En rueda de prensa conjunta, Bush se expresaba: "Quieron agradecer el fuerte compromiso de Silvio con la libertad de los pueblos de Iraq y Afganistán. Aprecio profundamente su visión de paz en los Balcanes".

Por otra parte, también la Italia de Berlusconi se ha sumado al coro de voces hipócritas que se ha encrespado tras las declaraciones del presidente iraní Ahmadineyad, sumándose de nuevo al eje neo–con/sionista que se muestra alarmado ante la creciente influencia iraní en Iraq. De nuevo Fini, el dóberman de Bersluconi era protagonista de la noticia: volvió a lanzar la cuestión del programa civil nuclear de Irán como objeto de discusión en la ONU y tras las declaraciones del presidente iraní, afirmó que la comunidad internacional debía mostrarse firme ante Irán porque la seguridad mundial se veía amenazada por la política anti–israelí de Irán y su ambición por obtener armas nucleares. El portavoz del ministerio de Exteriores iraní, Hamid Reza Asefi, respondía a esto con "tales declaraciones lanzadas por un ministro de exteriores italiano son un ejemplo de indiferencia respecto a la masacre de palestinos indefensos a manos de Israel y su terrorismo de Estado. Israel está confundiendo a la opinión pública al magnificar el programa nuclear iraní , para desviar la atención internacional del genocidio sistemático de los palestinos"

Crecen las cifras adversas en el Frente Interno

El llamado "Nigergate", el escándalo público sobre la falsificación de documentos que pretendían demostrar que Saddam Hussein habría llegado a adquirir uranio en Níger, siendo este uno de los principales argumentos para la invasión de Iraq, ha sacudido esta semana a la impresionable sociedad estadounidense. Esta cuestión, ligada a una investigación previa sobre filtraciones de información desde la CIA, ha llevado al encausamiento del principal ayudante del vicepresidente Dick Cheney, su jefe de equipo Lewis Libby. Las acusaciones sobre Libby fueron realizadas por el fiscal que investiga la fuente de una filtración de información sobre la identidad de una agente de la CIA cuyo marido, Joseph Wilson, alto funcionario, se había convertido en un claro crítico de la guerra de Iraq y había negado que Iraq hubiera comprado uranio, hecho que estuvo encargado de investigar.

Esta semana un nuevo escándalo saltaba a la luz: la existencia de cárceles secretas de la CIA en algunos países "democráticos" de Europa del Este, Afganistán, Tailandia, y por supuesto Guantánamo e Iraq, donde se mantiene e interroga a prisioneros sospechosos de terrorismo al margen de toda legalidad. Dana Priest, pluma del Washington Post en un amplio reportaje, denunciaba la existencia de una compleja red de centros de detención ­llamados "puntos negros" – a nivel global, enmarcada en la guerra contra el terrorismo. Tal red descansa en la cooperación con servicios de inteligencia extranjeros y su mantenimiento en secreto respecto al gran público y a los congresistas que en teoría se encargan de controlar a la CIA. El acceso a los documentos relacionados con esta red está reservado a funcionarios de primera línea y al presidente de los EEUU. Tanto la CIA como la Casa Blanca lograron disuadir durante todo este tiempo al Congreso de que exigiera demasiada información al respecto, a diferencia de las actividades del ejército, de las cuales un mínimo control posibilitó el conocimiento de los abusos en Abu Graib o Guantánamo.

El Washington Post, a petición de altos funcionarios, no publicó el nombre de los países europeos donde se ubican "puntos negros". En estos "puntos negros" se aísla indefinidamente al preso, privado de todo estímulo sensorial, se practica torturas, se violan las leyes de los países en donde se instalan, e incluso las de los EEUU o las de su ejército, siguiendo un manual de interrogación propio de la CIA. La mayoría de los detenidos son capturados sin conocimiento de los gobiernos de los que son ciudadanos, y se ha podido ir sabiendo de los métodos empleados en su secuestro, interrogatorio y torturas en base a haber sido liberados poco a poco (libres de culpa, pero encarcelados por meses, años, y torturados) y haber llegado sus casos a sus respectivos gobiernos, asociaciones de derechos humanos, etc El número oficialmente reconocido de detenidos en los "puntos negros"es de 100, aunque 70 de los mismos, considerados de clase B, menos "peligrosos", fueron conducidos a prisiones de las naciones huésped, donde los interrogatorios continuaron con mano de obra local bajo la asistencia o dirección de efectivos de la CIA. A este proceso de entrega de sospechosos se le llama "rendición". Marruecos, Jordania o Egipto son algunos de los países en los que oficialmente se han producido "rendiciones".

La mayoría de los "puntos negros" se mantienen con partidas económicas aprobadas por el Congreso, pero sobre las que esta cámara no tiene información respecto a su utilización. Estos "puntos negros" surgen oficialmente a partir de 2001. En ese momento, el presidente dio autorización a la CIA para realizar operaciones clandestinas ilegales por las que perseguir, infiltrar, detener y asesinar a sospechosos de terrorismo en países de Oriente Medio, África o Europa y la necesidad de centros de interrogatorio secretos se hizo patente. Los primeros países colaboradores al respecto, aliados incondicionales de EEUU, fueron Egipto y Jordania. Durante la invasión de Afganistán, el número de detenidos se elevó tanto, que la CIA dispuso de ellos como si de ganado se tratara: los metía masificadamente en contenedores industriales para su traslado; de ahí los escalofriantes episodios de decenas de prisioneros muertos por la asfixia y cocidos por el calor en Afganistán. Otros casos que saltaron a la luz fueron los de la muerte por congelación de detenidos, expuestos toda una noche al frío glaciar del invierno montañés afgano. Por no hablar de la masacre de Mazzar Al–Sharif, donde la violencia de los interrogatorios condujo a una rebelión que se saldó con una carnicería de más de 400 presos muertos, reventados por continuos bombardeos sobre el patio de la prisión. Ninguna de estas muertes supuso juicio alguno a agentes de la CIA. Poco después, los puntos negros ya se ubicaban en Tailandia y Europa.

Todos estos datos, sumados a la creciente falta de confianza en la administración Bush, han producido ciertas críticas incluso entre oficiales de inteligencia: "El secreto que rodeaba al programa ya no es sostenible. Simplemente esto es una horrible carga". De ahí las filtraciones que generaron el polémico reportaje del Washington Post, que ha vuelto a dejar de piedra a la sociedad norteamericana.

El reciente anuncio de las 2.000 bajas oficialmente reconocidas, sumado al resto de factores que ponen en entredicho la eficiencia y honestidad de la administración Bush, se veía reflejada en la última encuesta realizada por USA Today, la CNN y la agencia Gallup: un 55% de los norteamericanos consideran que la presidencia de Bush es un fracaso. El New York Times , en edición especial, publicaba las fotos de 995 efectivos muertos en Iraq, con motivo de las 2.000 bajas. La respuesta de Bush al número fue predecible: "La guerra requerirá más sacrificio, más tiempo y más voluntad. Lo mejor que podemos hacer para honrar a nuestros soldados caídos es completar la misión". El número oficial de heridos reconocidos ronda los 16.000, de los cuales 7.837 se considera de gravedad. Sobre el tema de los heridos, es de reseñar una gran ironía: la tira de cómic diaria, "Doonesbury", distribuida cotidiniamente en 140 periódicos estadounidenses y que muestra una visión ácida y crítica sobre la administración Bush, en la figura de un excombatiente que intenta recuperarse de una depresión, se ha convertido en la principal esquina donde se presta atención a las protestas de los numerosos veteranos de la guerra que se quejan por la desatención que sufren por parte de su gobierno. Robert Thompson, director del Centro de Estudios Televisivos de la Universidad de Siracusa, lo decía bien claro en declaraciones al semanario "Morning Star": "Cuando tienes un país librando una guerra y el único lugar entre los mass media que parece estar preocupándose por sus heridos es una tira cómica, creo que la situación habla por sí sóla. Ver a los heridos podría hacer pensar a la gente, algo que no resulta de interés a un gobierno que impulsa una guerra".

Esta semana, la poderosa cadena de periódicos locales norteamericana Knight Ridder daba cuenta de otro tipo de bajas de guerra que apenas encuentra eco en los mass–media, las de los trabajadores civiles que acuden a Iraq en busca de sueldos elevados trabajando para la Ocupación. Existen más de 75.000 trabajadores civiles oficialmente reconocidos en Iraq, y el nivel de bajas se ha triplicado en los últimos 13 meses, siendo los últimos meses de una peligrosidad extrema. Esta semana, la cifra oficial de muertos hasta la fecha era de 428, y la de heridos de 3.963, según datos extraídos del Departamento de Seguridad Laboral (DSL) de EEUU. Sin embargo, dos de los principales contratistas civiles operando en Iraq han denunciado que sus bajas son mayores de las reflejadas en este informe. El censo de trabajadores se basa únicamente en los contratados por empresas estadounidenses. Las compañías privadas no están obligadas a informar de sus bajas a los medios, pero sí al departamento federal de seguros y reclamar en su caso al DSL según el Acta nacional de Defensa. Esta exigencia sólo se aplica a compañías que trabajan para el Pentágono, con lo que se estima que el número de civiles muertos mientras trabajaban para la Ocupación podría ser mucho mayor.

Sin embargo, y prosiguiendo en la obcecada retórica de "mantener el rumbo" en Iraq, el Secretario de Defensa Rumsfeld volvía esta semana a defender la política de EEUU en el país, apuntando además que con motivo de las elecciones del 15 de diciembre se incrementaría la cifra de efectivos militares allí destinados. En la actualidad son 159.000.

Sobre el tema de las inspecciones de organismos internacionales a las instalaciones para detenidos en Guantánamo, Rumsfeld se manifestó en contra de que una comisión de la ONU estableciera contacto con los presos, porque el gobierno "no desea incrementar el número de organizaciones internacionales con acceso a los detenidos". Sólo una delegación de la Cruz Roja ha disfrutado de ese "privilegio". Sobre la huelga de hambre de 27 de los 500 presos de Guantánamo, muchos de los cuales llevan tres años y medio detenidos, sin cargos ni asistencia legal, Rumsfeld soltó otra perla: "Lo hacen para llamar la atención de la prensa internacional". Por supuesto, para eso se hacen las huelgas de hambre. para llamar la atención sobre hechos concretos. El gobierno estadounidense se escudó también para su rechazo a la visita de la comisión de NNUU en que los detenidos no están "en suelo norteamericano", con lo que no está obligado a dar el permiso.

En Inglaterra, la popularidad de la guerra inicia una caída que parece inexorable. Tan inexorable como la retirada de reservistas del Ejército Territorial (Territorial Army, TA, formado por pseudo–reservistas a tiempo parcial al estilo de la Guardia Nacional estadounidense), estimada en una media mensual de 540 efectivos, según informaba la agencia Xinhua. El proceso de retiradas, iniciado en 1998, se ha visto muy agudizado tras la invasión de Iraq: de 160 en abril de 2003, se pasó a 690 en noviembre del mismo año La última cifra oficial es de agosto, establecida en 540. El TA supone el 10% de las tropas coloniales británicas destinadas en algún momento a Iraq, y también formará parte del próximo envío de tropas Afganistán

Quizá para contrarrestar el desánimo entre las tropas británicas, la corte marcial contra siete soldados acusados de asesinar a Nabdem Abdullah, un civil iraquí de 18 años, desestimó los cargos, en base a que no se daban "evidencias suficientes", informaba la BBC. El joven iraquí habia resultado muerto el 13 de mayo tras un ataque contra civiles iraquíes en Al–Ferka, al sur de Iraq. Si los soldados británicos cada vez tienen menos claro la legalidad de la guerra de Iraq, y saben que si además disparan sobre iraquíes pueden afrontar un consejo de guerra, existen razones de peso que hacen pensar que la justicia militar británica va a levantar mucho la mano sobre los pocos efectivos que lleguen a ser acusados alguna vez; de lo contrario, GB se arriesga a enfrentar una ola de desobediencia, dimisiones y deserción que no podría permitirse.

Informaciones volcadas desde la agencia IRNA y Arabic News, daban cuenta de la iniciativa que un grupo de 16, de los cuales 11 son del partido laborista, parlamentarios británicos pretendían hacer desarrollar a su gobierno: enviar una queja al Consejo de Seguridad de NNUU, por romper la Convención sobre Armas Biológicas y de Toxinas al permitir el envío de materiales prohibidos a Iraq. La iniciativa surge tras la publicación en EEUU del infome Riegle, donde se refleja las variedades de elementos susceptibles de componer armamento químico y biológico que EEUU vendió a Iraq durante los ochenta, incluyendo variedades deÄntrax.

Según las últimas decisiones legales de GB al respecto de la referida convención, Londres podría perfectamente formular una queja oficial a NNUU.

Australia, inamovible al lado de Bush

El compromiso militar de Australia con la ocupación de Iraq no cesa; se incrementa. Su última aportación es el despliegue sobre el terreno de batalla de una serie de aviones espía en miniatura teledirigidos, que proporcionarán apoyo aéreo en información a las tropas de tierra, según informaba la agencia Xinhuanet. El envío se hará para las tropas destinadas en Al–Muzanna, parte del contingente de 1300 efectivos destinados a la guerra de Iraq.

Por otra parte, el diario Herald Sun daba cuenta de la liberación de un ciudadano australiano, Ahmed Aziz Rafiq, tras dos años de estancia sin cargos en la cárcel de Abu Graib. Hay otro detenido australiano en Iraq, preso sin cargos, pero no por las tropas de ocupación ni por el gobierno títere, sino por obra de la UPK kurda, desde hace un año. El caso ha provocado gran polémica en Australia, en base a la absoluta alegalidad de las detenciones, y la ausencia de todo respaldo legal a los detenidos, salvo la "buena" voluntad de quienes los retienen. En el segundo caso, quien lo retiene no es ni siquiera un gobierno, sino la milicia de un partido político; en otra parte del mundo se estaría hablando de secuestro. En Iraq se habla de lucha "contra el terror".

Relación de ataques, amenazas y abusos, sectarios y sobre civiles

En Kirkuk, la rica capital petrolera de las regiones kurdas de Iraq, el proceso de limpieza étnica para fomentar una mayoría étnica kurda sigue adelante, tal y como informaba un reportaje a fondo del Washington Post; la constitución colonial "aprobada" el 15 de octubre dispone que antes de acabar el año 2007 se ha de realizar un referéndum que disponga el estatuto final de la provincia. Una de las concesiones que los grandes partidos colaboracionistas kurdos, la UPK y el PDK han obtenido de la Ocupación es la aprobación de un proceso de retorno de kurdos a la zona. Considerando que el gobierno central es "demasiado lento", son los partidos kurdos , con el beneplácito de las tropas de EEUU, han tomado control del proceso y están invirtiendo millones de dólares en efectivo, materiales de construcción y ayuda técnica; están levantado poblados enteros y ofreciendo incentivos para el retorno a kurdos emigrados o expulsados de la zona en los últimos veinte años. Al mismo tiempo, llevan adelante una política de intimidación o compra de propiedades sobre árabes, asirios y turcomanos; 350.000 es el número de kurdos que con la protección de las tropas ocupantes se han instalado en la zona. La intención es volcar definitivamente el balance demográfico de la ciudad y sus alrededores, para ligarla al proyecto fragmentario kurdo que están impulsando tanto Israel (quien podría estar aconsejando a los partidos kurdos tanto a la hora de realizar políticas de colonización, como a la de ejecutar políticas de limpieza étnica) como EEUU. Tales políticas incluyen el rapto de chicas jóvenes o la matanza de ganados (al estilo de los colonos israelíes en Cisjordania), que ha llevado a muchos granjeros a cambiar de oficio. Según Tahsin Mohammad Ali, concejal turcomano de la ciudad: "Están intentando cambiar la demografía de Kirkuk". Bajo la ciudad hay "un océano de petróleo" sin el cual un posible Kurdistán independiente podría ser muy difícil. En el proceso de "kurdización" necesario para proceder a la fragmentación de esa parte de Iraq ya se están transformando los nombres de calles, escuelas, edificios

Otra de las formas de abuso de las que apenas se habla es la toma de propiedades civiles, viviendas en concreto, donde las unidades del ejército de ocupación realizan misiones fuera de sus bases. Un reportaje de un periodista empotrado de AP mostraba esta semana algunos aspectos que pretendían pasar bajo un prisma simpático de esta práctica habitual de los ocupantes. Sin contar con la postura de los dueños de las viviendas, los marines, en sus operaciones de guerra ocupan viviendas particulares, instalándose a sus anchas, convirtiendo las viviendas de los civiles en objetivos bélicos y a los propios civiles en escudos humanos involuntarios en caso de que no deseen abandonar sus viviendas. La ocupación de viviendas es una práctica habitual, y puede durar días o semanas, dependiendo de la duración de la campaña. Tal práctica parece violar flagrantemente la tercera enmienda a la constitución de EEUU: "Ningún soldado, ni en tiempo de guerra ni de paz, se instalará en vivienda alguna sin el consentimiento del propietario, salvo en la manera en que las leyes prescriban".

Un informe público del Pentágono situaba en 26.000 el número de iraquíes "muertos o heridos por la insurgencia" desde el 1 de enero de 2004. Una semana antes un portavoz del ejército estadounidense ocupante cifraba en un máximo de 30.000 los civiles iraquíes muertos desde marzo de 2003. Un informe reciente de Associated Press estimaba en 3.870 las bajas civiles en los últimos seis meses. Los informes independientes más fiables, estiman entre 30.000 y más de 100.00 las bajas civiles. Entre este baile de cifras, lo cierto es que a diario, civiles inocentes iraquíes pierden la vida bajo los bombardeos aéreos, en el fuego de ocupantes y colaboracionistas y en atentados indiscriminados de dudosa autoría.

La campaña estadounidense de violencia contra civiles iraquíes no cesa en el oeste del país. Mas aún: las acciones se han recrudecido tras el referéndum de la constitución colonial. El 31 de octubre, los ataques aéreos de EEUU dejaron un total de 40 muertos entre la población civil de Al–Qaim; la mayoría mujeres y niños, según el director del hospital de la ciudad en declaraciones a IRIN. Los militares estadounidenses presentaron la acción de esta manera: "Fuerzas de la coalición, actuando sobre numerosas fuentes de inteligencia y datos ofrecidos por ciudadanos de la zona, realizaron un ataque aéreo sobre dos casas–refugio de terroristas de Al–Qaeda cerca de Ubaydi, Iraq". El doctor Ahmed Al–Rabia, del hospital de Al–Qaim, manifestaba que "llevamos recibiendo heridos desde el lunes por la mañana". Al–Rabia cifró finalmente en 43 muertos y 25 heridos la cantidad de víctimas recibidas en el hospital: "es muy desagradable que ataquen a gente inocente y simplemente digan luego que habían apuntado a 'insurgentes'". Cuando las cifras de la masacre salieron a la luz, el centro de información de los ocupantes emitía la siguiente nota: " No tenemos datos sobre que algún civil haya resultado muerto en este ataque contra las casas de los terroristas. El uso de munición de precisión guiada empleada en la destrucción de las dos casas–refugio de los terroristas mitigó el riesgo sobre los civiles de la zona".Al margen de este ataque, cuatro viviendas más habían sido asaltadas en la zona por los ocupantes. Tras estos hechos, un nuevo éxodo fuera de la ciudad daba comienzo, ante el miedo a sufrir nuevos ataques.

Al –Yazira daba cuenta de los ataques casi diarios contra el pueblo de Hsaiba, en la frontera con Siria; seis viviendas fueron destruidas por los aviones estadounidenses, mientras que tropas estadounidenses establecían un cerco alrededor, impidiendo a nadie entrar o salir. El periodista de Al–Yazeera informaba que mientras intentaban rescatar a las víctimas de los escombros los aviones volvieron a bombardear, y que Hsaiba se estaba convirtiendo "en otra Faluya".

A continuación detallamos una lista de ataques sectarios y sobre población civil efectuados por ocupantes y colaboracionistas o por elementos sospechosos de pertenecer a éstos. Todos los datos están tomados de los informes diarios que miembros de Free Arab Voice redactan tras un seguimiento cotidiano de diversos medios no empotrados presentes en Iraq.

3 de noviembre: miembros de las Brigadas Badr abren fuego sobre fieles en oración en una mezquita sunní en Al–Iskandariya. EL doctor Mahmud Farhan relataba el caso: 7 víctimas mortales y cinco herido.

3 de noviembre: tropas de EEUU, en un asalto en Al–Habbaniya, expulsan a 30 familias de sus viviendas con la excusa de que tropas ocupantes habían sido atacadas desde el vecindario. La zona desalojada se convirtió en un acuartelamiento estadounidense.

3 de noviembre: otro ataque aéreo en Al–Qaim deja una cifra de al menos 20 civiles muertos y tres viviendas destruídas.

2 de noviembre: el "ministro" de Defensa, Saadun Al–Dulaimi amenazó públicamente con derribar las viviendas de quienes ofrezcan refugio a guerrilleros.

2 de noviembre: tropas y tanques de EEUU cierran la mezquita de Al–Yunaidi Al–Bagdadi en Al–Yusufiya, impidiendo el paso a los fieles.

2 de noviembre: la policía colaboracionista y las milicias kurdas lanzan una ola de arrestos entre los islamistas kurdos, apoyados por fuerza aérea de EEUU, en Irbil.

1 de noviembre: Quds Press informa que las fuerzas de ocupación estaounidenses lanzan la operación "Toro Salvaje" conjuntamente con fuerzas colaboracionistas al sur de Bagdad; 40 civiles arrestados, decenas de viviendas asaltadas, sumados a los 80 que las fuerzas de Interior habían detenido días atrás; todo ello estaba provocando que los vecinos abandonaran la zona progresivamente.

31 de octubre: EEUU y fuerzas colaboracionistas de Interior realizan arrestos en masa en Salman Bak tras cerrar por completo las entradas y salidas de la ciudad. Más de 70 civiles detenidos.

31 de octubre: docenas de residentes se manifiestan en Al–Latifiya como protesta por el arresto sin razón aparente de una vecina, Sayida Al–Jalidi, a manos de fuerzas del "ministerio" de Interior, a la que además dispararon en una pierna. También detuvieron a dos ancianos Seijs, de más de 70 años de edad: Yabir Al–Jalidi y Salman Al–Gabiri. Esta es la primera vez que fuerzas colaboracionistas siguen la táctica estadounidense de secuestrar a las mujeres o familiares de supuestos guerrilleros para forzar la entrega de estos.

31 de octubre: un oscuro atentado mata y hiere a docenas de civiles en una zona comercial en Basora en el momento festivo de rotura del ayuno en Ramadán.

30 de octubre: otro coche–bomba sin reivindicar asesina a 25 civiles y hiere a 45 más en Al–Huuaidir, un pueblo cerca de Baquba, en el momento festivo de rotura del ayuno.

30 de octubre: las brigadas Badr efectúan arrestos en masa en un barrio sunní de Al–Nasiriya: la campaña de arrestos en la zona supera los 100 detenidos.

29 de octubre: tropas de EEUU lanzan una campaña de arrestos en masa en Arab Yabbur, al sur de Bagdad: tras un toque de queda en la zona, Quds press informaba que decenas de vehículos militares de invasores y colaboracionistas ocuparon la zona. No hay datos exactos del número de vecinos presos.

29 de octubre: efectivos de la brigada de Interior "Al Huseyn", lanzan una campaña de arrestos en Al–Madaín: al menos 120 miembros de las tribus Dulaymí y Yanabiyí detenidos.

29 de octubre: tropas de EEUU y colaboracionistas sellan la zona de Al–Bazayiz y lanzan una campaña de arrestos en masa, con apoyo aéreo de helicópteros estadounidenses. En la zona se había producido poco antes el confuso enfrentamiento entre hombres armados sin identificar y la milicia de Al–Sadr, acompañada de algunos efectivos de la policía iraquí. Poco después, y a través de Internet, el grupo Ansar Al–Sunna declaraba ser la otra parte implicada. El "ministerio" de Interior rápidamente intentó tomar partido de la situación, dándole un sentido de enfrentamiento religioso. El episodio tenía todo el aspecto de ser una provocación sectaria destinada a enfrentar a la incómoda ­para la Ocupación– milicia de la corriente Sadr con las fuerzas sunníes de la zona. Al–Sadr pedía mucha calma al respecto, culpando de ciertos aspectos de la situación a elementos indisciplinados de su gente, al mismo tiempo que declaraba su apoyo a la Resistencia, afirmando que la Resistencia combatía a los colaboracionistas sin discriminación de ningún tipo; la unidad de Iraq y su única identidad nacional fueron los otros puntos reflejados en su comunicado. Poco después, tropas ocupantes y colaboracionistas tomaron ventaja de la situación y arrestaron a numerosos vecinos de la zona, incluyendo al influyente Seij Ziyad Muhammad, jefe de la tribu de los Al–Bu Majma, junto con algunos de sus hijos menores, lo que en otro contexto hubiera sido bastante complejo.

28 de octubre; sin poder llegar a confirmarlo, la agencia Mufakirat informaba del bombardeo aéreo de una vivienda en Abu–Farrach, al norte de Ramadi, que podría haber matado a cuatro civiles, incluyendo a mujeres y niños.

28 de octubre: tras un ataque de la Resistencia, tropas de EEUU lanzan una campaña de registro y asalto de viviendas en el pueblo de Al–Auzi, llegando a abrir fuego indiscriminado, dañando comercios, y golpeando a los civiles presentes en la zona comercial.

27 de octubre: dos civiles mueren en Faluya bajo el fuego indiscriminado de ocupantes y colaboracionistas tras un ataque de la Resistencia.

El movimiento Sadr volverá a presentarse a las próximas elecciones

Esta semana, la corriente de Moqtada Al–Sadr era objeto de un sospechoso ataque que según representantes del movimiento, tenía todo el aspecto de haber sido "una emboscada" cuidadosamente preparada, enfocada a provocar el enfrentamiento del ejército del Mahdi y sectores de la Resistencia; Hasta 25 podrían haber sido los milicanos saderistas caídos cuando respondían a una denuncia de secuestro con rehenes civiles. Sin embargo, en un extenso artículo del semanario beirutí Monday Morning., el propio Moqtada informaba de la intención del movimiento Sadr de formar "una lista nacional que represente a los iraquíes desde Sulemaiya a Basora", en la que participen iraquíes de toda confesión o etnia, al margen de la retórica de división étnica y confesional manejada por ocupantes y colaboracionistas. Esta lista, formada también por sunníes de la castigada provincia de Al–Anbar, se presentará a las elecciones del 15 de diciembre para "confrontar la difícil situación del país, evitar que el ocupante y los enemigos de Iraq logren sus objetivos, consolidar la identidad nacional y reafirmar la unidad de Iraq". Al mismo tiempo, un sector del movimiento también se ha integrado en la lista shií general; de esta manera los saderistas realizan un movimiento de expansión destinado a ocupar cuantos escaños sea posible tras las elecciones. La formación de Sadr se manifestó en contra de la Constitución colonial, y es de suponer que tras las elecciones, en el periodo de cuatro meses abierto para presentar enmiendas a la Constitución, este trabajo de oposición continuará.

El analista Joost Hilterman, del International Crisis Group, definía los motivos por los que esta oposición continuará: "La Constitución votada el 15 de octubre es una constitución sectaria que ayudará a que el país se deslice hacia la guerra civil en lugar de evitarla".

La influyente Asociación de Ulemas, aliada puntual del movimiento Sadr, finalmente decidió llamar al boicot de las elecciones del 15 de diciembre, condicionando toda su participación en el "proceso político" en Iraq al establecimiento previo de un calendario de retirada de los ocupantes.

Mike Whitney, analista, se refería en un artículo publicado en Information Clearing House a la formación Frente de la Concordia Iraquí, un movimiento que pretende presentar varios candidatos al parlamento en los próximos comicios; tras este nombre se encuentra una organización "sunní", formada por Washington, cuya principal tarea será enfrentar de forma directa desde el parlamento los planteamientos de la resistencia desde una retórica fragmentaria "sunní" ; uno de sus principales representantes, Alla Makki , ya ha confirmado que intentará convencer a los guerrilleros de que depongan las armas y se unan al proceso político; un movimiento semejante parece ser un primer paso en una estrategia planificada que conduzca a una mesa de negociación con los ocupantes, algo que hubiera resultado impensable hace doce meses, y que parece una posibilidad cada vez mas cercana, impulsada por la fuerza de las cifras que indican el fracaso de la ocupación militar.

El pasado 28 de octubre finalizó el plazo para registrar candidaturas y participaciones en vista a las elecciones del 15 de diciembre. 21 coaliciones y 230 partidos políticos de toda suerte y calibre formalizaron sus perfiles electorales. De esta nebulosa de grupos, sólo cinco tendrá algo que decir en el Iraq colonial: el bloque kurdo, la lista shií, un par de partidos sunníes y la formación secular del favorito de EEUU, Iyad Alaui. Todos ellos aspirarán a los 275 escaños, de los cuales 230 se distribuyen por representación proporcional respecto a las 18 provincias de Iraq. El resto de escaños se destinarán a los partidos que sin obtener escaños por provincias logren reunir suficientes votos en el total del país.

La provincia de Mosul, Nínive, podría sumarse en masa a la Resistencia

Los líderes locales de Mosul amenazaron con unirse a la guerrilla de la Resistencia. El diario Al–Sharq Al–Ausat la situación de creciente desasosiego en la provincia de Nínive, donde las sospechas de fraude electoral ya habían calentado los ánimos previamente: la posible manipulación de los votos en el referéndum sobre la constitución colonial podría haber posibilitado el "sí" oficial de la provincia. En esta ocasión, la destitución del jefe provincial de policía es el objeto del conflicto. Ahmad Muhammad Al–Yuburi, jefe de la policía en la provincia de Nínive está acusado de corrupción por parte del "ministerio" de Interior. Ante esta noticia, 51 líderes de clanes locales (kurdos y árabes) se coordinaron con la policía local para establecer un control propio armado en la zona en caso de que la destitución se desarrollara. Cientos de vecinos y policías armados se concentraron alrededor de la sede del gobierno regional en protesta. Tropas de EEUU evitaron el asalto sobre el edificio. Las protestas con megáfono aludían al progresivo control sectario de los colaboracionistas kurdos en las instituciones locales.

En una carta enviada por los líderes de los clanes, se advertía que en caso de producirse el despido de Al–Yuburi, Mosul pasaría a convertirse en un núcleo de la Resistencia. El propio Al–Yuburi avisaba que los partidos títere kurdos y shiíes pretendían sembrar el terror en la provincia tras su destitución, con la intención de frenar el voto sunní en las futuras elecciones del 15 de diciembre, con lo que la provincia pasaría a "seguir el camino de Saladino y Al–Anbar", provincias abiertamente opuestas a la Ocupación con alta actividad armada contra los ocupantes y colaboracionistas.

Más sobre el juicio a Saddam Hussein

El equipo legal del ex–presidente iraquí, siguiendo en su estrategia de demostrar las ilegales condiciones en que pretende celebrarse, internacionalizando de paso la cuestión sobre bases jurídicas, y como forma de protesta por el asesinato impune de componentes del equipo legal de Saddam Hussein, envió esta semana una carta a Kofi Annan, donde se solicitaba el traslado del proceso al tribunal de La Haya. La carta, firmada por el abogado Nayib Al–Nauimi, solicitiaba "un equipo internacional de jueces independientes e imparciales". Al mismo tiempo solicitaba presión frente a las autoridades colaboracionistas y sus responsables estadounidenses para que reconocieran a los encausados en el proceso contra Saddam en calidad de "prisioneros de guerra" y se quejaba de que al equipo legal todavía no se le había proporcionado una copia de la lista de acusaciones ni se les había otorgado un mínimo de tres meses para preparar la defensa. Por supuesto, Al–Nauimi llamaba la atención en su misiva sobre la situación de total inseguridad a la que se ven enfrentados los integrantes del equipo legal de Hussein, destacando el asesinato, la semana pasada, del abogado defensor Saadún Yanabi, probablemente a manos de elementos del ministerio de Interior: "nos encontramos en una situación muy peligrosa donde el actual gobierno iraquí no tiene ningún control sobre la seguridad que necesitamos para asistir y participar en el juicio"

Corea del Sur comienza a retirar sus tropas

Según informaciones de UPI, el gobierno surcoreano planea retirar 1.000 de sus efectivos de Iraq durante el próximo año, del total de 3.250 destinados al país ocupado. Su tarea hasta la fecha eran labores "de reconstrucción" en la ciudad de Irbil, al norte del país, misión que expirará el próximo 31 de diciembre. El contingente surcoreano es el tercero más numeroso en Iraq, tras los 161.000 estadounidenses y los 8500 británicos.

Las dudas sobre Arabia Saudí y la posibilidad de invadirla

Según informaciones volcadas por el New York Times, los dirigentes estadounidenses dudan de la capacidad saudí de producir tanto crudo como anunciara Riyad la pasada primavera. Los números ofrecidos entonces, que reflejaban un aumento de la producción, dieron confianza a Washington para poder mantener sus reservas estratégicas, en caso de guerra o desastre. Sin embargo, las predicciones ofrecidas por el reino árabe, que ya fueron recibidas con cierto escepticismo por algunos funcionarios estadounidenses, han demostrado estar por encima de las sumas reales. La disparada subida de los precios de crudo ha obligado a EEUU a depender aún mas de extracciones extra de las reservas del golfo, sobre todo las de Arabi Saudí. Un informe hasta ahora secreto de la administración ofrece unos cálculos escépticos acerca de la capacidad del crudo del golfo para suplir las necesidades estadounidenses. El principal fallo en el esquema general es la falta de rentabilidad del crudo iraquí; La Resistencia en su acción de sabotaje sobre la infraestructura petrolífera gestionada por la ocupación y el gobierno títere ha aplastado todas las expectativas de explotación que EEUU mantenía antes de la invasión.

Tenemos que recordar aquí el preocupante informe publicado por World Tribune el 1 de noviembre: el Comité de Fuerzas Armadas del Congreso consideraba públicamente el pasado 26 de octubre la posibilidad de un acción militar, una invasión en concreto; tal consideración se lanza tras un estudio de prospectiva lanzado desde la Brookings Institution, un think–tank de la derecha liberal norteamericana, donde se estudia tal posibilidad si la situación en Arabia Saudí así "lo exigiera". Se considería entonces, en base a mantener asegurado el suministro de crudo, el envío de hasta 300.000 efectivos con vistas a instalar un gobierno pro–estadounidense.

El escándalo hipócrita de "Petróleo por Alimentos"

Siguiendo con el proceso de erosión al que EEUU intenta someter a la ONU, particularmente demostrado desde la elección del neocon John Bolton, abiertamente opuesto a la existencia de tal organización, esta semana saltaba a primera plana el "descubrimiento" de que unas 4.500 compañías habrían realizado supuestamente "sobornos" para lograr contratos con el régimen iraquí durante los años del Embargo genocida que diezmó a la población iraquí. El informe, liderado por el que fuera presidente de la Reserva Federal de EEUU, Paul Volcker, establecía en 1.800 millones de dólares la cantidad total.

El informe afirma que el gobierno iraquí favoreció también a las empresas que de alguna manera colaboraron en iniciativas en contra de las sanciones. Las compañías británicas, estadounidenses y japonesas fueron excluídas, pero existen pruebas documentadas que demuestran que empresas norteamericanas procedieron a cerrar tratos con el gobierno iraquí a través de empresas–tapadera europeas. En el estado español, existen evidencias que así lo prueban, y además entre las filas de los beneficiados se encuentra el misterioso Javier Robert, quien podría tratarse de Javier Rupérez, miembro del PP destinado a plazas diplomáticas en Oriente Medio.

Sin embargo, algunas voces dentro de las altas esferas de la política han lanzado públicamente sus dudas sobre la autenticidad de algunos de los documentos presentados por NNUU en su investigación. Por ejemplo, altos funcionarios y políticos rusos. El ministro de exteriores ruso, Sergei Lavrov, declaraba que algunos de estos documentos llevaban firmas falsificadas. "Los documentos que nos han mostrado estaban falsificados; contenían firmas falsificadas de funcionarios cursos", afirmaba en declaraciones recogidas por MosNews. Por otra parte, el diputado Zhirinovski, acusado de recibir cuotas de algunas partidas de crudo del régimen de Saddam Hussein, ha negado todos los cargos: "no he firmado ningún contrato y no he recibido ni un centavo del gobierno iraquí".

En cualquier caso, lo realmente vergonzoso es que sean las pérdidas de millones de dólares en supuestos procesos ilegales las que sigan creando más escándalo que las de millones de vidas bajo argumentos legales. En todo el revuelo mediático creado en torno a este asunto aún por resolver, no se ha alzado ni una sola voz que recordara que el mantenimiento de las sanciones que mataron a mas de un millón de personas– fue una política genocida, impuesta legalmente desde el Consejo de Seguridad de NNUU por EEUU, destinada a debilitar a Iraq y posibilitar posteriormente su ocupación. Un genocidio criminal realizado desde la supuesta legalidad y con la más absoluta impunidad. Ahora, los mismos que lo posibilitaron e impulsaron, osan protestar están en su derecho– porque 1.800 millones de dólares una cantidad no tan elevada si comparamos el contexto del mercado del petróleo– no cuadran en un proceso de varios años.

El último dato de relevancia al respecto: la excusa de los "sobornos" del anterior gobierno iraquí es una estratagema recurrente por parte de la administración Bush para intentar deslegitimar al movimiento contra la guerra y la ocupación de Iraq, a través de algunas de sus figuras más prominentes; este es el caso del parlamentario británico George Galloway, o el actual sobre Gilles Munier, principal responsable de la Asociación de Amistad Franco–Iraquí, acusado de favorecer contactos con empresas francesas que se comprometieran con campañas solidarias con el pueblo de Iraq y contra el Embargo.

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