Diario
de la resistencia
CSCAweb,
noviembre de 2005
Las
dificultades bélicas de ocupantes y colaboracionistas: mercenarios
sudamericanos, tecnología punta y cursos de formación urgente para
intentar evitar lo inevitable
Las
dificultades frente a la creciente sofistificación y efectividad de
las tácticas de la Resistencia han llevado al ejército iraquí ,
informaba Reuters, a lanzar una medida desesperada; recuperar a los
antiguos oficiales del ejército de Saddam Hussein. También es, a
pesar de que los portavoces del ejército de EEUU intentan ahora
despegarse de la retórica de fragmentación étnico–religiosa que
suelen exhibir, un intento de mostrar a cuadros sunníes combatiendo a
guerrilleros de la misma adscripción religiosa.
El
coronel Fred Wellman, portavoz del Mando Multinacional que supervisa
la formación de tropas colaboracionistas iraquíes, afirmaba:
"No me gusta definir esta iniciativa como una reclutamiento entre
sunníes, sino como un reclutamiento de antiguos oficiales". Sin
embargo, la intención es esa, demostrar que en el nuevo ejercito
colonial iraquí no hay divisiones sectarias, mientras que toda la política
y las acciones bélicas de las instituciones coloniales en Iraq se
desarrollan, por supuesto, según parámetros sectarios que
posibilitan la fragmentación del Estado.
Washington
recibe la presión de la sociedad estadounidense, una vez superado el
listón psicológico de la cifra oficial de 2.000 bajas. Y para
contrarrestar esa presión necesita desesperadamente dar la impresión
de que el ejército iraquí corresponde al nuevo y democrático Iraq,
admitiendo a todo recluta sin discriminación religiosa, política o
étnica. El ministro de Defensa colaboracionista hizo un llamamiento a
todos los ex–oficiales entre los rangos de teniente y mayor para
volver a "servir a la preciada patria"la misma que el
ministro ha puesto de nuevo en manos del colonialismo. Por supuesto,
esta "repesca" va a estar sujeta a filtros ideológicos y de
currículo, para evitar que elementos incómodos se puedan introducir
en las filas del ejército colaboracionista. Según la propaganda
oficial, la medida ha sido "un éxito", en base a los altos
niveles de desempleo existentes en el país. El nuevo ejército
colonial iraquí está desesperadamente necesitado de mandos medios y
oficiales.
Igualmente
desesperados por afrontar la creciente efectividad de la Resistencia
parecen estar los militares estadounidenses; el New York Times daba
noticia el 2 de noviembre de la próxima inauguración de una
"escuela de contrainsurgencia" para oficiales en Iraq. La
nueva instalación, situada en la base de Tayi dará un curso de
formación sobre métodos, facciones y datos de la Resistencia y cómo
responder a todo ello, a todo oficial recién llegado al país. Se
espera que en breve una formación semejante la puedan recibir los
oficiales del ejército colaboracionista. Parece ser que esa
Resistencia que según Rumsfeld, y hace unos meses "estaba dando
sus últimos coletazos" no deja de dar serios problemas, y
obligando a EEUU a invertir cada vez más tiempo y dinero en
combatirla. Esta semana, EEUU dio comienzo a la retirada de sus
efectivos de la capital de Al–Anbar, Ramadi Tan sólo la base de
Al–Uarrar, informaba Mufakirat Al–Islam, quedaría en la zona como
representación de las fuerzas de ocupación. Las tropas ocupantes
solicitaron a las fuerzas colaboracionistas protección en la
retirada. Una fuente en el ejército colaboracionista declaraba a la
agencia que tal movimiento podría ser temporal, o una prueba para ver
el desenvolvimiento de las fuerzas iraquíes; también existe la
posibilidad de que se trate de una retirada real, en calidad de
derrota.
La
agencia UPI daba cuenta esta semana de que los responsables del ejército
de EEUU eran conscientes de que sus "caros vehículos
blindados" no estaban preparados para soportar las explosiones de
los artefactos que la guerrilla iraquí había comenzado a utilizar.
Los "nuevos" artefactos en realidad corresponden a formas más
racionales de emplear los explosivos, a los que se les da forma
puntiaguda, convirtiéndose en una especie de enorme bala perforadora,
capaz de atravesar 4 pulgadas de blindaje a cien metros de distancia.
Es una táctica que lleva años utilizando la resistencia libanesa
para combatir la ocupación israelí. Este tipo de reconocimiento
publico, ahora sobre la incapacidad del blindaje estadounidense para
frenar los devastadores efectos de los artefactos de la Resistencia,
puede interpretarse de dos formas: de una honestidad forzada por la
crudeza de la guerra en Iraq, destinada a generar el clima necesario
para ir retirándose, o de una forma de ir proporcionando argumentos
para una mayor inversión militar en el pais ocupado.
Ofreciendo
otro ejemplo, quizá involuntario, quizá propagandístico, de cómo
la Resistencia iraquí está obligando a las tropas estadounidenses a
gastar miles de millones en intentar sofocar la guerra de liberación
nacional, representantes del ejército de EEUU mostraban orgullosos
otro avance de la tecnología militar: 15 millones de euros y cinco años
de investigación ha costado al contribuyente norteamericano la
fabricación de un aparato de identificación de francotiradores
llamado Weapon Watch. Al mismo tiempo, la empresa israelí Elbit
Systems ha introducido otro artilugio llamado Sistema de Control de
Francotirador. El sistema final del Weapon Wacht es por infrarrojos y
permite identificar el arma y la posición de quien la dispara en milésimas
de segundo, pesa menos de 10 kilos y se puede instalar en vehículos.
Los francotiradores iraquíes son un serio problema para los
ocupantes. En la actualidad hay cuatro máquinas así operando en Iraq,
pero a pesar de lo que dice la propaganda del ejército
norteamericano, no parece estar clara su ponderada efectividad sobre
todo, porque olvida la premisa principal del francotirador de combate:
nunca realizar dos disparos desde el mismo lugar. El sistema israelí
es un conjunto tecnológico de cámaras y pequeñas computadoras
adosadas al francotirador, que permite al coordinador del equipo de
infantería ver simultáneamente los objetivos de varios tiradores,
dar órdenes por sms, y registrar hasta 30 horas de imágenes para su
posterior estudio.
Otra
muestra de la intensidad con que los estadounidenses se ven obligados
a operar en Iraq la ha dado esta semana el periodista David Wood,
quien en un reportaje difundido en varios medios en internet,
informaba que las tropas de ocupación estaban empezando a utilizar
munición de stocks que llegaban a datar de la segunda guerra mundial.
Se refería al tipo de munición empleada por los M–2, las
ametralladoras pesadas adosadas a la torreta de los Humvees, cuyo peso
y calibre ( casi 100 gramos por bala, 50mm) las convierte en una
herramienta de destrucción aterradora, capaz, según testimonios de
los ocupantes de desgajar literalmente a una persona, atravesar el
muro de cemento detrás suyo y los muros de varias viviendas situados
mas atrás. Estas balas tienen un alcance de casi cinco kilómetros, y
viajan a una velocidad de mas de 2700 kms por hora en sus primeros mil
metros, y al parecer, están siendo usadas en tal medida en Iraq que
el suministro llega a flaquear a veces. En anteriores ediciones de
este Diario ya dimos cuenta de que el gasto general de munición de
los ocupantes en Iraq es tal, que deben comprar existencias a Israel.
Uno de los usos mas comunes de las ametralladoras M–2 es el servicio
que prestan al final de una columna de Humvees, como última medida
ante un ataque con coche bomba, pero su falta de exactitud establece
que en una distancia media (más de 800 metros) sean necesarios una
media de 40 disparos para lograr una diana completa. A corta distancia
son demoledoras, pero normalmente si un conductor fedai está a corta
distancia, ya suele ser tarde para la columna; esa falta de precisión
puede hacer explotar la carga y en todo caso si explota ,aún sin
impactar contra la columna, la deflagración resulta muy dañina.
Otro
ejemplo de los aprietos de los ocupantes en Iraq lo indica su
necesidad de empresas privadas de seguridad, quienes a veces llegan
incluso a tomar cuidado de los oficiales estadounidenses que el propio
ejército norteamericano es incapaz de proteger. IPS informaba el 31
de octubre que empresas de seguridad estadounidenses, concretamente la
empresa Triple Canopy, con sede en Illinois– estaba contratando a
200 expolicías y exmilitares peruanos como guardias de seguridad con
destino a Iraq, lo que estaba provocando un escándalo en el país
latino. La media de sueldo de un mercenario peruano en Iraq es de
menos de 30 euros diarios, una miseria para cualquier país europeo,
pero un dinero bastante considerable en el empobrecido Perú. Los
mercenarios peruanos suelen estar fogueados en la lucha contra la
guerrilla maoista de Sendero Luminoso, algo muy valorado por los
empresarios estadounidenses. Triple Canopy proporciona guardaespaldas
a empresarios implicados en la "reconstrucción" del país y
goza de suculentos contratos en Iraq, gracias a sus contactos con la
administración Bush: uno de sus primeros contratos, 90 millones de
dolares, tenía como objeto proteger a una docena de funcionarios del
anterior gobierno interino iraquí. Lo más chocante es que en
palabras del representante de la subcontrata "Gun Supply"
que forma para Triple Canopy a los futuros "guardas de
seguridad" la empresa norteamericana "no contrata a
mercenarios". Triple Canopy ya ha contratado mercenarios de El
Salvador, Colombia y Chile, con sueldo más elevados, por cierto. 380
mercenarios peruanos han partido hacia Iraq por el momento, con un
contrato de un año de duración, en el cual tanto EEUU como la
empresa quedan exentos de responsabilidad en caso de que el contratado
resulte muerto o herido en el cumplimiento de su trabajo. Así mismo,
el seguro del empleado sólo se circunscribe a las horas y lugar de
trabajo; si el mercenario es atacado en su alojamiento, no recibirá
compensación alguna por parte de la empresa. Todos los peruanos
recibieron un curso rápido de quince días, y fueron destinados a
zonas dentro de la Zona Verde. Según algunos aspirantes al puesto, la
situación era de urgencia para la empresa, andaban faltos de
personal.
Al
parecer, los términos del reclutamiento eran tan abusivos que el
gobierno peruano tuvo que tomar cartas en el asunto. El propio ejército
peruano tuvo que proporcionar la munición necesaria para el curso de
entrenamiento de 15 días. Gun Supply, representante de Triple Canopy
en Lima, cerró un contrato de 150.000 dólares con el ejército
peruano al respecto, sin que este trámite pasara por el ministerio de
defensa, al parecer. De toda formas, el contrato no se canceló, y la
intención es reclutar a 600 mercenarios más. Gun Supply está
dirigida por el hijo del jefe de seguridad de la embajada de EEUU en
Peru, y ha vendido munición a la escolta del presidente Toledo.
Más
efectos colaterales domésticos de la guerra en Oriente Medio: En EEUU,
la reconocida necesidad de reducir los gastos militares del país
posibilitaba el seguir adelante con el proceso de cierre de bases y
optimización de recursos bélicos; según informaba AP, el Congreso
autorizaba el primer cierre de bases militares domésticas desde hacía
una década. Las emergencias provocadas por los huracanes que este otoño
han sacudido EEUU, donde se demostró que la administración Bush era
incapaz de proteger a sus gobernados, terminaban de inclinar la
balanza a favor de esta medida.
Destacamos
también una noticia que viene a describir el estado de estupor en el
que parecen haber caído los ocupantes; nos venía dada esta semana
desde Sky News: un teléfono por satélite, robado en la embajada
inglesa en Bagdad, podría haber sido usado por
"insurgentes" hasta el punto de efectuar un gasto de casi
medio millón de libras en miles de llamadas hechas a Yemen y Arabia
Saudí.(alrededor de 1.250.000 euros). El hecho fue descubierto al
notar ciertas irregularidades en las facturas de dos años. No se
puede saber si la noticia es auténtica o si forma parte del entramado
desinformativo destinado a fortalecer la cada vez más cuestionada
idea de que existe una enorme red de terroristas islámicos operando
en Oriente Medio. Que un teléfono satelital opere en manos
equivocadas durante dos años en zona de guerra da mucho que
preguntarse. Una investigación oficial del M–16 se ha puesto en
marcha, oficialmente, baja la redundancia.
Esa
enorme cantidad de dinero se añade a las cifras publicadas esta
semana sobre el esfuerzo económico que le está costando a GB la
guerra de Iraq. Según informaba YahooNews el 31 de octubre, hasta la
fecha el ministerio de Defensa británico ha reconocido un gasto de al
menos 3.100 millones de libras, unos 5.300 millones de euros. Son 8500
los efectivos británicos oficialmente presentes en Iraq.
Parte
de esas elevadas partidas van destinadas a paliar la creciente
retirada de efectivos del Territorial Army, caso del que hablamos esta
semana en otro apartado ( Ver: Crecen las cifras adversas en el frente
interno). El Ejército Territorial inglés está a 6.000 efectivos por
debajo de lo planificado, pero según el propio ministerio de Defensa,
las cifras son incluso más bajas, ya que de 35.000 soldados, sólo
12.000 se encuentran formados y en disposición de entrar en combate;
a pesar de todo, los portavoces de Defensa afirman que la situación
en Iraq no es la responsable de esta tesitura. No obstante, Defensa ha
empleado tres millones de libras (unos 4.5 millones de euros) en campañas
televisivas llamando al alistamiento, al igual que sus aliados
estadounidenses, que enfrentan el mismo problema de falta de nuevos
reclutas. De hecho, el número de bajas voluntarias del E.T. se ha
cuatriplicado desde el inicio de la guerra de Iraq, según fuentes del
ejército. Así mismo, el esfuerzo en Oriente Medio ha provocado la
primera leva entre reservistas desde la guerra de Corea en los 50.
12.580 reservistas han sido movilizados, y se ha reconocido
oficialmente la muerte de 5 de ellos. La falta de efectivos se hace pública
justo cuando el general George Casey, comandante de EEUU en Iraq, daba
cuenta de la carencia de tropas que se precisan para patrullar la
frontera con Irán en la zona bajo control británico. El mayor Rob
Fulton, responsable de las fuerzas coloniales británicas en el sur de
Iraq, solicitaba al menos 2.000 efectivos mas, que finalmente se
quedaron en sólo 200. El gobierno británico también veta el aumento
de tropas en Iraq, sobre todo como forma de controlar el descontento
nacional respecto a la guerra de Iraq. Finalmente, el gobierno británico
estudia la posibilidad de ofrecer primas de hasta 500 libras (unos 735
euros) a los soldados que logren reclutar a un amigo o familiar,
durante un periodo de 6 semanas a partir de diciembre.
La
Resistencia mantiene a raya al FMI y al Banco Mundial de Wolfowitz
Los
planes de "Reconstrucción" de Iraq orquestados desde el FMI
y el Banco Mundial se están viendo seriamente frenados por la acción
de la Resistencia Iraquí, quien ha obligado incluso a que las sedes
iraquíes de los dos máximos representantes de la usura internacional
se tengan que desplazar fuera del país. El BM opera desde Omán, y el
FMI desde los Emiratos. El caso del Banco Mundial es especialmente irónico;
su actual dirigente, Paul Wolfowitz, fue uno de los principales
arquitectos de la guerra de Iraq, y ahora es incapaz de hacer que el
BM opere con total libertad desde Bagdad, en base a las condiciones de
inseguridad que el propio Wolfowitz fue incapaz de predecir en su
entusiasmo por atacar el país. De hecho, cuando era consejero de
Defensa, Wolfowitz llegaba a criticar a quienes aseguraban que para
mantener el control de Iraq habría que mantener una mayor cantidad de
tropas ocupando el país que las previstas. Pero bueno, también dijo
que las tropas de EEUU serían recibidas como libertadores en Bagdad.
Nada más tomar control de su nuevo cargo, Wolfowitz se vio obligado a
rebajar las expectativas anunciadas. Hay problemas incluso para que
funcionarios del Banco puedan desplazarse y trabajar en Iraq, siendo
como son objetivo de la Resistencia. En agosto de 2003, una bomba
estalló cerca de la sede del Banco en Bagdad. La excusa de esta
inseguridad se ve empleada así para justificar que de los 35.800
millones que hace dos años y medio el BM prometió dedicar a la
"reconstrucción" de Iraq, sólo 156,8 han sido inyectados
en sus proyectos en el país ocupado. Por su parte el FMI, desde su
exilio en los EAU afirma que la acción de la resistencia mantiene el
flujo de crudo en una cantidad oficial de dos millones de barriles
diarios, en vez de los 2,4 proyectados. De igual manera, el FMI se ha
visto obligado a reducir las expectativas del crecimiento económico
" de Iraq" del 17 % proyectado al 4%.
Gestos
de buena voluntad desde Siria; a cambio EEUU ataca territorio sirio,
matando civiles
Siguiendo
en ese proceso diplomático de gestos que apacigüen las demandas de
occidente, Siria liberó esta semana a 190 prisioneros políticos,
incluyendo a dos destacados activistas de derechos humanos, informaba
la BBC el 3 de noviembre. Uno de los liberados, Mohammed Radoun es el
presidente de la Organización Árabe de Derechos Humanos en Siria,
quien manifestó a la liberación de Radoun: "este movimiento da
al gobierno una mayor popularidad y consolida la unidad nacional
frente a los peligros que acechan a Siria"
Por
otra parte, la excusa de perseguir a "terroristas" en la
zona oeste de Iraq cercana a la frontera con Siria, ha permitido a
EEUU desplegar tropas a lo largo de la frontera. Este movimiento se
entiende sólo en consonancia con la ofensiva diplomática anti–siria
lanzada por EEUU, Francia, Gran Bretaña e Israel.
La
presencia de tropas ha sido constante durante todo el año, y según
testimonios recogidos y publicados el 29 de octubre por el Saturday's
Globe han sido varios los incidentes provocadores protagonizados por
las fuerzas de EEUU; en mayo de 2005, un helicóptero de EEUU abrió
fuego sobre territorio sirio, resultando muerto Abdullah Al–Hassaki,
funcionario sirio de seguridad destinado al puesto fronterizo de
Barghouz. Otro militar y dos civiles sirios han muerto y otros seis
han sido heridos este año bajo fuego estadounidense sobre territorio
sirio, según cifras oficiales.. Por otra parte, diversas fuentes
diplomáticas estadounidenses han insinuado que la administración
Bush ha contemplado la posibilidad de operaciones especiales secretas
estadounidenses en territorio sirio para acabar supuestamente con
miembros de la Resistencia iraquí. Sin embargo, estos incidentes no
han provocado una reacción pública del gobierno sirio, por temor a
que la reacción en la calle árabe lleve a un empeoramiento de las
relaciones con EEUU. Según Joshua Landis, reconocido analista sobre
asuntos sirios, "El gobierno sirio mantiene esto en secreto
porque no quiere verse avergonzado. Es el signo definitivo de su
debilidad, porque no pueden hacer nada para evitar esto". Por
otra parte, Siria ha levantado grandes secciones de un muro de arena a
lo largo de los más de 700 kilómetros de frontera con Iraq, para
poder cumplir con las exigencias de EEUU de evitar las filtraciones de
guerrilleros a un lado y otro de la frontera. Sin embargo, la
vigilancia nocturna es un gran problema; Gran Bretaña aún no ha
entregado a las tropas sirias los anteojos de visión nocturna que
hace tiempo prometió, y los militares sirios se quejan de que la
vigilancia de la frontera no se vea respondida por el lado del
ocupantes ni sus colaboracionistas. El General Amin Suleyman lo
expresaba así: "Siria ha cumplido con todo lo que se le ha
pedido y ha hecho todo lo posible. Pero no hemos visto nada por parte
del otro lado". En la actualidad, Siria mantiene 557 puestos de
control a lo largo de la frontera.
Las
inteligentes maniobras iraníes
En
un gesto que parece indicar definitivamente la influencia iraní entre
los sectores shiíes pro–ocupación, el "ministro" iraquí
de Interior, Bayan Yabor, salía en defensa de Irán tras las
acusaciones de EEUU y GB en relación a la "injerencia" de
Irán en asuntos internos de Iraq. Yabor, en declaraciones recogidas
por Arabic News, calificaba de "ridícula" tal acusación, y
realizaba un movimiento político bastante preocupante para EEUU, GB,
Israel y otros países aliados: en una entrevista con la cadena de TV
iraquí Al–Fayha, afirmaba : "como he repetido en varias
ocasiones, Irán no tiene nada que ver con los acontecimientos en Iraq,
y en particular con los que ocurren en el sur. () Déjeme entregar al
público iraquí un pedazo de la verdad. Hemos arrestado a varios
elementos de la inteligencia estadounidense y británica". Yabor
aseguraba que mientras que Irán se ve repetidamente bajo la acusación
de inmiscuirse en Iraq, Iraq había detenido a miembros de los
servicios de inteligencia de India, Bangladesh, Pakistán, Gran Bretaña
y EEUU, pero que no daría detalles sobre el asunto. En lo que podemos
considerar un primer paso a la hora de que ciertos elementos en el
poder en Iraq descubran su lealtad para con otros países, Yabor
parece inclinarse hacia la defensa de Irán, acusando a "algunos
países" de no querer ver desarrollarse un gobierno soberano en
Iraq. Todo ello configura en realidad una nueva prueba de fuerza iraní
en el pulso que mantiene con las potencias occidentales que ocupan
Iraq.
Hemos
de reseñar también, una de esas notas involuntarias, que a veces
aparecen, casi inadvertidas en los mass media. En la información que
el Sunday Times volcaba el 31 de octubre sobre la falta de reclutas en
el Ejército Territorial británico, un par de frases nos llamaba la
atención: "La policía británica en el sur de Iraq patrulla la
frontera (con Irán) junto al nuevo ejército iraquí, mientras las
tropas británicas permanecen en reserva. Los iraquíes, sin embargo,
han demostrado no ser capaces de impedir las incursiones de los
Guardias Revolucionarios de Irán". Se afirma abiertamente que
fuerzas armadas iraníes entran Iraq en incursiones habituales. Si
esto fuera así, ¿porque no se emplea este argumento más
contundentemente en la vigente campaña de presión sobre Irán? Nos
inclinamos a pensar que tal denuncia sería un arma de doble filo: Irán
probablemente disponga de evidencias y acusaciones concretas sobre
actividades hostiles de Gran Bretaña, EEUU o Israel en suelo iraní.
Hay diversas formas de mantener la tensión con una intención mediática
clara de crear, al menos, ruido ambiental; una es evidentemente
mediante estas pequeñas esquirlas de metralla periodística.
Al
mismo tiempo, en declaraciones recogidas por Associated Press, la máxima
autoridad religiosa shií en Iraq, el Ayatolá iraní Ali Al–Sistani,
declaraba desde su sede en Nayaf, la posibilidad de solicitar próximamente
un calendario de retirada de las tropas. En caso de que EEUU y GB no
se mostraran por la labor, asistentes de Al–Sistani comunicaron que
el muy influyente líder haría un llamamiento para iniciar una campaña
de protestas pacíficas en la calle. Tal resolución pondría en un
serio compromiso a las potencias ocupantes. Sin embargo, Al–Sistani
rechaza reunirse con los representantes de EEUU, lo cual no deja de
ser una postura cara a la galería. El Ayatolá no desea mostrar en público
la relación que necesariamente mantiene con los ocupantes: son ellos
quienes han colocado a Al–Sistani en el lugar en el que se mantiene.
El
anuncio del líder religioso puede indicar varias cosas: a)que Irán,
a través de su representante religioso en Iraq finalmente lanza sus
primeros golpes bajo la línea de flotación de los ocupantes. b) que
Al–Sistani pretenda ofrecer una nueva vuelta de tuerca en su imagen
de confrontación con los ocupantes, con la vista puesta en las
elecciones de diciembre, favoreciendo la lista shií que defiende sus
intereses, pese a que Al–Sistani se ha cuidado muy mucho de dar su
apoyo a formación política alguna; c) que se trate de un movimiento
pactado con los ocupantes, cuando éstos se ven muy agobiados domésticamente
ante la falta de fechas concretas para la retirada.
EEUU
vuelve a reconocer la influencia israelí en los planes de cambio de
regímenes en Oriente Medio
El
pasado 1 de noviembre, Stephen Hadley, consejero en seguridad nacional
volvía a ligar públicamente los intereses de EEUU e Israel en
Oriente Medio: una retirada de EEUU de Iraq animaría a "déspotas"
y "extremistas" que pretenden "la eventual destrucción
de Israel". Las declaraciones se producían en la reunión anual
del influyente Comité de Relaciones Públicas Americano –Israelíes
los días 30 y 31 de octubre. Hadley afirmó que donde permaneció una
vez el régimen de Saddam Hussein, la construcción de la democracia
haría de Iraq un firme aliado de EEUU: "Israel no debería ser
condenado, en nombre de la estabilidad, a vivir en una región donde déspotas
amenazan con 'borrarle del mapa'". Durante su intervención
Hadley se marcó un considerable farol, al recordar el proyecto de que
el nuevo Iraq venda electricidad a Israel. Cuando Iraq no dispone de
electricidad para sí mismo, llegando incluso la ciudad de Basora a
cerrar acuerdos autónomamente con Irán para que este "déspota"
país le venda electricidad. Así mismo, Hadley dio cuenta de la
apertura en Bagdad de una sede del Instituto de Investigaciones sobre
el Medio Oriente, un think–tank con sede en Washington, pero ligado
a Israel y al Mossad; la ciudadanía de Iraq ve esta inauguración
como una confirmación del proceso de infiltración israelí en el país.
Hadley no dudó en recordar los acuerdos por los que el petróleo del
norte de Iraq llegaría a Israel a través de un nuevo oleoducto. La
total pleitesía de Washington para con el proyecto colonial sionista
quedaba recogida en las declaraciones de Hadley: "Como todos sabéis,
el presidente Bush es un dedicado amigo de Israel. Ha asegurado al
primer ministro Sharón que nunca pedirá a Israel que asuma riesgos
para satisfacer intereses o políticas estadounidenses". Para dar
prueba de ello, Hadley aseguró que la administración Bush había
dado luz verde a Israel para que realizara cuanto considerara
necesario para eliminar el "terrorismo" en los TTOO, en base
a la "agenda de la libertad" que tanto Israel como EEUU
"comparten". Sobre la cuestión palestina Hadley no dejó de
estar sintonía con el resto de declaraciones de la noche: "sólo
cuando los palestinos sean capaces de expresarse por las urnas y no
con bombas, seremos capaces de ponernos en el camino para la seguridad
de Israel". Toda una muestra de delicadeza y conocimiento de
causa
Los
colaboracionistas no pueden gobernar Iraq sin los cañones de los
ocupantes
Incluso
el mayor de los colaboracionistas iraquíes, Ahmed Chalabi se ha
manifestado vehementemente en contra de la retirada de las tropas de
EEUU. Chalabi, el que fuera estafador perseguido por las autoridades
jordanas, líder del Congreso Nacional Iraquí, en nómina de
Washington desde 1992, proveedor de la mayoría de evidencias falsas
que condujeron a la invasión de Iraq, en una entrevista con Al–Yazira
afirmaba que "Iraq necesita ahora apoyo internacional en el
contexto de las Naciones Unidas, para defenderse a sí mismo y su
territorio, interna y externamente". Chalabi, en la actualidad
"ministro" del petróleo iraquí, se excusaba por sus
mentiras como si hubiera sido una equivocación: "Éramos héroes
equivocados. Saddam ya no está y los americanos están en Bagdad; lo
que antes se dijera no tiene importancia". En relación a las
protestas que el Nigergate está generando, en el que Chalabi tuvo
mucho que ver, el colaboracionista afirmó: "la administración
Bush está buscando un chivo expiatorio". Por la "información"
que proporcionó a Washington, el CNI recibió un total de 366
millones de dólares.
En
cuanto al futuro de Iraq, Chalabi no dudó en situarlo en una órbita
de enfrentamiento con sus vecinos: Iraq está rodeado por seis países
que suman un total de 3 millones de soldados, 10.000 tanques y 2.000
aviones de caza () Estamos construyendo el ejército iraquí, y hasta
que no acabemos, necesitaremos ayuda internacional para mantener la
seguridad y defender Iraq". Quizá debió especificar: "
defender nuestro Iraq".
Por
su parte, el colaboracionista kurdo Masud Barzani, quien ocupa el
puesto de presidente de la región kurda mantuvo una reunión con el
primer ministro Blair el 31 de octubre. En declaraciones conjuntas a
la prensa, ambos mantuvieron el discurso habitual: "son los
terroristas quienes matan a civiles, no las fuerzas multinacionales o
las de la seguridad iraquí". "Es el terrorismo la razón de
nuestra permanencia en Iraq". Barzani volvió a insistir públicamente
en la necesidad de que permanezcan las tropas de ocupación en el país,
algo que Blair dio por seguro, mientras en Iraq permanezca "la
insurgencia".
Sin
embargo, a veces se intuye en los mass–media que para los ocupantes
empieza a darse una necesidad de estabilizar las cosas en Iraq,
"desde dentro", y que no termina de ocurrir "el
hecho" (un partido, un movimiento, una figura) que sea capaz de
generar el ambiente ideal para normalizar la situación en Iraq. El
embajador en Iraq, Zalmay Jalilzad lo decía a las claras en
declaraciones recogidas por el diario virtual pakistaní Paktribune:
" la ausencia de un líder fuerte y carismático afecta a los
esfuerzos de Washington para reconstruir Iraq". Acto seguido,
ofrecía como modelo de líder a Hamid Karzai, el
"presidente" afgano instalado por la OTAN. ¿Podemos intuir
de estas declaraciones que la relación entre colaboracionistas y
ocupantes en Iraq comienza a mostrar públicamente sus roces? Algo en
común tienen Karzai y los colaboracionistas de la Zona Verde: ninguno
de ellos extiende su "gobierno" mas allá del búnker de sus
edificios presidenciales, y ninguno de ellos ha sido nunca lo
suficientemente "fuerte y carismático" como para llegar al
poder sin la ayuda de fuerzas extranjeras que los auparan.
Iraq
le costará la presidencia a Berlusconi
En
Italia se intuye un cambio de gobierno, parece haber un interés en
que Berlusconi abandone su puesto como primer ministro. Y de ahí ha
de entenderse que comiencen a aparecer como setas noticias que
desmontan los argumentos adoptados por el "Cavaliere" para
entrar en la guerra de Iraq o que demuestren las mentiras y la
ilegalidad de la misma. Esta semana saltó a los medios la participación
de los servicios secretos italianos en el montaje del famoso uranio de
Níger que nunca existió. AP informaba que una comisión
parlamentaria cerrada al público interrogó al subsecretario de
Estado y al director del SISMI (la inteligencia italiana) sobre la
fabricación de documentos y evidencias falsas que fueron entregados a
Gran Bretaña (GB) y EEUU donde se decía que Saddam hussein quería
adquirir 500 toneladas de uranio africano. El escándalo había
saltado cuando el diario "La República",próximo al
candidato Prodi de la oposición a Berlusconi, había publicado días
antes esta información. Berlusconi quiso desmentirlo todo en una
entrevista realizada por el diario conservador Líbero, pro–Berlusconi.
Por
otra parte AFP informaba que el consejero de seguridad de George Bush,
Stephen Adley admitía haberse reunido con Pollari, jefe del espionaje
italiano, el 9 de septiembre de 2002, pero que no hablaron sobre el
uranio.
Las
inminentes elecciones en Italia, y el rechazo a la guerra de Iraq ha
llevado incluso a Berlusconi a realizar declaraciones antes
impensables: en un programa televisivo, aseguraba que intentó
"muchas veces convencer al presidente americano de no ir a la
guerra". De hecho, Italia no envió tropas a Iraq hasta la toma
de Bagdad. A principios de año retiró 300 de sus 3200 efectivos
A
pesar de la polémica desatada por estas palabras, Berlusconi quiso
dejar claro que seguía siendo un fiel aliado de Washington. En rueda
de prensa conjunta, Bush se expresaba: "Quieron agradecer el
fuerte compromiso de Silvio con la libertad de los pueblos de Iraq y
Afganistán. Aprecio profundamente su visión de paz en los
Balcanes".
Por
otra parte, también la Italia de Berlusconi se ha sumado al coro de
voces hipócritas que se ha encrespado tras las declaraciones del
presidente iraní Ahmadineyad, sumándose de nuevo al eje
neo–con/sionista que se muestra alarmado ante la creciente
influencia iraní en Iraq. De nuevo Fini, el dóberman de Bersluconi
era protagonista de la noticia: volvió a lanzar la cuestión del
programa civil nuclear de Irán como objeto de discusión en la ONU y
tras las declaraciones del presidente iraní, afirmó que la comunidad
internacional debía mostrarse firme ante Irán porque la seguridad
mundial se veía amenazada por la política anti–israelí de Irán y
su ambición por obtener armas nucleares. El portavoz del ministerio
de Exteriores iraní, Hamid Reza Asefi, respondía a esto con
"tales declaraciones lanzadas por un ministro de exteriores
italiano son un ejemplo de indiferencia respecto a la masacre de
palestinos indefensos a manos de Israel y su terrorismo de Estado.
Israel está confundiendo a la opinión pública al magnificar el
programa nuclear iraní , para desviar la atención internacional del
genocidio sistemático de los palestinos"
Crecen
las cifras adversas en el Frente Interno
El
llamado "Nigergate", el escándalo público sobre la
falsificación de documentos que pretendían demostrar que Saddam
Hussein habría llegado a adquirir uranio en Níger, siendo este uno
de los principales argumentos para la invasión de Iraq, ha sacudido
esta semana a la impresionable sociedad estadounidense. Esta cuestión,
ligada a una investigación previa sobre filtraciones de información
desde la CIA, ha llevado al encausamiento del principal ayudante del
vicepresidente Dick Cheney, su jefe de equipo Lewis Libby. Las
acusaciones sobre Libby fueron realizadas por el fiscal que investiga
la fuente de una filtración de información sobre la identidad de una
agente de la CIA cuyo marido, Joseph Wilson, alto funcionario, se había
convertido en un claro crítico de la guerra de Iraq y había negado
que Iraq hubiera comprado uranio, hecho que estuvo encargado de
investigar.
Esta
semana un nuevo escándalo saltaba a la luz: la existencia de cárceles
secretas de la CIA en algunos países "democráticos" de
Europa del Este, Afganistán, Tailandia, y por supuesto Guantánamo e
Iraq, donde se mantiene e interroga a prisioneros sospechosos de
terrorismo al margen de toda legalidad. Dana Priest, pluma del
Washington Post en un amplio reportaje, denunciaba la existencia de
una compleja red de centros de detención llamados "puntos
negros" – a nivel global, enmarcada en la guerra contra el
terrorismo. Tal red descansa en la cooperación con servicios de
inteligencia extranjeros y su mantenimiento en secreto respecto al
gran público y a los congresistas que en teoría se encargan de
controlar a la CIA. El acceso a los documentos relacionados con esta
red está reservado a funcionarios de primera línea y al presidente
de los EEUU. Tanto la CIA como la Casa Blanca lograron disuadir
durante todo este tiempo al Congreso de que exigiera demasiada
información al respecto, a diferencia de las actividades del ejército,
de las cuales un mínimo control posibilitó el conocimiento de los
abusos en Abu Graib o Guantánamo.
El
Washington Post, a petición de altos funcionarios, no publicó el
nombre de los países europeos donde se ubican "puntos
negros". En estos "puntos negros" se aísla
indefinidamente al preso, privado de todo estímulo sensorial, se
practica torturas, se violan las leyes de los países en donde se
instalan, e incluso las de los EEUU o las de su ejército, siguiendo
un manual de interrogación propio de la CIA. La mayoría de los
detenidos son capturados sin conocimiento de los gobiernos de los que
son ciudadanos, y se ha podido ir sabiendo de los métodos empleados
en su secuestro, interrogatorio y torturas en base a haber sido
liberados poco a poco (libres de culpa, pero encarcelados por meses, años,
y torturados) y haber llegado sus casos a sus respectivos gobiernos,
asociaciones de derechos humanos, etc El número oficialmente
reconocido de detenidos en los "puntos negros"es de 100,
aunque 70 de los mismos, considerados de clase B, menos
"peligrosos", fueron conducidos a prisiones de las naciones
huésped, donde los interrogatorios continuaron con mano de obra local
bajo la asistencia o dirección de efectivos de la CIA. A este proceso
de entrega de sospechosos se le llama "rendición".
Marruecos, Jordania o Egipto son algunos de los países en los que
oficialmente se han producido "rendiciones".
La
mayoría de los "puntos negros" se mantienen con partidas
económicas aprobadas por el
Congreso,
pero sobre las que esta cámara no tiene información respecto a su
utilización. Estos "puntos negros" surgen oficialmente a
partir de 2001. En ese momento, el presidente dio autorización a la
CIA para realizar operaciones clandestinas ilegales por las que
perseguir, infiltrar, detener y asesinar a sospechosos de terrorismo
en países de Oriente Medio, África o Europa y la necesidad de
centros de interrogatorio secretos se hizo patente. Los primeros países
colaboradores al respecto, aliados incondicionales de EEUU, fueron
Egipto y Jordania. Durante la invasión de Afganistán, el número de
detenidos se elevó tanto, que la CIA dispuso de ellos como si de
ganado se tratara: los metía masificadamente en contenedores
industriales para su traslado; de ahí los escalofriantes episodios de
decenas de prisioneros muertos por la asfixia y cocidos por el calor
en Afganistán. Otros casos que saltaron a la luz fueron los de la
muerte por congelación de detenidos, expuestos toda una noche al frío
glaciar del invierno montañés afgano. Por no hablar de la masacre de
Mazzar Al–Sharif, donde la violencia de los interrogatorios condujo
a una rebelión que se saldó con una carnicería de más de 400
presos muertos, reventados por continuos bombardeos sobre el patio de
la prisión. Ninguna de estas muertes supuso juicio alguno a agentes
de la CIA. Poco después, los puntos negros ya se ubicaban en
Tailandia y Europa.
Todos
estos datos, sumados a la creciente falta de confianza en la
administración Bush, han producido ciertas críticas incluso entre
oficiales de inteligencia: "El secreto que rodeaba al programa ya
no es sostenible. Simplemente esto es una horrible carga". De ahí
las filtraciones que generaron el polémico reportaje del Washington
Post, que ha vuelto a dejar de piedra a la sociedad norteamericana.
El
reciente anuncio de las 2.000 bajas oficialmente reconocidas, sumado
al resto de factores que ponen en entredicho la eficiencia y
honestidad de la administración Bush, se veía reflejada en la última
encuesta realizada por USA Today, la CNN y la agencia Gallup: un 55%
de los norteamericanos consideran que la presidencia de Bush es un
fracaso. El New York Times , en edición especial, publicaba las fotos
de 995 efectivos muertos en Iraq, con motivo de las 2.000 bajas. La
respuesta de Bush al número fue predecible: "La guerra requerirá
más sacrificio, más tiempo y más voluntad. Lo mejor que podemos
hacer para honrar a nuestros soldados caídos es completar la misión".
El número oficial de heridos reconocidos ronda los 16.000, de los
cuales 7.837 se considera de gravedad. Sobre el tema de los heridos,
es de reseñar una gran ironía: la tira de cómic diaria, "Doonesbury",
distribuida cotidiniamente en 140 periódicos estadounidenses y que
muestra una visión ácida y crítica sobre la administración Bush,
en la figura de un excombatiente que intenta recuperarse de una
depresión, se ha convertido en la principal esquina donde se presta
atención a las protestas de los numerosos veteranos de la guerra que
se quejan por la desatención que sufren por parte de su gobierno.
Robert Thompson, director del Centro de Estudios Televisivos de la
Universidad de Siracusa, lo decía bien claro en declaraciones al
semanario "Morning Star": "Cuando tienes un país
librando una guerra y el único lugar entre los mass media que parece
estar preocupándose por sus heridos es una tira cómica, creo que la
situación habla por sí sóla. Ver a los heridos podría hacer pensar
a la gente, algo que no resulta de interés a un gobierno que impulsa
una guerra".
Esta
semana, la poderosa cadena de periódicos locales norteamericana
Knight Ridder daba cuenta de otro tipo de bajas de guerra que apenas
encuentra eco en los mass–media, las de los trabajadores civiles que
acuden a Iraq en busca de sueldos elevados trabajando para la Ocupación.
Existen más de 75.000 trabajadores civiles oficialmente reconocidos
en Iraq, y el nivel de bajas se ha triplicado en los últimos 13
meses, siendo los últimos meses de una peligrosidad extrema. Esta
semana, la cifra oficial de muertos hasta la fecha era de 428, y la de
heridos de 3.963, según datos extraídos del Departamento de
Seguridad Laboral (DSL) de EEUU. Sin embargo, dos de los principales
contratistas civiles operando en Iraq han denunciado que sus bajas son
mayores de las reflejadas en este informe. El censo de trabajadores se
basa únicamente en los contratados por empresas estadounidenses. Las
compañías privadas no están obligadas a informar de sus bajas a los
medios, pero sí al departamento federal de seguros y reclamar en su
caso al DSL según el Acta nacional de Defensa. Esta exigencia sólo
se aplica a compañías que trabajan para el Pentágono, con lo que se
estima que el número de civiles muertos mientras trabajaban para la
Ocupación podría ser mucho mayor.
Sin
embargo, y prosiguiendo en la obcecada retórica de "mantener el
rumbo" en Iraq, el Secretario de Defensa Rumsfeld volvía esta
semana a defender la política de EEUU en el país, apuntando además
que con motivo de las elecciones del 15 de diciembre se incrementaría
la cifra de efectivos militares allí destinados. En la actualidad son
159.000.
Sobre
el tema de las inspecciones de organismos internacionales a las
instalaciones para detenidos en Guantánamo, Rumsfeld se manifestó en
contra de que una comisión de la ONU estableciera contacto con los
presos, porque el gobierno "no desea incrementar el número de
organizaciones internacionales con acceso a los detenidos". Sólo
una delegación de la Cruz Roja ha disfrutado de ese
"privilegio". Sobre la huelga de hambre de 27 de los 500
presos de Guantánamo, muchos de los cuales llevan tres años y medio
detenidos, sin cargos ni asistencia legal, Rumsfeld soltó otra perla:
"Lo hacen para llamar la atención de la prensa
internacional". Por supuesto, para eso se hacen las huelgas de
hambre. para llamar la atención sobre hechos concretos. El gobierno
estadounidense se escudó también para su rechazo a la visita de la
comisión de NNUU en que los detenidos no están "en suelo
norteamericano", con lo que no está obligado a dar el permiso.
En
Inglaterra, la popularidad de la guerra inicia una caída que parece
inexorable. Tan inexorable como la retirada de reservistas del Ejército
Territorial (Territorial Army, TA, formado por pseudo–reservistas a
tiempo parcial al estilo de la Guardia Nacional estadounidense),
estimada en una media mensual de 540 efectivos, según informaba la
agencia Xinhua. El proceso de retiradas, iniciado en 1998, se ha visto
muy agudizado tras la invasión de Iraq: de 160 en abril de 2003, se
pasó a 690 en noviembre del mismo año La última cifra oficial es de
agosto, establecida en 540. El TA supone el 10% de las tropas
coloniales británicas destinadas en algún momento a Iraq, y también
formará parte del próximo envío de tropas Afganistán
Quizá
para contrarrestar el desánimo entre las tropas británicas, la corte
marcial contra siete soldados acusados de asesinar a Nabdem Abdullah,
un civil iraquí de 18 años, desestimó los cargos, en base a que no
se daban "evidencias suficientes", informaba la BBC. El
joven iraquí habia resultado muerto el 13 de mayo tras un ataque
contra civiles iraquíes en Al–Ferka, al sur de Iraq. Si los
soldados británicos cada vez tienen menos claro la legalidad de la
guerra de Iraq, y saben que si además disparan sobre iraquíes pueden
afrontar un consejo de guerra, existen razones de peso que hacen
pensar que la justicia militar británica va a levantar mucho la mano
sobre los pocos efectivos que lleguen a ser acusados alguna vez; de lo
contrario, GB se arriesga a enfrentar una ola de desobediencia,
dimisiones y deserción que no podría permitirse.
Informaciones
volcadas desde la agencia IRNA y Arabic News, daban cuenta de la
iniciativa que un grupo de 16, de los cuales 11 son del partido
laborista, parlamentarios británicos pretendían hacer desarrollar a
su gobierno: enviar una queja al Consejo de Seguridad de NNUU, por
romper la Convención sobre Armas Biológicas y de Toxinas al permitir
el envío de materiales prohibidos a Iraq. La iniciativa surge tras la
publicación en EEUU del infome Riegle, donde se refleja las
variedades de elementos susceptibles de componer armamento químico y
biológico que EEUU vendió a Iraq durante los ochenta, incluyendo
variedades deÄntrax.
Según
las últimas decisiones legales de GB al respecto de la referida
convención, Londres podría perfectamente formular una queja oficial
a NNUU.
Australia,
inamovible al lado de Bush
El
compromiso militar de Australia con la ocupación de Iraq no cesa; se
incrementa. Su última aportación es el despliegue sobre el terreno
de batalla de una serie de aviones espía en miniatura teledirigidos,
que proporcionarán apoyo aéreo en información a las tropas de
tierra, según informaba la agencia Xinhuanet. El envío se hará para
las tropas destinadas en Al–Muzanna, parte del contingente de 1300
efectivos destinados a la guerra de Iraq.
Por
otra parte, el diario Herald Sun daba cuenta de la liberación de un
ciudadano australiano, Ahmed Aziz Rafiq, tras dos años de estancia
sin cargos en la cárcel de Abu Graib. Hay otro detenido australiano
en Iraq, preso sin cargos, pero no por las tropas de ocupación ni por
el gobierno títere, sino por obra de la UPK kurda, desde hace un año.
El caso ha provocado gran polémica en Australia, en base a la
absoluta alegalidad de las detenciones, y la ausencia de todo respaldo
legal a los detenidos, salvo la "buena" voluntad de quienes
los retienen. En el segundo caso, quien lo retiene no es ni siquiera
un gobierno, sino la milicia de un partido político; en otra parte
del mundo se estaría hablando de secuestro. En Iraq se habla de lucha
"contra el terror".
Relación
de ataques, amenazas y abusos, sectarios y sobre civiles
En
Kirkuk, la rica capital petrolera de las regiones kurdas de Iraq, el
proceso de limpieza étnica para fomentar una mayoría étnica kurda
sigue adelante, tal y como informaba un reportaje a fondo del
Washington Post; la constitución colonial "aprobada" el 15
de octubre dispone que antes de acabar el año 2007 se ha de realizar
un referéndum que disponga el estatuto final de la provincia. Una de
las concesiones que los grandes partidos colaboracionistas kurdos, la
UPK y el PDK han obtenido de la Ocupación es la aprobación de un
proceso de retorno de kurdos a la zona. Considerando que el gobierno
central es "demasiado lento", son los partidos kurdos , con
el beneplácito de las tropas de EEUU, han tomado control del proceso
y están invirtiendo millones de dólares en efectivo, materiales de
construcción y ayuda técnica; están levantado poblados enteros y
ofreciendo incentivos para el retorno a kurdos emigrados o expulsados
de la zona en los últimos veinte años. Al mismo tiempo, llevan
adelante una política de intimidación o compra de propiedades sobre
árabes, asirios y turcomanos; 350.000 es el número de kurdos que con
la protección de las tropas ocupantes se han instalado en la zona. La
intención es volcar definitivamente el balance demográfico de la
ciudad y sus alrededores, para ligarla al proyecto fragmentario kurdo
que están impulsando tanto Israel (quien podría estar aconsejando a
los partidos kurdos tanto a la hora de realizar políticas de
colonización, como a la de ejecutar políticas de limpieza étnica)
como EEUU. Tales políticas incluyen el rapto de chicas jóvenes o la
matanza de ganados (al estilo de los colonos israelíes en
Cisjordania), que ha llevado a muchos granjeros a cambiar de oficio.
Según Tahsin Mohammad Ali, concejal turcomano de la ciudad: "Están
intentando cambiar la demografía de Kirkuk". Bajo la ciudad hay
"un océano de petróleo" sin el cual un posible Kurdistán
independiente podría ser muy difícil. En el proceso de
"kurdización" necesario para proceder a la fragmentación
de esa parte de Iraq ya se están transformando los nombres de calles,
escuelas, edificios
Otra
de las formas de abuso de las que apenas se habla es la toma de
propiedades civiles, viviendas en concreto, donde las unidades del ejército
de ocupación realizan misiones fuera de sus bases. Un reportaje de un
periodista empotrado de AP mostraba esta semana algunos aspectos que
pretendían pasar bajo un prisma simpático de esta práctica habitual
de los ocupantes. Sin contar con la postura de los dueños de las
viviendas, los marines, en sus operaciones de guerra ocupan viviendas
particulares, instalándose a sus anchas, convirtiendo las viviendas
de los civiles en objetivos bélicos y a los propios civiles en
escudos humanos involuntarios en caso de que no deseen abandonar sus
viviendas. La ocupación de viviendas es una práctica habitual, y
puede durar días o semanas, dependiendo de la duración de la campaña.
Tal práctica parece violar flagrantemente la tercera enmienda a la
constitución de EEUU: "Ningún soldado, ni en tiempo de guerra
ni de paz, se instalará en vivienda alguna sin el consentimiento del
propietario, salvo en la manera en que las leyes prescriban".
Un
informe público del Pentágono situaba en 26.000 el número de iraquíes
"muertos o heridos por la insurgencia" desde el 1 de enero
de 2004. Una semana antes un portavoz del ejército estadounidense
ocupante cifraba en un máximo de 30.000 los civiles iraquíes muertos
desde marzo de 2003. Un informe reciente de Associated Press estimaba
en 3.870 las bajas civiles en los últimos seis meses. Los informes
independientes más fiables, estiman entre 30.000 y más de 100.00 las
bajas civiles. Entre este baile de cifras, lo cierto es que a diario,
civiles inocentes iraquíes pierden la vida bajo los bombardeos aéreos,
en el fuego de ocupantes y colaboracionistas y en atentados
indiscriminados de dudosa autoría.
La
campaña estadounidense de violencia contra civiles iraquíes no cesa
en el oeste del país. Mas aún: las acciones se han recrudecido tras
el referéndum de la constitución colonial. El 31 de octubre, los
ataques aéreos de EEUU dejaron un total de 40 muertos entre la
población civil de Al–Qaim; la mayoría mujeres y niños, según el
director del hospital de la ciudad en declaraciones a IRIN. Los
militares estadounidenses presentaron la acción de esta manera:
"Fuerzas de la coalición, actuando sobre numerosas fuentes de
inteligencia y datos ofrecidos por ciudadanos de la zona, realizaron
un ataque aéreo sobre dos casas–refugio de terroristas de
Al–Qaeda cerca de Ubaydi, Iraq". El doctor Ahmed Al–Rabia,
del hospital de Al–Qaim, manifestaba que "llevamos recibiendo
heridos desde el lunes por la mañana". Al–Rabia cifró
finalmente en 43 muertos y 25 heridos la cantidad de víctimas
recibidas en el hospital: "es muy desagradable que ataquen a
gente inocente y simplemente digan luego que habían apuntado a
'insurgentes'". Cuando las cifras de la masacre salieron a la
luz, el centro de información de los ocupantes emitía la siguiente
nota: " No tenemos datos sobre que algún civil haya resultado
muerto en este ataque contra las casas de los terroristas. El uso de
munición de precisión guiada empleada en la destrucción de las dos
casas–refugio de los terroristas mitigó el riesgo sobre los civiles
de la zona".Al margen de este ataque, cuatro viviendas más habían
sido asaltadas en la zona por los ocupantes. Tras estos hechos, un
nuevo éxodo fuera de la ciudad daba comienzo, ante el miedo a sufrir
nuevos ataques.
Al
–Yazira daba cuenta de los ataques casi diarios contra el pueblo de
Hsaiba, en la frontera con Siria; seis viviendas fueron destruidas por
los aviones estadounidenses, mientras que tropas estadounidenses
establecían un cerco alrededor, impidiendo a nadie entrar o salir. El
periodista de Al–Yazeera informaba que mientras intentaban rescatar
a las víctimas de los escombros los aviones volvieron a bombardear, y
que Hsaiba se estaba convirtiendo "en otra Faluya".
A
continuación detallamos una lista de ataques sectarios y sobre
población civil efectuados por ocupantes y colaboracionistas o por
elementos sospechosos de pertenecer a éstos. Todos los datos están
tomados de los informes diarios que miembros de Free Arab Voice
redactan tras un seguimiento cotidiano de diversos medios no
empotrados presentes en Iraq.
3
de noviembre: miembros de las Brigadas Badr abren fuego sobre fieles
en oración en una mezquita sunní en Al–Iskandariya. EL doctor
Mahmud Farhan relataba el caso: 7 víctimas mortales y cinco herido.
3
de noviembre: tropas de EEUU, en un asalto en Al–Habbaniya, expulsan
a 30 familias de sus viviendas con la excusa de que tropas ocupantes
habían sido atacadas desde el vecindario. La zona desalojada se
convirtió en un acuartelamiento estadounidense.
3
de noviembre: otro ataque aéreo en Al–Qaim deja una cifra de al
menos 20 civiles muertos y tres viviendas destruídas.
2
de noviembre: el "ministro" de Defensa, Saadun Al–Dulaimi
amenazó públicamente con derribar las viviendas de quienes ofrezcan
refugio a guerrilleros.
2
de noviembre: tropas y tanques de EEUU cierran la mezquita de
Al–Yunaidi Al–Bagdadi en Al–Yusufiya, impidiendo el paso a los
fieles.
2
de noviembre: la policía colaboracionista y las milicias kurdas
lanzan una ola de arrestos entre los islamistas kurdos, apoyados por
fuerza aérea de EEUU, en Irbil.
1
de noviembre: Quds Press informa que las fuerzas de ocupación
estaounidenses lanzan la operación "Toro Salvaje"
conjuntamente con fuerzas colaboracionistas al sur de Bagdad; 40
civiles arrestados, decenas de viviendas asaltadas, sumados a los 80
que las fuerzas de Interior habían detenido días atrás; todo ello
estaba provocando que los vecinos abandonaran la zona progresivamente.
31
de octubre: EEUU y fuerzas colaboracionistas de Interior realizan
arrestos en masa en Salman Bak tras cerrar por completo las entradas y
salidas de la ciudad. Más de 70 civiles detenidos.
31
de octubre: docenas de residentes se manifiestan en Al–Latifiya como
protesta por el arresto sin razón aparente de una vecina, Sayida
Al–Jalidi, a manos de fuerzas del "ministerio" de
Interior, a la que además dispararon en una pierna. También
detuvieron a dos ancianos Seijs, de más de 70 años de edad: Yabir
Al–Jalidi y Salman Al–Gabiri. Esta es la primera vez que fuerzas
colaboracionistas siguen la táctica estadounidense de secuestrar a
las mujeres o familiares de supuestos guerrilleros para forzar la
entrega de estos.
31
de octubre: un oscuro atentado mata y hiere a docenas de civiles en
una zona comercial en Basora en el momento festivo de rotura del ayuno
en Ramadán.
30
de octubre: otro coche–bomba sin reivindicar asesina a 25 civiles y
hiere a 45 más en Al–Huuaidir, un pueblo cerca de Baquba, en el
momento festivo de rotura del ayuno.
30
de octubre: las brigadas Badr efectúan arrestos en masa en un barrio
sunní de Al–Nasiriya: la campaña de arrestos en la zona supera los
100 detenidos.
29
de octubre: tropas de EEUU lanzan una campaña de arrestos en masa en
Arab Yabbur, al sur de Bagdad: tras un toque de queda en la zona, Quds
press informaba que decenas de vehículos militares de invasores y
colaboracionistas ocuparon la zona. No hay datos exactos del número
de vecinos presos.
29
de octubre: efectivos de la brigada de Interior "Al Huseyn",
lanzan una campaña de arrestos en Al–Madaín: al menos 120 miembros
de las tribus Dulaymí y Yanabiyí detenidos.
29
de octubre: tropas de EEUU y colaboracionistas sellan la zona de
Al–Bazayiz y lanzan una campaña de arrestos en masa, con apoyo aéreo
de helicópteros estadounidenses. En la zona se había producido poco
antes el confuso enfrentamiento entre hombres armados sin identificar
y la milicia de Al–Sadr, acompañada de algunos efectivos de la
policía iraquí. Poco después, y a través de Internet, el grupo
Ansar Al–Sunna declaraba ser la otra parte implicada. El
"ministerio" de Interior rápidamente intentó tomar partido
de la situación, dándole un sentido de enfrentamiento religioso. El
episodio tenía todo el aspecto de ser una provocación sectaria
destinada a enfrentar a la incómoda para la Ocupación– milicia
de la corriente Sadr con las fuerzas sunníes de la zona. Al–Sadr
pedía mucha calma al respecto, culpando de ciertos aspectos de la
situación a elementos indisciplinados de su gente, al mismo tiempo
que declaraba su apoyo a la Resistencia, afirmando que la Resistencia
combatía a los colaboracionistas sin discriminación de ningún tipo;
la unidad de Iraq y su única identidad nacional fueron los otros
puntos reflejados en su comunicado. Poco después, tropas ocupantes y
colaboracionistas tomaron ventaja de la situación y arrestaron a
numerosos vecinos de la zona, incluyendo al influyente Seij Ziyad
Muhammad, jefe de la tribu de los Al–Bu Majma, junto con algunos de
sus hijos menores, lo que en otro contexto hubiera sido bastante
complejo.
28
de octubre; sin poder llegar a confirmarlo, la agencia Mufakirat
informaba del bombardeo aéreo de una vivienda en Abu–Farrach, al
norte de Ramadi, que podría haber matado a cuatro civiles, incluyendo
a mujeres y niños.
28
de octubre: tras un ataque de la Resistencia, tropas de EEUU lanzan
una campaña de registro y asalto de viviendas en el pueblo de
Al–Auzi, llegando a abrir fuego indiscriminado, dañando comercios,
y golpeando a los civiles presentes en la zona comercial.
27
de octubre: dos civiles mueren en Faluya bajo el fuego indiscriminado
de ocupantes y colaboracionistas tras un ataque de la Resistencia.
El
movimiento Sadr volverá a presentarse a las próximas elecciones
Esta
semana, la corriente de Moqtada Al–Sadr era objeto de un sospechoso
ataque que según representantes del movimiento, tenía todo el
aspecto de haber sido "una emboscada" cuidadosamente
preparada, enfocada a provocar el enfrentamiento del ejército del
Mahdi y sectores de la Resistencia; Hasta 25 podrían haber sido los
milicanos saderistas caídos cuando respondían a una denuncia de
secuestro con rehenes civiles. Sin embargo, en un extenso artículo
del semanario beirutí Monday Morning., el propio Moqtada informaba de
la intención del movimiento Sadr de formar "una lista nacional
que represente a los iraquíes desde Sulemaiya a Basora", en la
que participen iraquíes de toda confesión o etnia, al margen de la
retórica de división étnica y confesional manejada por ocupantes y
colaboracionistas. Esta lista, formada también por sunníes de la
castigada provincia de Al–Anbar, se presentará a las elecciones del
15 de diciembre para "confrontar la difícil situación del país,
evitar que el ocupante y los enemigos de Iraq logren sus objetivos,
consolidar la identidad nacional y reafirmar la unidad de Iraq".
Al mismo tiempo, un sector del movimiento también se ha integrado en
la lista shií general; de esta manera los saderistas realizan un
movimiento de expansión destinado a ocupar cuantos escaños sea
posible tras las elecciones. La formación de Sadr se manifestó en
contra de la Constitución colonial, y es de suponer que tras las
elecciones, en el periodo de cuatro meses abierto para presentar
enmiendas a la Constitución, este trabajo de oposición continuará.
El
analista Joost Hilterman, del International Crisis Group, definía los
motivos por los que esta oposición continuará: "La Constitución
votada el 15 de octubre es una constitución sectaria que ayudará a
que el país se deslice hacia la guerra civil en lugar de
evitarla".
La
influyente Asociación de Ulemas, aliada puntual del movimiento Sadr,
finalmente decidió llamar al boicot de las elecciones del 15 de
diciembre, condicionando toda su participación en el "proceso
político" en Iraq al establecimiento previo de un calendario de
retirada de los ocupantes.
Mike
Whitney, analista, se refería en un artículo publicado en
Information Clearing House a la formación Frente de la Concordia
Iraquí, un movimiento que pretende presentar varios candidatos al
parlamento en los próximos comicios; tras este nombre se encuentra
una organización "sunní", formada por Washington, cuya
principal tarea será enfrentar de forma directa desde el parlamento
los planteamientos de la resistencia desde una retórica fragmentaria
"sunní" ; uno de sus principales representantes, Alla Makki
, ya ha confirmado que intentará convencer a los guerrilleros de que
depongan las armas y se unan al proceso político; un movimiento
semejante parece ser un primer paso en una estrategia planificada que
conduzca a una mesa de negociación con los ocupantes, algo que
hubiera resultado impensable hace doce meses, y que parece una
posibilidad cada vez mas cercana, impulsada por la fuerza de las
cifras que indican el fracaso de la ocupación militar.
El
pasado 28 de octubre finalizó el plazo para registrar candidaturas y
participaciones en vista a las elecciones del 15 de diciembre. 21
coaliciones y 230 partidos políticos de toda suerte y calibre
formalizaron sus perfiles electorales. De esta nebulosa de grupos, sólo
cinco tendrá algo que decir en el Iraq colonial: el bloque kurdo, la
lista shií, un par de partidos sunníes y la formación secular del
favorito de EEUU, Iyad Alaui. Todos ellos aspirarán a los 275 escaños,
de los cuales 230 se distribuyen por representación proporcional
respecto a las 18 provincias de Iraq. El resto de escaños se destinarán
a los partidos que sin obtener escaños por provincias logren reunir
suficientes votos en el total del país.
La
provincia de Mosul, Nínive, podría sumarse en masa a la Resistencia
Los
líderes locales de Mosul amenazaron con unirse a la guerrilla de la
Resistencia. El diario Al–Sharq Al–Ausat la situación de
creciente desasosiego en la provincia de Nínive, donde las sospechas
de fraude electoral ya habían calentado los ánimos previamente: la
posible manipulación de los votos en el referéndum sobre la
constitución colonial podría haber posibilitado el "sí"
oficial de la provincia. En esta ocasión, la destitución del jefe
provincial de policía es el objeto del conflicto. Ahmad Muhammad
Al–Yuburi, jefe de la policía en la provincia de Nínive está
acusado de corrupción por parte del "ministerio" de
Interior. Ante esta noticia, 51 líderes de clanes locales (kurdos y
árabes) se coordinaron con la policía local para establecer un
control propio armado en la zona en caso de que la destitución se
desarrollara. Cientos de vecinos y policías armados se concentraron
alrededor de la sede del gobierno regional en protesta. Tropas de EEUU
evitaron el asalto sobre el edificio. Las protestas con megáfono aludían
al progresivo control sectario de los colaboracionistas kurdos en las
instituciones locales.
En
una carta enviada por los líderes de los clanes, se advertía que en
caso de producirse el despido de Al–Yuburi, Mosul pasaría a
convertirse en un núcleo de la Resistencia. El propio Al–Yuburi
avisaba que los partidos títere kurdos y shiíes pretendían sembrar
el terror en la provincia tras su destitución, con la intención de
frenar el voto sunní en las futuras elecciones del 15 de diciembre,
con lo que la provincia pasaría a "seguir el camino de Saladino
y Al–Anbar", provincias abiertamente opuestas a la Ocupación
con alta actividad armada contra los ocupantes y colaboracionistas.
Más
sobre el juicio a Saddam Hussein
El
equipo legal del ex–presidente iraquí, siguiendo en su estrategia
de demostrar las ilegales condiciones en que pretende celebrarse,
internacionalizando de paso la cuestión sobre bases jurídicas, y
como forma de protesta por el asesinato impune de componentes del
equipo legal de Saddam Hussein, envió esta semana una carta a Kofi
Annan, donde se solicitaba el traslado del proceso al tribunal de La
Haya. La carta, firmada por el abogado Nayib Al–Nauimi, solicitiaba
"un equipo internacional de jueces independientes e
imparciales". Al mismo tiempo solicitaba presión frente a las
autoridades colaboracionistas y sus responsables estadounidenses para
que reconocieran a los encausados en el proceso contra Saddam en
calidad de "prisioneros de guerra" y se quejaba de que al
equipo legal todavía no se le había proporcionado una copia de la
lista de acusaciones ni se les había otorgado un mínimo de tres
meses para preparar la defensa. Por supuesto, Al–Nauimi llamaba la
atención en su misiva sobre la situación de total inseguridad a la
que se ven enfrentados los integrantes del equipo legal de Hussein,
destacando el asesinato, la semana pasada, del abogado defensor Saadún
Yanabi, probablemente a manos de elementos del ministerio de Interior:
"nos encontramos en una situación muy peligrosa donde el actual
gobierno iraquí no tiene ningún control sobre la seguridad que
necesitamos para asistir y participar en el juicio"
Corea
del Sur comienza a retirar sus tropas
Según
informaciones de UPI, el gobierno surcoreano planea retirar 1.000 de
sus efectivos de Iraq durante el próximo año, del total de 3.250
destinados al país ocupado. Su tarea hasta la fecha eran labores
"de reconstrucción" en la ciudad de Irbil, al norte del país,
misión que expirará el próximo 31 de diciembre. El contingente
surcoreano es el tercero más numeroso en Iraq, tras los 161.000
estadounidenses y los 8500 británicos.
Las
dudas sobre Arabia Saudí y la posibilidad de invadirla
Según
informaciones volcadas por el New York Times, los dirigentes
estadounidenses dudan de la capacidad saudí de producir tanto crudo
como anunciara Riyad la pasada primavera. Los números ofrecidos
entonces, que reflejaban un aumento de la producción, dieron
confianza a Washington para poder mantener sus reservas estratégicas,
en caso de guerra o desastre. Sin embargo, las predicciones ofrecidas
por el reino árabe, que ya fueron recibidas con cierto escepticismo
por algunos funcionarios estadounidenses, han demostrado estar por
encima de las sumas reales. La disparada subida de los precios de
crudo ha obligado a EEUU a depender aún mas de extracciones extra de
las reservas del golfo, sobre todo las de Arabi Saudí. Un informe
hasta ahora secreto de la administración ofrece unos cálculos escépticos
acerca de la capacidad del crudo del golfo para suplir las necesidades
estadounidenses. El principal fallo en el esquema general es la falta
de rentabilidad del crudo iraquí; La Resistencia en su acción de
sabotaje sobre la infraestructura petrolífera gestionada por la
ocupación y el gobierno títere ha aplastado todas las expectativas
de explotación que EEUU mantenía antes de la invasión.
Tenemos
que recordar aquí el preocupante informe publicado por World Tribune
el 1 de noviembre: el Comité de Fuerzas Armadas del Congreso
consideraba públicamente el pasado 26 de octubre la posibilidad de un
acción militar, una invasión en concreto; tal consideración se
lanza tras un estudio de prospectiva lanzado desde la Brookings
Institution, un think–tank de la derecha liberal norteamericana,
donde se estudia tal posibilidad si la situación en Arabia Saudí así
"lo exigiera". Se considería entonces, en base a mantener
asegurado el suministro de crudo, el envío de hasta 300.000 efectivos
con vistas a instalar un gobierno pro–estadounidense.
El
escándalo hipócrita de "Petróleo por Alimentos"
Siguiendo
con el proceso de erosión al que EEUU intenta someter a la ONU,
particularmente demostrado desde la elección del neocon John Bolton,
abiertamente opuesto a la existencia de tal organización, esta semana
saltaba a primera plana el "descubrimiento" de que unas
4.500 compañías habrían realizado supuestamente
"sobornos" para lograr contratos con el régimen iraquí
durante los años del Embargo genocida que diezmó a la población
iraquí. El informe, liderado por el que fuera presidente de la
Reserva Federal de EEUU, Paul Volcker, establecía en 1.800 millones
de dólares la cantidad total.
El
informe afirma que el gobierno iraquí favoreció también a las
empresas que de alguna manera colaboraron en iniciativas en contra de
las sanciones. Las compañías británicas, estadounidenses y
japonesas fueron excluídas, pero existen pruebas documentadas que
demuestran que empresas norteamericanas procedieron a cerrar tratos
con el gobierno iraquí a través de empresas–tapadera europeas. En
el estado español, existen evidencias que así lo prueban, y además
entre las filas de los beneficiados se encuentra el misterioso Javier
Robert, quien podría tratarse de Javier Rupérez, miembro del PP
destinado a plazas diplomáticas en Oriente Medio.
Sin
embargo, algunas voces dentro de las altas esferas de la política han
lanzado públicamente sus dudas sobre la autenticidad de algunos de
los documentos presentados por NNUU en su investigación. Por ejemplo,
altos funcionarios y políticos rusos. El ministro de exteriores ruso,
Sergei Lavrov, declaraba que algunos de estos documentos llevaban
firmas falsificadas. "Los documentos que nos han mostrado estaban
falsificados; contenían firmas falsificadas de funcionarios
cursos", afirmaba en declaraciones recogidas por MosNews. Por
otra parte, el diputado Zhirinovski, acusado de recibir cuotas de
algunas partidas de crudo del régimen de Saddam Hussein, ha negado
todos los cargos: "no he firmado ningún contrato y no he
recibido ni un centavo del gobierno iraquí".
En
cualquier caso, lo realmente vergonzoso es que sean las pérdidas de
millones de dólares en supuestos procesos ilegales las que sigan
creando más escándalo que las de millones de vidas bajo argumentos
legales. En todo el revuelo mediático creado en torno a este asunto aún
por resolver, no se ha alzado ni una sola voz que recordara que el
mantenimiento de las sanciones que mataron a mas de un millón de
personas– fue una política genocida, impuesta legalmente desde el
Consejo de Seguridad de NNUU por EEUU, destinada a debilitar a Iraq y
posibilitar posteriormente su ocupación. Un genocidio criminal
realizado desde la supuesta legalidad y con la más absoluta
impunidad. Ahora, los mismos que lo posibilitaron e impulsaron, osan
protestar están en su derecho– porque 1.800 millones de dólares
una cantidad no tan elevada si comparamos el contexto del mercado del
petróleo– no cuadran en un proceso de varios años.
El
último dato de relevancia al respecto: la excusa de los
"sobornos" del anterior gobierno iraquí es una estratagema
recurrente por parte de la administración Bush para intentar
deslegitimar al movimiento contra la guerra y la ocupación de Iraq, a
través de algunas de sus figuras más prominentes; este es el caso
del parlamentario británico George Galloway, o el actual sobre Gilles
Munier, principal responsable de la Asociación de Amistad
Franco–Iraquí, acusado de favorecer contactos con empresas
francesas que se comprometieran con campañas solidarias con el pueblo
de Iraq y contra el Embargo.
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