Israel
intenta la misma trampa en Líbano
Por
Shadi Fadda
Desde
Líbano, para Socialismo o Barbarie, 31/07/06
Traducción
de Iván Vanney, corresponsal de SoB en Medio Oriente
La
política israelí de cometer masacres contra la población civil no
es un simple crimen. No es un crimen que pretenda saciar el
“deseo de matar”. No es llevado a cabo por un “grupo de
criminales”. Es algo peor: es una política de Estado.
El
Estado de Israel, tiene la experiencia de que la mejor forma de
combatir la resistencia popular árabe, es desatando una guerra psicológica.
Aprendió de la represión a la rebelión de Al-Aqsa,
que cometiendo crímenes contra la humanidad obtuvo respuestas
favorables. Es decir, respuestas determinadas por los sentimientos y
temores del pueblo, y no respuestas “lógicas”, estratégicas.
Durante
la Intifada de Al-Aqsa, las fuerzas de ocupación israelíes
dispararon en la primera semana más de un millón de balas,
asesinaron a decenas de civiles palestinos e hirieron a otros miles,
aunque hasta ese momento no se habían realizado ataques contra
civiles israelíes.
El
objetivo se logró. Como respuesta del pueblo palestino. comenzaron
los “ataques de mártires”.
La resistencia armada, sin ningún plan estratégico, benefició a la
mayor potencia militar de Medio Oriente.
Durante
los primeros dos meses de la segunda intifada (sublevación), como
informó la PRCS (Sociedad de Media Luna Roja palestina), el número de muertos
excedió el de los siguientes siete meses, y el de heridos el del
siguiente año y medio.
Lamentablemente,
Palestina cayó en la trampa sionista, y basó su segunda insurgencia
en lo que se denominó como “lucha armada”, contrariamente a su
primera intifada, que fue un levantamiento de masas. Pero, al revés
de lo ocurrido en la primera intifada (la iniciada en 1987), Israel
logró sus objetivos, a
pesar de perder a 900 civiles israelíes en ataques palestinos (más
de la mitad soldados de las Fuerzas de Ocupación), contra 11 en la
primera intifada. Israel finalmente consiguió encarcelar a los palestinos
dentro del Muro del Apartheid.
Hoy,
después de 18 días de invasión en Líbano, asesinando a más de 600
civiles y a cuatro
miembros de la ONU mediante la fuerza aérea provista por EEUU, el Ejército
de Ocupación Israelí intenta aplicar la misma política contra la
resistencia libanesa.
Hoy,
30 de julio, la aviación del Estado de Israel bombardeó
viviendas de civiles donde dormían los habitantes de Qana. Y
tuvieron “éxito”. Lograron asesinar a casi 60 civiles, y al menos
30 de las victimas mortales son niños menores de los 10 años.
La
respuesta en las calles de Líbano es muy similar a la de los
palestinos en octubre del 2000. El objetivo de Israel es claro,
provocar la misma respuesta por parte del Hezbollah, como lo hizo en
el 2000 con el pueblo palestino. Pero, hasta el momento, Hezbollah ha
procurado responder razonablemente. Espero que así continúe.
.- Se refriere a la
“segunda intifada”, desatada a fines de septiembre de 2000 por
la provocación de Ariel Sharon al profanar la mezquita de Al-Aqsa
en Jerusalén.
.- Los “ataques de mártires”
son los realizados por palestinas y palestinos que se inmolaban al
atacar generalmente blancos civiles.
.- Organización
perteneciente a la Cruz Roja Internacional.
|