Documento detalla plan
estadounidense para
hundir a Hamas
Por
Mark Perry y Paul Woodward
Asia
Times, 16/05/07
Rebelión,
20/05/07
Traducido por Sinfo Fernández
El 30 de abril, el periódico
semanal jordano Al–Majd publicó una historia sobre un
documento secreto de dieciséis páginas titulado: “Plan de Acción
para la Presidencia Palestina”, en el que se llamaba a socavar y
sustituir al gobierno palestino de unidad nacional.
El documento perfilaba una
serie de pasos para fortalecer al Presidente palestino Mahmud Abbas,
aumentar los efectivos de seguridad bajo su mando y proceder a
disolver el Parlamento palestino, reforzando a los aliados
estadounidenses en Fatah a lo largo de un período transitorio que
llevaría a celebrar elecciones parlamentarias, que Abbas convocaría
a comienzos del próximo otoño.
El documento de Majd se
basa en una traducción del gobierno jordano de un documento
acreditado de la inteligencia estadounidense que un funcionario del
gobierno jordano entregó al periódico. El documento, dijo el
funcionario al periódico, estaba redactado por las “partes árabes
y estadounidenses” y “había sido presentado al presidente Abbas
por el jefe de una agencia árabe de inteligencia”. El documento es
explosivo.
Si Abbas hubiera dado su
consentimiento al plan –extremo que aún no se conoce con
seguridad– habría sido cómplice de un proyecto encaminado a
socavar a su propio gobierno.
Comprendiendo las
implicaciones del documento, los funcionarios del gobierno jordano
ordenaron que se parara la impresión a la vez que se confiscaban las
planchas de la edición. “Los servicios de la seguridad jordana, que
censuran previamente los periódicos, intervinieron durante la noche
para parar nuestra tirada”, confirmó Fahd Al Rimawi, uno de los
editores de Al–Majd.
El 1 de mayo, el gobierno
jordano explicó su decisión en una declaración emitida por el
presidente de la Asociación Jordana de Prensa, Tariq al–Mumani. La
declaración afirmaba que Al–Majd había publicado repetidas
veces informes “basados en información facilitada por fuentes de la
inteligencia que ponían en peligro los intereses y la seguridad del
país”.
Mumani explicó que la
imprenta de la Fundación de la Prensa Jordana se había negado a
imprimir la edición del 30 de abril porque se incluían informes
perjudiciales para Jordania y que “ofendían a un estado hermano”.
El “estado hermano” referido es la Autoridad Palestina (AP), según
han publicado algunas fuentes.
El 2 de mayo, el gobierno
jordano y Mumani proporcionaron más antecedentes del caso del Majd.
Mumani afirmó que el informe Al–Majd era “totalmente
falso” y no estaba basado en fuentes fiables. Sin embargo, dos días
después, Mumani fue citado de nuevo en la información de las
noticias, diciendo esta vez que la asociación de prensa requería
“el levantamiento de la prohibición e insistía en abolir cualquier
tipo de censura”.
(Al–Majd,
que se describe en su editorial como “nacionalista árabe” ha
tenido varios roces con los servicios jordanos de seguridad, incluido
un incidente por un editorial sobre Arabia Saudí por el que el periódico
estuvo suspendido durante dos meses.)
La acción del gobierno
jordano provocó una rápida condena del Comité Internacional para la
Protección de los Periodistas (CPJ, en sus siglas en inglés).
“Este flagrante acto de censura es una clara evidencia del precario
estado de la libertad de prensa en Jordania”, dijo el director
ejecutivo del CPJ, Joel Simon. “Los funcionarios deberían permitir
que Al–Majd se editara inmediatamente”.
Parece que las presiones
dieron resultado. A finales de la pasada semana, Mumani anunció que
las autoridades jordanas habían levantado la prohibición y que la
edición de Al–Majd del 30 de abril volvería a imprimirse.
Aún así, la publicación
por Al–Majd del “Plan de Acción para la Presidencia
Palestina” podía haberse desvanecido en la oscuridad si no fuera
por un artículo del 4 de mayo del periódico israelí Haaretz en
el que detallaba unos “Puntos de Referencia para el Acuerdo sobre
Movimientos y Accesos”. El documento sobre la “Aceleración de
Puntos de Referencia” detallaba una serie de fechas tope para que
Israel empezara a desmantelar gran número de sus obstáculos de
seguridad y puntos de control en Cisjordania, permitiendo que se
incrementara el acceso a los territorios ocupados.
La aparición del
documento de los “Puntos de Referencia” en los días siguientes a
la revelación del documento del Majd sugiere una conexión,
aunque, a pesar de las apariencias, el primero puede no ser en
realidad un componente del segundo. Al contrario, la revelación de
los dos planes uno tras otro puede reflejar agendas en competición
partiendo del Departamento de Estado y de la Casa Blanca
estadounidense.
No es ninguna sorpresa que
la prensa de EEUU haya brillado por su ausencia a la hora de recoger
esas historias aparecidas en Majd o en Haaretz ni que
haya ignorado la existencia de un programa de la Casa Blanca para
socavar al gobierno de Hamas (véase No–goodniks and the
Palestinian shootout (1), Asia Times Online, 9 de enero).
El documento de Majd llegó hasta una amplia audiencia cuando
se informó de él en la página de Internet Missing Links (2)
sobre el incidente de Ammán, traduciendo del árabe algunas
partes del documento y analizando el plan propuesto.
Los detalles del incidente
del Majd, la publicación del “Plan de Acción para la
Presidencia Palestina”, los comentarios proporcionados por Missing
Links, y la consiguiente publicación adicional del documento
estadounidense en Haaretz han hecho ahora posible que se pueda
detallar cómo EEUU (o al menos una facción de consejeros políticos
dentro de la administración) está intentando poner en marcha su plan
para lanzar un “golpe suave” contra el gobierno palestino de
unidad nacional.
El ‘plan de acción’
de EEUU
Tras el Acuerdo de La Meca
del mes de febrero, que postulaba la formación de un gobierno de
unidad palestino, los funcionarios de la Casa Blanca están peleándose
para remodelar un programa anti–Hamas. El “plan de acción”
resultante se apoya en gran medida en el desembolso de fondos
estadounidenses para organizar las fuerzas de seguridad del Presidente
Abbas, al mismo tiempo que se aumenta la entrega de fondos para
proyectos específicos de desarrollo conectados con su oficina.
El plan que se entregó a
Abbas, según un funcionario de Fatah, es muy detallado, en él se
expone que se entregarían los salarios a los componentes del gobierno
palestino que estén estrechamente afiliados a Fatah y sean apoyados
por Abbas. El plan prevé asestar ‘un fuerte golpe a Hamas
satisfaciendo las inmediatas necesidades del pueblo palestino a través
de la presidencia y de Fatah’. Al mismo tiempo, el boicot
internacional contra Hamas seguiría en marcha y los programas que
Hamas quiere desarrollar no recibirían financiación alguna.
Antiguos funcionarios de
Fatah que se oponen a ese programa confirman las alegaciones de Majd
de que la acción fue planeada entre la Casa Blanca y funcionarios
de la inteligencia árabe. “Puedes ver la mano de Omar Sulieman
[jefe de la inteligencia egipcia] en esto”, dijo un funcionario de
Fatah. “No es ningún secreto que ha estado trabajando con los
estadounidenses para fortalecer a Fatah”.
Pero este funcionario de
Fatah rechazó implicar a nadie del gobierno jordano, que afirmó
“era mucho más escéptico sobre este tipo de planes, razón por la
cual, quizá, el documento se filtró antes”. Y aunque este
funcionario de Fatah no podía asegurar quién había sido el autor
del programa en la Casa Blanca, el documento refleja los puntos de
vista largamente mantenidos por el consejero de la Casa Blanca para
Oriente Medio Elliot Abrams, conocido por ser el que más empeñado
está en ejercer las presiones necesarias para conseguir rearmar las
fuerzas de seguridad de Abbas.
Las preocupaciones de EEUU
por la cada vez más débil posición de Abbas aparecen claramente en
el lenguaje del plan de acción: “En ausencia de esfuerzos firmes
por parte de Abbas para proteger la posición de la presidencia como
el centro de gravedad del liderazgo palestino, puede esperarse que el
apoyo internacional hacia él disminuya y que la cooperación sea poco
entusiasta”, dice el plan.
“Y un número creciente
de países, incluyendo a la Unión Europea y al G–8 [Grupo de los
Ocho], empezarán a buscar socios palestinos que sean más aceptables
y más creíbles y que tengan más posibilidades de avanzar en las
cuestiones de seguridad y gobierno. Y eso fortalecería la posición
de Hamas dentro de la sociedad palestina y debilitaría más a Fatah y
a la presidencia palestina. Y todo ello disminuiría las posibilidades
de convocar unas próximas elecciones.”
El plan vuelve a poner el
énfasis en el compromiso estadounidense para construir el servicio de
seguridad de Abbas, un programa financiado ahora con unos 59 millones
de dólares en ayudas para la seguridad aprobada directamente por el
Congreso. El dinero “impedirá que Hamas o cualquier otra facción
desarrolle algún intento de intensificación del conflicto, mientras
que el control de la seguridad por parte de la Autoridad Palestina y
Fatah se apoyará en una base sólida”. El plan cuenta también con
el apoyo de la UE y del Banco Mundial.
“El Presidente palestino
Mahmud Abbas propondría, en consultas con el Banco Mundial y la Unión
Europea, un plan que definiría los sectores y proyectos específicos
que tienen necesidad de financiación y que deberían mostrar
resultados prácticos y tangibles sobre el terreno en el espacio de
seis a nueve meses, y que se centrarían en el alivio de la pobreza y
el desempleo”, apunta el documento. “Y ya que algunos proyectos
necesitarán más de nueve meses, debería haber una garantía de
resultados aceptables dentro de esos nueve meses. Todo esto persigue
garantizar la utilidad de esos proyectos antes de las elecciones.”
Anticipando que la
popularidad de Abbas estaría ya en alza –y con el dinero para sus
partidarios fluyendo a través de su oficina– el plan propone que
Israel actúe para mejorar más la credibilidad de Abbas levantando
bloqueos de carreteras y barricadas en Cisjordania y facilitando el
acceso palestino a Gaza. “Abbas necesitará que se le proporcionen
los medios, tanto materiales como legales, para gobernar y fortalecer
su credibilidad y legitimidad, para que así pueda convocar cómodamente
elecciones parlamentarias para comienzos del otoño de 2007”.
Quizá la parte más
interesante del plan de acción esté en la aparente necesidad de sus
autores de ocultar el hecho de que es una propuesta que parte de EEUU
y sus aliados
–jordanos y egipcios–
árabes. El plan afirma que está ideado para ser presentado ante los
palestinos como un primer paso a dar a fin de poder obtener el acuerdo
de EEUU y del Cuarteto Árabe.
Esto aseguraría a Israel
y a los europeos que Abbas está tomando el mando. El engaño sería
completo y las manos de EEUU aparecerían limpias: el “plan de acción”
no sería así un plan estadounidense para socavar al gobierno de
unidad palestina, sería el propio plan de Abbas.
El papel de Israel
El 4 de mayo, Haaretz publicó
el plan de seguridad estadounidense para Cisjordania y Gaza que el
periódico había recibido el 25 de abril de funcionarios del gobierno
israelí. Según un diplomático estadounidense, les llevó más de un
mes escribir el documento (3), redactado por el General
estadounidense Keith Dayton, por el Embajador de EEUU en Israel Dick
Jones y por su Cónsul General en Jerusalén Jacob Walles, y empezó a
elaborarse a mediados de marzo, poco después del anuncio de la
formación de un gobierno de unidad palestino.
El momento escogido para
escribir el documento de Haaretz coincide entonces con el
“plan de acción” elaborado para la aprobación de Abbas y, en
efecto, los dos parecen estar conectados, bien como planes
interrelacionados o, quizá más probablemente, reflejando el
enfrentamiento en curso en Washington por ver quién controla la política
hacia Oriente Medio.
El objetivo del documento
de los “Puntos de referencia” patrocinado por EEUU es fijar un
calendario para el levantamiento de los bloqueos de carreteras israelíes
y la apertura de pasos para el comercio y las personas en los
territorios ocupados. Pero el documento contiene también un fuerte
componente secundario, que requiere que Israel “apruebe las
peticiones de armas, munición y equipamiento que requieran las
fuerzas de defensa” leales a Abbas.
Los componentes del plan
prevén que israelíes y palestinos se comprometan en una serie de
acciones coordinadas que amplíen el control de seguridad de la AP a
todos los sectores de Gaza y Cisjordania. Muhammad Dahlan, el recién
nombrado jefe del Consejo de Seguridad Nacional de Abbas, se encargará
de elaborar y poner en marcha un plan de seguridad que asegure esto.
Israel reducirá entonces lentamente las restricciones de paso en
zonas específicas de Cisjordania según un detallado programa.
Así pues, hay dos
componentes claves en el programa: primero, que Israel aprobará y
apoyará la transferencia de “armamento, munición y equipamiento”
a las fuerzas de Dahlan bajo la dirección de Dayton y a petición
específica de éste, y que, a cambio, las fuerzas de seguridad de la
AP pondrán en marcha un plan que suprimirá el lanzamiento de cohetes
Qassam hacia Israel.
Según el documento de los
“Puntos de Referencia”, se requerirá a Dahlan para que desarrolle
un plan contra el lanzamiento de cohetes Qassam antes del 21 de junio,
con el apoyo del Presidente Abbas, y que las fuerzas bajo mando de
Dahlan se desplieguen por las áreas problemáticas antes de esa
fecha. Se pedirá también a las fuerzas palestinas que impidan el
contrabando de armas en el área de Rafah en coordinación con Israel,
un aspecto delicado y largamente pretendido por anteriores oficiales
de las fuerzas de la defensa israelíes desde la retirada israelí de
Gaza.
En las veinticuatro horas
siguientes a la publicación del documento de los “Puntos de
referencia”, Abbas lo aprobó. Pero el plan fue rechazado en cambio
por Hamas. El líder de la organización que vive en Damasco, Jalid
Meshaal, declaró que la propuesta era una “farsa”, que implicaba
que los controles israelíes sólo se levantarían cuando los
palestinos depusieran poco a poco su resistencia ante la ocupación.
“La ecuación ahora no
es desmantelar los puntos de control a cambio de poner fin a la
resistencia palestina”, dijo Meshaal. El gobierno israelí dudaba
también, diciendo que estudiaría la propuesta. Los oficiales de la
defensa israelí adoptaron una línea mucho más dura, manifestando
que la adopción del plan dañaría la seguridad de Israel.
Washington se movió
velozmente para tranquilizar a su aliado. El plan simplemente apoyaba
las “sugerencias e ideas que han estado circulando”, dijo un
portavoz del Departamento de Estado. “No es ninguna clase de acuerdo
formal ni algo que se le esté imponiendo a nadie”. Cuatro días
después, un funcionario de la Embajada de EEUU en Tel Aviv dijo que
no era un documento para “tomarlo o dejarlo”, sino “un proyecto
informal” o “sugerencias” que podrían “ayudar a facilitar la
discusión, el compromiso y la acción”.
Tras el incidente del Majd
y la publicación del documento de los “Puntos de Referencia”
en Haaretz, la Secretaria de Estado de EEUU Condoleeza Rice,
canceló abruptamente su viaje a Israel, alegando “confusión política”
en el gobierno israelí. En realidad, la confusión real está en
Washington, donde sucesivos intentos para hacer que arranque un
proceso de paz han sido, en efecto, cortocircuitados por la falta de
reflexión diplomática de Rice (“No creemos que ella tenga el
mandato del presidente”, señala un funcionario israelí), o por la
deliberada indiferencia de la Casa Blanca hacia los esfuerzos de Rice
por mostrar a los aliados de EEUU que este país hará algo para
resolver el conflicto israelo–palestino.
“Condi no está a cargo
de la política hacia Oriente Medio”, comentó un funcionario israelí.
“Cada vez que ella hace una gira, Elliott Abrams corre a denigrarla.
Es vergonzoso”. La vergüenza se ha hecho ahora pública.
En un almuerzo de trabajo
el miércoles pasado en la Casa Blanca, Abrams dijo a un grupo de
republicanos judíos que no dedicarían demasiados recursos a los
esfuerzos para presionar a Israel para que llegue a un acuerdo con los
palestinos. “Declaró que las presiones sobre Israel eran un poco de
cara a la galería”, contó un miembro del congreso conocedor del
encuentro, “y que sólo se hacían para satisfacer a los europeos y
a los árabes”.
Dijo: “Ya saben, tenemos
que aparentar que estamos haciendo algo. Realmente no tienen que
preocuparse de nada”.
Abrams, de acuerdo con un
informe sobre la misma reunión que apareció en Haaretz, dijo
que las conversaciones entre Rice, Abbas y el Primer Ministro israelí
Ehud Olmert sobre las eventuales negociaciones eran sólo un
“proceso por amor al arte”. El informe de Haaretz indicaba
que “algunos de los asistentes interpretaron los comentarios de
Abrams como una seguridad de que la iniciativa de paz promovida por
Rice no contaba con el apoyo total del Presidente George W Bush”.
La información sobre los
comentarios de Abrams provocaron una respuesta inmediata de la Casa
Blanca: “Es inexacto sugerir que la Casa Blanca y el Departamento
del Estado están en desacuerdo sobre esta cuestión, porque toda la
administración –incluido el Sr. Abrams– está comprometida en ese
objetivo [la iniciativa de paz de Rice], así como el resto de la
agenda del presidente”.
A pesar de esto, es difícil
llegar a la conclusión de que el programa de Rice –imponer que
Israel esté conforme con disminuir las barreras en Cisjordania y
facilitar el acceso a Gaza– pueda realizarse cuando, por otra parte,
el programa estadounidense en aras a minar a Hamas parece destinado a
proseguir su curso. Y al final, señalan los observadores de
Washington, es probable que en la actual pelea Abrams–Rice, Abrams
acabe ganando y los palestinos perdiendo.
Notas:
(*) Mark Perry
es co–director de Conflicts Forum (http://conflictsforum.org/),
una organización con sede en Beirut dedicada a proporcionar una
oportunidad al Islam político. Es asesor político en Washington, DC.
Paul Woodward es el editor administrativo de la página de
Internet Conflicts Forum y también es en el creador y editor del blog
especializado en asuntos exteriores War in Context (http://warincontext.org/)
(**) Sinfo Fernández
forma parte del colectivo de Rebelión y Cubadebate.
(1) http://www.atimes.com/atimes/Middle_East/IA09Ak03.html
(2) http://www.atimes.com/atimes/Middle_East/IA09Ak03.html%282
(3)
http://arablinks.blogspot.com/2007/05/unified-explanation-of-american-schemehtml%283
http://www.haaretz.com/hasen/spages/855665.html
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