La oposición venezolana:
guerrilla urbana al servicio del
imperialismo
José Del Grosso
- Psicólogo Clínico
Rebelión-
02/04/04
Con
tal de tener a alguien a quien pisarle la cabeza,
no les importa que
la nobleza les pise la cabeza a ellos. Robespierre
Cuando tratamos de esclarecer los
motivos del por qué de la violencia desatada por las elites económicas
y políticas de este país, en lo inmediato, en lo superficial,
aparece una larga lista de quejas en apariencia razonables: "La
pobreza ha aumentado de forma dramática". "Se ha
incrementado el desempleo y la inseguridad". "Chávez lleva
casi 5 años gobernando y las cosas van de mal en peor"… Esta clase de quejas por parte de las elites económicas y
políticas llaman la atención, pues:
1. Tratan de hacer ver que esta
clase de cosas nunca ocurrieron durante la dictadura democrática del
59 al 99: "Todo tiempo pasado fue mejor". "Nosotros
supimos hacerlo". El objetivo de esta estrategia es lavarse las
manos y borrar las responsabilidades de su papel protagónico en los
desastres sociales, económicos y políticos que mencioné en la
primera parte de este ensayo (Próximamente Rebelión publicará el
libro entero del autor "El país por un dinerito", que
incluye la parte señalada).
2. La reacción de dichas elites
ante situaciones aún más graves que las que describen del gobierno
de Chávez, nunca alcanzó los niveles de violencia y terrorismo que
han exhibido en estos últimos años.
3. Dichas quejas ocultan una verdad
más grande que una catedral. Y es que si bien Chávez y su gabinete
han cometido errores en su gestión, no se les puede atribuir
exclusivamente la responsabilidad del incremento de la pobreza, la
inseguridad, el desempleo a dichos errores.
A simple vista, resalta el hecho de
que la protesta de las elites ha ido mucho más allá de simples
marchas ¿pacíficas?,
y que para "sacar a Chávez", implícitamente han llegado al
extremo de adoptar el lema de "Destruyamos a Venezuela para
salvarla", es decir: "Vamos a destruir a PDVSA",
"Vamos a paralizar la industria", "Vamos a paralizar el
comercio", "Vamos a dejar sin comida a la gente",
"Vamos a descapitalizar el país"…
para que Chávez se vaya por la vía democrática.
Al seguir clasificando las quejas
supuestamente racionales y razonables de la falsa oposición, surge
otra clase de quejas que pone en evidencia el hecho de que las elites
económicas y políticas están convencidas de que sólo ellos son el
Pueblo.
Como es típico del discurso
saturado de la tonalidad inconsciente del arquetipo del patriarca, la
oligarquía nacional no sólo habla como si fuese la mayoría, sino
que, además, aparenta haber hablado con el colectivo y también
quiere hacernos creer que el colectivo está de acuerdo con ellos y
los ha escogido como sus portavoces.
Así, excluyendo a la mayoría de
la gente que ha sido siempre marginada, alegan alegremente, como si
fuese una verdad absoluta y contundente, que entre las razones para
sacar a Chávez están: "Existe un consenso nacional en torno a
la salida de Chávez". "Setenta por ciento de encuestados
responsabiliza al Presidente de los problemas del país".
"La frustración del chavismo
se está convirtiendo en un sentimiento de ira popular que puede
resultar incontenible". "Ahora es de convicción general su
incapacidad para resolver los problemas de la sociedad".
Esta segunda clase de razones para
"sacar a Chávez", concuerdan claramente con la esencia del
patrón de pensamiento del arquetipo del patriarca: "Sólo yo
gobierno. Sólo nosotros gobernamos… sobre la base de un pensamiento único, absoluto, verdadero,
incuestionable, indiscutible, irrefutable, infalible…"
El propósito de la oligarquía venezolana, entonces, se torna
inconscientemente en un asunto religioso, de reunirse, de congregarse,
para luchar contra el mal de un pensamiento diferente, el cual amenaza
el sagrado orden establecido.
Parte significativa de la lucha
contra Chávez tiene por objetivo, no el simple hecho de llegar a
ocupar la presidencia, sino, además, el colocar "gente de
confianza", para retornar al "orden sagrado", a la
vieja ideología patriarcal de la dictadura democrática, consistente
en que quienes estén al frente del gobierno, lo hagan para beneficio
de la oligarquía nacional y el de sus socios extranjeros.
Muy bien lo explica Joseph Ramoneda
en su obra, "Después de la pasión política", cuando dice
que las elites económicas se esconden detrás de los políticos y que
estos últimos al ser gobierno han estado al servicio de las elites
nacionales e internacionales.
Las poderosas elites económicas
nacionales y extranjeras forman los cuadros políticos de los países
y para que las representen, les lavan el cerebro con su ideología de
salvación.
En las últimas décadas, han sido
las elites económicas las que, a través de las empresas de
comunicación, han sembrado en la gente imágenes y opiniones
favorables de los politiqueros que han de representarlos y de este
modo crear y mantener gobiernos que estén de acuerdo con su ideología
y directrices.
Lo anterior significa que la mayoría
no tiene control sobre la vida política nacional y que su papel en
ella se limita a escoger entre las alternativas que imponen las
elites.
Más allá de lo anterior,
"sacar a Chávez" tiene dos propósitos urgentes. 1. Sus
ideas bolivarianas y su obra son un mal ejemplo para los venezolanos y
para los demás países de América Latina, ya que las mayorías podrían
asumir el poder e imitar sus acciones anticolonialistas, lo cual
cuestiona y pone en peligro las "sagradas ideas
imperialistas" de globalización. 2. Hacerse del petróleo
venezolano, particularmente en este momento en que USA está en
bancarrota y está viviendo una crisis energética que creía poder
superar casi de inmediato invadiendo al pueblo iraquí.
Para el imperialismo estadounidense
Chávez es una verdadera amenaza, un demonio, porque nos ha alertado
sobre el peligro que representa el pensamiento neoliberal, esto es,
quedar supeditados a la hegemonía del principio político y económico
de libre mercado, lo cual quiere decir, la no intervención del Estado
en la planificación y definición de las inversiones del ingreso
nacional.
De este modo serían las elites las
que deciden sobre aspectos vitales de nuestra vida social como lo son
la educación, la salud, la producción agrícola, el agua, los
servicios públicos…
en otras palabras, las elites decidirían sobre cómo debemos pensar,
qué es lo podemos leer, quiénes tienen derecho a estar sanos, qué
es lo que podemos comer, cuánta agua podemos consumir y para qué… Uno de esos proyectitos inocentes
de los colonialistas e invasores yanquis es el ALCA. Este esconde detrás
de sus supuestos beneficios, la noción de que se trata del único
modelo de comercio a seguir, de que es la única ideología y visión
de comercio salvadora para los latinoamericanos.
Para legitimar los propósitos
ocultos del ALCA, el proyectito está enmarcado en un ámbito jurídico
que se superpone a las Leyes de las Constituciones nacionales, lo cual
erosiona la soberanía de estas y las obligaría legalmente a
someterse a las normas de la Organización Mundial de Comercio. Con
ello, además, el imperio no tendría ninguna necesidad de comprar a
los políticos criollos, se ahorraría un dinerito y USA podría
castigar como le venga en gana a aquellos países que no se sometan a
su voluntad.
El control es sólo nuestro porque
somos el pueblo
Para comprender en mayor
profundidad la actitud de la oligarquía venezolana y sus alianzas con
los gringos es necesario que revisemos brevemente algunos elementos
significativos de la política.
Aristóteles dice en su obra,
"La Política", Libro 8, el cual versa sobre la teoría
general de las revoluciones, que: "todos los sistemas políticos,
por diversos que sean, reconocen ciertos derechos y una igualdad
proporcional entre los ciudadanos, pero todos en la práctica se
separan de esta doctrina".
En el colectivo, la mayoría de los
venezolanos durante los 40 años de dictadura democrática estuvo
convencida de que las tres Constituciones refrendadas durante ese período
reconocían y defendían por igual una serie de derechos para todos
los ciudadanos. Más aún estuvo convencida de que vivíamos en una
democracia armónica y pacífica.
Sin embargo, a pesar de ello, la
gente, confusa, se preguntaba si realmente vivíamos o no en
democracia.
Esta pregunta, hoy más que nunca,
vuelve al tapete cuando observamos el comportamiento terrorista de la
Coordinadora Democrática y sus aliados durante estos últimos años,
espacio del tiempo durante el cual, esta, en nombre de la democracia,
ha querido, entre otras cosas, eliminar la Constitución Bolivariana,
sacar a Chávez a pesar de haber ganado las elecciones varias veces
con mayoría abrumadora de votos e imponernos un referéndum, que
desde su inicio ha estado viciado y sólo ha contado con un grupo
reducido de sus acólitos.
A todos nos vendieron en la escuela
la idea de que Democracia significa: "Gobierno del pueblo".
Nos dijeron y leímos en los textos escolares: "Democracia
proviene del griego demos que significa pueblo y kratos que significa
gobierno". También nos dijeron que Venezuela era un país democrático,
pero nos escondieron cuál fue el contexto en el que nació la idea de
democracia y cómo era entendida. Tampoco explicaron cuál concepción
de democracia era usada y puesta en práctica en Venezuela.
La cultura griega ha guiado la
cultura occidental hasta nuestros días (Alfred North Whitehead:
"Adventures of Ideas"). La cultura griega, que es una
cultura "machista", siempre ha estado latente en nuestro
inconsciente, influyendo sobre nuestra forma actual de pensar,
percibir el mundo, sentir y actuar.
Así, nuestra típica manera de
concebir opuestos por todas partes:
blanco-negro, bueno-malo,
hombre-mujer; y la idea de que el mundo está jerarquizado nació con
los griegos y está enraizada inconscientemente en nuestra manera de
pensar (Ken Wilber: "La consciencia sin fronteras"; José
Del Grosso: "Más allá de mente y conducta").
La concepción griega de un
universo organizado jerárquicamente, refleja patrones psicológicos típicos
del arquetipo del patriarca. Esta idea concibe a un solo dios supremo,
Zeus, al cual están supeditados los demás dioses y los hombres.
De manera semejante, y siguiendo
los patrones psicológicos del arquetipo del patriarca, los griegos
organizaron su vida social de forma jerárquica y desarrollaron la
idea de democracia como la única y mejor forma de convivencia social.
En la época de la Grecia Clásica,
sólo los hombres libres, de fortuna, es decir, quienes tuvieran más
propiedades, más esclavos…, eran quienes constituían el pueblo, quienes gobernaban y
se gobernaban.
Ellos eran los únicos que contaban
y eran ellos quienes determinaban y asumían todas las decisiones de
la polis, es decir, de la ciudad. Ellos se consideraban a sí mismos
como los únicos que podían y debían regir el país y defendían que
Grecia nunca debía estar en manos de los pobres.
Las mujeres, los artesanos, los
esclavos y los pobres no llegaban a la categoría de ciudadanos y no
participaban en la Asamblea. En cuanto a derechos políticos, tampoco
eran considerados ciudadanos.
Según explica Aristóteles en su
obra antes citada, la oligarquía (gobierno de pocos) "ha nacido
del empeño de hacer absoluta y general una desigualdad que sólo es
real y positiva en ciertos conceptos, porque siendo los hombres
desiguales en fortuna han supuesto que deben serlo en todas las demás
cosas y sin limitación alguna […]
apoyados en esta desigualdad, sólo han pensado en aumentar sus
privilegios, porque esto equivalía a aumentar la desigualdad".
Un poco más adelante, no sorprende
encontrar que aquella vieja oligarquía hacía el siguiente juramento
en algunos Estados griegos:
"Yo seré enemigo constante
del pueblo, le haré todo el mal que pueda".
El empeño de la oligarquía en
hacer absoluta la desigualdad y su juramento, en su inconsciente y en
la práctica, han sobrevivido a través de los siglos hasta nuestros días:
"Para los oligarcas venezolanos, el 90% de los pobladores no
contamos, no somos gente, particularmente, los pobres no son más que
Chusma". "Para los Amos del Valle no existe otro Pueblo que
ellos".
Es esa exactamente la idea de
democracia que defiende USA. Como dice Heinz Dieterich Steffan:
"Toda la praxis política de la democracia estadounidense parte
del axioma: el gobierno de un país siempre debe estar en manos de sus
dueños y nunca en manos de los pobres. Porque los dueños del país
son los primeros interesados en preservar su patrimonio y, por lo
tanto, ejecutarán una política moderada y razonable".
Además, como explica, Rai O´Brain,
en su artículo "What democracy to expect if opposition takes
control in Venezuela?, "El sistema político estadounidense está
totalmente controlado por dos partidos políticos. Estos dos partidos,
indiscutiblemente son controlados por el dinero…
…es indiscutible que en USA el dinero es el que regula el
sistema político y que el sistema democrático de USA simplemente
trata de asegurar la permanencia de las reglas de la minoría…
La versión globalizada de democracia puede ser definida como un
sistema que aparenta ser democrático en sí mismo, pero que en
realidad es un sistema cuya meta es mantener a la elite en la economía
global" (vheadline.com).
Estados Unidos no sólo defiende en
su propio territorio la idea de que el poder debe estar en manos de
las elites, sino que como globocop y campeón de una idea de
democracia que supuestamente "es buena para todos", la
impone al mundo por la fuerza.
Vigilante del bien de la Humanidad,
USA interviene en todos los países de América Latina para
cerciorarse de que en ellos esté presente la democracia y asegurarse,
no sólo de que los gobiernos estén en manos de las oligarquías
criollas, sino además, asegurarse de que sean sus aliados y los
ayuden en su lucha contra el mal.
Desde la perspectiva de su doctrina
patriarcal, Chávez no entiende qué es la democracia, no es un demócrata,
sino un mal ejemplo para los países latinoamericanos y del mundo. Es
un "líder radical" que amenaza con la "estabilidad de
la región".
Sobre la base de la excusa
anterior, USA considera urgente deshacerse de Chávez a como de lugar,
incluyendo la destrucción de Venezuela y el "asesinato
legal". Recordemos su participación en el golpe de estado del 11
de abril del 2002; el ¿Paro
Cívico?, cuyo objetivo era el colapso económico del país, así como
las declaraciones del procónsul y conocido operador de inteligencia
Shapiro en Venezuela: "Asesinar a un presidente no necesariamente
es un crímen" (Arrogant US Ambassador to Venezuela Charles S.
Shapiro says its not a crime to kill a President..., VHeadline. Com,
28/09/2003).
Chávez coloca a globocop en una
situación embarazosa ante el mundo, al poner en evidencia desde un
alto cargo las verdaderas intenciones de las elites económicas y políticas
de USA y al proponer, entre otras cosas, que la democracia sea una
democracia participativa y no una democracia regulada por el dinero y
el control de una elite.
Desde la perspectiva del arquetipo
del patriarca, la oligarquía venezolana, que se identifica plenamente
con la idea de democracia de la oligarquía estadounidense, ha
reaccionado violentamente contra Chávez y sus ideas bolivarianas,
porque Chávez, no sólo ha instituido una verdadera democracia en
Venezuela, sino porque además, les ha puesto límites y ha mantenido
en marcha planes que favorecen a la mayoría de los venezolanos.
Desde su mentalidad patriarcal,
esto es inadmisible para la oligarquía, ya que en su programa mental
inconsciente tienen grabados mensajes como: "sólo nosotros
mandamos"; "sólo nosotros hacemos las leyes"; "sólo
nosotros somos gente"; "sólo nosotros somos los dueños del
país"; "nosotros somos superiores".
El control es y será nuestro como
sea: Guerras de tercera y cuarta generación
"Todos deseamos la paz, pero
la cuestión, por desgracia, es la de quién decide lo que es la paz,
quién lo que sea orden y seguridad, quién lo que se haya de
considerar como situación soportable o no soportable" Carl
Schmitt.
La violencia desbordada de la mal
llamada oposición llama la atención.
Para la mayoría de los venezolanos
su actuación es incomprensible, irracional… va más allá de lo tolerable y,
por ello, pide al gobierno su inmediata intervención: "El
gobierno debería meterlos presos a todos".
Creo que no nos podemos dejar
llevar por los primeros impulsos y reaccionar de manera convencional,
ajustándonos simplemente a lo que dictan nuestras leyes, incluso
porque se las han ingeniado para usarlas como arma de guerra.
Nos encontramos en medio de una
guerra no convencional, con una lógica diferente a la que estamos
acostumbrados. Se trata de un conjunto de estrategias ideadas y
asesoradas por USA, las cuales han sido canalizadas y puestas en
marcha por un sector de la oligarquía venezolana y sus secuaces.
Es un hecho reiteradamente
denunciado el que USA ha estado apoyando a la mal llamada oposición
venezolana de forma encubierta en los numerosos intentos de
"Sacar a Chávez.
Su asesoramiento e intervención en
el golpe del 11 de abril del 2002 fue puesto en evidencia por
numerosas instituciones, grupos, periodistas, publicaciones…: "EEUU apoyó golpe de Estado
en Venezuela afirma TransÁfrica Forum"; Venpres, 08/01/2004…
Poco antes del golpe del 11 de abril del 2002, líderes de la supuesta
oposición se reunieron abiertamente con miembros oficiales de la
administración del emperador Jorge Mala Hierba en Washington y está
fuera de discusión el que recientemente la Nacional Endowment for
Democracy ha estado financiando el llamado a referéndum de la falsa
oposición (Rai O´Brien, "What democracy to
expect if opposition takes control in Venezuela?, VHeadline.com).
Esta guerra no convencional, no sólo
es apoyada por las elites económicas, políticas y militares de USA,
sino que además, involucra a muchas organizaciones internacionales,
que les sirven de pantalla; y una serie de infiltrados o "quinta
columna" en todos los ámbitos de la vida nacional.
No nos debemos dejar engañar por
los nombres de dichas organizaciones.
Human Rights Watch, no defiende los
derechos humanos, defiende los intereses económicos, políticos y
militares de USA. El Fondo Nacional para la Democracia (Nacional
Endowment for Democracy) aparece a la vista del mundo como una
organización sin fines de lucro que lucha por la libertad y la
democracia, pero su verdadero propósito es entrometerse en los
asuntos de países como Venezuela. Y en ese entrometerse en los
asuntos del país, la NED ha venido financiando a la supuesta oposición
venezolana (Rebelión.org "Denuncian envío de dinero desde
Estados Unidos a la oposición golpista en Venezuela", Venpres,
13/02/2004).
La nuevas teorías militares sobre
la guerra desarrolladas por USA, consideran que el objetivo de las
guerras en la actualidad no es la destrucción física del enemigo,
sino su dominio; y, según dichas teorías, en el presente este
objetivo puede ser logrado con ayuda de la tecnología existente, sin
necesidad de sacrificar a uno solo de sus soldados.
Las guerras de tercera y cuarta
generación, a diferencia de las de primera y segunda generación que
se valen de los encuentros cuerpo a cuerpo y de la fuerza bélica;
usan la cultura y la información como armas de guerra dirigidas a
controlar la mente y la voluntad de la gente. A través de este
control, USA ambiciona o aspira movilizar masas de población a su
favor para que antagonicen contra un supuesto enemigo.
Desde la perspectiva de las teorías
sobre la guerra desarrolladas por USA, la penetración cultural por
parte de USA debe ser total, es decir, penetrar al enemigo hasta en lo
más íntimo en todos los ámbitos sociales de la vida cotidiana: la
educación, la salud, la higiene, la alimentación, el
entretenimiento, las publicaciones…;
los medios de información masiva, la actividad artística, musical y
poética…;
las organizaciones religiosas, económicas y políticas…; con el objetivo de alcanzar y
manipular el sistema mental y organizativo de su adversario.
Es esto lo que, evidentemente, ha
venido haciendo USA en Venezuela, Haití, Nicaragua, Chile, Irak…
Es muy revelador lo que dicen William Lind, el Coronel Keith
Nightengale (USA), el Capitán John Schmitt (USMC), El Coronel Joseph
Sutton (USA) y el Coronel Gary Wilson (USMCR) en "Marine Coros
Gasette", Octubre 1989, pp 22-26:
En términos más amplios, las
guerras de cuarta generación probablemente serán ampliamente
dispersas y ampliamente indefinibles; la distinción entre guerra y
paz será borrosa y no habrá un punto de distinción. Será una
guerra no lineal, al punto de que no se podrán definir campos de
batalla ni frentes. La distinción entre "civil" y
"militar" podría desaparecer. Las acciones ocurrirán
corrientemente a través de todos los participantes, incluyendo su
sociedad como entidad cultural y no como entidad física…
…todos estos elementos están presentes en las guerras de
tercera generación. Las guerras de cuarta generación simplemente
acentuarán lo anterior… Las Operaciones Psicológicas podrían convertirse en el
arma estratégica operacional dominante en la forma de intervención
información/medios… Las noticias se convertirán en armas operacionales más
poderosas que las mismas divisiones de las fuerzas armadas.
Todas las estrategias que viene
utilizando la Coordinadora Democrática tienen en común con las teorías
de las guerras de tercera y cuarta generación el utilizar una lógica
contradictoria y cambiante; emplear combatientes imperceptibles y volátiles;
y el usar hábilmente algunos de los principios y derechos democráticos
que aparecen en la Constitución Bolivariana.
Así, la guerra psicológica de los
medios de información se basa en la libertad de prensa y el derecho a
informar. El sabotaje interno en el gobierno se fundamenta en la
protección de los sindicatos y la inamovilidad laboral. Las marchas,
protestas, guarimba…,
en parte, se sustentan en el Artículo 350 de la Constitución
Bolivariana de Venezuela, el cual habla sobre el desconocimiento de
"cualquier régimen, legislación y autoridad que contraríe los
valores, principios y garantías democráticos o menoscabe los
derechos humanos".
Operaciones Psicológicas o Guerra
Psicológica
Cuando nos detenemos a observar cómo
la supuesta oposición venezolana, aliada a las elites económicas y
políticas de USA, ha venido actuando en contra de Chávez, lo más
evidente ha sido el uso de los medios de información, con el objetivo
de obtener seguidores lavándoles el cerebro.
El target o blanco de su Guerra
Psicológica ha sido esencialmente la clase media venezolana. En sus
campañas han apelado a aspectos claves de su inconsciente, el cual se
halla dominado por el arquetipo del patriarca, y usarlos para
desencadenar en ellos la violencia cuando así lo crean conveniente.
La Guerra Psicológica a través de
los medios, no se limita al 90% de los medios que están en manos de
la oligarquía nacional, sino que involucra también a los medios
internacionales como CNN. Una de las cadenas más amplias que emplea
la Casa ¿Blanca?
para ir creando una opinión internacional favorable a sus
intervenciones a corto, mediano y largo plazo.
CNN, como los cuatro jinetes del
Apocalipsis venezolanos, se esmera, no sólo en manipular la información
y hacer creer que Chávez es un tirano, sino que, además, no suele
mostrar los aspectos democráticos y positivos de los logros de este
gobierno; y trata de vincularlo disimuladamente con organizaciones
terroristas, de manera que cualquier intervención directa de tipo
militar por parte de USA en Venezuela pase por una intervención
humanitaria, como hicieron en Haití.
En Venezuela, la Coordinadora
Democrática se ha valido de los 4 jinetes del Apocalipsis para llamar
a la rebelión y cuando ha hecho esto no pocas veces ha usado la
estrategia del racismo y del clasismo para provocar terror en la clase
media y alta, llamar a una supuesta defensa de sus vidas, moverlos a
la acción y generar confrontaciones frontales con la gente de menos
recursos.
Más aún, los 4 jinetes del
Apocalipsis en particular, han ido creando una opinión favorable de
intervención de USA en el país y han sido notables aquellos
individuos que abiertamente así lo han exigido ante las cámaras de
TV privadas de Venezuela.
Cuando la Coordinadora ha utilizado
las horas millonarias de televisión en las emisoras de los 4 jinetes
del Apocalipsis, es de preguntarse ¿De dónde sacan el dinero para
costear tan millonarias campañas de desprestigio y Guerra Psicológica
contra Chávez? Más aún, ¿De dónde saca el dinero Gustavo Cisneros, cuyos negocios, a
decir de los que saben, van de mal en peor, para mantener en su cadena
de televisión latinoamericana toda una campaña de guerra contra Chávez?
¿Será
que el padre de Jorge Mala Hierba colabora con generosas donaciones
para sus campañas? No podemos olvidar que el padre del emperador
Jorge Mala Hierba es amigo de Gustavo Cisneros y hasta salen a pescar
juntos. Tampoco podemos olvidar que Jorge Mala Hierba tiene un
gabinete proveniente de la empresa petrolera, que la familia Mala
Hierba posee importantes empresas petroleras, que esta y la familia de
Osama Ben Laden son socios en muchos negocios vinculados al sector
petrolero en Oriente… (Thierry Meyssan, "La
terrible impostura").
Cuando la Coordinadora ha
paralizado el país entero en contra de sus propios intereses económicos
es de preguntarse y ¿cómo se mantienen en pie sus negocios y empresas? ¿Simplemente
recuperan las pérdidas aumentado el precio de los productos y botando
a sus empleados? Cuando detienen a supuestos líderes de la
Coordinadora con armas de guerra de alta potencia, que ni siquiera las
tiene el ejército venezolano y que son de origen gringo, tampoco
podemos mirar para los lados. Debemos preguntarnos ¿cómo las han conseguido? ¿De dónde salieron los
paramilitares que están en Venezuela y han asesinado a más de 80 líderes
campesinos? ¿Quiénes les pagan? ¿Por qué los medios que
abiertamente están contra Chávez no dicen nada al respecto y muchos
menos dicen nada sobre la base militar que está instalando USA en
nuestra frontera con Colombia, en la zona de la Guajira?
Un enemigo "invisible"
Dos estrategias derivadas de las
guerras de cuarta generación, las podemos observar, por ejemplo, en
las marchas y protestas públicas de la supuesta oposición y en lo
que han denominado la Guarimba.
En las marchas, la estrategia
consiste en la aparición repentina de ciertos individuos que se han
mezclado en estas y así como aparecen, también desaparecen como por
obra de magia.
Son individuos que de pronto surgen
de las ventanas o azoteas de los edificios y disparan con armas de
fuego de largo alcance contra la Guardia Nacional -a veces, también
contra su propia gente-, o bien, que surgen de sus mismas marchas y
lanzan metras con chinas de alta potencia, lanzan bombas molotov,
disparan armas que contienen fragmentos de metal y vidrio, tiran
piedras, palos, pedazos de tubo…
desapareciendo rápidamente entre la muchedumbre. ¿Son esas marchas pacíficas?
Siempre contando ¿casualmente? con la presencia de las cámaras de TV o las cámaras
de video de "aficionados", cuando la Guardia Nacional trata
de defenderse o cuando los cuerpos de seguridad del estado intentan
atrapar a estos "terroristas", la gente de las marchas se
hace pasar por víctimas. Momento que es utilizado, para impedir que
esta cumpla con su deber y, simultáneamente, "obtener pruebas de
la brutalidad y represión del gobierno".
No pocas veces montan shows mediáticos
que supuestamente son una prueba evidente de la represión del estado.
Uno de esos shows, ocurrió el 27
de febrero del 2004, cuando la oposición pretendía romper el cerco
de seguridad implementado para proteger a los presidentes que asistían
a la cumbre del G-15 en la ciudad de Caracas.
¿Casualmente?, las cámaras de TV
tomaron las imágenes de una mujer joven que solita se fue de frente
contra la Guardia Nacional, entabla una discusión, le quita el rolo a
una mujer de la Guardia Nacional y en la confusión, sale volando de
espaldas y cae a uno o dos metros de donde estaba parada. Los
narradores, como era de esperarse, de una vez condenaron los actos de
violencia por parte de la Guardia Nacional en contra de esa pobre e
indefensa mujer. Imágenes que Globoterror repitió hasta la saciedad.
Cuando se ve el video por primera
vez, por la rapidez de los acontecimientos, pareciera que en verdad la
mujer fue agredida, pero cuando se lo ve varias veces, uno se
pregunta: ¿Cuánta
fuerza tenía la mujer de la guardia nacional para tomar en vilo a la
supuesta agredida y lanzarla por el aire entre uno y dos metros? ¿Por
qué la víctima cae tan perfectamente de espaldas y no se hace ningún
daño? Tan es así, que la supuesta víctima se levantó caminando
perfectamente como si nada.
La Guarimba es una estrategia
similar a la anterior, sólo que en vez de ser un grupo grande de
gente marchando, se trata de grupos reducidos frente a lugares
seguros, los cuales, una vez cometidas las fechorías, sirven de
refugio a los forajidos, es decir, utilizan la estrategia de
convertirse en terroristas urbanos imperceptibles y volátiles, a los
cuales difícilmente se les puede detectar, detener y responsabilizar
de sus acciones ilegales.
El nombre de Guarimba significa
territorio, lugar donde refugiarse para que nadie los pueda atrapar.
El único objetivo de este plan es paralizar totalmente el país,
crear caos y anarquía a nivel nacional con la participación de la
ciudadanía.
Para paralizar al país y crear
caos a nivel nacional, su autor intelectual, Roberto Alonso (Humberto
Gómez García, "¿Guarimba o terrorismo made in Miami?, Temas Venezuela
30/03/2004), propone entre otras cosas:
No hay que enfrentarse frontalmente
con las fuerzas del orden público, sobre todo por la desproporción
de medios disponibles. Es por eso que debemos emplear técnicas como
las aplicadas por las guerrillas en contra de los ejércitos regulares
y que les ha dado muchos éxitos.
Hay que atacarlos mediante la técnica
de golpes de mano. Atacar y retroceder. Atacarlos donde menos se lo
esperan. Nosotros estamos en todos lados y nos vestimos como queremos.
Iremos ocasionando bajas en sus filas, lo cual irá destruyendo su
capacidad combativa, sobre todo, cuando no sepan de dónde ni quién
puede ser el enemigo.
Utilicemos cuerdas de color oscuro
o cable a una altura de metro y medio entre poste y poste a lo largo
de las calles, para hacer caer a los motorizados de la Guardia
Nacional, DISIP y círculos bolivarianos.
Hagamos hielo con los potes de
arroz chino que siempre nos sobran en la casa, los cuales utilizaremos
para lanzarlos desde los edificios, junto con vasos, botellas, latas,
basura…
Vamos a ir lentamente en nuestros carros. Si cada uno de nosotros va
lentamente en su carro, poco a poco la ciudad va colapsando… Las mentes terroristas de la falsa
oposición engañan a sus seguidores haciéndoles creer que con su
participación van a restituir la "anterior dictadura democrática";
y a evitar que el castro-comunismo se instale en el país.
Pero les ocultan que, en medio de
la invisibilidad e impunidad que otorga "el tirar la piedra y
esconder la mano", no pocas veces han apostado francotiradores o
han colado sicarios para herir o matar a su propia gente o a la gente
de las "hordas chavistas", para "crear mártires"
y encender así la mecha de una guerra civil sangrienta por la vía
del resentimiento y la venganza.
Al hacer esto, las mentes macabras
de Coordinadora Democrática y las elites económicas nacionales y
extranjeras esperan que el país se vuelva ingobernable. Y siendo así,
el desorden sería de tal magnitud que, difícilmente podría ser
detenido llamando a la calma por televisión.
El gobierno caería entonces en la
trampa de usar las fuerzas del orden público y lograrían objetivos
ulteriores como: a) hacer pasar al gobierno nacional como un gobierno
represor, b) invocar la famosa Carta Democrática, para que las tropas
gringas invadan al país, c) la oligarquía nacional y el gobierno de
Washington tendrían en sus manos el control del país y d)
reestablecerían la democracia en términos de su propia definición
de democracia.
El petróleo es nuestro
Estados Unidos ha asumido por
siglos una "ideología mesiánica". Se considera "el
pueblo elegido", "el pueblo llamado a gobernar el
mundo" y se adjudica el poner en práctica el único sistema económico
y político internacional ideal, razón por la cual desprecia la
existencia de un equilibrio de poder nacional e internacional (léase
al respecto el capítulo sobre "El nuevo orden mundial", de
Henry Kissinger. La diplomacia).
USA no ha hecho más que extender
"la misión que Dios le otorgó" como "pueblo
elegido" para abarcar el mundo entero. Misión que en la
actualidad Jorge Mala Hierba piensa que le fuera encomendada, para
cumplir los destinos de su país.
Desde esta posición de Gran
Patriarca, USA cree que tiene derecho a los recursos de los demás países,
de allí que haya auspiciado una gran diversidad de guerras a través
de todo el planeta. Guerras que le son muy convenientes, porque gran
parte de su economía se basa en la producción y venta de armas y
porque de esas guerras, además de colonizar a los países invadidos,
le quedan jugosas ganancias a través de sus famosas
"reconstrucciones".
El interés y las conspiraciones de
USA para apoderarse del petróleo venezolano no son algo reciente.
Tienen más de un siglo en marcha (Varios autores: "PDVSA y el
golpe").
Desde luego, no podemos decir que
este apropiarse indebidamente de nuestro petróleo ha sido
abiertamente mediante la fuerza, es decir, a través de una invasión
directa como han hecho recientemente en Irak o indirectamente a través
de un estado aliado terrorista como ha ocurrido en Timor, país que
fuera invadido por Indonesia en 1975 y luego en 1999 con apoyo
financiero y militar de USA.
Una de las estrategias recientes de
USA para quedarse con nuestro petróleo está apoyada en la ideología
de la globalización. Toma de esta la idea de no intervención de los
Estados en la economía y la falsa necesidad de que los gobiernos
deben privatizar todas las empresas que le pertenezcan.
Se trata de un trabajo apenas
imperceptible, consistente en corromper empleados claves para que las
empresas estatales sean un fracaso y se declaren en quiebra. La
responsabilidad de la quiebra es atribuida a los gobiernos, que son
acusados de ineptitud. Estos, bajo presión de los politiqueros y del
sector privado empresarial criollo, se ven obligados a vender las
empresas nacionales a "precio de gallina flaca" y las
transnacionales, generosamente, aceptan el trato de comprar compañías
quebradas, que luego, milagrosamente, florecen debido a su buena y
admirable administración.
En Venezuela esa ha sido una de las
estrategias para apoderarse de nuestro petróleo. Casi de manera
imperceptible, en la década de los 90 PDVSA comenzó a convertirse en
una carga para el Estado, con unos gastos operativos muy elevados e
inversiones chimbas como la compra de refinerías abandonadas e
inservibles, las cuales una vez adquiridas nunca fueron recuperadas y
puestas a funcionar.
Sin embargo, USA comenzó a emplear
tácticas más agresivas debido a la inspección e intervención
directa de Chávez en PDVSA y recurrió al golpe petrolero con ayuda
de la meritocracia, que se dio a la tarea de "desplumarla" y
sabotearla: desabastecernos de gasolina, destrucción de
instalaciones, saboteo de contratos…
El golpe petrolero era un plan macabro perfecto. 1) Al destruir a
PDVSA y dejarla en la banca rota, USA, no sólo se haría a "buen
precio" de una de las compañías petroleras más importantes del
mundo, sino que, además, tendría acceso libre al petróleo del
quinto país con más reservas comprobadas del oro negro. 2) El
patrimonio de la familia Mala HIerba se vería incrementado. 3) Al
estar la principal fuente de ingresos del país en manos de USA, este
tendría una amplia capacidad de maniobrabilidad y de coerción a
nivel económico, dejando de manos atadas al gobierno. Podrían crear
un caos económico, culpar a Chávez y obligarnos a someternos a las
recetas del FMI. 4) La insatisfacción y la pobreza se elevarían a
tales niveles, que la misma población que llevó a Chávez al poder
se rebelaría y lo obligaría a renunciar. 5) Sacando a Chávez se
cumplirían: a) los anhelos de USA por apoderarse de una de las
fuentes petroleras más importantes del mundo, b) quitar del medio el
peligro que les representa en su mentalidad, pues según ellos Chávez
es un mal ejemplo, ya que incita a los países a defender sus riquezas
y proponer formas más justas de economía. Por parte de un sector de
la clase media y de los ricos, al sacar a Chávez se cumpliría su
deseo: a) de volver a "ponerle a la chusma las botas sobre la
cabeza", b) recuperar el control sobre el país, el cual
consideran su derecho divino y c) reestablecer el sagrado orden
patriarcal con todas sus implicaciones.
El gran patriarca del norte acelera
sus planes: "Hay que invadir a Venezuela de inmediato" Para
la soberbia y gran ego del gran patriarca del norte, el emperador Mala
Hierba, el no haber aplastado a Chávez lo tiene iracundo, fuera de sí.
Hasta ahora ha intentado muchas de
las tácticas de guerra de tercera y cuarta generación, pero han sido
inútiles sus esfuerzos.
Sin embargo, no debemos confiarnos
y debemos estar alertas a la posibilidad de que emplee la fuerza
militar, bien sea indirectamente, apoyándose en el Plan Colombia o
directamente con sus marines.
La indignación de Mala Hierba es
mucha y junto a ello tenemos a unos Estados Unidos en franca
bancarrota. Desesperadamente necesitan el petróleo venezolano. Sus
planes de explotación del petróleo iraquí es una realidad muy
remota y sin combustible USA se paralizaría, de modo que no dudarán
de apropiarse del petróleo venezolano por las buenas o por las malas.
Aunque nos horroriza la posibilidad
de que USA nos invada e inventemos toda clase de "peros"
para negarla, no podemos cerrar los ojos o hacer como el avestruz. Son
muchas las advertencias de esta posibilidad de invasión a Venezuela
por parte de USA. He aquí la más reciente, hecha por Petras,
Profesor de Sociología de la Universidad de Nueva York, en
Birmingham:
"Según Petras, la prioridad
de USA es el gobierno de Venezuela. Estados Unidos no va a invadir
Venezuela solo, por lo que necesitan un aliado militar capaz de abrir
un segundo frente, que es Colombia.
Según este sociólogo, actualmente
USA actúa a partir de un proyecto militar y está calculando cuánta
resistencia tendría en su invasión a Venezuela. En mi opinión, se
prepara un derrocamiento violento de Chávez; en combinación con un
levantamiento interno y una invasión fronteriza de Colombia que abra
camino a la entrada de USA" (Bush prepara el derrocamiento de
Hugo Chávez, asegura James Petras, La Jornada México, 28/03/2004).
Junto a la advertencia anterior,
tenemos las declaraciones públicas de un funcionario del Departamento
de Estado de USA, Meter Deshazo, las cuales reafirman lo antes dicho
por Petras:
"…El
reconocimiento público del funcionario del Departamento de Estado,
Peter Deshazo, de que la CIA financia a los mercenarios de Washington
en Venezuela; los más de ochenta asesinatos de líderes campesinos y
líderes populares durante el gobierno bolivariano; el continuo envío
de armas a los paramilitares venezolanos y las crecientes agresiones
de los paramilitares colombianos demuestran que Washington procede sin
cuartel para destruir al gobierno de Hugo Chávez" (Heinz
Dieterich: Destrucción consumada de Arístide, destrucción planeada
de Hugo Chávez. Rebelión, 21/02/2004), y tenemos también, el
informe del general James T. Hill, jefe del Comando Sur de USA, quien
la semana pasada en sus declaraciones ante el Comité de las Fuerzas
Armadas de la Cámara de Representantes, advirtió que una nueva
amenaza surge en América Latina: "El populismo radical":
"…los
líderes están logrando a la vez reforzar sus posiciones radicales al
alimentar el sentimiento antiestadounidense. Adicionalmente, otros
actores buscan minar los intereses estadounidenses en la región al
apoyar estos movimientos Como ejemplos citó a Haití, Venezuela y
Bolivia, donde líderes "radicales" han promovido un
sentimiento antiestadunidense y a la vez buscan explotar el frágil
contexto de sus países para promover y reforzar su poder. También señaló
que "la crisis económica argentina ha provocado que muchos
cuestionen la validez de las reformas neoliberales, tal como se
manifestó en el Consenso de Buenos Aires firmado en octubre pasado
por los presidentes (argentino Néstor) Kirchner y (brasileño Luiz
Inacio) Lula (da Silva) que hizo énfasis en el respeto por los países
pobres'" (Jim Cason / David Brooks, "Una nueva amenaza surge
en América Latina, según el Pentágono: el populismo radical".
La Jornada, 29/03/2004).
El informe del señor James T.
Hill, sugiere el peligro de estos líderes para la estabilidad de la
región.
Este aspecto, "estabilidad de
la región" es clave para entender las acciones bélicas que USA
ya emprendió contra Haití y que posiblemente pretenderá emprender
contra Venezuela y Bolivia. Con este propósito utilizaré el análisis
de Noam Chomsky, que es realmente claro y revelador:
"…
y los elementos que generen desorden en el mundo han de saber que lo
pagarán caro…
si no obedecen las órdenes de Washington, el amo… Así entendido, una región es
estable cuando se encuentra integrada en el sistema global que,
dominado por USA, sirve a los intereses sancionados oficialmente y está
controlado por determinados centros de poder… Del mismo modo, Washington se vio obligado a imponer en
Guatemala una dictadura militar extremadamente cruel, porque su primer
gobierno democrático, representa una amenaza creciente para la
estabilidad de Honduras y El Salvador, según se advirtió desde el
Departamento de Estado. El riesgo de inestabilidad de la región no
debe entenderse al pie de la letra; lo que sucedía es que la reforma
agraria de Guatemala es una poderosa arma propagandística; su
generoso programa social, centrado en ayudar a los trabajadores y
campesino y opuesto frontalmente a los intereses de las clases
superiores y las grandes corporaciones extranjeras, resulta de gran
atractivo para los pueblos centroamericanos vecinos que viven bajo
condiciones similares. Después de cuarenta años de terrorismo, ya no
existen tales programas, con lo cual Guatemala ya no es una amenaza
para la estabilidad".
Chomsky destaca, además:
"Téngase en cuenta que, en el
sentido doctrinal, ni siquiera se considera contradictorio el
desestabilizar con miras a estabilizar; así, Nixon y Kissinger
pusieron todo su empeño en desestabilizar el gobierno marxista que
habían escogido los chilenos en unas elecciones libres, porque estábamos
decididos a lograr la estabilidad, según un reconocido experto en
relaciones internacionales" ("Una nueva generación dicta
las reglas". Pp.42-43)
Las guerras las ganan los soldados
(ciudadanos), no los generales o los líderes solitos. De allí que,
aunque Chávez sea un genial estratega, no podemos seguir actuando según
el patrón inconsciente del arquetipo del patriarca, es decir,
endiosando a Chávez, convirtiéndolo en un dios todopoderoso y
nosotros asumiendo un papel pasivo, dejándole la responsabilidad de
que el sólo gane las batallas.
Debemos luchar y nuestra primera
tarea es estar despiertos, conscientes, de que lo está sucediendo en
el país y en el mundo. Debemos pasar de una actitud pasiva a una
actitud activa inscrita en una visión amplia del mundo, no en la bíblica
de "ojo por ojo", porque, como dijo Ghandi, "El mundo
se quedaría ciego".
"Otro mundo es posible" y
nosotros los venezolanos y los latinoamericanos, juntos, podemos
crearlo, porque nuestra América está llena de gente bella,
espiritual, amorosa, creativa…
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